Resumen: Después de que el maestro Fu se viera forzado a recolectar el Miraculous de Ladybug y de la ruptura entre ella y su partenaire, Marinette se convierte en la nueva CEO de Gabriel y hereda algo más que su compañía. Y Chat Noir tendrá que enfrentar solo a Hawkmoth con una grave desventaja.
Notas:
1) Los Personajes no me pertenecen, son propiedad de ZAG Heroes, y los créditos son de Thomas Astruc y su equipo.
2) Este fin está realizado sin fines de lucro, solo por diversión.
3) Puede contener Spoilers de lo que ha aparecido en la tercera temporada
DISCORDIA
CAPÍTULO 1
Edificio del maestro Fu
Tres años después de la aparición de Hawkmoth
Marinette subió por la escalera hacia el apartamento del Guardián de los Miraculous. Por primera vez en los tres años que tenía de conocerlo, Marinette iba a ver al maestro Fu con un poco de miedo. Estaba segura de que el anciano la reprendería por haber cometido un error. Un grave error que provocó una seria herida a Chat Noir y estuvo a punto de hacer dejar que Hawkmoth se hiciera con los Miraculous de ambos.
Mientras subía hacia el apartamento del maestro Fu, Marinette miró de reojo hacia su bolso. Tikki estaba inusualmente callada durante todo ese tiempo. Normalmente, cuando Marinette cometía un error, la kwami no dejaba de regañarla, pero en esta ocasión Tikki se había guardado todo para sí misma.
-¿Estás enojada conmigo, Tikki?- dijo Marinette.
La kwami asomó la cabeza del bolso y sacudió levemente la cabeza mientras que miraba a su elegida con tristeza.
-¿Porqué estaría enojada contigo?- dijo finalmente Tikki.
-Bueno, porque…- comenzó Marinette, deteniéndose en el descanso de la escalera y volviéndose a su bolso abierto- cometí un error. Me dejé llevar por mis emociones y…-
-Y fuiste akumatizada- completó Tikki.
Marinette se mordió el labio. Esta vez sí había metido las patas. Después de que Lila y Chloé se unieran para hacerle la vida imposible, por fin habían colmado la paciencia. La rubia había hecho una broma cruel para burlarse de Luka, y el mismo día Lila había logrado aniquilar toda la fortaleza a Marinette.
Esas dos habían caído demasiado bajo en esta ocasión.
Marinette se había ido del colegio con lágrimas en los ojos, y después de eso no recordaba nada más. Había sido akumatizada en un villano sumamente poderoso que incluso había logrado herir gravemente a Chat Noir, quien apenas había logrado liberarla del akuma con ayuda del Viperion. La chica no recordaba nada hasta que despertó de su trance akumatizado delante de los dos héroes. Una vez libre de su influencia, Marinette se pudo transformar en Ladybug y purificó el akuma, pero ya era demasiado tarde: Hawkmoth ya había descubierto que ella era Ladybug.
Cuando Marinette volvió a su casa, recibió un mensaje del maestro Fu, diciéndole que ya había terminado de curar las heridas de Chat Noir y que necesitaba verla para explicarle su plan para protegerla de Hawkmoth ahora que su identidad había sido revelada al villano.
-Lo siento mucho, Tikki- dijo Marinette- sé que me dijiste mil veces que debería mantener mis emociones bajo control. Realmente arruiné todo y…-
-No fue tu culpa- la interrumpió Tikki, pero seguía esbozando una expresión más triste de lo que Marinette jamás había visto- Chloe y Lila llegaron demasiado lejos en esta ocasión. No te culpo, y sé que ni Chat Noir ni el maestro Fu lo hacen tampoco-
-Creo que lo arruiné todo… y lastimé a Chat Noir…- dijo Marinette, por fin llegando a la puerta del apartamento del maestro Fu y llamando con un par de golpecitos.
-Pasen- escuchó decir al anciano dentro.
Marinette abrió la puerta y entró al pequeño apartamento, y miró sorprendida que el anciano no se encontraba solo. Chat Noir estaba sentado detrás del anciano, con su bastón entre sus manos y una expresión derrotada. El héroe levantó su vista hacia ella por un momento, pero volvió a fijarla en el suelo.
