DISCLAIMER, LOS PRESONAJES SON DE J. K Rowling todos

Agradezco a mi gran amiga Amia Snape por cederme su historia, ella desafortunadamente no la puede continuar por causas de fuerza mayor, pero yo acepte adoptarla, asi que aquí estamos dándole continuidad a esta increíble historia que en lo personal me encanto desde que leí el primer Cap. , Amia, un besote y abrazo, espero no decepcionarte

HOLA A TODAS Y A TODOS, ESTOY DE VUELTA CON UN SEVIMIONE MAS, ESPERO LES GUSTE Y QUE ESO SE REFLEJE EN LOS REVIEWS , PORFA QUE SEAN MUCHOS SIIIII, AQUÍ LES DEJO EL PRIMER CAP, DISFRUTENLO =)

Capitulo # 1 Rigel

Este era uno de sus peores años escolares definitivamente , sexto no le dejaría nada bueno y no podía ser para menos. Después de que Ron se pusiera de novio con Lavender todo empezó a ir mal, se había apoyado en su amigo Harry quien no la dejo sola en esos difíciles momentos, pero entonces él se puso de novio con Ginny. Y no lo soportaba era extraño pues a él solo lo podía ver como un amigo, un hermano nunca de otra forma y ella era su amiga no su mejor amiga pero desde que se hizo novia de Harry, no la soportaba y era que ella no lo merecía se sentía sola, triste e incompleta.

La noche estaba entrada y decidió subir a la torre de astronomía aun no podía entender como ninguno de sus amigos quiso acompañarla, si era algo que solo se mostraba una vez cada dos años y medio y por nada del mundo se perdería de tan maravillosos espectáculo.

La luna azul era una de sus preferidas, para su suerte esa noche era perfecta para ver la luna y las estrellas.

Camino un poco al otro lado de la torre para apreciar la vista desde ese punto, iba distraída por sus pensamientos y por la maravillosa vista que no se percató que entre las sombras se encontraba un hombre alto y esbelto, el cual estaba perdido en sus pensamientos contemplando el cielo.

Por el contrario el si se percato de que alguien se acercaba, sigilosamente camino hacia esa persona y se puso a su lado.

En cualquier otro momento habría disfrutando el momento quitándole todos los puntos a esa casa, pero no esa noche por increíble que pareciera, solo quería dejar de pensar en porque estaba ahí.

Si era correcto lo que hacía, en lo cansado que estaba de ser espía y lo hastiado de comportarse así, cansado de fingir, ser lo que no era todo, cansado de no poder tener una vida propia siempre a expensas de los deseos del Lord y las peticiones de Dumbledore. Por esa maldita guerra y por otro lado estaba ese insolente, orgulloso, presumido y arrogante de Potter, la viva imagen de su padre, aunque siempre podría equivocarse, tal ves era como Lily, amable, y leal lo cual hacia que lo quisiera como a un hijo.

-Dando un paseo Señorita Granger- saludo él. Ella dio un salto de sorpresa al escucharlo y lentamente volteo a verlo.

–Profesor, yo vera… - Quiso explicarse, no quería perder puntos pero él la sorprendió con una pregunta.

–Rigel es la estrella más brillante ¿no cree usted eso? – Hermione se sonrojo al no saber la respuesta su mente se había quedado en blanco por la reacción de Snape, aunque nada tenía que ver el que astronomía no fuera su materia favorita, aunque siempre le había echado la culpa a sus maestros pues a ella le gustaba estar así como esa noche, contemplando las estrellas.

Snape curvó su boca con arrogancia en una sonrisa de satisfacción

–O la pequeña sabelotodo de Gryffindor no sabe…- hizo una pausa en la que Hermione no respondió

-Esta noche pasara a la historia como el día que no supo una respuesta. – vocifero en voz alta, Hermione cerró los puños del coraje y de la impotencia al no poderle responder. ¿Porque siempre la tenía que humillar? ¿Por que se portaba así con ella? ¿No podría ignorarla como lo hacían los demás?

No pensaba quedarse ahí escuchando sus palabras e insultos pero justo cuando iba a dar un paso para marcharse el empezó a hablar.

-En invierno, al observar la constelación de Orión, pienso quien será la estrella más brillante, Rigel con ese color azul tan hipnotizarte o Betelgeuse de ese color rojizo ,–

Hermione quería preguntar, saber donde estaba esa estrella Rigel pero no se atrevía , no después de cómo se había burlado Snape de ella. "Vamos Hermione. Sé valiente." Se animaba, pero Snape como sabiendo lo que ella deseaba saber le dijo.

