bien, he pensado que no estaría mal que hiciera unas cuantas historias basadas en canciones de vocaloid pero con personajes de Sonic, ya sabes pues, que muchas de estas son bastante perturbadoras, eso y el romance son mis fuertes. Hare para comenzar los sacrificios humanos de Alicia, dudo que desconozcan esa canción, es muy buena.

La primera Alicia.

-llevo mucho tiempo en este mundo… ya nadie me recuerda…- dijo el pequeño sueño, en forma de un joven erizo de piel blanquecida vagaba por el mundo de los sueños, donde otros más importantes que él le miraban solo de reojo o sobre el hombro, y donde muy pocos de ellos, solo los mas puros le dirigían una sonrisa lastimera.

-estoy a punto de desaparecer y ya todos lo saben- se anudó la cinta roja que colgaba del cuello de su camisa, pensando qué podría hacer para evitar aquello que tanto pánico le producía.

-ya sé. No basta, en realidad, que la gente solo sueñe conmigo…- se esbozó una sonrisa macabra desde la comisura de su labio –si puedo hacer que se pierdan en mí-

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En otro reino más allá de aquel una guerra se desataba. Amy, la valiente guerrera rosa no aguantaba más, el dolor de la herida en su estómago se incrementaba más. Su cabeza palpitaba, su corazón estallaría de miedo en cualquier segundo. Veía la sangre teñir su vestido de carmesí, sentía nauseas, quería vomitar pero ella sabía que tenía que ser fuerte y encarar a los del reino atacante.

Presionó sus ojos con fuerza y en cuanto los abrió vio delante de ella la figura de un niño erizo peli-blanco parado frente a ella, mirándola fijamente y con una tierna sonrisa.

-hola- levanto su manita tapada por la manga larga agitándola insistentemente.

-¡eh tú!- gritó nerviosa.

-¿mm? ¿Acaso no se le debe decir hola a una persona al saludarla? ¿Me habré equivocado? Me parece que ahora estoy confundido- miro cabizbajo, pensativo. Sin nada más que decir, a la espera de la respuesta correspondiente.

-n-niño ¡este no es lugar para pequeños! Sal de aquí!-

Amy cogió al niño de la muñeca halándolo con ella, a sabiendas de que el escenario bélico tras de ella había desaparecido y una blanca habitación vacía le había sustituido.

-¿niño?- se zafó de la mano de la chica sin forcejear mucho -Pero si llevo cientos, miles de años que tú, no sé cuantos con exactitud, ya ves. Ni lo recuerdo-

-mira niño, estoy algo ocupada. Tienes que irte- había olvidado por completo su herida en el estómago aunque su rostro y su ropa seguían empapados de sangre ya no sentía dolor.

-pero si he venido aquí con un propósito- sonrió con gracia –oye nee chan ¿quieres ser mi amiga?- un sonido de eco hizo desvanecer el mundo tras de sí poniéndolos en medio de una calle villana.

-e-este pueblo ¡¿q-q-quién eres tú?-

-soy un sueño, mi nombre es Silver, mucho gusto. En cuanto a este lugar, es aquí donde vivo, es un sueño también. Aunque como eres tú la que está dormida… quizá podría ser.. tu mundo-rió como si estuviese tramando una travesura propia de chiquillos.

-quisiera pedirte, que te conviertas en Alicia-

Amy lo miró perpleja, no sabía a qué se refería "¿qué sucedía? ¿Qué tenía planeado hacer este niño? ¿De donde provenía?" quería aclarar dudas pero le daba miedo la forma en la que podría llegar a hacerlo.

-¿Ali…cia?-

-humju, Alicia- asintió –si te conviertes en Alicia, te ayudaré a salir de aquí, por eso… espero que te esfuerzes mucho.. amiga…-

Tras decir esto aquel pequeño y pobretón sueño desapareció lentamente.

-¡espera! ¡oye! ¡¿pero quién es Alicia?- gritó al vacío sin ninguna respuesta. Mientras caminaba intentaba pensar qué tenía que hacer, cómo podría salir de allí.

-ey, nee chan- una niña halaba su ropa intentando llamar su atención -¿quieres jugar?-

-lo siento pequeña, no tengo tiempo de…- volvió la mirada nuevamente hacia la pequeña de ojos verdes y ropajes marrones, su pecho lo decoraba un delantal blanco.

