Yukihana: Bueno les traigo un one-shot que debí haber publicado hace tiempo, pero bueno olvidemos eso XD

Diamond no Ace no me pertenece

Titulo: Motivos

Resumen: Porque todas nuestras acciones, buenas o malas, siempre tienen un motivo.

Pareja: ChrisRyou

Genero: YAOI, Fantasia, Romance, Drama.

Advertencias: Muerte de personaje.

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El inicio de todo sucedió hace mucho, mucho tiempo atrás, en donde no existía nada en el universo, un conjunto de dioses se reunieron y crearon los planetas, la naturaleza y sus maravillas, así como la vida, los animales y su mayor creación, los seres humanos

Seres semejantes a ellos, pero sin ningún poder especial.

Por años se vieron fascinados por los avances que mostraban sus creaciones, hasta que notaron que algunos humanos desarrollaron emociones y sentimientos negativos. Creando caos y contaminando su alrededor. Fue por ello que los dioses se vieron en la necesidad de crear algo más. Para proteger a los humanos que no desarrollaron dicha maldad, crearon a otros seres semejantes a los humanos, pero con poderes similares a ellos. Su nueva creación fue bautizada por el nombre de "ángeles", les brindaron alas para que se desplegaran por los cielos y se protegieran de cualquier tipo de arma, les dieron largas vidas para asegurarse de que pasara lo que pasara mantendrían la pureza de la divinidad, además de que les regalaron un don especial; manipular el aire, la tierra, el fuego, el agua, la luz o la neblina, dependiendo al dios que servirían. Gracias a la aparición de los ángeles el mal que creció en los humanos se controló, brindando nuevamente tiempos de paz. Y es en eso tiempos de que la historia se divide en dos realidades. En ambas se dice que la contaminación generada por los humanos llego a los cielos, aquel paraíso en los aires donde residían los dioses y los ángeles de manera pacífica, pero ni su pureza los salvo de ser infectados con deseos y ambiciones egoístas.

La leyenda más creíble y que es tomada casi como verdadera, es la que cuenta que uno de los dioses se llenó de maldad y egocentrismo, deseos de poder y muchas frivolidades, es por ello que ambiciono gobernar sobre todos, ocupar el lugar de líder entre los suyos y tener el poder absoluto para regir. El resto de los dioses y sus fieles ángeles se unieron en batalla para combatir contra aquel ser maligno y sus secuaces, aquellos que se vieron envueltos en sus ambiciones y fueron tentados por su líder, Mei, un dios de bajo rango. La guerra termino con la derrota de los seres envenenados y la victoria de los puros, quienes castigaron a los revoltosos con el destierro de los cielos, confinándolos en el infierno, una tierra de gran sequía, sin vida y de infinito calor.

La segunda leyenda y la menos creíble es aquella que desmiente por completo la anterior, relatando que la contaminación realmente llego a los cielos contaminando a un trio de dioses que planeaban el asesinato de sus congéneres y de los ángeles que se opusieran a ellos, obteniendo poder absoluto en el paraíso y esclavizando la vida en la tierra. Sin embargo, antes de que pudieran llevar acabo sus planes, Mei les descubrió e intento detenerlos, revelar sus verdaderas intenciones a los demás dioses y unir fuerzas para derrotarles, no obstante, los tres dioses se adelantaron. El trio sabía que Mei estaba enamorado de un humano e invirtieron la situación, usando ese secreto a su favor. Reunieron a los demás dioses a excepción del dios de bajo rango y les mintieron, inculpando al pobre enamorado en un sin fin de atrocidades al ser contaminado por la maldad humana. Revelaron parte de su plan, pero haciendo creer a los demás que la mente maestra era aquel dios y que eran ellos los que le habían escuchado. Convencidos de que los dioses no mentían y confiados en los años que llevaban conociéndolos, no dudaron en enfrentar al pobre dios inocente, quien solo pudo defenderse y a los suyos, a través de la pelea. Desatando la guerra en los cielos, que termino con el destierro de un ser inocente y sus aliados.

Ambas leyendas terminan igual, el grupo desterrado se llamaron a sí mismos demonios, gobernadores del afamado mundo nombrado infierno. Seres llenos de resentimientos, buscadores de venganza y anhelantes de su antigua vida en los cielos. Razones suficientes por las que, por años, continuaron la guerra, con el deseo de regresar a los cielos y hacer pagar a los demás la pésima vida que les esperaba eternamente. No eran tiempos buenos para ninguno de los tres bandos y cansados de ellos, el nuevo rey de los demonios y el consejo de dioses que se formó después de lo sucedido, firmaron un tratado de paz; en el cual incluían una clausula sobre las almas humanas.

Todo debido a que, a inicios de la guerra, los demonios buscaban sin limitante las almas de las personas en la tierra para incrementar su poder y hacer frente a los ángeles y demás dioses, ocasionando que los seres de luz defendieran las creaciones de sus superiores y que eran inocentes de aquel enfrentamiento -al menos un porcentaje era inocente de todo-.

Para resolver y salvas a aquellos que no tenían nada que ver en el pleito entre seres superiores y a sabiendas de que los demonios no dejarían tan fácilmente ir una fuente de poder, se acordó en la cláusula que la humanidad se dividiera en dos ante la vista de los seres con dones; aquellos que eran puros e inocentes serian protegidos por los ángeles, así como también serían intocables para los demonios, que se encargarían de aquellos humanos que ya estaban contaminados y eran intocables por los ángeles.

Después de que ambas partes estuvieron de acuerdo con tal trato, la paz reino y la vida giro en un ciclo equitativo. Las personas buenas y puras eran cuidadas por los ángeles, llevadas al término de su vida al cielo donde descansarían en el paraíso hasta que su turno de renacer llegara. Mientras que las personas contaminadas serian observadas y/o comidas por los demonios o en el mejor de los casos, solo serían llevadas al infierno donde su alma vagaría por la eternidad entre el sufrimiento y la agonía.

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Yukihana: Bueno, espero les guste esta pequeña introducción y más adelante el pequeño one-shot.

Bye~ Bye~