DISCLAMER: Nada de esto me pertenece.
Demonios. ¿Y si ella no quería? ¿Y qué si prefería quedarse tal y como estaba? Las reglas no estaban hechas para ella. Le daba risa. No quería ni oír hablar del estúpido de Malfoy, ni mucho menos de Lestrange. Eran todos unos insensibles, unos asquerosos. No pegaban. No conectaban. No quería pasar el resto de su vida junto a ellos. No sería feliz. Ella tenía sueños y quería cumplirlos. Nada más.
Está bien, hay que reconocerlo. Por algo la eligieron en Slytherin. Sería una Slytherin toda su vida. Era su forma de pensar, de actuar. Pero ni mucho menos despreciaba a nadie. No quería. ¿Qué más daba que fuesen magos o muggles? Eran personas igualmente. Todos eran iguales física e interiormente. Los dos eran capaces de alcanzar el cielo si se lo proponían. Era ridículo pensar que unos eran una basura y otros, alguien a quien besar los pies. No, ella no quería pensar así. Ni siquiera lo hacía.
¿Decepción? Já. No tenían derecho si quiera a ser decepcionados por ella. Sus padres puede, pero ¿Bella? ¿Cissy? No. Y mucho menos otros. Ella había visto cómo la miraban cuando se juntaba con Tonks. Cómo los miraban a los dos. Deseando que se pudriesen bajo el subsuelo.
Rabia que corría por sus venas. Nunca hubo amor. Sólo mero interés. Aunque guardaba una pizca de esperanzas. Al menos que alguien le echase un poco de menos. O por lo menos que recordasen los buenos momentos que pasaron juntos. ¡Joder! Eran familia. Habían convivido juntos durante años. Quieras o no, a la gente a la que dejas de lado, la sigues echando algo de menos. Era su rutina. Y hacer otra costaba.
Pero ni mucho menos se arrepentía. Ella estaba enamorada y lucharía. Lucharía por Ted. Por poder pasar una vida junto a él. Tener hijos y formar un hogar. Aunque eso le costase ser la oveja negra de su familia.
Aunque la verdad es que donde más ovejas negras habían existido, era en su familia. Porque todos los sangre pura eran una especie de familia. Familia a la que no deseaba juntarse jamás ni por nada del mundo. No quería humillaciones. Los conocía bien.
Todos unas víboras deseosas de carne fresca y trapos sucios.
Y a ella no le gustaba ser igual que los demás. Ella marcaría un comienzo. Empezaba la lucha. Y tenía claro que fuese como fuese, ganarían. Para todos los descarrilados, despreciados y demás. Su triunfo. Y restregárselo por la cara. Tal y como ellos harían en caso contrario, porque, quisiese o no, ella fue, era y sería Slytherin.
Y muchos seguirían su ejemplo. Estaba segura.
Pero se mantendría al margen. El Señor Oscuro ya prometía. Nunca le pareció bien la idea de que muchos de su familia se juntasen con ese monstruo. Ni a ella ni a muchos. Pero callaban, callaban por temor a ser asesinados. Ellos y sus familias.
Siempre le guardaría la mayor parte de su odio. Él estaba impulsando a todos a su destrucción. A pensar que los muggles tenían que ser destruidos. Y a la vez destruía también a todos los que lo seguían. Sembrando odio, miedo, terror.
¡No! Debía proteger a su familia de todo esto. No derramaría lágrimas. No quería. Y lucharía por ello.
Andrómeda Tonks lucharía. Y si se tenía que llevar por delante a todos los anteriormente mencionados, lo haría. Como la víbora que protege sus huevos. Una víbora de dientes puntiagudos y venenosos, aunque mansa por fuera, brava por dentro.
Hola!
Bueno, aquí un fic nuevo! Y esta vez subiré dos capítulos de una vez.
Es una idea loca que me vino a la mente mientras comía. Estaba viendo un documental sobre personas que liberaron al país y lucharon por ser diferentes y se me ocurrió este maravilloso fic donde iré escribiendo en cada capítulo algo sobre los liberadores del mundo mágico. Y es curioso porque lo primero que se me vino a la cabeza fue Andrómeda Black, ahora de Tonks. Los personajes irán saliendo por orden aleatorio. Quizá de los que más fáciles de escribir sean hasta los más complicados.
Canción: I'm not your toy- La Roux
Nos leemos!
Besos! Y mandad algún review! ;D