-¿sabes algo de una tal Alicia? ¿Sabes quién es?-

-hum…..- pensó haciendo un molesto sonido de zumbido entre sus labios –pues no se na…- de pronto sus ojos se iluminaron, mirando a la nada como si de pronto una idea se le hubiera clavado en el cerebro.

-alicia…..-

-yo…-

-he escuchado…..-

-sobre ella….-

-¡¿de verdad? ¡¿quién es Alicia?-

-Alicia es…..-

-a decir verdad…-

-es una persona…-

-que siempre…..-

-¡recordará este mundo!- una perturbadoramente larga y afilada sonrisa se dibujo en su rostro, tan alargada que desfiguraba sus ojos y sus mejillas.

Amy se llevó el susto de su vida, corrió como pudo, como si sus pies tuvieran batería propia, no estaba dispuesta a detenerse, ni volver, ni siquiera mirar hacia atrás.

-(no lo entiendo ha ha… ¿que está pasando?)- jadeaba incesante y sin parar ni un segundo –(¡¿Quién es esa Alicia? ¡¿a qué se refiere con que es una persona que recordará este mundo?)-

-(¡no puedo quedarme más tiempo aquí! ¡aun tengo… ha… muchos enemigos por derrotar!)-

Se detuvo de pronto, aquella niña jamás la estuvo siguiendo, pero sí… el pensamiento… aquellas palabras de aquel sueño.

"quisiera pedirte, que te conviertas en Alicia"

-je.. j-jeje…- una risilla nerviosa brotaba de sus labios, por fín lo había comprendido, sabía cual era su misión, qué debía hacer para salir de allí.

-¿Alicia? A mi no me interesa quién sea ella. Pero algo sé que es seguro, si todos los habitantes de este maldito lugar desaparecen…- se irguió con decisión, sus ojos rojos y pupilas achicadas demostraban la terrible malicia que había apoderado el corazón de Amy.

-¡YO SERÉ ALICIA!-

Una personilla, un pequeño sueño, aparentemente joven le miraba en silencio. Con una expresión lastimera, viendo como aquella que ahora se pretendía auto-proclamar la Alicia que buscaba desparramaba la sangre de su pueblo por todo el lugar, sin piedad, cortaba y amputaba los miembros de las personas que en vano pedían clemencia ante tan vil proyecto llevado a cabo con una pesada espada de hierro.

-moo.. no era esto lo que imagine, tan solo quería que se quedara aquí para siempre-

-¡no me lastimes! ¡Por favor!- gritaba una de los pueblerinos víctimas del ataque.

-pues ya que. Tendré que buscar a otra Alicia que sirva-

-¡iaaaah! ¡No!- gritaba una dama sin piernas.

-¡por favoooor! ¡piedad!- gritaba un hombre cuyo brazo caía en el suelo.

-¡dueleeee!- escupía un niño la sangre generada de su pulmón-

-¿onee… chan?- se preguntaba la niña… que miraba fijamente el rostro manchado de sangre de su agresora.

-(matar, matar. Mi mato a todos estos desgraciados podré volver a mi mundo)- casi podía sentir la espada atravesando la dulce carne de la niña cuando de pronto.

#plank# barras de acero cayeron del cielo aislándola de todos, volviendo el mundo negro. Justo en ese momento apareció el insignificante pero astuto sueñito que le había traido ahí.

-está mal lastimar a las personas. Te quedarás ahí lejos del mundo al que atacas. Lo lamento pero ya no necesito a una Alicia ba-su-ra-

-¡¿qué? ¡Sácame de aquí maldito!-

-n-o q-u-i-e-r-o- negó Silver, dándole la espalda y dejándola sola en su jaula gigante.

-es… es mentira ¿no? Ah… arggg IAAAAHHAHAHAHHHHAAAAHHH!- chilló hasta que su garganta arañó.

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En una habitación oscura, Silver el indeseado sueño blanco jugaba con una muñeca de vestido carmesí y mirada destruida.

-"la primera Alicia estaba llena de valor, con espada en manos se adentró en aquel país"-

-"muchas persona consiguió ella matar, dejando escarlata un camino allá detrás"

-¿q…qué es esa canción?- lloraba Amy, aguantada a sus barrotes de hierro, llorando desconsolada.

-¿eh? ¡pero si es tu canción!- exclamó el sueño que volteó sonriente.

-"esa Alicia sola y encerrada ella quedó"-

-"en lo profundo del bosque como una criminal"-

-"arboles cubrieron toda forma de escapar, nadie sabe si vivió.."

-YA BASTAAAAA!- chilló atormentada.

-"o murió ¿Dónde estará?"-