hola!!!
bueno este es el segundo one-shot, fue una idae que aparecio un clase de biologia en mi cabeza jajaja y tuve que escribirla...espero les guste..
NARUTO Y SUS PERSONAJES NO ME PERTENECEN (pero si me regalan un Sasuke-kun x mi no hay problema xD)
"Weakness"
(Debilidad)
"Débil"…
Una simple palabra, cinco letras… más sin embargo con un significado profundo; esta palabra puede significar la diferencia entre la vida y la muerte en el mundo shinobi. En ese mundo donde solo el fuerte sobrevive y el débil…simplemente deja de existir; esa palabra es la diferencia entre un ninja de elite que es temido por sus adversarios y un simple gennin.
Es una palabra que Haruno Sakura conoce muy bien, después de todo no hace mucho tiempo ese adjetivo la describía perfectamente. Fue durante sus tiempos de gennin alguien que no resultaba de utilidad en las misiones, era la chica fastidiosa que solo pensaba en chicos – más bien en un chico – en pocas palabras ella era…débil en toda la extensión de la palabra.
Con el paso de los años y debido a los sucesos inesperados en su vida – la partida de su amado – ella se dio cuenta de que tenía que cambiar; la oportunidad de hacerlo llegó cuando la Godaime decidió entrenarla y después de arduos entrenamientos Sakura se convirtió en una de las mejores kunoichi de la aldea, ahora ella no era débil, ella era respetada y podía valerse por si misma.
A sus veinte años Sakura Haruno era la imagen del éxito y la perfección; la prueba de que la inteligencia y la belleza no están peleadas, y que es posible estén presentes en un solo lugar. La chica había cambiado mucho en todo aspecto de esa niña pequeña ya solo quedaba su recuerdo; ahora en su lugar había una hermosa mujer de estatura media, largo cabello rosa hasta la mitad de la espalda, una piel blanca y aterciopelada, un cuerpo proporcionado y por último pero no menos importante: su expresiva mirada color verde jade que, combinada con su sonrisa, derretía a cualquier chico a su alrededor.
En el plano de lo psicológico ella se había vuelto fuerte de carácter, había aprendido a disfrazar sus sentimientos para cumplir sus misiones con éxito. En la aldea casi todos la conocían y la apreciaban por su gran fuerza y destreza como shinobi, además de su notoria carrera como ninja medico. Pero a pesar del paso de los años algunas cosas no habían cambiado en ella como: su alegría, amabilidad, sus constantes peleas con Ino y uno que otro golpe a Naruto por sus comentarios estupidos pero eso era parte de su personalidad, cosas que simplemente la hacían única.
A ojos de los aldeanos Sakura Haruno era perfecta y la palabra…débil ya no iba para nada con ella. Lo único que extrañaba a todos sus amigos es que a pesar de tener una enorme lista de pretendientes – la mayoría de ellos muy guapos y con buen futuro – ella los rechazaba a todos y cada unos de ellos con una sonrisa, muchos se preguntaban la razón de esta situación pero nunca obtenían respuesta. Lo que no sabían era que "La flor de Konoha" tenía un secreto…una pequeña debilidad.
Esa noche la pelirrosa acababa de tener un riguroso entrenamiento con la Hokage, estaba agotada y lo único que quería era irse a su casa para descansar ya que al otro día había sido citada de nuevo por su sensei.
-Tsunade-sama no tiene compasión – pensaba la chica mientras a paso lento se dirigía a su hogar
Desde que se convirtió en jonnin la chica vivía sola en un confortable departamento en el centro de la aldea cerca del hospital. Esa noche el viento soplaba suavemente y no había ni un alma en las calles de esa próspera villa. Caminaba perdida en sus pensamientos estaba tan distraída que no se dio cuenta de una presencia que la seguía muy de cerca; no lo notó hasta que unos fuertes brazos la atraparon. Estaba a punto de golpear al pervertido pero luego reconoció ese fresco y varonil aroma que tanto le encantaba, sonrió de forma muy dulce al sentir una respiración calida en su nuca.
-¿Cómo te fue en tu misión, Sasuke-kun? – preguntó ella mientras volteaba para ver al dueño de ese aroma.
Y ahí estaba con su uniforme de ANBU un joven pelinegro de preciosos ojos azabaches y piel pálida mirándola con una sonrisa altanera en su rostro... ahí estaba, su secreto, su debilidad…Uchiha Sasuke.
El pelinegro había vuelto cuatro años antes luego de haber cumplido con su venganza, al igual que muchos chicos de la aldea Sasuke se le declaró a Sakura pero, para su sorpresa, ella lo rechazó al igual que a todos los demás. Sin embargo él era un Uchiha y los Uchiha nunca se rinden. Le tomó dos años a Sasuke convencer a la pelirrosa de que sus intenciones y sentimientos hacia ella eran completamente sinceros; ella aceptó tener una relación con él, una relación secreta.
Tenían dos años siendo novios y todo iba bien entre ellos, la razón por la que era un secreto es porque Sasuke lo decidió así ya que a pesar de ser perdonado por la hokage había mucha gente que aun no aceptaba del todo al portador de sharingan y él no quería manchar la reputación de su pelirrosa con las criticas de la gente. No quería que la acusaran de haberse enamorado de un traidor por eso ese era…su secreto.
