Prólogo

Cansada es la única palabra que encuentro para describir mi estado en este momento.

Hace solo 3 días que la universidad empezó, y ya me tiene harta. El paso que he dado al entrar a la universidad, me da la pauta de que he alcanzado la madurez. Aunque siempre dentro de mi corazón estará la simpática, hermosa y alegre niña que fui y que siempre llevare conmigo.

No es que ahora no posea esas características, es solo que ahora soy más adulta, y el pasar de la niñez a la adolescencia me hace perder un poco de inocencia y por supuesto me hace perder características de la etapa de la vida que ahora estoy abandonando.

Aunque reconozco que eso no me quita lo perezosa y el miedo a los fantasmas y a los relatos de terror. Sé que puede sonar tonto y hasta infantil, pero la verdad es que eso es lo que más conservo de la niñez.

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Siempre me han dicho que la universidad es muy difícil, ahora podré comprobarlo por mi misma. Aunque me tranquiliza un poco la idea de saber que pase con buenas clasificaciones el examen para ingresar. Reconozco que era bastante difícil, después de todo nadie entra a la grandiosa Universidad de Tokio fácilmente. Es una escuela prestigiosa, a la que no va cualquier persona, pero la verdad, el hecho de que yo pueda ir a esa maravillosa escuela se lo debo a mi padre. Después de todo, no pertenezco a una familia adinerada, al contrario, toda mi vida he sido una chica sencilla, y esta es la primera vez que asistiré a una escuela de suma importancia.

Pero es una ventaja para mí y para mis estudios que mi padre sea Director en jefe de la famosa "Facultad de arqueología y preservación nacional de objetos pertenecientes a Japón" localizada en Kyoto.

A decir verdad, nos costo mucho separarnos, pero después de varios intentos fallidos convencí a mi papá de irse para Kyoto. Después de todo no estamos tan lejos, y un puesto así no se obtiene todos los días.

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Parece que la cabeza va a estallarme. No es para menos, he pasado casi 4 horas tratando de preparar las múltiples tesis para las difíciles asignaturas que me ha tocado cursar. Pero acepto que siempre tuve el sueño de cursar esta carrera. Bueno, también quería ser una modelo como mi madre.

Pero mi sueño se vio frustrado por un desafortunado incidente ocurrido en los días en que me disponía a seguir los pasos de mamá. Pero eso ya quedo en el pasado, y prefiero olvidarlo por el momento. Estoy demasiado ocupada como para andar pensando en otra cosa que no sean mis estudios.

Ahora puedo afirmar que la universidad es realmente un dolor de cabeza. Especialmente por la cantidad de tesis que debo realizar. Eso me deja realmente exhausta, pero sé que debo mantener el animo que tengo hasta ahora, porque ¡¡¡apenas llevo 3 días y ya me estoy quejando!!!. Es que nunca he sido buena para el estudio, (especialmente si se trata de las matemáticas *-*) siempre me he destacado en los deportes, y creo que en la universidad no será la excepción. He estado viendo las posibilidades de entrar a algún club de la universidad, pero entre el estudio y el trabajo, apenas me queda tiempo libre. De todas formas haré lo posible para poder hacer alguna actividad extra- escolar.

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Pero creo que ya es hora de tomar un descanso. Puedo ver claramente en el espejo lo cansada que estoy. Después de todo, mi rostro muestra que he estado varias horas estudiando, y apenas puedo mantener los ojos abiertos.

Cada vez que me veo en el espejo trato de ver a la niña que era, intento ver su tierna mirada, su fino rostro y su bella sonrisa, pero la verdad me parece imposible. Sin embargo, ahora veo que la tierna mirada se ha convertido en una mirada cálida, el fino rostro se ha transformado en un rostro muy suave y bien perfilado, y la bella sonrisa se ha reformado y es una sonrisa pura, y por sobre todo una sonrisa alegre. También mi cabello ha cambiado, ya que paso de ser corto a ser un poco más largo que como solía llevarlo cuando niña.