–Ve aquellas tres estrellas juntas son Alnitak, Alnilam y Mintaka ¿las ves? – Preguntó y ella asintió " me acaba de tutear" pensó la castaña viendo a Snape, pero la voz de el la devolvió a lo que estaba pasando

– Bajo Mintaka hay dos estrellas, la más brillante e imponente es Rigel-

Ella sonrío y asintió. Él le siguió con su explicación la cual se prolongo hasta la una de la mañana, mientras ella fascinada escuchaba y aprendía. Tenía que ir a dormir eso era seguro se estaba dormitando , pero no quería, no quería dejar la torre de astronomía. Un bostezo se le escapó traicionándola, él lo notó.

– Es hora que se vaya a dormir señorita Granger, no quiero que sus profesores me hachen la culpa de que se duerma en sus clases - Lo dijo sin ganas pues el tiempo que paso ahí con ella fue el mejor que había tenido en muchos años, ella asintió en silencio y sin muchas ganas de irse contesto.

–Buenas noches profesor, gracias por enseñarme – Se dio la vuelta y comenzó a caminar. Snape sin saber por qué se giro hacia ella y le dijo.

- Todos los lunes, miércoles y viernes estoy aquí… por si tiene una duda, no dude en preguntarme -Sin esperar respuesta se volvió a girar y contemplar las estrellas.

–Gracias profesor, lo tendré en cuenta –Volvió a decir y se marcho.

Al entrar en la sala común se dio cuenta de que Harry se encontraba en un sillón frente a la chimenea dormido el chico aun tenía sus anteojos puestos y en la mano sostenía un ejemplar del profeta, Hermione se acercó y lo contemplo el siempre preocupándose por ella, siempre tan lindo, tomo su varita encanto el sillón para que Harry se acomodara e invocó una manta y almohada para taparlo le quito los lentes y los puso en una mesita al lado conjuro una alarma para que sonara antes de que bajaran sus compañeros

-Dulces sueños Harry- le dijo y le dio un beso en la frente y se fue a acostar.

Al día siguiente se despertó con una sonrisa en la cara que no podía ocultar, pues aunque no lo quisiera aceptar la velada de esa noche era la mejor que había tenido en su vida. No solo era que por fin encontrara interesante la astronomía, si no que lo que habían platicado, de todo, de hechizos, pociones, libros, música y arte… Nunca pensó encontrar alguien así, con quien poder platicar de todo y sin tenerle que explicar a qué se refería. Al bajar vio como la esperaban Harry y Ginny, esta última con cara de molestia por tener que esperarla.

–Buenos días chicos – Dijo alegre.

–Serán tardes – Comentó Ginny, Harry solo la ignoro y se acerco a Hermione.

–A que se debe esa sonrisa, linda. – Hermione solo sonrió más, pues no pensaba contestarle que la noche anterior tuvo la mejor charla de su vida y fue con el profesor Snape.

Se río a un más si eso era posible, se dirigieron al comedor a desayunar y a clases. Así paso toda la mañana, hasta que fue hora de clases de Defensa contra las artes oscuras, que ese año era impartida por Snape. Pues pociones las impartía Horacio Slughorn.

Cuando estaban por entrar al salón de clases. El trío dorado y Neville se toparon con Draco Malfoy que venía con su prometida Pao, a la que más de una odiaba por su belleza y elegancia, sin tener en cuenta que todas desearían estar en su lugar, pues el gran Draco no permitía que nada le pasara. Meterse con ella era firmar un acta de defunción. Tras ellos estaban sus inseparables guardaespaldas Crabbe y Goyle. Como era de esperarse Draco no perdió la oportunidad de burlarse de Ron, que por su causa perdió el equipo de Gryffindor y gano Slytherin.

–Miren a quien tenemos aquí. Al jugador estrella del equipo de Slytherin. –Ron se puso tan rojo como los colores de su uniforme, y trato de irse a golpes con Draco, pero Harry lo sujeto por los hombros mientras que Hermione lo tomaba del brazo, y Neville mantenía su distancia. Pao miraba recriminatoria mente a Draco mientras Crabbe y Goyle se ponían delante de este, que sonreía burlonamente mientras volvía ha atacar.

-¿Qué dirá el equipo de Gryffindor cuando se entere que te vendiste por unas monedas? – Draco le aventó un pequeño saquito de monedas a los pies. Harry saco su varita para apuntar a Draco. Pao al ver eso también la saco y apunto hacia Harry y dijo.

–Si sabes lo que te conviene, baja esa varita ahora, Potter. – Harry La miro de reojo.

–Ahora dejas que tu novia te defienda Malfoy. – Hermione ya había sacado su varita, al igual que Neville, Draco, Crabbe y Goyle.

