Niña inocente

Estoy aquí otra vez, en tu puerta llamando con posado de niña inocente. Me aliso la falda una vez mas y llamo a tu puerta, abres enseguida como si hubieras estado esperándome, llevas mi camisa favorita lastima que durara poco. Me miras con una sonrisa socarrona y me invitas a pasar.

Mi cuerpo se enciende con solo verte, se que sientes mi mirada lujuriosa cuando me quitas la chaqueta procurando rozar mi piel al máximo. Noto como buscas disimuladamente la cremallera de mi falda. Esta vez me toca a mi sonreir socarrona y decirte: "Esta falda lleva la cremallera delante Romeo". Bajo la cremallera y automáticamente mi falda se desliza hasta mis pies, de una patada la mando lejos y me giro.

"Te gustan?" te pregunto mientras señalo mis bragitas rojas, tu me miras y con voz ronca me dices "las preferiría en el suelo" , sonrio y te empujo hacia el sofa, me siento a horcajadas sobre ti y te empiezo a mordisquear la oreja.

Se exactamente tu punto débil y noto como te invade un deseo sexual incontenible, me arrancas los botones de la blusa y te quedas estupefacto al ver que no llevo sujetador. "Me has roto mi blusa favorita, tendre que castigarte" digo mientras me levanto y me voy a tu habitación.

Oigo que te levantas y vienes a la habitación sin camisa, me tiras a la cama. Yo me resisto mientras tu intentas quitarme la ultima prenda de ropa que cubre mi niveo cuerpo. Con un agil movimiento te arranco el botón del pantalón y oigo el gruñido que sigue a continuación "joder nena con estos ya van tres" te quitas los pantalones y los arrojas al suelo.

"No estábamos en igualdad de condiciones" digo mientras sonrio y me coloco encima de ti, noto tu erección y decido moverme lentamente sobre ella, notando como palpita de deseo. "Noto lo mojada que estas" me dices e intentas agarrar mis pechos, rápidamente te cojo los manos y te lo impido. "Hoy mando yo guapo " digo intentando que no te liberes del agarre.

"Ni de coña" me coges las manos y me impides moverme mientras te pones encima mio, me arrancas las bragas y bruscamente empiezas a tocarme, no puedo evitar gemir de placer mientras noto tus dedos penetrándome bruscamente, tu lengua busca ansiosa mis pezones para chupar y succionar, gemidos de placer invaden la habitación mientras yo me retuerzo debajo de ti suplicando que pares, sin desearlo.

En un ataque de lucidez logro decirte entre gemidos "Hazme tuya ya!", veo que sonries y mientras me mordisqueas la oreja me dices "Quiero que te corras primero nena". Eso hace que me moje mas, mientras tus dedos juguetean con mi clítoris, veo como te chupas los dedos mojados (cosa que me excita aun mas) y los vuelves a meter dentro de mi, la sensación es demasiado para mi cuerpo y me corro con un ultimo gemido gritando tu nombre.