Eto…Bueno este es mi primer fic, y espero que les guste o agrade.

Dulce esencia, puedo sentir

Se impregna en mí ser y no me deja salir

Hermosa melodía puedo oír

Sonidos que a mis sentidos hacen desistir

Mas ese sendero no debo seguir

Dulce Melodía quiero yo seguir

Canto de sirena muerte ah de decir

Dulce veneno como la miel, letal y placentero

¿Qué debería hacer?

Catare del dulce néctar que marchitara mi ser

A mi existencia hare desaparecer

Adorable Traición

Capitulo 01: Un Simple Encuentro.

-¡Eren, no puedo creer que estés enamorado de él!-gritó Mikasa-.

-"Él es un demonio, alguien al que no puedes creerle, aun que diga la verdad; alguien de carácter frío y testarudo, llevado a sus ideas. Hijo de uno de los demonios más poderoso de todo el infierno. No entiendo que le viste a ese ser tan despreciable".

Recuerdo que eso me dijo mi hermana adoptiva, Mikasa. Eran sermones de los que ya estaba acostumbrado un poco mas y ya serian como rutinas diarias o semanales. Quería entender el porqué de siempre estar preocupada por mí, pero no podía y tampoco comprendía. Podía llegar a ser insoportable.

Yo ya era un adolescente podía cuidarme solo, no siempre iba a necesitar a Mikasa a mi lado, yo ya era grande y podía cuidarme solo.

Bueno, eso quedó olvidado por unos momentos. Debía entregar un pergamino, era nuevo y no tenía mucha experiencia. Siempre que salíamos a entregar pergaminos u otros encargos, debíamos ir acompañados de tres arcángeles y dos diáconos. Nunca fui solo, ya que al ser un ángel era un tanto débil.

Había muchos rumores, rumores que normalmente todos creían, decían que, si un ángel iba a su mundo solo, era torturado o asesinado por criaturas con más poder, esas criaturas que viven en el infierno. O la tierra.

De lo que estaba seguro era que si un ángel entraba solo no volvía. El inframundo era conocido por muchas cosas, y una de ellas eran sus formas de torturas, por ejemplo; "El Despedazado"(en el cual te arrancan las alas de estos e infrinjan dolor sin matar, totalmente repugnante). Eran distintas, y cada vez más macabras.

Mikasa era un arcángel, había subido un mando, más que yo. Siempre era mejor que yo en todo, eso a veces me frustraba y enojaba porque, es una mujer y el que sea mejor que yo era fastidioso, habían veces en las que me molestaba, pero sé que pronto seré igual a ella o la superaré.

Armin es un ángel, al igual que yo. Es un hermano para mí, es mi mejor amigo. Siempre me apoya y ayuda, de verdad le agradezco y debo mucho.

He sido enviado a muchas misiones, tanto buenas o fáciles como malas o difíciles, más de las que puedo contar y acordarme.

En una de ellas, todo cambio para mí. Le vi por primera vez, impactó en mi su existencia, y desde ese momento no puedo dejar de pensar en él, no me lo podía quitar de la mente.

Quería saber su nombre.

"¿Cómo se llamaba aquel demonio?"

Sólo teníamos que hacer una simple entrega a los demonios, una simple entrega de un pergamino.

-Debo admitir que me llenaba de adrenalina y algo de miedo estar en las fronteras que separaban el cielo del infierno, los sorprendente es que era un simple que el destino da muchas vueltas, pero nunca pensé que terminaría fijándome en un demonio.

Al sentir tal adrenalina fijándome en esa figura que tal vez estaba distanciada de mi por unos diez metros, eran tal vez la distancias entre las fronteras del cielo con el infierno y solo se podían juntar a través del puente de Rose.

Son tres puentes y uno estaba quebrado, aun que siempre ocupábamos el de diez porque era el mejor en temas de distancia. El primero media cinco metros, aquel puente se llamaba "Sina", era uno muy corto, ese era el que estaba quebrado. Recuerdo que mi madre me contó el cómo se había roto, fue por una pelea entre un arcángel y dos demonios, en esa pelea los cuerpos nunca fueron encontrados, pero la de un demonio si, los otros dos no. Mi me conto que el arcángel era una mujer y los dos demonios hombres, aquella mujer muy delicada como un pétalo y tan frágil como una flor, pero a la hora de una batalla era una de las mejores.

