Disclaimer: No soy rubia, no soy ella.
Diferentes
Para Eugeart
Recomendación musical: What difference does it make? - The Smiths
Se conocen desde pequeños, desde que eran unos críos y no superaban el metro del suelo. Recuerda las tardes de domingo cuando el padre de Nott, un hombre alto, delgado, la mirada callada y las mangas de la camisa siempre abrazando sus muñecas con recelo, entraba a su casa con su hijo y saludaba a su padre con un hosco estrechamiento de mano. Luego pasaban horas enteras encerrados en el estudio hablando entre murmullos y cosas que a esa edad ninguno de los dos podía entender, hasta que era la hora de la cena y el padre de Nott nunca accedía a quedarse ante la formal invitación de Narcisa.
Los niños se quedaban en el jardín, uno en cada punta y procurando no mancharse la túnica de tierra, el pequeño brillo aristocrático de su mutua indiferencia, la huella intacta de cómo los criaron.
En Hogwarts, las cosas tampoco cambiaron tanto (-Malfoy- junto con una leve inclinación en el tono de voz y los ojos fijos en los grises. Las manos en los bolsillos y ningún torpe mastodonte para hacerle de guardaespaldas.
-Nott, ¿cómo has estado?- seguido de una sonrisa que nunca supera los labios y ambos siguen por su lado del pasillo).
La diferencia es que ahora no les molesta mancharse las túnicas.
(-¿Por qué has tardado tanto?- la camisa en el piso y los labios justo en el hueso de la cadera.
La voz de Malfoy es fría, muy fría cuando lo acaricia sobre el pantalón, sus rodillas en el suelo de piedra y las manos del rubio despeinándole el pelo. Marcándole el ritmo. Nunca dejó de ser levemente autoritario.
-Pansy- es la respuesta de siempre y por unos segundos ninguno dice nada. Tampoco es que haya algo que decir. El gemido de Draco cuando se corre es lo último que se escucha antes de volver a clases).
Y no les molesta para nada, eso, de ensuciarse. Pero siguen siendo los mismos niños que nunca cruzaban palabras más allá de las necesarias, como lo eran hace tantos años.
(-¿Tienes miedo, Malfoy?
-¿De qué hablas, Nott?- la corbata se anuda al cuello como las palabras que sabe que él le dirá. Lo mira a los ojos. Theodore siempre ha tenido una mirada fácil de leer para él. Un libro aburrido como el de los estantes que rellenan la Biblioteca.
-De nosotros.
Una sonrisa ladeada seguida de un encogimiento de hombros. No es que esa sea una pregunta que le guste responder. Y le contesta como lo educaron, nunca cediendo territorio a extraños.
-¿Tú qué dices?- las pupilas desafiantes, la barrera que Nott nunca podrá romper).
O quizás no tanto. Quizás hayan crecido lo suficiente para entender de qué hablaban sus padres en ese estudio, y qué clase de mundo es el que están pisando. Para entender que esos encuentros son la única forma que tienen de evadirse de las cosas que a ellos francamente no les importa. Algo que tiene que ver con la sangre y serpientes en los antebrazos. Encuentros que duran un par de minutos, con suerte, media hora. Encuentros que ni Pansy ni nadie de Slytherin podría adivinar…
Porque Draco Malfoy y Theodore Nott sólo son viejos conocidos de la infancia, sus padres amigos y ambos con el mismo status social.
(-Yo digo que sí, Malfoy).
Y tal vez los mismos intereses.
Hola!
Este es el primer fic que hago que contiene slash, así que tómenme como una principiante xDD.
No sé bien si me quedaron los personajes IC o completamente OoC pero hice lo que pude ^^.
Si llegaste hasta acá, gracias. Si llegás hasta la barrita de letras verdes, quiero que sepas que te quiero mucho.
Graciasgracias y Feliz Navidad -adelantada!
