Fics de Shakugan no Shana.

Kawai Shana.

Capítulo Uno: Una Shana muy Kawai.

El profesor acababa de poner un problema de matemáticas en la pizarra, estaba esperando a que alguien levantara la mano, para que pudiera pasar al frente a resolverlo. Pero todos estaban evitándolo, todos excepto Shana, quien demostrando una extraña muestra de inusual animo, estaba de pie moviendo la mano animadamente, para que la sacaran al frente.

—Shana, siéntate, por favor…

—¡Yuuji! Shana quiere pasar al frente. Shana sabe la respuesta —Shana estaba inusualmente entusiasmada.

Los mejores amigos de la pareja, veían la nueva actitud de Shana algo, curiosa, pero tan solo se limitaban a comentar entre ellos. Al final, Shana fue seleccionada al no querer nadie más, pasar a resolver el problema.

—¡Siii! —Shana se levantó de un brincó y corrió hacia la pizarra, moviendo los brazos, como si quisiera volar—. ¡Yo se la respuesta! ¡Yo se la respuesta!

Shana mostró una curiosa sonrisa muy linda, que nadie le había visto antes de ese día. Luego tomó la tiza y empezó a resolver el problema "a su manera". Yuuji estaba muy preocupado por lo que haría su amiga. Al final Shana terminó.

—Miren… un lindo conejo.

Con los números del problema puestos en la pizarra, Shana había dibujado un conejo. El profesor miró la "obra" de Shana muy extrañado, al igual que todos sus compañeros. Solo Yuuji que sabía lo que realmente le pasaba a la Flame Haze, se escondía detrás de su pupitre, como si el hubiera sido el que salió al frente.

—Shana.

El resto del día pasó igual, Shana misteriosamente estaba muy animada, como si en el desayuno Whilhemina le hubiera dado una ración de azúcar, en lugar de lo que usualmente le servía.

Sin embargo, la nueva actitud, a veces infantil de Shana, tenía encantado a muchos.

—Es tan linda.

—Que tierna es.

—Nunca vi a Shana antes así, pero me gusta.

Y así, varios comentarios más, se repetían por toda el aula. Cuando llegó la hora del almuerzo, Shana salió lo más a prisa que pudo, al menos su afición por el Pan de Melón seguía igual. Yuuji intentaba escapar, pero sus compañeros le cerraron el paso.

—Bien Sakai. ¿Qué le pasa a Shana?

—Responde Sakai.

—¿Por qué Shana actúa de esa forma tan rara?

—No nos iremos hasta que nos digas la verdad.

—Habla Sakai.

—Esperen chicos… no es nada anormal —Yuuji tuvo que pensar en una historia convincente para convencer a sus compañeros—. Ayer Shana tuvo un accidente, resbaló y se golpeó la cabeza.

Varios de los presentes reaccionaron al escuchar esto, Yuuji sabía que iba por buen camino.

—¿Shana tiene amnesia?

—Pero me saludo en la mañana, si me recuerda.

—Es cierto, no parece haber olvidado nada.

Y las reacciones de sus amigos, eran la evidencia que necesitaba, para continuar con su alocada historia.

—La llevamos al médico para que la examinara, pero cuando despertó, parecía bien, hasta que vio a Carmel-san. Empezó a comportarse como una niña pequeña. Entonces el doctor nos explicó, que se trataba de un problema de personalidad. Shana iba a actuar así un tiempo hasta que se recuperara del todo. Solo había que brindarle apoyo o podría sufrir trastornos emocionales.

—¡Pobre Shana!

—¡Por qué las más lindas sufren tanto!

—Debemos hacer todo para que este mejor.

Shana acaba de llegar con varios Panes de Melón, aun muchos más de los que usualmente compraba, estaba muy feliz. Tanto, que empezó a repartirlos entre todos sus compañeros. Al terminar, se quedó aun con una buena cantidad.

—¡Melón Pan! ¡Melón Pan! ¡Melón Pan! —repetía mientras devoraba cada pan, como sino hubiera mañana.

—¡Rápido, tráiganle algo de beber a Shana!

Mientras los compañeros de Yuuji, escoltaban a su nueva reina o más bien princesa, de vuelta a la cafetería. Yuuji pudo descansar por fin, de tanto interrogatorio.

—Se la creyeron —Yuuji suspiró aliviado, pero no sabía, que otras personas más, lo habían escuchado—. Ahora si pudiera evitar a…

Pero ya era tarde, aquellos amigos más íntimos de la pareja, junto con aquellos que sabían del secreto de Shana, también querían respuestas acerca de lo que le pasaba a esta, y las respuestas creativas del Mystes no les serían suficientes.

—A nosotros si nos dirás la verdad. No es cierto, Yuuji —Satou, junto a Tanaka, Yoshida, Ogata, algunas chicas más, incluso Ike, miraban fijamente a Yuuji.

—Me pregunto si nuestro amigo Yuuji nos esta guardando un secreto, que no quiere que sepamos —empezó a hablar Ike—. Tal vez algo sucedió entre él y Shana-chan, por eso es que nuestra amiga esta tan feliz.

—Esta bien, me atraparon —Yuuji que ya no sabía que hacer, tuvo que mentir de nuevo—. Shana se me declaró anoche —aunque lo que dijo, en parte no era mentira, pero tampoco era muy cierto.

