Don't Be Afraid.


"Sherlock Holmes me miro de reojo y me dijo que no temiera, que todo iba a estar bien"...


Capitulo 1: El Señor Sherlock Holmes.

Los Hechos que voy a relatar a continuación, han ocurrido ya hace varios años. Luego de tanta insistencia por mi parte, la larga espera dio resultado. Así que expondré el casi tal cual fue.
El lector deberá perdonar si oculto el año, pero debo seguir las condiciones que me han dado.
También he de ocultar el día, pero asegurare que fue en algún día del mes de agosto, un día de aquel crudo invierno.
Yo me hallaba en la calle, no provengo de una familia muy adinerada, así que debo ganarme la vida trabajando. Mejor dicho, mi familia falleció hace tiempo en un horrible accidente de coches, y yo fui la única sobreviviente.
Me crié en las calles de Londres durante algunos años, así que mucha gente me conocía.
Recuerdo que en unos de mis trabajos como Ama de llaves, mi patrona -según ella, gracias a mi buen comportamiento y servicio- me obsequio un hermoso vestido violeta azulado, junto con un hermoso par de tacos que combinaban, en esa casa me refugie unos largos años de mi vida.

Abra sido cuando cumplí mis dieciocho años, que salí a la calle en busca de otro trabajo. Ya que había renunciado al anterior,(por la lamentable muerte de mi patrona.)
Iba caminando por la calle, distraída, mirando hacia una tienda de libros, cuando sin darme cuenta, choque contra una persona.
-Disculpe Usted, no fue mi intención- exclame avergonzada- lo lamento mucho.
Al mirar hacia el individuo al que había "atropellado", me di cuenta de que se trataba de un hombre alto, de ojos negros y rápidos, al igual que sus maneras,
-Perdóneme Usted a mi, Señorita- me dijo con una sonrisa en su rostro-no tiene por que disculparse tanto, todo esta bien.
Su tono de voz era muy amable, y realmente me tranquilice.
-Le ruego que me perdone, yo fui la distraída- insistí.
-No se haga mas problema- contesto el- Su vestido, el que lleva puesto, lo gano trabajando, ¿Cierto?
Lo mire atónita, y respondí que así era, en efecto.
-Y el anillo que lleva puesto,¿de quien es?- pregunto.
-Era de mi madre, ella falleció en un..
-En un grave accidente en la calle- contesto el, cortándome fríamente.

En ese momento me asuste, pero había algo en el, esa luz en sus ojos, y en su manera de hablar, que hizo que vuelva a recuperar la paz.
-Si Señor, acertó en todo.
-¡OH!-dijo el, levantando su ceja izquierda- temo que no me he presentado.-
Y al decir esto, hizo una leve reverencia y continúo:
-Soy Sherlock Holmes, Detective privado. ¿Tengo el placer de dirigirme..A?
-Usted, Señor Sherlock Holmes, se dirige a Katherine Elizabeth Stephens.
Al pronunciar mi nombre, pude ver en su rostro una muestra de asombro, y pregunto si yo era pariente de yo no se quien. A lo cual respondí que no, pero el no pareció decepcionarse.
-Si algún día necesita algo, o ayuda, Bella Katherine, puedes encontrarme en la dirección de la tarjeta.
Y diciendo esto saco una tarjeta, entregándomela.
-Claro Señor Holmes, muchísimas gracias y disculpe el tropezón.

Y Ambos seguimos nuestros caminos, yo hacia mi nuevo trabajo, guardando aquella tarjeta en mi bolsillo...