- Kaede, ve por naruto y llama a Shizune, por favor – Dijo Tsunade
- ¿Y para que los quieres? - Pregunto con una gran sonrisa en la cara

- A naruto y a ti les tengo una misión, y los acompañaran… necesito un Hyuuga, Neji Hyuuga esta en una misión con su equipo así que Hinata y el equipo de Sunakagure ira con ustedes – mientras pensaba – y a shizune necesitamos discutir un tema sobre ciertas cosas – dijo con una mueca de disgusto

- ¡¡Aaah ya veo problemas con el escondite del sake!! – dijo kaede asiendo una mueca de burla.

- tsk… pues si, siempre lo adivinas Kaede – dijo levantando los brazos como rindiéndose

Kaede se fue corriendo y se topo con Shizune.

- ¡¡Shizune!!, ¡¡Tsunade te llama!! Quiere saber dónde le escondite el sake esta vez – le dijo sin para de correr

- ¡Gracias! – dijo shizune despidiéndose con la mano.

"Muy bien ahora debo encontrar a Naruto-nicha" – pensó mientras miraba de lado a lado sobre un tejado.

"Me pregunto que estará ocultando la hokage" – susurro en su mente

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En la oficina de la Hokage. Se escucha:

- Toc! Toc!

Adelante – dijo con un tono serio.

- Tsunade-sama parecer no se dio cuenta de nada – dijo Shizune mirando por la puerta mientras la cerraba.

- Eso parece, es muy difícil mentirle, siempre sabe cuando le decimos la más mínima mentirilla blanca, ojala yo tuviera ese instinto con las apuestas – resoplo mirando su chanchito de alcancía vació – pero de eso no es lo que debemos hablar.

- Hai, es sobre esa misión, Tsunade-sama esta segura que quiere enviar a esos dos por ese objeto tan peligroso, es solo peligroso para ellos dos y justamente son ellos los que deben ir a buscarlo – dijo tomando un tono más seria un poco melancólico.

-Lo se Shizune, pero esos tres son los más Avilés de nuestra aldea además Irán con los hermanos Sabaku y recuerda que el menor ahora es kazekage – dijo con u tono que le pareció un poco humillante a su edad de 50 y el Kazekage apenas de 18.

- ese objeto nos traerá muchos problemas esperemos que, no suceda lo que temo – dijo shizune pensando con la cabeza gacha.

- es cierto, lo mejor será destruirlo, pero es algo imposible ya que si naruto sabe sobre las propiedades de ese objeto… lo relacionara enseguida con Orochimaru y Uchiha Sasuke, no podemos cambiar eso – dijo apoyando sus hombros en el escritorio – Además el otro problema es que Kaede ira con ellos y si eso pasara seria peor ¿no?, no podemos dejar que ella sepa la verdad, "ese es uno de tus deseos no es así… Viejo Sarutobi" - pensaba mientras miraba el cuadro en su pared del tercero.
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En la calle:
-¡Kaede-necha! – Dijo naruto sonriendo como era normal en el.

- ¡Naruto-nicha! Ehehe la vieja Tsunade nos llama, aa cierto ¿haz visto a Hinata?

- amm veamos, así iba a entrenar con Kiba en el Bosque – dijo señalando hacia el bosque.

- Bien, Nos vemos más tarde- dijo Kaede sin para de correr hacia el bosque que le señalo naruto.
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En el bosque:
kiba, Hinata, Shino y Kurenai empezaban con su entrenamiento cuando akamaru sintió una presencia en los árboles

- ¡Waf!, ¡Waf! – ladraba akamaru hacia una de las ramas de un árbol.

- Ehh ¿Qué sucede Akamaru? – Preguntaba mientras miraba hacia la rama del árbol – ¡Ahh! ¡Kaede eras tú! – dijo mientras observa la silueta de cabello corto hasta los hombros entre café claro y rubio y ojos ligeramente azules como los de naruto.

- ¡ehehe!, Akamaru siempre delatándome – dijo Kaede con un tono de enfado falso.
- Ah Kaede, ¿Sucede algo? – dijo kurenai acercándose, mientras kaede saltaba de la rama al piso.

- buenos días Kaede-chan – dijo Hinata sonriendo con dulzura.

- Buenas Kaede – dijo Shino con su típico tono serio que para kaede ya era habitual.

- ¡¡Buenos días Hinata, Shino!! – Dijo mientras agitaba su mano en señal de saludo – Pues eh venido por Hinata –dijo tomándola del brazo sonriendo – la hokage tiene una misión para nosotras – dijo sin dejar de sonreír

Kurenai asintió con la cabeza en señal de que podían irse.
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En la Oficina de la Hokage:

- Tsunade-sama ya vienen – dijo despertando a la Hokage de sus pensamientos

- Muy bien déjalos entrar – dijo parándose de su asiento

- También vienen los Hermanos Sabaku no, dijo mientras miraba para el otro lado del corredor.

