Hola chicos.
He escrito mi primer oneshot de este anime. Danmachi.
Así que espero que les guste.
Aclaración: Danmachi no me pertenece. Es propiedad de Fujino Omori. Yo solamente pido prestado sus personajes para poder escribir.
Vacaciones, que otra cosa más se podía pedir. El sol brillaba a todo lo que daba por lo cual aquellos rayos eran capaces de quemar. Aunque todo se podía solucionar con el mar, aquella fría y refrescante sensación que se podía sentir bajo los pies.
-¡Mire mi diosa!, ¡El mar!
Aquel joven de blanco cabello, ojos rojos y de una inocencia tan hermosa, miraba con ilusión todo el lugar. Su mirada brillaba como cualquier niño pequeño. Era un niño pequeño mirando ilusionado gran mar que tenia frente a él.
-¿Acaso nunca habías venido al mar?
Una hermosa joven, de lejos pareciera una niña pero realmente era una hermosa joven, aunque en realidad era una diosa joven. Miraba embobado al chico, a pensamientos de ella, era tierno verlo.
-No, nunca tuve la oportunidad de venir aquí así que se podría decir que es mi primera vez
La diosa sonrió, estaba feliz de que ella fuera la única que lo viera. Se acerco a él, poso una mano en su desnudo hombro, el inmediatamente la miro. Ella le dirigió una mirada cómplice, alzo su pulgar y sonrió como nunca.
-Entonces hay que divertirnos y disfrutar más para no olvidar este día
Ambos sonrieron y empezaron a correr al mar. Brincaron de alegría. Sus risas empezaron conforme jugaban con el agua.
Ella se sentía tan feliz de que solamente fueran los dos. Como siempre, habían empezado el día con tanto alboroto con el joven, justamente el día en el que iban a tener otro intento de cita "secreta" alguien más se entero y empezó a esparcir su pequeño secreto.
Pero lamentablemente casi todos, aunque sería mejor decir todos, se enteraron que ellos dos iban a tener una cita y poco despues había demasiado alboroto.
Y como siempre habían tenido que huir, no quería que su oportunidad se acabara así que ella decidió ir a un lugar que nunca los buscarían, el mar.
Y era ahi justamente donde se encontraban, jugaban y se divertían como niños. El joven al no saber nadar se mantenía donde aun podía tocar la arena.
-No te preocupes si algo te llegara a pasar, yo iré por ti
Ella le sonreía con sinceridad, él como siempre lo había hecho desde que se habían conocido, confió. Así que decidieron seguir jugando y sobre todo enseñarle a ese despistado joven a nadar.
Cuando el estomago de los dos empezaron a gruñir, comieron lo que ella había llevado para ese día. Y por lo tarde que ya se estaba haciendo prefirieron disfrutar de aquel atardecer.
-Este fue el mejor día Bell, muchas gracias por estar aquí conmigo
Ella termino por recargarse en su hombro y el de igual manera recargo su cabeza en la de ella.
-No hay de que mi diosa, con tal de verla feliz
Se quedaron por mucho tiempo así hasta que el cielo nocturno con estrellas adornara el lugar.
-Es hora de irnos mi diosa, nuestra próxima cita será en otro lugar o regresaremos aquí
Ambos sonrieron con cariño y decidieron irse de ese lugar, no sin antes voltear a ver aquel lugar.
Porque ambos solo necesitaban un día, un día para ellos dos.
A mí siempre me gusto ver a Bell y a Hestia juntos.
Muchas gracias por leer.
Nos vemos a la próxima.
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Fecha: Miércoles 23 de marzo de 2016
