Disclaimer: Nada del mundo de Merlín me pertenece.

Este fic participa en el reto "Viñetas de emociones" del foro En una tierra mítica y en una época mágica.

Personaje: Mithian.


Ante todo, princesa


I. Envidia

Había salido de palacio montada en su corcel negro camino al pueblo.

Aquella mañana, había discutido, una vez más, con su padre,el rey Rodor de Nemeth. Los motivos fueron los mismos de siempre. A pesar de tenerlo todo, a Mithian le gustaba salir desapercibida. Se consideraba alguien simple, sin necesidad de tener tantos privilegios.

Al llegar al pueblo, dejó amarrado su caballo y comenzó a andar por las calles hasta llegar a un pequeño mercado que había colocado en mitad de una plaza. La princesa, oculta bajo su caperuza blanca, pasó por los puestos observando cada objeto con detenimiento.

Se quedó mirando a un niño pequeño que la observaba con detenimiento. Seguramente le sorprendía su vestimenta ya que él llevaba ropajes un tanto andrajosos. Mithian se agachó y le dio al niño dos monedas de oro; éste las sostuvo entre sus manos con los ojos como platos.

Una mujer, posiblemente su madre, cogió al pequeño y agradeció a la princesa su generosidad. Mithian contempló la escena durante un par de minutos. Observó cómo la madre le hablaba a su hijo de aquella manera tan suave. Por una vez en su vida, Mithian deseó haber podido estar así con su madre.