En cuanto a mi cuerpo, no puedo quejarme. Tengo un cuerpo bastante esbelto, bien formado y bastante desarrollado, que muchas veces resulta ser la envidia de mis amigas, y el punto de atracción de los chicos. Aunque debo confesar que siempre he sido tímida y no me gusta presumir las cosas, y este caso es el principal. No me gusta presumir de mi cuerpo, ni de nada.

Aun estoy intentando encontrar a la pequeña niña que solía ser, pero como siempre es imposible.

Uf!!!, un suspiro, realmente estoy cansada, pero aun tengo trabajo que hacer y mañana tengo que entregar las tesis, así que debo terminarlas.

Mejor dejo de perder el tiempo buscando algo que sé, jamas encontrare y termino las cosas que debo hacer. Hablo como si odiara mi infancia, y es por eso que no puedo encontrarla en el espejo, pero la verdad es que solo dejo de buscar la niñez porque los recuerdos vienen a mi mente, y aunque muchos fueron felices, tengo mas recuerdos dolorosos que no quiero recuperar ahora. Me alejo del espejo, esperando alejarme del pasado, aunque después de alejarme algunos pasos, tengo una sensación extraña y volteo para ver al espejo otra vez. No hay nada allí. Debe haber sido mi imaginación, y sumado al cansancio que tengo por estar estudiando sin parar, hacen que mi mente me juegue una mala pasada. Ahora se termino el descanso, basta de distracciones y a trabajar. Entre más rápido lo haga mas pronto terminare con mis tesis.

- Veamos... tengo que buscar algo acerca de la historia antigua del Japón, periodo Asuka. Creo que hay algo de eso en la biblioteca, eso espero- dijo la joven chica saliendo inmediatamente hacia la biblioteca.

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La biblioteca a la que la chica sé dirigía era una magnifica habitación, decorada en diseños muy antiguos pero a la vez muy elegantes y que además, sumado a su hermosa decoración conservaba su toque japonés digno de una familia apegada a las tradiciones de ese país. Era increíble que una biblioteca así se haya mantenido en tan buen estado desde la construcción de la casa. Y es que esa habitación había estado así desde antes de que la chica llegara a ocupar esa casa. A decir verdad ella había insistido mucho en dejar la habitación como estaba, después de todo algo le decía dentro de sí misma que debía dejarla así, a pesar de la negativa de su padre que deseaba cambiarla, pero a causa de problemas económicos, esa biblioteca había permanecido así, y así se encontraba cuando la chica llego a revisar uno a uno los libro que se encontraban en los estantes. Reviso y reviso hasta que por fin, encontró un libro que le serviría para terminar su tesis.

- Historia del Japón. Este es- dijo la chica con una amplia sonrisa en su rostro.

Pero cuando fue agarrar el dichoso libro, todos los libro que estaban encima de ese terminaron sobre el cuerpo de la chica que termino resbalándose de la silla donde se había subido para alcanzar el libro. La pobre muchacha había sufrido el golpe de cada uno de los libros incluyendo el famoso libro que buscaba que, gracias a su mala suerte, había caído justo sobre su cabeza haciendo que la hasta ahora inocente chica maldijera cada una de las 552 paginas del libro "Historia del Japón".

- Ay!!! Eso si que dolió- dijo la chica pasando suavemente una mano sobre su cabeza y maldiciendo una y mil veces a ese libro.

De repente un cuaderno atrajo su atención.

Estaba tapado por los otros libros, pero vio claramente algunos dibujos infantiles con varios símbolos. El cuaderno era de un color rojo, y contenía algunos dibujos en su tapa. Un sol, una luna y una gran estrella que en el centro llevaba una inscripción.

Decía: "Remembranzas..."

- ¿Dónde he visto esto antes?- se preguntaba la chica que aun sostenía el cuaderno en sus manos.

