Susana había muerto... Ya había sido un año imedio desde aquella penosa muerte. Terry no había dejado de pensar en Candy aun después de la muerte de su comprometida, ya que, Terry nunca llego a tener un sentimiento de amor para ella. El único sentimiento que guardaba el joven actor hacia la ex actriz era lastima.

Sabiendo que la muerte de Susana había causado mucho escándalo nunca dijo una palabra de ello, a ninguna persona, solo había llegado a mencionar algo de ello en una carta, que había tardado medio año en enviar. La carta era para Candy.

Candy,

¿Cómo estás?

... ha sido un año.

Estuve planeando en volver a estar en contacto contigo después de que pasó un año pero otro medio año ha pasado por mi indecisión.

Pondré esto en el correo.

- Nada ha cambiado en mí.

No sé si esta carta te llegará o no, pero quise asegurarme de que lo supieras.

T.G.

En esta carta Terry no quiera referirse a sus sentimientos por la muerte de Susana ni como se sentía respecto a ello. Él quería dar a entender a Candy que, nada había cambiado en él, sus sentimientos seguían siendo los mismos. Aun la amaba y quería que ella estuviera enterada.

Terry ya hacia sentado sobre su cama pensando si le habría llegado la carta a su pequeña pecas, conociendo a Candy, sabía que ella era capaz de no responder la breve carta que le había enviado ya que no se sentiría dispuesta a hacerlo.

Por su lado, Candy había intentado enviarle numerosas cartas a el actor, transmitiendo todo sentimiento que ella llego a tener por él y que aun por más que lo escondiera seguía ahí, un sentimiento de amor vivo y tan fuerte como el fuego. Claro que esto paso antes de enterarse de la cruda muerte de Susana Marlow, la mujer que tenía a Terry a su lado, todas sus cartas (que nunca fueron enviadas) mencionaban a Susana y la suerte que ella tenía, un ejemplo de las cartas que escribía fue el siguiente.

Querido Terruce Graham,

Terry...

Cada vez que vienes a mi mente, mi mente se vuelve un albaricoque maduro, dulce y ácido. Ni siquiera puedo respirar, es como si una ligera brisa lo fuera a tirar al suelo.

La obra Hamlet-se anotó un gran éxito. Felicidades!

La obra Hamlet ha tenido otro largo recorrido seguido de un largo recorrido!

Puedo ver que artículos especiales se están vendiendo por todos lados con grandiosas críticas.

"Es el mismo Hamlet el que todo el mundo se imagina. Eso no es todo. !Va más allá de nuestra imaginación!"!El "Hamlet"de Terry ha decidido representarse en Gran Bretaña!

Ahora el Tío William casualmente te menciona cuando está conmigo. Me duele que al principio el parecía evitar a propósito el hablar de ti y escondía las revistas. Es un alivio que ahora se comporta normalmente.

Tú tenías razón Terry! El tío William era- bueno, ¡el Sr. Albert!

¿Puedes creerlo? Es la más absurda historia en el mundo, ¿no es cierto?

Bueno, lo conocí en Londres, Lo que es más, cuando me escapé del Colegio San Pablo, le mandé al Tío William mi diario donde yo había escrito mis sentimientos sin esconder nada.

Me pregunto qué expresión hizo en su cara cuando leyó mi diario.

El Sr. Albert y yo todavía no lo hablamos...

Es algo bueno que el Sr. Albert no haya tenido deseos de ser un actor. Una gran máscara de poker. Él hubiera sido un gran rival para ti. El Sr. Albert nunca confesó cuando recobró la memoria... Todavía tiene muchos misterios. Sin embargo, gracias al Sr. Albert, realmente tuve fuerza. Me pude sostener en pie. Tal vez porque el Sr. Albert permaneció a mi lado.

Terry. Yo deseaba decirte mi historia de aventura al regresar de Gran Bretaña después de ti pero no pude. Parece que la mayoría de mis cartas no te llegaron. Al contrario, tú me mandaste tantas cartas... Yo sé que has de haber estado ocupado. El nombre del destinatario siempre era Tarzan Pecosa. Seguiste usando tu tono burlón en todo contexto, yo quería recibir cartas más románticas... Pero, yo conocía tus verdaderos sentimientos. A pesar de que parecía que te burlabas de mí, tus cartas estaban llenas de amabilidad y preocupación por mí.

Gracias, Terry...

Yo todavía les tengo mucho cariño, pero no me atrevo a leerlas de nuevo.

Tú visitaste el Hogar de Pony. En ese tiempo, yo regresaba como polizón en el barco.

Cuando escuché a la Srita. Pony y a la Hermana María más tarde... Yo estaba tan desilusionada, pensando en que "Qué hubiera pasado si hubiera llegado más temprano? ¿Qué hubiera pasado si tú hubieras visitado un poco después?"