La chica comenzó a sentirse nerviosa, mirando alternadamente al anciano y a su partenaire. ¿Porqué todos la miraban como si hubiera muerto?
-Bienvenida, Marinette- dijo el maestro Fu, aun sentado en posición de flor de loto, mirándola fijamente con una expresión seria.
-Maestro Fu, realmente lo siento- dijo Marinette tan pronto como entró al apartamento. No se sentó, sino que se mantuvo de pie frente al anciano. Pasó sus ojos al chico- y tú también, Chat Noir. Jamás quise lastimarte, y mucho menos…-
-Marinette- la interrumpió el maestro Fu en un tono serio que le causó escalofríos a la chica- nadie te culpa por lo sucedido. Pero no tenemos mucho tiempo antes de que Hawkmoth haga su siguiente movimiento. Tenemos que tomar los pasos necesarios para evitar que se aproveche de que conoce tu identidad para hacerse de tu Miraculous-
La chica supuso que eso era lógico y asintió, aún sin entender porqué Chat Noir se veía tan miserable.
-Por supuesto, maestro- estuvo de acuerdo ella- entiendo-
-Bien- dijo el maestro Fu, volviéndose a Tikki, quien flotaba tristemente al lado de la chica- sé que será difícil para ambas, pero no tenemos mucho tiempo. Les puedo dar un poco de tiempo para despedirse-
Marinette tardó un par de segundos en caer en cuenta de lo que quería decir el maestro Fu, pero cuando lo hizo, palideció mortalmente.
-¡No!- dijo Marinette, llevándose las manos a los oídos y dando un paso atrás- ¿pretende tomar mi Miraculous?¡No!¡No me puede quitar a Tikki!-
Tikki asintió tristemente, pero ni el maestro Fu ni Chat Noir dijeron nada, solamente el chico dejó escapar un gemido triste desde donde estaba sentado, pero no se movió.
-Marinette, sé razonable- dijo Tikki tristemente- a ninguno de nosotros nos gusta esta solución, pero es lo único que podemos hacer para proteger el Miraculous, y protegerte a ti-
-Yo me puedo cuidar…-
-Sabes bien lo que significa el hecho de que Hawkmoth sepa tu nombre- dijo la kwami- si te quedas con el Miraculous, Hawkmoth no dejará de atacarte y podrá lastimar a tu familia y a la gente que amas con tal de obtenerlo. Créeme que no quiero separarme de ti, tú eres la mejor Ladybug que he tenido. Pero quiero que estés a salvo-
-No…- comenzó a decir Marinette, dándose cuenta de que sus mejillas estaban húmedas. Un nuevo gemido de tristeza escapó de los labios de Chat Noir, pero el chico continuó inmóvil- por favor, Tikki. Dime que debe de haber otra solución. No quiero perderte. No quiero estar sola…-
-Marinette, por favor sé razonable- dijo Tikki- piensa en tus padres, en tus amigos, en Ad…-
-¡Pienso en ellos!- dijo la chica- ¿cómo los voy a poder proteger si no tengo poder?-
-¡Marinette!- dijo el maestro Fu, alzando la voz por primera vez desde que tanto Marinette como Chat Noir lo habían conocido. Esta vez no parecía el anciano benévolo y sabio que conocía. Parecía mucho más joven, una fuerza de la naturaleza que podría fulminarlos en cualquier momento- esto no es una negociación. Como Guardián de los Miraculous, te ordeno que regreses el Miraculous de la Catarina inmediatamente-
Marinette miró alternadamente al maestro Fu, a Tikki, y finalmente a Chat Noir, que por fin se había puesto de pie, aunque seguía mirándola con una expresión sumamente afligida.
-Maestro…- comenzó a decir Marinette, pero cayó en cuenta de que no iba a servir de nada. El maestro Fu quería el Miraculous, y había previsto su resistencia, por eso había pedido a Chat Noir que se quedara ahí: para que él lo tomara por la fuerza si se resistía- ah, ya entiendo cómo es esto, es una trampa. Pero no voy a perder a Tikki. ¡No me la quitarán!- frunció el entrecejo- Tikki…-
-¡Marinette, no!- dijeron Tikki y Chat Noir al mismo tiempo.