Saco rápidamente la envoltura que protegía al cuaderno del polvo y se disponía a abrirlo cuando...

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El teléfono sonó, haciendo sobresaltar a la chica. Aunque no recordaba el cuaderno, su corazón y el nudo que se formo en su garganta, le decían que ese cuaderno, seria de gran importancia a partir de ahora.

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Llevaba casi media ahora hablando por teléfono, y no tenia intensiones de soltarlo, de no ser porque la persona que estaba hablando con ella se lo pidió. Su llamada hacia que la chica se pusiera muy feliz, tanto que decidió ir a la cocina y comenzar a preparar la cena con mucho entusiasmo. De verdad estaba feliz, pues llevaba mucho tiempo esperando esa llamada. Es que el trabajo y ahora la universidad ocupaban todo su tiempo, y cuando llegaba a casa descubría que su contestador estaba saturado de llamadas.

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Después de cenar, la chica volvió al trabajo, así que se dirigió nuevamente hacia la biblioteca para recoger el libro de historia que había olvidado horas atrás. Apenas llegó a la biblioteca, el cuaderno volvió a llamar su atención.

Pero ¿Qué tenia ese cuaderno que hacia que la atención de la chica siempre se dirigiera hacia él?

Inmediatamente la chica lo levanto del suelo, y después de admirar la cubierta durante un rato, con un poco de temor siendo vencido por la curiosidad, abrió el cuaderno.

- Pero si esto es...- dijo la chica un poco sorprendida. -Es el contenedor de recuerdos que comencé después de que termine de transformar las cartas clow a cartas Sakura- volvió a decir. - Aquí guarde todas los escritos desde que empecé a capturar las cartas hasta que las selle todas. Todos mis secretos, todo aquello que ni siquiera un diario de vida podría guardar está aquí; cartas, recortes de periódicos, poesías que escribía, todo solo aquí...- dijo la muchacha en voz baja, casi en un susurro

- El libro de Clow- dijo recordando aquel libro que ahora le pertenecía y que en el pasado había servido como un contenedor para las cartas que ella se había encargado de sellar.

- Tengo que encontrar el libro de las cartas- . Inmediatamente salió corriendo hacia el lugar donde había visto por ultima vez aquel misterioso libro que, aunque no lo suponía llamaba a la chica tal y como lo hizo la primera vez.

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Notas de la autora: Bueno, al fin pude terminar el prologo de esta historia. Lamento mucho que se me haya hecho tan largo, pero es que tenia que ambientar un poco la historia. Después de todo pienso incluir muchos temas culturales y hacer el fic largo porque ¡¡¡Me encantan los fanfics largos!!!. Lo único que tengo para aclarar es el periodo Asuka, este periodo de tiempo forma parte de la verdadera historia de Japón y se produjo desde el año 593 hasta el año 710. Bueno, solo quiero mandar un beso a mis amigas Sakura Yolei Sora, Oracle, Zympre, Megumi, Kira Chan, Asuka, por supuesto a mi friend Moonkat y a todos los que leen mis fics. Dicho esto, solo quiero pedir que dejen muchos reviewa y me envíen sus comentarios (que realmente me sirven mucho) felicitaciones y demás cosas a ayanami00_rei@yahoo.com.ar

Besos, Rei Li

Avances del primer capitulo: La vida de Meiling ha cambiado mucho en estos últimos años y ahora encontrara una amiga que la ayudara a solucionar una angustia generada en el pasado. Mientras tanto, la vida de Shaoran se complica al saber que su situación sentimental es un desastre, y esto provocara un giro completo en la actitud del joven hechicero. Entretanto, un doctor amable, esta felizmente comprometido, pero le surgirán algunas complicaciones. Sakura por su parte encontrara el deseado libro, y un sentimiento de nostalgia invadirá el corazón de la joven haciendo que recuerde un hecho doloroso en el pasado.

Primer capitulo: "Los complicados cambios de la vida".