Max Caulfield es la noticia más reciente de Arcadia Bay. Citadina de Seattle que logró entrar en la academia Blackwell, especialista en Ciencia y Artes, gracias a una beca artística, pero eso no era lo que hacía que todo el mundo hablara de ella, sino el hecho de que su familia había comprado la casa Price.

Arcadia Bay es un pueblo pequeño en el que todos conocen a todos, no era secreto para nadie la tragedia sufrida por la pequeña familia conformada por William, Joyce y Chloe Price; seis años atrás, Willian sufrió un accidente automovilístico que le costó la vida (conductor adolescente alcoholizado o drogado, nada nuevo en estos días), Joyce sufrió la pérdida de un esposo ese día y Chloe la de un padre.

William había sido un buen hombre en vida, querido por compañeros y amado por familia y amigos. La pobre Joyce, quien había trabajado como mesera de la cafetería local "Dos Ballenas"*, se vio en la necesidad de doblar sus turnos para poder sacar adelante a su hija como madre viuda, fue en esas largas jornadas en las que conoció al entonces nuevo jefe de seguridad de Blackwell; David Madsen, después de meses de pláticas ambos adultos se enamoraron y decidieron casarse. Esto provocó la ira de la joven Chloe, quien ya luchaba contra la depresión que dejo la muerte de su padre, demandando su derecho de mantener el apellido Price.

La muchacha no había tomado su situación muy bien; comenzando con una baja en sus calificaciones, consumo de alcohol y drogas, chicos malos, expulsión, un cambio drástico de imagen que comenzó con un rayo de color azul y terminó en todo el cabello de ese color, decisión que tomó después de conocer a Rachel Amber, otro misterio propio de Arcadia Bay, la joven desapareció al año de amistad con Chloe, quien quedó incluso más devastada por este hecho, hizo de su misión encontrar a su amiga, desafortunadamente, terminó por desaparecer también.

Joyce y David hicieron todo lo que estaba a su alcance por encontrar a la joven durante un año, reunir familia, contactos, policía, el ex soldado perdió incluso su trabajo en Blackwell después de que su investigación y creciente paranoia lo llevará a acusar a personal de la institución por la desaparición de las muchachas, después de eso no quedo mucho para la pareja en Arcadia Bay por lo que decidieron vender su casa y abandonar el pueblo.

Lo que nos lleva al presente: la familia Caulfield recibiendo las llaves y escrituras de la casa de una Joyce de apariencia exhausta, había conocido a David y lucia de la misma manera; caras pálidas, ojeras marcadas debajo de ojos rojos por falta de sueño**, una imagen no muy agradable, algo muy triste.

-Muy bien, Vanessa,- el acento sureño de la mujer rubia resonó en el jardín en frente la casa- aquí está todo lo que necesitan- presentó dichos objetos.

-Muchas gracias Joyce- contestó Vanessa recibiéndolos- es una lástima que tuviéramos que conocernos de esta manera.

-Ya lo creo- su mirada se poso en Max y sonrió un momento con tristeza- estoy segura que a Chloe le hubiera encantado ser tu amiga.

-Me habría gustado conocerla- contestó la joven.

-Bueno, es momento de que nos vayamos- se dirigió de nuevo a los padres de Max- cuiden de su muchacha, algo raro pasa en Blackwell.

Después de eso y las despedidas esperadas, la pareja abordó su camión y condujeron hasta perderse en el horizonte dejando a la familia en frente de su nueva casa.

El edifico no se encuentra en malas condiciones, admiraba Max mientras se acercaban a la puerta de entrada, la fachada estaba pintada hasta la mitad de azul, y el resto, junto con el garaje de un amarillo opaco. La puerta dio paso a un pasillo, a la derecha, la puerta del garaje y más adelante las escaleras que llevan al segundo piso, al avanzar hacia la izquierda está la puerta que lleva a una pequeña cocina y al frente una sala comedor con unas puertas deslizantes que dan a un amplio patio trasero. Max observaba todo con curiosidad preguntándose cuántas memorias se encontraban en esas paredes, cuántas de ellas serían buenas, cuántas malas.

La joven dejo sus cavilaciones y subió las escaleras para, a indicación de su padre, elegir la que sería su nueva habitación por el resto del verano y los fines de semana que regresara de Blackwell.

Consideró sus opciones, el segundo piso constaba de tres habitaciones y un baño, la primera a la derecha estando arriba del garaje, más adelante y frente al baño estaba la segunda y a la izquierda, frente a la primera, la tercera. Max no sabía por qué pero algo de la primera habitación le atrajo. Se acerco a ella y al abrir la puerta fue recibida por una ráfaga de aire frío, algo curioso para el clima caluroso del verano, observó el cuarto; espacioso con un colchón al fondo y un escritorio debajo de la ventana que da vista a la calle. Un destello azul distrajo a la joven, una mariposa entró por dicha ventana y se posó en una de las esquinas del colchón, Max, siempre lista, sacó su cámara (polaroid) de su mochila y se acercó con cuidado, ya estando a una distancia aceptable tomó la foto, una vez revelada la observó, era una muy buena foto y decidió que esa era la señal que indicaba que esa debía ser su habitación, dejó su mochila, cámara y foto en el escritorio y bajó para comunicar su decisión a sus padres.

Después de trasladar todas sus pertenencias del camión de mudanzas a su cuarto y de prepararse para dormir, Max buscó su cámara en el escritorio para tomar la última selfie del día, sin embargo la encontró arriba de la caja con su ropa sin desempacar… "Podría jurar que la había dejada en el escritorio."

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*Ni idea de cómo es en español.

**Me los imaginé como personas de una película de Tim Burton xD

Saludos lectores!

Este es un nuevo proyecto que estoy construyendo, después de 2 meses sin escribir (estoy MUY oxidada, lo siento) y con ayuda del final de Life is Strange ( aún no supero ninguno de los finales) me decidí a escribir este fic que llevaba ya un tiempo en mi cabeza, este es solo el intro, espero se les haga interesante y no los haya aburrido con tanta descripción .

Este año entré a la universidad así que aún estoy acostumbrándome a todo el rollo de los horarios y eso, por lo que no estoy segura cada cuanto actualizaré, intentaré escribir entre clases y cuando tenga tiempo libre.

(También haré eso con mi otro fic que no he actualizado, no me maten)

Sin más, espero les haya gustado y les agradezco por leer.

Elizabeth Wolf.