Mientras Ike, Ogata y las chicas hablaban acerca de esa "confesión", Satou, Tanaka y Yoshida separaron a un lado a Yuuji.

—Bien, dinos la verdad —lo interrogó Satou.

—Somos amigos de Shana-chan. ¿Qué sucedió con ella realmente, Sakai-kun?

Yuuji se tuvo que dar finalmente por vencido, además, sus amigos sabían todo acerca de los Mistes y de los Flame Haze. Tuvo que hablar.

—Todo sucedió ayer, mientras revisábamos en el escondite de Hunter.

—El día Anterior—

A petición de Whilhemina, temiendo que alguno de los viejos Hougus se activaran y crearan problemas. Shana, Yuuji y Alastor, fueron enviados de nuevo al escondite del que fue la Bruma Ardiente Hunter.

—Shana, hasta que horas debemos estar buscando. Ni siquiera sabes que buscamos.

—Solo sigue buscando Yuuji —Shana estaba molesta y cansada, lo peor es que estaba muy sucia.

—La última vez no nos fue bien, porque regresamos.

—La última vez que vinimos, "alguien" estuvo jugando con los Hougu's —Shana le lanzó una mirada enojada a Yuuji, este solo la evitó, haciéndose el que buscaba entre tanto objeto.

—Pero no sabemos si la mayoría de estos objetos aun funcionen. Alastor, hay posibilidad de que alguno de estos Hougus ya no sirva.

—Es muy probable —contestó Alastor desde el pendiente de Shana.

—Y sino funcionan, para que estamos aquí. Podríamos estar en casa, descansando.

—Crees que no me gustaría estar descasando ahora Yuuji-baka —Shana estaba muy sucia y llena de polvo, uno de los Hougus había estallado cuando quiso verificarlo—. Quiero darme un baño y descansar.

Yuuji seguía examinando los Hougus, esperando que alguno, no le terminara explotando solo por tocarlo. Como le había pasado a Shana hace poco.

—Shana, no podrías aumentar tu flama un poco más, no puedo ver bien.

Una pila de objetos casi le cae encima a Yuuji.

—No soy una linterna, Yuuji-baka.

—Odio estar aquí.

—¡Urusai! ¡Urusai! ¡Urusai! —reaccionó instintivamente Shana, Yuuji ya la había cansado con tanto reclamo—. Crees que me gusta estar aquí.

Shana se volteó molesta y siguió buscando. Luego emergió feliz, aunque algo tiznada.

—Encontré uno Alastor —Shana tenía lo que parecía ser un marcador.

—En efecto, es un Hougu que esta por activarse.

Al escuchar estas palabras, Yuuji se acercó a Shana y Alastor. Como no había mucha luz, Yuuji se acercó a Shana para ver mejor el famoso objeto. Haciendo que la Flame Haze se sonrojara.

—¿Qué hace eso? —preguntó curioso Yuuji.

—Es el Vortex —comentó Alastor—. Puede volver realidad todo lo que se dibuje con el.

Yuuji que estaba muy impresionado, se acercó aun más a Shana para ver el famoso Hougu. Haciendo que su cuerpo tocara el de Shana. Esta aun más roja lo lanzó de un empujón.

—¡Qué te pasa Shana!

—Q-qu-quedaté en tu la-lado, Yuuji-baka —Shana se volteó para que Yuuji no la viera sonrojada—. Si-sigue tra-trabajando.

—Lo haría mejor, si pudiera ver algo.

—¿Dijiste algo? —Shana miró molesta a Yuuji, este solo se volteó a seguir trabajando.

—No dije nada.

Pasaron varios minutos sin que alguno de los dos hablara. Shana ya había encontrado cerca de siete Hougus, mientras Yuuji, no había encontrado nada aun. Molesto y frustrado, mayormente, porque Shana le iba ganando, se seguía excusando en que la luz no era suficiente.

—Si hubiera más luz —como escuchando sus ruegos, algo brillo entre una pila cercana—. Lo tengo.

Era una linterna de color amarillo, parecía un objeto bastante viejo y olvidado.

—Quizás no sea un Hougu, debió olvidárseles a Satou y a Tanaka la última vez que vinimos —Yuuji trató de encender la linterna, pero esta no parecía funcionar—. ¿Se le habrían acabado las baterías?

Yuuji abrió la linterna y efectivamente, encontró lo que parecían dos baterías. Solo que estaban puesta al revés. Las puso en la posición correcta y procedió a cerrar la linterna.

—¿Lo has sentido Alastor?

—Si, un Hougu bastante peligroso se ha activado.

—No era muy difícil. Alguien descuidadamente había colocado las baterías al revés.

—¡YUUJI!

—¡Sakai Yuuji, suelta eso ahora!

Pero Yuuji no logró escuchar la advertencia a tiempo y encendió la linterna.

—¿Eh? ¿Pasa algo?

Confundido apuntó sin querer la luz en su misma dirección. Shana corrió y empujó a Yuuji, pero la linterna que había volado de su mano, giro varias veces en el aire e iluminó a Shana. Luego calló y se rompió.

—¡Shana que te pasa! —Yuuji se levantó enojado, había terminado de cabeza entre una pila de Hougus—. ¿Shana?

Pero Shana no respondía, estaba inconsciente.

Continuará…