-…¡transfórmame!-
Antes de que los otros pudieran hacer algo, y una vez transformada en Ladybug, la chica salió rápidamente por la ventana del apartamento del maestro Fu dando un salto y desapareció sobre los techos de París. Chat Noir la miró alejarse, boquiabierto, y se volvió al Guardián de los Miraculous.
-Bueno, esto fue un desastre- dijo el chico, rascándose la nuca con una expresión incómoda. No le gustaba nada esa situación.
-Realmente tenía confianza en que Marinette me escuchara y fuera razonable- dijo el maestro Fu en un tono decepcionado mientras que se llevaba una mano a la frente.
-¿Ladybug, razonable?- dijo Chat Noir en un tono irónico y dejando escapar una carcajada sin humor. Se sentía igual de desolado desde el momento en que el maestro Fu le había dicho lo que sucedería con su partenaire- es la chica más terca que existe en el mundo-
El maestro Fu sonrió tristemente. Sabía bien cuál era el siguiente paso que tenía que dar para recuperar el Miraculous de la Catarina. Sabía que tanto Marinette como Tikki estarían en peligro mientras que la primera tuviera el Miraculous: Hawkmoth bien podría estar preparando su ataque en esos momentos.
-No quería que tuviéramos que llegar a esto- dijo el anciano, volviéndose al héroe que estaba a su lado- es tu turno de hacer esto, Chat Noir. Sabes lo que está en juego-
-Lo sé, maestro- dijo el chico.
-Y sé que tienes idea de donde encontrarla- continuó el maestro Fu, mientras que Chat Noir asentía. El anciano pudo un par de pequeños discos dorados en sus manos- toma esto, lo necesitarás para cumplir esta misión. Recuerda bien que…-
-Marinette jamás debe descubrir mi identidad- dijo el chico tristemente mientras que caminaba hacia la ventana- lo sé-
Chat Noir se lanzó por la ventana hacia los techos de la ciudad, pensando que todo lo sucedido había sido el peor escenario posible. Hubiera preferido ser él quien perdiera su Miraculous. Él no era nadie sin ella, y ahora…
FLASHBACK
Apartamento del maestro Fu
Horas antes
Adrien abrió los ojos y se encontró en el apartamento del maestro Fu, tirado en el suelo sobre el futón y escuchando la suave música del gong que el Guardián hacía sonar sobre él. Plagg flotaba a su lado, mirándolo con una expresión preocupada.
-¡Por fin despertó!- anunció el kwami, volviéndose al maestro Fu- maestro, el idiota ya recobró la conciencia-
-Hey- dijo Adrien, pero inmediatamente hizo una mueca de dolor. El kwami se sentó sobre su frente, impidiéndole que se levantara.
-¡Quédate quieto, cachorro!- dijo Plagg, volviendo a flotar a su lado- deja que el anciano te regrese a la normalidad-
Adrien respiró hondo mientras que se llevaba una mano a la frente. Marinette era Ladybug. ¡Marinette era Ladybug! ¿Cómo había podido haber sido tan ciego? Por supuesto que su maravillosa compañera del colegio tenía que ser la heroína. Y sí, la habían akumatizado, pero al menos él ya lo sabía. Ya no había razón para esconder sus identidades, y podrían estar juntos finalmente.
Pero la expresión entristecida de Plagg y del maestro Fu lo tomó por sorpresa.
-¿Qué sucede?- dijo Adrien.
-Acaba de suceder algo muy grave, Adrien- dijo Plagg- Hawkmotho conoce la identidad de Ladybug. Eso la expone, a ella y a su familia-
Adrien frunció el entrecejo. Tenía razón.
-Bueno, eso no es bueno- dijo Adrien- entonces, ¿cuál es el plan para protegerla? No podemos dejarla a la merced de Hawkmoth-
-No, no podemos dejarla desprotegida. En eso ambos estamos de acuerdo- dijo el maestro Fu tristemente- tendremos que hacer un sacrificio. Y creo que tú vas a sufrir las consecuencias más que los demás-
Adrien frunció el entrecejo.