Hermione apuntaba a Pao mientras Pao apuntaba a Harry y este a Draco, que a su vez apuntaba a Hermione, Crabbe tenía la varita hacia Neville que dirigía la suya hacia él como Ron a Goyle

-¿Ahora dejas que Granger te defienda? Se me olvidaba el héroe del mundo mágico no es nada sin su amiguita que le cubra las espaldas- Dijo Pao, Draco estaba un poco sorprendido al igual que los demás ella no era como los demás Slytherin, nunca se burlaba de los demás, ni le seguía el juego a Draco con sus bromas, Draco estaba complacido por su actitud pues años le había costado lograr que ella dijera algo así a los Gryffindor. Draco rodeo con su brazo libre la cintura de Pao para acercarla a él y ponerla hacía tras, pues no la expondría a esos imbéciles que apenas si podían agarrar bien la varita, ella bufo ante ese gesto y rodó los ojos susurrándole. - "se defenderme" - Para que el solo él pudiera escucharla. Harry y los demás casi les dan arcadas al ver esa escena tan "romántica" pues en lo ultimo que pensaron ver es a Malfoy involucrado en este tipo de muestras cariñosas.

– ¿Que tenemos aquí? El "gran" Harry Potter. – Ese era Severus Snape.

– ¿No puede solucionar nada civilizadamente? siempre exhibiendo su destreza con la varita… –Dijo arrastrando las palabras.

– Diez puntos menos a cada uno… de los Gryffindor por supuesto.

Todos se apuraron a entrar a clases, nadie quería ser blanco de Snape y perder más puntos. Los Slytherin se rieron burlonamente de ellos, Crabbe y Goyle entraron de tras de los Gryffindor quedando Draco y Pao, al final Snape los vio molesto y Pao se coloco tras Draco mirándolo con ojos suplicantes y este sonrió divertido por la actitud infantil de su prometida. ¿Quien diría que hace apenas unos minutos parecía una fiera?

–Sabes que eso no funciona con migo. Entra o te castigare. –Ella salió de detrás de Draco sabiendo que si funcionó, pues él nunca le permitía usar la violencia para solucionar sus problemas y cuando lo hacia como ahora la castigaba. Después de la muerte de sus padres, él era el encargado de ella, desde que tenia ocho años paso por un lado y como niña traviesa le dio un rápido beso en la mejilla, entrando rápido para que él no le dijera nada.

Dentro Hermione se encontraba sentada con Harry, que se sentía incomodo por estar sentado al frente, pero no quiso dejarla sentar sola. Bueno Ron se hubiera sentado con ella, pero no podía confiar en que si alguien intentaba desquitarse de él con ella, pues no era secreto para nadie que el talón de Aquiles de Harry Potter era Hermione Granger. Y esto lo pensaba por su profesor, el muy desgraciado siempre estaba buscando una escusa para molestarlo a él y a sus amigos.

Snape entro azotando la puerta y cerrando las cortinas con un movimiento de varita y se coloco frente a la clase.

–Como bien saben en un mes empezaremos con la evaluación. En esta ocasión he decidido que serán calificados por su destreza, habilidades con la varita y tácticas de pelea. No será personal como lo quise al principio, pues su amado director me pidió que fuera en equipos de cuatro. Dos de Slytherin y dos de Gryffindor. – Todos comenzaron a protestar, nadie quería hacer equipo con alguien de la otra casa.

–SILENCIO Gryffindor. Su pareja de equipo será el que se encuentra sentado junto a ustedes y los de Slytherin igual compartirán equipo con la pareja de la otra casa por filas. La uno será equipo con la fila tres y la dos con la fila cuatro. El día de la evaluación competirán de la siguiente manera: las filas uno y tres contra las filas dos y cuatro. Pónganse de acuerdo para que practiquen antes de la evaluación. –Hermione volteo a ver quienes serian sus compañeros de equipo y suspiro. Sabía que tendrían problemas con ese par. Dejo caer cansadamente su cabeza en el hombro de Harry pronunciando una suplica. –Prométeme que no pelearas Harry, prométemelo. –Harry estaba apunto de contestar cuando una voz se lo impidió.

–Granger esto no es un parque para que se este secreteando con su novio. Se quedará después de clase. -Dijo con asco y enojo.

– Pero profesor tengo clases de astronomía y… -No me interesa su vida Granger.

-Ella no es mi… - Trató de replicar Potter.

-Diez puntos menos para Gryffindor. - Cortó el profesor secamente, la castaña miró indignada al hombre mientras el chico apretaba los puños. Snape solo frunció el ceño sosteniéndole la mirada a la joven con su gesto más arrogante. Fue solo un instante, antes de que se volviera bruscamente azotando su capa para dirigirse a su escritorio.

Harry dio un respingo antes de bajar la vista hacia su pergamino… ninguno de los dos Gryffindor hablo en lo que restó de clase. Harry rasgaba con rabia el pergamino, mientras la chica lanzaba airadas miradas al hombre de negro… hasta que la clase dio por terminada.

Todos los alumnos comenzaron a salir del aula. Harry antes de hacerlo, la miro y le sonrió mientras su mano apretaba la de ella para mostrarle su apoyo dejando la sola con el murciélago.