- Que bien ahora no tendré que explicar la misión dos veces – dijo sacando unos documentos del escritorio – solo espero que no se compliquen las cosas durante la misión – dijo poniendo un semblante serio.

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En el pasillo Hinata iba distraída con los alardes del rubio, y las risas de kaede, cuando enfrente de ella sienta una mirada y mira hacia en frente, al instante se pone roja como un tomate al ver a un chico con un polerón café y shorts beitch, su cabello era rojo, y sus ojos aguamarina con unos círculos negros alrededor, era alto y tenia buen cuerpo, mientras lo asimilaba de inmediato con Sabaku no gaara, el Kazekage de Sunakagure.

"Esos ojos son los de un Hyuuga" – pensaba el mientras no paraba de mirarla era bonita, realmente bonita vestía un polerón blanco con mangas y detalles lavanda pálido, cabello largo negro azulado y unos pantalones negros hasta la rodilla pero un grito de su hermana temari lo despertó de sus pensamiento asiéndolo mirar hacia el lado.

- ¡Ah! ¡¡¡Kaedeeeeeeeeeeeeeeeeee!!! – Grito temari asiéndole señales a la peliclaro, que llevaba una polera color lima de mangas cortas con detalles negros y pantalones negros ajustados hasta las rodillas

- ¡Temari-saaaan!- dijo sonriente acercándose para luego estrujarse mutuamente abrazándose.

Mientras Gaara miraba acostumbrado la escena, Kankuro aprovechaba de saludar a Hinata, Kaede y Naruto.

- Nee! La Hokage los espera adentro. –dijo Shizune abriendo la puerta.

- ¡Hai! – dijeron todos menos Gaara que solo se limito a asentir con la cabeza.

Todos entraron y la Hokage empezó a explicar lo que debían hacer.

- Ahora les explico en consiste su misión – mientras miraba a cada uno de los presentes - deben ir a buscar las aguas de la verdad – con pronunciar esas palabras todos quedaron mirando a la quinta como si estuviera loca o algo por estilo – Son aguas que te conceden dos verdades al momento de tocarlas, la primera verdad es como pedir un deseo puedes saber la verdad sobre lo que tu desees – esas ultimas palabras, resonaron el la cabeza de kaede.

- la verdad de lo que uno desee – susurro de modo que nadie pudo oírla a excepción de naruto que estaba a su lado y que se volteo para verla, estaba pálida como si le dieran escalofríos saber algo, naruto sabia que ella al igual que el no tenia padres y fue encontrada abandonada el la aldea de la cascada y luego traída a Konoha cuando aun había paz entre las aldeas shinobi.

- Kaede, ¿estas bien? – dijo en un tono bajo solo para ella mientras ponía su mano en su hombro.

- estoy bien naruto, gracias – dijo volteándose para sonreírle, pero nunca había forzado tanto una sonrisa, aun le atormentaba la idea de que si podía usar esas aguas para saber sobre su pasado pero al oir la voz de naruto salio de sus pensamientos

- ¿Y cual es la otra verdad que te concede? – dijo naruto dando un paso adelante y poniendo semblante serio.

- Pues… Te da todo conocimiento de jutsus – al momento de oir aquello naruto abrió los ojos como plato, y recordó una de las conversaciones que había tenido con Jiraiya:

Flash back:

- Ero-sennin, porque, porque Orochimaru si el era su compañero no? – dijo con un poco confundido naruto

- Si, no lo niego era nuestro compañero, pero el rompió las reglas por ambición, el quería saberlo todo sobre jutsus quería ser el más fuerte de todos y eso lo llevo por el mal camino – contaba mientras bebía una taza de sake.

Fin del Flash back.

Sasuke…- susurro entre dientes mientras apretaba los puños

Mientras tras de la puerta Sakura escuchaba todo y también al igual que naruto relaciono esas aguas con la ambición de Orochimaru, y obviamente con su sasuke-kun.

- Tsunade… –dijo Kaede mirando a los ojos a la Hokage

- Lo se,… Sakura! Puedes pasar! –dijo apoyando sus codos en el escritorio

De repente se abrió la puerta y todos los presentes se giraron a ver quien era la espía que oía todo tras la puerta.

- Lo siento Maestra yo solo… -pero fue interrumpida por su maestra.

- Lo se también te preocupa, si te gustaría podrías acompañarlos.

- ¡Hai! – Asintió felizmente y se unió a la explicación de su maestra

- Como decía, esas son las dos verdades que te dan esas aguas, su misión es ir a la aldea de la cascada y traerlas, pero será mejor que no las uséis, -recalco - esta misión es considerada en el rango más peligroso, no sabemos cuantos enemigos encontraran en el camino, o quienes – dijo un poco más bajo – pero lo que sabemos es que no será fácil,