-Haré lo que sea, maestro. Todo con tal de que ma lady… Marinette esté a salvo- dijo el chico con convicción. Sonrió levemente. Marinette era Ladybug. Ya sabía quien era la chica de quien había estado enamorado desde hacía tres años.
-Me temo que no te va a gustar nada la solución, cachorro- intervino Plagg tristemente, ignorando la mirada de advertencia del maestro Fu.
-Tenemos que recolectar el Miraculous de Ladybug- dijo el maestro Fu finalmente.
-¿Qué?- dijo Adrien, palideciendo mortalmente- ¡no!- sacudió la cabeza repetidamente- maestro Fu, no puede hacer eso. Yo no puedo… ella es la fuerza que mueve el equipo. Si recolecta su Miraculous…-
-Es la única manera de mantener a salvo a la coccinelle- dijo Plagg- por supuesto que no le va a gustar, pero es la mejor opción para ella y para mantener a salvo el Miraculous. Si lo dejamos…-
-Sí, sí, me imagino- dijo Adrien tristemente, cayendo en cuenta de lo que significaba eso. Ladybug no volvería a pelear a su lado. Marinette perdería a su kwami. Y ella no podría saber jamás su identidad secreta. Pero si eso significaba que su Lady estaría a salvo…
Adrien asintió tristemente, completamente desolado.
-Tengo que pedirte otra cosa, Adrien- dijo el maestro Fu- en caso de que Marinette no quiera entregar su Miraculous, tendrás que ser tú quien lo recolecte-
El chico palideció, si era posible, aún más. La idea de hacer algo como eso hizo que sintiera como si se hubiera tragado una piedra. Pero si no lo hacía y Hawkmoth la atacaba. O atacaba a los Dupain-Cheng. O a Nino y Alya…
-De acuerdo, maestro. Lo haré- dijo finalmente Adrien.
-Bien, entonces transfórmate- añadió el Guardián- Marinette no debe de tardar en llegar-
FIN DEL FLASHBACK
"Deja de atormentarte por Marinette, chico", le dijo Plagg en su mente "sabes lo que tenemos que hacer. Es por el bien de la chica y de Sucrette"
-Lo sé, Plagg, lo sé. No soy yo quien necesita convencerse- dijo Chat Noir tristemente- es solo que quisiera que hubiera una forma más fácil de hacer esto-
"El maestro Fu te dio un arma para que tengas la ventaja sobre Ladybug", dijo Plagg.
-No me refería a eso, y lo sabes- dijo Chat Noir tristemente mientras que se acercaba al balcón de Marinette- el maestro Fu me está pidiendo que lastime… que le rompa el corazón a la chica que amo-
x-x-x
Balcón de Marinette
Poco antes
"Marinette, ¿qué crees que estás haciendo?"
-No puedo perderte, Tikki- dijo Ladybug con lágrimas en los ojos- no puedo renunciar a ti. El maestro Fu no entiende-
"El maestro Fu tiene ciento ochenta y seis años, la mayoría de los cuales ha estado cumpliendo sus deberes como Guardián de los Miraculous, y sabe bastante bien lo que está haciendo", le dijo Tikki " además, incluso tú sabes bien que está en lo correcto"
-¡No!- dijo Ladybug mientras aterrizaba sobre el balcón- debe de haber otra solución. No quiere intentarlo, quiere quitarme mis poderes después de todo lo que hice por él y por París…-
"Marinette, tu familia estará en peligro si no entregas el Miraculous al maestro Fu"; dijo Tikki "yo no quiero separarme de ti, pero prefiero eso a que tú o tu familia sufra por esto. Parece que a ti no te importan tus seres queridos"
-No lo entiendes, Tikki- dijo Ladybug.
"No, lo entiendo mejor que lo que crees", dijo Tikki "te olvidas que puedo escuchar tus pensamientos. Prefieres retener tu poder, sin importar de lo que le pueda pasar a tus padres, a tus amigos, a Luka, ¡a Adrien!"
-Tikki…-
"Si prefieres el poder a la seguridad de tus seres queridos, entonces yo estaba equivocada. ¡No mereces ser Ladybug!"