-¡hmp! fue muy sencilla pero el dobe casi lo arruina todo – dijo con fastidio
-Ese Naruto no cambia – ella sonrió
-Eso parece, pero sabes te extrañe Sa-ku-ra – dijo en un susurro el Uchiha
No dejó que ella le respondiera ya que rápidamente se apoderó de sus labios, era un beso tímido en un principio pero que se convirtió en uno demandante y apasionado pasados unos segundos. Estaban a solo unos pasos del departamento de Sakura; ambos sabían lo que seguía y la verdad es que no tenían intenciones de detenerse, no se habían visto en dos semanas, que fue el tiempo que Sasuke estuvo de misión en la tierra del Arroz, lo más normal es que se extrañaran mutuamente.
Entre besos y caricias los jóvenes shinobi llegaron hasta su destino…la habitación de la pelirrosa, no perdieron el tiempo y se dedicaron a demostrar lo mucho que se habían necesitado el uno al otro.
A la mañana siguiente los molestos del sol entraban por la ventana de la habitación donde dos jóvenes dormían tranquilamente anunciando el inicio de un nuevo día. Un par de ojos verdes se abrían perezosamente, Sakura sonrió al darse cuenta de la segunda presencia a su lado y se dedicó a contemplar a su querido Uchiha; el que había sido el dueño de sus más profundos sentimientos desde que tenía uso de razón. Con sus finos dedos delineó el rostro del ninja mientras quitaba algunos rebeldes mechones azabaches de su cara. Miró el reloj junto a su cama y se dio cuenta de que ya iba tarde a su entrenamiento con Tsunade, sabiendo que su sensei se molestaría si llegaba tarde, la pelirrosa se levantó rápidamente para luego dirigirse a la ducha. El agua caliente comenzó a salir de la regadera, estaba a punto de meterse cuando sintió los labios de Sasuke en su cuello.
-no…ahora no Sasuke-kun – intentaba decir la pelirrosa
-¡hmp! sabes que no puedes resistirte – la arrogante sonrisa del moreno no ayudaba a su autocontrol
Simplemente no podía resistirse a esa actitud arrogante, a esa media sonrisa y mucho menos a la manera tan suave que acariciaba su espalda…definitivamente no podía porque aunque intentara ocultarlo ella en cierta forma seguía siendo…débil.
La chica pelirrosa corría desesperada por las calles de Konoha, estaba aterrada, iba media hora tarde al campo de entrenamiento donde su sensei la esperaba y sabía mejor que nadie el tipo de castigo que la Hokage utilizaba para quienes eran impuntuales. Seguía corriendo mientras pensaba en las razones por las que se encontraba en ese predicamento e inevitablemente se sonrojaba.
-Ese Uchiha, es su culpa ahora Tsunade-sama me matara – decía para si misma – ¡pero es completamente irresistible¡Shanaroo! – su inner gritaba en su mente con pequeños corazones en los ojos.
Ella se sonrojó de nuevo y siguió corriendo a todo lo que sus piernas le permitían hasta que por fin llegó a un claro en el bosque que se encontraba en las afueras de la aldea – el lugar donde entrenaba diariamente – ahí se encontraba su maestra con cara de pocos amigos. Cuando la rubia notó la presencia de su querida estudiante levantó la mirada, la furia contenida en los ojos de su maestra hizo que un escalofrío recorriera su espalda.
Debido a que nuestra kunoichi no pudo darle una razón lógica del porque de su retrazo a su sensei, su entrenamiento se triplicó… para la desgracia de Sakura.
Así que mientras corría con grandes pesas en las piernas y en los brazos la chica pensaba en cierto pelinegro al que castigaría por haberla hecho llegar tarde y que en cierto modo era culpable de su actual sufrimiento.
Pero un segundo ¿ella pudo haberlo detenido, verdad?
Ella sabía que su Uchiha no la obligaría a hacer algo que ella no quisiera
Ella sabía que había sido culpa suya…su culpa por no poder resistirse a él
Por no poder resistirse a sus orbes negras que la miraban de forma tan penetrante.
Por no haber tenido la fuerza para detenerlo.
Eso demostraba que ella seguía siendo…débil.
Todos pensaban que ella era perfecta pero se equivocaban porque ella tenía un secreto.
Más que un secreto era una…debilidad.
Una debilidad con nombre y apellido…
Sasuke Uchiha.
El mismo que fue su debilidad en el pasado,
Seguía y seguiría siendo su debilidad
Porque cuando estaba con él, ella era…débil.
Algunas cosas nunca cambiarían;
Pero esa mañana de entrenamiento Sakura se dio cuenta de que en algunos casos ser débil no es tan malo después de todo.
Sakura Haruno se dio cuenta que:
Sasuke Uchiha era una debilidad con la que valía la pena vivir
Una debilidad… demasiado placentera
Una debilidad que le había ayudado a superarse.
Una debilidad que al mismo tiempo era…
Su fortaleza…
bueno eso es todo por ahora jeje espero le haya gustado... estoy pensando hacer una pekeña conti de este pero desde el punto de vista de Sasuke-kun
si kieren que la publike ya sabn dond puedn escribir sus comentarios xD
baiiiii