También pasó en Chicago...

Siempre nos evitamos en el camino. Pero en ese entonces yo pensé que la vida me recompensaría por el tiempo en que nos cruzamos y después yo podría estar contigo después de mucho tiempo.

La noche en Nueva York era fría, pero la nieve que caía rápidamente estaba tibia.

Tal vez, el calor de tu pecho permanecía en mi.

"Sé feliz. Y algo más, yo no te olvidaré..."

Terry, Tú dijiste eso.

Yo soy feliz.

Y tú, Terry. ¡Sé más feliz!

"Es el amor de Susana el que apoyo a Terruce en su regreso al teatro". Yo leí ese artículo.

Terry. Susana es una persona maravillosa. Sobre todas las cosas, es maravilloso que ella siga amándote. Y tú que hayas escogido a Susana es también maravilloso.

Si, desde luego. Yo no puedo enviar esta carta.

Yo lo sé.

Pero, yo estaba tan feliz con tu éxito que no podía quedarme así, a pesar de no poder enviártela.

Terry...

No olvides que hay una devota fan de Terruce Graham en el campo de los Estados Unidos. Y no olvides que yo estoy aquí aplaudiendo con todo lo que puedo mientras tú estás en el escenario.

P.S. Terry... te amé.

Tarzán Pecosa.

Y así fue como Candy mostraba su querido apoyo al chico que amaba.

Cuando se enteró de la muerte de Susana, leyó solo una vez el obituario, pero le basto para grabárselo en el cerebro.

"Susana ha muerto..."

Se sentó en el sofá porque sus piernas se habían vuelto de goma.

Su respiración se detuvo, sus lágrimas no se detendrían.

Una imagen de Susana en la silla de ruedas estaba en el obituario.

Mientras estuvo trabajando como narrador, Susana aparentemente había escrito obras de teatro también. El obituario mencionaba que un número de ellas se había producido.

Terruce Graham había sido su amigo, había vivido con ella, y la había apoyado en la batalla en contra de su enfermedad. Sin embargo, Susana nunca se casó a pesar de haber estado comprometida con Terruce.

Las declaraciones de Terruce no se publicaron...

Candy había sufrido mucho al saber sobre la muerte de ella. No porque le guardara cariño, si no, porque Terry ahora se encaminaría a una vida solitaria de nuevo. Ella aun deseaba que sus caminos se volvieran a juntar pero sabía que esto no sería posible, ella no supo más de el después de la muerte de Susana.

Ahora Candy se encontraba en la mansión de los Andley, la tía abuela por fin la había aceptado, por la petición del tío abuelo William que no era más que el queridísimo amigo de Candy. La tía abuela ese año imedio le había enseñado a ser una dama, aunque Candy ya había aprendido bastante de eso por los años que estuvo en el Colegio San Pablo. Candy ya era toda una señorita de sociedad, y la tía abuela estaba feliz por ella al fin.

Candy estaba en el jardín, sentada tranquilamente leyendo un libro, cuando fue interrumpida por el Sr. Josh que le entregaba la correspondencia a la Srta. Andley.

-Gracias Josh, dime, ¿la tía abuela se encuentra en la mansión?

- No señorita, es por eso que también vengo a informarle que hoy tiene el día libre y que el señor William la ha invitado a una cena.

-Con mucho gusto eh de aceptarlo, pero, ¿Por qué Albert no viene a decírmelo personalmente?

-El señor William se encuentra trabajando en algo muy importante, así que él me ha pedido avísale a usted para que esté lista en la noche. Si me disculpa tengo que retirarme para que usted pueda leer su correspondencia en paz.

-Gracias Josh.- Candy le sonrió amablemente y dicho esto él se retiró.

Candy empezó a ojear la correspondencia, hasta que el corazón se le paro en un instante.

-Nueva york.

No, es ridículo no puede ser de él, no después de 3 años.. Pensó Candy, intentando deshacerse de la idea que podría ser de Terry.

Abrió temblorosamente la carta y así era.. Era de él, de su querido Terry.

Cuando Candy leyó estos breves textos no sabía qué hacer ni que pensar, su amado Terry le había vuelto a escribir aclarándole que sus sentimientos eran los mismos, o eso fue lo que entendió ella.

Candy se puso a llorar, ya no sabía que pensar, le había costado hacerse la idea de que Terry nunca volvería aunque al separarse ella para que esta carta, borrara toda idea que ella tenía sobre Terry y ella.

Indecisa decidió no corresponder la carta, puesto que si lo hacía, se le abriría más la herida que tenía en su corazón y podría ser que Terry se refería a algo más, así que prefirió dejar las cosas así, como si no hubiesen pasado. Se paro y se fue a su habitación a prepararse para la cena que Albert le había invitado.