Ladybug hizo una mueca, pero no respondió, pues había visto a Chat Noir acercándose a ella. Frunció el entrecejo y saltó hacia L'Ile de la Cité, con la intención de llegar al campanario de Notre Dame, pero el chico la siguió y la alcanzó en el techo del palacio de Justicia, junto a la Sainte Chapelle.
-Por favor, Ladybug, detente- dijo Chat Noir al alcanzarla- sé razonable, por favor. No quiero tener que pelear contigo-
-Entonces no lo hagas- dijo Ladybug en un tono agresivo- no tienes que hacer el trabajo sucio del maestro Fu-
-No es el trabajo sucio. Sabes bien que esto es por tu propio bien, y el de la gente que amas- dijo Chat Noir, lanzándose hacia ella- estoy tratando de mantenerte a salvo-
-Tienes una forma bastante curiosa de demostrarlo- dijo la heroína, evadiéndolo.
-Ma lady, por favor- dijo el chico en un tono lastimero- por favor, realmente no quiero tener que hacer esto-
-Entonces no lo hagas- Ladybug comenzó a girar su yoyo de manera amenazante- yo tampoco quiero pelear contra ti. Solo déjame en paz, Chat Noir-
-No puedo hacer eso- dijo él tristemente- lo siento, lo siento tanto…-
La mano de Chat Noir se cerró alrededor de uno de los discos que el maestro Fu le había dado. No quería hacerlo, pero sabía que entre más tardara en tomar el Miraculous, más probable sería que Marinette o su familia estuviera en peligro. Sabía que era injusto pelear con ella con esa ventaja desleal, pero no tenía tiempo para convencerla.
-Lo siento mucho, ma lady- repitió Chat Noir tristemente- espero que algún día entiendas que lo hago porque… porque te amo y no quiero que nada malo te suceda-
Ladybug lo miró boquiabierta. No sabía que iba a pasar, pero tuvo un mal presentimiento.
-¡No, Chat Noir, espera…!- dijo Ladybug, levantando las manos como una señal de que se detuviera.
Pero Chat Noir no la escuchó. Tomó en disco con cuidado y lanzó el disco contra ella. Ladybug lo evadió, impidiendo que el artefacto la golpeara, pero éste comenzó a girar sobre su propio eje y flotó sobre la cabeza de la heroína como si fuera una aureola.
-¿Pero qué…?- dijo ella en voz baja.
"Lo siento mucho, Marinette, pero es hora de despedirnos", Ladybug escuchó decir a Tikki en su mente en un tono que hizo que sintiera como si el pánico la inundara "fuiste la mejor Ladybug que he tenido. Te deseo toda la felicidad que te mereces por todo lo que has sacrificado por proteger la ciudad"
-Tikki, no…-
Una luz apareció sobre ella, proveniente del disco, que la rodeó por completo y la obligó a detransformarse. Marinette trastabilló y cayó de lado, como si toda su energía hubiera desaparecido, absorbida por el disco y por su Miraculous.
-No…- dijo Marinette, intentando en vano levantarse.
-Lo siento tanto, Marinette- dijo Chat Noir, caminando hacia ella- es por tu propio bien-
-¡No lo hagas, Chat Noir!- dijo Marinette con lágrimas en los ojos, haciendo un esfuerzo por cubrirse los oídos con sus manos- ¡por favor!-
Chat Noir sentía como si su corazón se rompiera al ver así a la chica que amaba. No podía soportar verla tan triste. Se acercó a ella y tomó sus aretes de sus oídos tras darle la oportunidad a Tikki de despedirse con una expresión triste.
-No, Chat Noir…- dijo ella de nuevo entre sollozos.
A pesar de sentir el corazón roto, el chico no respondió y la alzó en brazos, dando un salto por los techos de París rumbo a la casa de Marinette, aterrizando finalmente en el balcón y poniéndola con cuidado sobre el suelo.
-Por favor, Chat Noir, no te lleves a Tikki- dijo Marinette sin dejar de sollozar cuando el chico se levantó y se dispuso a irse- por favor… creí que me amabas-
Chat Noir se volvió tristemente hacia.
