-Lo siento, me estoy poniendo en tu camino-
-¡Idiota! ¡No digas eso! ¡No estás en mi camino!... Si te haces daño, yo te ayudaré, si tú no puedes moverte, entonces pelearé en tu lugar, si sientes dolor, sentiré dolor también… ¡Somos amigos! ¿Verdad?...-
-…Rukia-
Abro mis ojos, y lo primero que veo es el techo de una habitación que por poco y desconozco. Rápidamente, los recuerdos de esa noche en mi sueño comienzan a repetirse mil veces en mi cabeza, dándome una sensación que no sabría explicar.
Instintivamente giro mi cabeza a mi lado, uff… menos mal, Orihime no está, estoy seguro de haber dicho el nombre de Rukia en voz alta. Esto pasa con frecuencia, y las veces que Orihime me ah escuchado no se que explicarle porque ni yo mismo lo comprendo.
Echando un vistazo a la habitación, me doy cuenta de lo mucho que extraño la mía, ahí era mi lugar de paz, era mi propio espacio, y que ahora pertenece a Yuzu. Esta en comparación es un poco más grande, con más muebles y… más femenina, y con olor a dulce por todos lados, seguramente por alguna travesura de Kazui.
-Kazui-
Lo único bueno que ah salido de todo esto en estos años, es mi hijo, es de lo único que no me arrepiento.
Porque en mi interior se… que no soy feliz con esta vida.
Me ruedo y me acuesto boca abajo, pensando. Pensando ¿Qué sería de mi vida si yo hubiera decidido quedarme en la sociedad de almas? ¿Sería un capitán o teniente? ¿Byakuya se las hubiera arreglado para deshacerse de mí de algún modo? ¿Rangiku-san y Yoruichi-san me habrían quitado mi inocencia a la fuerza? ¿Kukaku por fin cambiaria el horrible diseño de su casa? ¿Ganju me habría enseñado a montar jabalíes? ¿Le habría enseñado a Rukia a mejorar sus horrendos dibujos?... ¿Rukia se hubiera casado con Renji si yo…
-¡KUROSAKI-KUN!-
¡Diablos!, ¿cuántas veces le eh dicho en todos estos años que deje de llamarme así y me hable por mi nombre? Aprieto los dientes y aplasto con fuerza la almohada sobre mi cabeza intentando no escucharla.
-¡Kurosaki-kun! ¡¿Ya estas despierto?! ¡Los chicos llegaran pronto, será mejor que ya te levantes!- Me grita desde la cocina. Desgraciada, ya debió haberla oído medio vecindario.
-…¡¿EH?!-
Me reincorporo de inmediato al procesar sus palabras, ¡Se me había olvidado por completo! Todos habían acordado venir hoy para ver juntos el campeonato de boxeo de Chad, excepto por Uryu que tiene mucho trabajo en el hospital, incluso… Rukia vendrá, con Renji y… con su hija.
Es la primera vez que la veo.
Desde que Rukia se casó con Renji, las veces que ah venido al mundo humano son contadas. Cuando estaba embarazada y aun no se le notaba mucho, después no vino los siguientes meses de su embarazo y los siguientes cinco después de que naciera su hija, diciendo que no la podría traer con ella porque era muy pequeña y algo podría alterar su energía espiritual, aunque eso me sonó mas como una excusa.
Luego de eso, no volvió a venir en 7 años, diciendo que tenía mucho trabajo dentro del sereitei. Y ahora, después de tanto tiempo por fin se dignaba a venir.
Pero… ¿Por qué siento tanta felicidad al mismo tiempo que tristeza? No lo comprendo, se supone que esta era la vida que tanto deseaba.
En fin, será mejor que baje antes de que otro grito termine de romperme los oídos.
-¡Oni-chan!- Yuzu está en la cocina, ayudando a Orihime, y Karin está sentada leyendo el periódico.
-Ichi-nii, por fin despiertas – Me dice para molestarme.
-Cállate- Le contesto con fastidio y me siento.
-Buenos días Kurosaki-kun, ¿Te pasa algo?- Me pregunta Orihime preocupada poniendo el desayuno en la mesa.
-No, nada- Le contesto, y comienzo a beber mi café antes de que se le ocurra hacerme más preguntas enfrente de mis hermanas.
Ella me observa por unos segundos, con esa cara de lástima que siempre me pone, sin embargo la ignoro.
Un segundo, dos segundos, tres segundos… ¿Sigue mirándome? Estoy por hartarme.
Suena el timbre. ¡Gracias Dios!
-¡Ya voy!-
Rápidamente Orihime sale de la cocina para recibir a nuestros amigos.