Aquellos demonios, uno fuerte, tanto de cuerpo como de sentimientos, él era uno de los mejores de su clase, debía demostrar ser eso un, ya que era alguien que le costaba entregar sus sentimientos, de hecho era muy amable pero lo ocultaba.

El otro ser era todo lo contrario. Testarudo, no se dejaba dar órdenes por nadie, insensible y solitario.

Una noche que cubría tanto el cielo como el infierno, dos eres poderosos estaban juntos, una arcángel y un demonio, salían a escondidas sin ser vistos, cuando podían se encontraban, todo era normal hasta esa noche a aquel demonio testarudo los siguió y los descubrió a los dos.

Desde ahí ya no recuerdo bien lo que seguía, pero bueno ese es otro tema. Empiezo a recordar tanto, que me distraigo de lo importante.

El tercer puente media quince metros, esa era muy largo y no recuerdo el porqué, no era tan ocupado como el segundo, aun que prácticamente no tenía nada, esa tenia por nombre "María".

El segundo puente se apodaba por el nombre "Rose", era el que siempre ocupábamos. En ese era el mejor, ya que el primero era muy corto (y estaba quebrado), y en el tercer puente la distancia era muy larga.

Pero recobrando el tema, ya que estaba divagando demasiado, estaba acordándome de otras cosas, me encerré en mis pensamientos, siempre me encierro en ellos.

Me enamore de él, de sus hermosos ojos escarlata, de su pálida y cremosa piel, de su mirada tan profunda, de sus cabellos color ébano. Era hermoso, demasiado y el no verlo era casi tentador. (o al menos esa era para mí).

Él estaba distanciado de mí por unos diez metros, no solo el si no que todo su grupo. Todos nos miraban serios. Pude ver de reojo a Mikasa, se le notaba quede tantas miradas desafiantes y frías le sobraban los impulsos como para desafiar uno por uno.

Aquel demonio iba acompañado tanto de hombres como de mujeres. El primero era alguien de contextura delgada, tenía una apariencia de alguien serio y tranquilo. Atrás se encontraban dos chicas, uno de ellas era castaño, su cabello era alzado en una cola de caballo, ocupaba anteojos y se veía bien sonriente, creo que era la primera vez que podía ver a un demonio tan sonriente. La otra chica a su costado se veía demasiado débil para ser un poderoso demonio. Detrás de esas dos mujeres había dos hombres. Uno aparentaba estar más viejo que los demás, ya que tenia arrugas en la frente, y era rubio. A su lado y como último alguien alto y rubio, su piel era de tez clara y tenía una barba y bigote muy corto. En total eran seis demonios, la mayoría con miradas penetrantes y profundas.

De pronto me di cuenta que estaba cometiendo un error, me estaba enamorando de un demonio, además no sabía si era amor solo me atrajo por apariencia.

-"¿Puede ser posible que alguien se enamore por la apariencia o por su físico?"

A pesar de que si estuviera profundamente enamorado de él…Pasaría…A ser un ángel caído…

Miles de pensamientos pasa por mi mente, no solo eran pensamientos, si no que también eran imágenes o tal vez alucinaciones

-"¡NO!"

Sin darme cuenta lo grite, sentí como un escalofrió recorría todo mi cuerpo.

Y los demonios presentes se empezaron a reír, y a burlarse, menos él.

Aquel hombre de ojos escarlata, no tenia ninguna expresión en su cara, solo una mirada seria. Profunda y con el ceño fruncido y seguía tan callado como siempre.

"Señor mío, ¡Cálmese!" me dije a mí mismo. Pensé "soy un idiota por gritar cosas sin sentido", al mirar de reojo pude por como Mikasa se cruzaba de brazos al igual que Annie y Jean que hacían los mismo, los tres eran arcángeles, se les notaba en el rostro que estaban muy molestos, y que todo se debía a mi culpa, por demostrar miedo sin ni siquiera cruzar palabra con aquellos seres infernales.

Podía escuchar desde el otro lado como se burlaban diciendo cosas como "Dios mío", "Mi Diosito", o "Que miedo apiádate de mi señor mío".

Por mi parte me sentía avergonzado, como un completo idiota. Armin que estaba a mi derecha puso una mano en mi hombro en señal de apoyo, mientras que Sasha que estaba a mi izquierda, solo miraba tanto a mí, como a los demonios del otro extremo.

Como alguien ya con la suficiente experiencia (creo yo) no sabía el porqué estaba temblando de pies a cabeza por dentro, ya que no podía demostrarlo las consecuencias se volverían a burlar por lo débil que soy. A demás, no me podía demostrar débil al frente de los arcángeles, tal vez luego me regañarían por mostrarme débil frente a ellos.

