.
LAS ALAS DEL CISNE
PREFACIO
Hoy desgraciadamente volvía a amanecer.
Con pesar me levanté a seguir con esta blasfemia que se hacía llamar vida, no encontraba sentido a continuar respirando si no había motivo. La vida, no, rectifico…, mi vida era una mierda, la absurda continuación de una historia que debió terminar mucho tiempo atrás.
¡Maldita sea!, mi madre entró de nuevo mientras yo dormía; ella y su absurda manía de correr las cortinas y abrir las ventanas. Cuando me acerco para encerrarme de nuevo en mi miseria personal, alcanzo a escuchar el alegre cantar de las aves, como si estuvieran regodeándose de su felicidad en mi cara; por si fuera poco, un par de pájaros marrones alzan el vuelo y pasan muy cerca de la ventana, presumiendo sus alas, hermosas como las que me fueron arrancadas.
Alas. Extiendan sus alas y vuelen…, ustedes que pueden.
Ya que tengo mi lúgubre encierro tal y como me gusta, enciendo el primer cigarro del día y sirvo la primer copa. "¡Salud!", brindo al aire una y otra vez.
¿Cuándo fue la última vez que ingerí alimentos? ¿Hace cuánto que no me quito estas mugrientas prendas? ¡Demonios! ¿Ya se acabaron los cigarros?
Una risa histérica escapa de mis labios, suena como el amago de un sonido distante que algún día significó felicidad.
¿Por qué me tocó esto a mí? ¿Por qué?
Las calles se hicieron inmensas, los edificios conmensurables y las horas eternas desde aquel día. Todo por lo que un día soñé, mis metas, mi ilusión, mi pasión y mi sentido en ésta vida se habían esfumado por completo. Yo danzaba en nubes con sabor a gloria, estaba a un paso de obtener la fama, el reconocimiento internacional por el que tanto había trabajado, tendría todo lo que soñé, tantos años, prácticamente toda mi vida.
Nada valía ahora.
Soy Isabella Swan y era un cisne, el más hermoso de todo el lugar; mis padres, mi hermano, mis compañeras y maestras; todos me admiraban, adulaban mi estilo, mi soltura y mi naturalidad. Ahora no era ni la sombra de aquello, ya no había más cisne, me habían arrancado las alas de raíz y no era más que un ave horrible y sin gracia. Sin un propósito ni un fin.
Ahora sólo soy Isabella, el burdo bufón del cisne Swan.
No soy nada.
Por: VickoTeamEC
Antes que nada quisiera dedicar esta nueva historia a mi princesita bella! que, aunque me adelanté unas horas, está de cumpleaños! Un añito más para esa personita maravillosa que ha venido a llenar de felicidad mi vida! Gracias por todo y que vengan muchos más. Te amu mi corazón! FELICIDADES!
De seguro habrá quienes digan "yo vi eso en un programa" y sí, esta historia es una adaptación al capitulo de un programa televisivo, por lo tanto la idea original es propiedad de la casa productora TELEVISA.
Esto sólo es el inicio, espero tenerles la actualización lo más pronto posible, estoy de graduación y estaré un par de días de juerga... así que, no prometo fechas.
Nos estamos leyendo! Besos de bombón!
