A veces se dejan pasar cosas importantes mucho creerán que la hokage no tiene necesidades o problemas pero a veces se olvidan de que ella es una mujer, de que tiene los mismos problemas que todas las mujeres de la aldea.
Era un día caluroso eran apenas las 08:00 ya se podía ver personas caminando en la aldea de konoha, mientras tanto en la torre del hokage una rubia apenas se despertaba, cubierta con las sabanas hasta la cabeza .
-Maldita sea….
Se despertó apenas, aun a si se levanto miro el calendario, respiro hondo tratando de no levantarse muy bruscamente, eran uno de esos días de cada mes que la naturaleza le recordaba que era mujer. Por tanto papeleo se le olvidaba cuando le llegaba lo más desagradable de ser mujer, su periodo. Fue directo a un cajón a ponerse una compresa, como odiaba tener que usar esas cosas pero tenía que hacerlo de otro modo se mancharía. Se cambio ropa, se peino, se puso labial se echo perfume, se puso sus tacos y salió de la habitación. Se encontró con shizune por el pasillo.
-Hola Tsunade-sama, ¿se encuentra bien? – pregunto al ver que Tsunade hacia una mueca de dolor.
-Nada shizune – sonrió– bueno tengo que ir a la oficina.
Al entrar a la oficina se encontró con kakashi y Naruto el cual venia a entregar uno documentos.
-Hola Tsunade no bachan – dijo el rubio
-¡NO ME LLAMES ASI! – grito golpeando a Naruto.
-Buenos días Tsunade-sama venimos a entregarle estos documentos que nos entrego shizune – dijo kakashi entregándole los documentos.
-Okey gracias – caminado a su escritorio
-¡Auch! – dijo Tsunade sujetándose el abdomen con las manos.
-Tsunade-sama ¿se encuentra bien? – pregunto kakashi asustado
-No es nada son solo cosas de mujeres - dijo sentándose lentamente.
Luego de eso kakashi y Naruto salieron de la oficina, se toparon con shizune en el pasillo a la cual le dijeron lo que le había pasado a Tsunade.
-Maldito dolor – murmuraba enojada abrasándose por el dolor que sentía
Ya era de tarde en konoha hacían ya 32° grados de temperatura, la hokage sufría tanto por el calor como por los dolores de la menstruación. Decidió colocarse algo más ligero, fue a su habitación para ponerse una polera la cual no usaba mucho por que siempre la miraban mucho al tener los pechos grandes lo cual le molestaba mucho pero como hacía calor igual se la puso. Y se fue caminado tranquila por el pasillo, como era de esperarse casi todos se dieron la vuelta a ver a la hokage que se veía hermosa con su con su cabello rubio y suelto que le llegaba hasta un poco más arriba de la cintura.
-¿Que miran? Mejor pónganse a trabajar – ordeno un poco molesta.
-S-si Tsunade-sama – dijeron todos los presentes sonrojados tanto por el calor como la presencia de la rubia.
Al llegar a su oficina se sentó. Termino de a poco su papeleo tomando como siempre un poco de sake. Ya iba cayendo la noche por lo cual se apresuro para terminar más rápido su papeleo para ir a dormir.
-Bueno creo que termine – dijo mientras salía de su oficina para ir a dormir.
Se cambio de compresa se puso su kimono y se acostó sobre la cama para descansar en la cual se quedo profundamente dormida. Tsunade podrá ser la hokage pero aun así ella es una mujer y tienes sus problemas como toda mujer.