-Precisamente porque te amo es que tengo que hacer esto- dijo él en voz baja, inclinándose frente a ella- aunque me rompa el corazón. Lo siento tanto, ma lady-
Marinette se dejó caer al suelo de rodillas y se cubrió la cara con las manos. Había perdido todo ese día. Su identidad secreta, su Miraculous, a Tikki e incluso a Chat Noir. No podía creer que el maestro Fu le hubiera hecho eso. No podía creer que su chaton, su partenaire, le estuviera haciendo eso.
Mientras eso sucedía, Chat Noir había tomado su mano y colocado un beso en el dorso de la misma, como si se estuviera despidiendo de ella. Marinette frunció el entrecejo y se soltó de él.
-¡Suéltame!- dijo ella, furiosa- ¡creí que éramos amigos!¡Creí que eras mi partenaire!-
-Lo somos- dijo Chat Noir.
-¡No más!- dijo Marinette, dándole la espalda y abriendo la trampilla para entrar a su habitación- ¡te odio, Chat Noir!¡Te odio, y jamás quiero volver a verte!-
-Marinette…-
-¿Porqué no te vas y me dejas en paz?- dijo la chica entre lágrimas- no querrás hacer esperar al maestro Fu-
Chat Noir la miró con una expresión triste mientras que desaparecía por la trampilla hacia su habitación.
-Lamento mucho haberte hecho llorar, ma lady. Yo nunca te dejaré de amar- susurró él antes de lanzar el segundo disco sobre la casa de Marinette y desaparecer sobre los techos de París, llevando consigo los aretes de Ladybug- al menos gracias a esto estarás a salvo de Hawkmoth-
x-x-x
Mansión Agreste
A la mañana siguiente
Gabriel Agreste se frotaba la barbilla mientras que miraba con atención la pantalla de su computadora. No entendía que era lo que había pasado. La noche anterior había esperado akumatizar nuevamente a esa chica, pero había sentido una barrera a su alrededor.
-Esto debe ser obra del Guardián de los Miraculous- dijo Gabriel en voz alta, volviéndose a su kwami- ¿qué sabes al respecto, Nooroo?-
-Creo que es así, maître- dijo Nooroo en voz baja- una vez que Ladybug estuvo comprometida, estoy seguro de que el Guardián debió haber recolectado a Tikki, para proteger el Miraculous y a la portadora. Y si así lo hizo, debió haber lanzado algún encantamiento protector sobre ella-
Gabriel miró pensativo al kwami.
-Bien, si yo no puedo acercarme a ella, entonces haré que ella sea la que se acerque a mí- dijo Gabriel sonriendo de pronto- sé que Adrien es su amigo, y que conoce sus ambiciones y sus habilidades de diseño- acentuó su sonrisa- será bastante fácil que la ex Ladybug esté en mi poder-
Nooro miró a su portador, preocupado, pero Gabriel lo ignoró y tras salir de la oficina fue a buscar a Adrien, quien estaba desayunando en el comedor. El chico se sorprendió de ver a su padre en el desayuno, e incluso Nathalie parecía sorprendida.
-¿Père?- dijo Adrien, quien no se esperaba ver a su padre esa mañana. Normalmente tenía programadas las comidas que hacía con su hijo durante la semana- ¿está todo bien?-
Gabriel alzó las cejas al ver los ojos enrojecidos de su hijo, pero supuso que estaría siendo dramático como siempre, así que decidió ignorar ese hecho.
-Todo está bien, mon fils- dijo el hombre en un tono amable- pero necesito tu ayuda con un asunto de la compañía…-
X-x-x
CONTINUARÁ…
¡Hola a todos! Por fin estoy de regreso con esta historia nueva. Espero que les haya gustado hasta ahora. Como pueden ver, las cosas no están nada bonitas en estos momentos. Iba a subirlo mañana, pero como me enviaron a casa del trabajo a unas vacaciones forzadas (coff… coff…incapacidad) aproveché para terminar la historia y subirla de una vez.
Muchas gracias a todos por seguir mis locuras. Nos leemos pronto.
Abby L.