-Ichi-nii- Me llama Karin cuando nos quedamos solos
-¿Qué pasa?-
-No seas así con Orihime- … ¿Qué?
-¿Así? ¿Así como?- Le pregunto mirándola.
-Así de frio con ella- Me contesta con seriedad- Después de todo, ella es tu esposa, tú decidiste casarte con ella, no creo que sea justo que la trates así-
-¿De qué hablas Karin? No siempre es así y lo sabes. Hoy solo dormí muy poco eso es todo- Le respondo despreocupadamente. Karin sigue siendo tan perceptiva como siempre.
-No hablo solo de hoy, ichi-nii, hay veces en que la tratas como si ella no significara nada para ti. Ella no dice nada, pero en el fondo esta triste y se preocupa mucho por…
-¿Triste dices? ¿Por qué debería de estar triste si nos tiene a mí y a Kazui?- No tiene mucho sentido que Karin piense eso.
-Ichigo… ¿De verdad ella te tiene a ti?- Sus ojos escudriñan los mios.
Me quedo perplejo, mirándola fijamente, buscando una respuesta que no se. Yuzu solo nos observa, con una mirada seria y preocupada a la vez.
No es momento de hablar esto.
-Karin, Yuzu. Orihime y yo estamos casados, tenemos un hijo, nos queremos, y tratamos nuestros problemas a nuestra manera- ¿Qué más podría decir? Esa era la verdad.
-Oni-chan…
-Kurosaki-kun- Orihime regresa.
-¿Si?-
-Tatsuki-Chan y los otros chicos ya están aquí- Dice con alegría.
-Está bien, iré a saludarlos- Con una sonrisa me dirijo a la sala, y como ya me lo esperaba…
-¡I-CHI-GO!- Ese loco viene hacia mí como si su vida dependiera ello. Coloco mi puño en frente de mí y se estrella de cara para caer desmayado. Clásico.
-Hola Keigo- Lo saludo cuando ya está más muerto que vivo.
-Hola Ichigo-
-¿Qué tal Mizuiro?- Lo saludo con una sonrisa
-¡Ichigo!- Es Tatsuki.
-Hola Tatsuki-
-¿Y tus hermanas?- Pregunta.
-Están en la cocina ayudando a Orihime-
-¡ICHIGO! ¡MALDITO! ¡- Keigo se levanta y me sujeta del cuello de mi camisa-¡¿Por qué me tratas siempre como basura?!-Lloriquea- ¡Somos los mejores amigos!
Comienza a abrazarme y yo trato de alejarme de él interponiendo mis manos.
-¡Ya suéltame!-
-¡¿Porque ya no me quieres?!- Está loco.
-¿Qué dices?-
-¡Primero te robas a la más hermosa de la escuela, te casas y te conviertes en hombre de familia! ¡¿Qué pasó con aquellos hermosos días soleados cuando íbamos a cazar chicas juntos?!-
-¡Yo nunca hice tal cosa!-
-Que tu no tengas vida propia no es culpa nuestra- Interviene Tatsuki.
-Tatsuki tiene razón, ya es tiempo que te hagas una vida Keigo- Apoya Mizuiro, que a pesar de tener sus auriculares está pendiente de todo.
-¡¿Por qué son así conmigo?! ¡Yo no tengo la culpa de que ninguna chica vea mi increíble atractivo!- Comienza a llorar encima de mi.
- ¡Suéltame ya Keigo! Me llenaras de tus…!-
El timbre de la entrada suena, todos se quedan quietos preguntándose quién será. Es Rukia
-¡Debe ser Kuchiki-san!-
-¡Yo iré!- Grito antes de que alguien más lo haga. Me suelto de Keigo y corro a la entrada mientras una enorme sonrisa aparece sin querer en mi rostro al ver esa pequeña e inconfundible silueta tras el cristal.
Quiero ser yo el primero en ver a Rukia.
Hola queridos lectores de fanfiction, esta es mi versión (ichiruki claro jeje) de lo que pasaba por la mente de Ichigo, un detrás de cámaras se podría decir xD, en el lamentable capitulo final, que lo odie a morir jaja, pero ya esta superado y el Renruki ya no lo veo tan malo ya que ellos siempre fueron amigos e Ichika es HERMOSA, Kazui en mi opinión tiene la misma cara de inútil que Orihime, pero aun así también es súper kawaii.
¿Qué pasara en el siguiente capítulo? Díganme que piensan jeje, aquí todo puede suceder, desahoguen todo eso que quisieran que pasara.
El siguiente capítulo será desde la perspectiva de nuestra querida Rukia, y veremos qué pasa después de su reunión con Ichigo y sus amigos, descubriendo que entre esos 10 años que pasaron ellos guardan un profundo secreto.