-"¡VE DE UNA MALDITA VEZ!"-grito Jean-

-"Y-YA VOY v-VOY NO ME APUREN".

Estaba nervioso, sin saber el porqué, comencé a caminar hacia el puente, mi corazón estaba muy acelerado, al estar arriba podía ver como los demonios se seguían burlando de mi grito "sorpresivo". Espere a que dejaran de burlarse. Pasaron los minutos, tanto tiempo había pasado, que hasta me dio tiempo de tranquilizarme un poco de tan alterado que estaba, ahora podía respirar mejor o normal. Pasó el rato.

Hasta que aquel hombre rubio u alto le dio una señal para que avanzara a aquel sujeto del cual me llamo la atención a primera vista. Pude notar en su cara una expresión de molestia. Eso me asusto un poco, baje la cabeza mirando al puente de Rose, y empecé a pensar de muchas maneras de cómo iniciar la conversación, sin aparentar estar asustado.

-"¿Cuándo mierda me vas a entregar el maldito pergamino?"

Pude sentir su voz era un tanto suave pero al mismo tiempo agresiva. Recuerdo que cruzamos miradas por unos minutos, y aquel ser desvió la mirada por unos segundos.

-"¿Cuánto rato había pasado desde que quede encerrado en mis pensamientos?"

-"EL MALDITO PERGAMINO"-grito aquel demonio-

-"¡e-enseguida!"Recuerdo que lo dije con voz un poco titubeante. "No puedo mostrarme débil, no puedo, no puedo" esas palabras me las repetía todo el tiempo en la cabeza.

Estiré mis manos entregándole aquel pergamino, este me lo arrebato de las manos, como si fuera algo preciado, no dudo en ningún momento y lo abrió y empezó a verlo. Pude notar cómo me miro de reojo, en esos ojos solo se veía odio y venganza.

Retrocedí un paso.

"Tsk.." Aquel demonio que estaba al frente de mi, pude ver como frunció el ceño a mi acto.

Cuando termino de leerlo, o al menos eso creí yo. Que quedo mirando por un momento y se dio la media vuelta en signo de retirada.

-"¡ESPERA!"-grite-.

Se giró un poco al escuchar mi grito.

-"¿Qué mierda quieres?".Por un momento no pude creer que me haya contestado, dentro de mí no pude evitar sentirme feliz por eso.

-"¿Cómo te llamas?".Recuerdo que me miro algo enojado ante esa pregunta.

-"¿Para qué quieres saber mi nombre?"-me pregunto aquel demonio-.

-"Es solo curiosidad, al menos quiero saber a quién le entrego un pergamino entregado por mi padre Dios"

"¡Mentira!" Quería saber su nombre. Quería saber su nombre para saber quién era ese demonio del cual me llamo mi atención a primera vista.

_"Maldito mocoso". Dijo en susurro, pero lo pude escuchar tan claro como el agua. Me miró con esos ojos sin expresión alguna, y dio un suspiro, su mirada de enojo se había borrado un poco, por lo que pude notar, que hizo una expresión de suspiro.

-"Me llamo Rivaille. Soy el príncipe del inframundo hijo de los demonios más poderoso y temibles de todo el infierno".

Pude sentir como mi corazón se paró un momento al escuchar aquellas palabras. Abrí mis ojos de par en par, y baje un poco la mirada algo sorprendido.

"Estaba al frente de un príncipe".

Mi mama antes de morir me había contado muchas cosas, tanto fantásticas como reales, y una de ellas era que el ver a un príncipe demonio era casi imposible, ya que no los dejaban salir. Me había vuelto a encerrar en mis pensamientos, recordando cosas que mi madre me contaba de pequeño, eran historias míticas sobre nuestro mundo, sentí una respiración cerca mío por un momento había desviado la mirada, pero al sentir tal respiración me volví a encontrar con esos ojos escarlatas, cruzando miradas con sus ojos con los míos.

Estaba al frente mío y yo lo miraba desde arriba. Mi hermana adoptiva que miraba desde lejos, se exalto al ver aquel demonio tan cerca mío.

-"¿Y tu quien eres?" -Me pregunto aquel ser infernal-.

Espero que les haga gustado como dije antes esta es mi primera historia y en realidad siempre la había querido escribir pero no sé el porqué no lo hacía D: Acepto todo tipo de concejos :3 sin insultos por favor u.u