Esta historia está inspirada en un dorama que vi hace un tiempo, los personajes me parecieron muy adaptables a Katniss y Peeta que por supuesto pertenecen a Susanne Collins, así como los demás personajes que le tomé prestados y que yo no inventé.
En cuanto termine con ella podré deciros que dorama es por si lo queréis ver porque tiene realmente una banda sonora preciosa y es bonito, pero salvo las letras de las canciones y el esqueleto de la misma voy a contarlo a mi manera, no se si mejor o peor pero no voy a transcribir a los actores, así que deseadme suerte. Ya se que algunas personas están esperando por el ultimo capítulo de "Los ojos del chico del Pan" y prometo que estoy con él, sólo que nada de lo que escribo me parece aceptable de momento, y estuve un tiempo sin mucha inspiración, lo siento, dejadme "entrar en calor" ¿si?.
CAPITULO I - La horma de su zapato.
El parque de atracciones es un sitio para divertirse ¿no?, los globos, las risas, los helados… todo lo necesario para pasar un gran día, y el verano es el tiempo ideal para disfrutarlo, todos parecen estar pasándolo bien, pero… la chica que había conseguido un trabajo temporal para pagar su matrícula en la universidad no esta tan de acuerdo con ello.
El maldito disfraz de pájaro que su jefe le entregó el primer día está a punto de conseguir que se desmaye, además de ser algo ridículo, el calor que se acumula bajo la gomaespuma la hace sudar y la deja pegajosa cuando cada noche vuelve a casa. Katniss no soportaba la dichosa vestimenta ¿sinsajo? ¿se puede saber que pintaba un pájaro llamando la atención en una atracción de tiro con arco?
Al menos en agosto le permiten retirarse la máscara más a menudo, su jefe no quiere arriesgarse a una inspección por culpa de una chica tonta desmayada ¿cierto?.
- Dios por favor, mátame – el disfraz se estaba haciendo insoportable, solo faltaba el grupo de niños que se acercaban seguramente dispuestos a hacerla pasar un mal rato tirándole de las plumas o poniéndole la zancadilla, al menos de ellos podía defenderse ¿o no?.
De pronto todo el mundo de Katniss se puso negro y el poco aire dejo de entrar a través de las pequeñas rendijas de la cabeza del traje - ¿Qué pasa? ¿Quién ha girado el disfraz?
Solo risas y voces y unas manos en su cintura haciéndole dar vueltas sin parar – Para, déjame en paz, cobardes… - las risas se hacen más fuertes.
- Oh el pájaro sabe hablar – una voz que en otro momento podría haber resultado agradable se atascó como engrudo en sus oídos.
- Si, una bonita voz de pito - acompañó una segunda voz a la primera, mientras la cabeza de Katniss comenzaba a notar los efectos de tanto giro.
- Vamos, esto ha dejado de ser divertido – continuó la primera voz entre las risas de los demás chicos – además no quiero estar aquí cuando vomite, nos podría salpicar y arruinaría nuestra excursión ¿no? .
- Tienes razón Peeta – así que ¿ese era el nombre del desagradable ser que la había atacado? – ya nos hemos reído bastante, vayamos ahora a tomar algo ¿sí?
Con un empujón se siente echada a un lado, y trastabilla intentando no caerse por el mareo y el peso de su disfraz, en cuanto las pisadas comienzan a alejarse y haciendo un gran esfuerzo Katniss consigue agarrar la máscara y sacársela a tiempo de ver el aspecto de esos tipos que seguro son impecables – Me las vas pagar rubio del demonio – murmura la chica mientras les ve alejarse entre risas.
Poco a poco su cuerpo vuelve a ser normal, pero nadie se acerca a la chica con disfraz de ave con mirada de odio perdida frente a ella.
- Peeta eres un caso ¿lo sabes no? – el chico moreno reprende a su amigo – la pobre chica estaba trabajando.
- Bah – el rubio mira a su amigo con indiferencia y un deje de aburrimiento – esto es un parque de diversiones ¿no? , a mi me pareció muy divertido y no oí que te opusieras.
- Bueno al principio si, solo que –
- Marvel, déjalo ya, bebamos algo y olvida a la "chica pájaro" vamós ¡muévete!, me apetece conocer alguna chica agradable hoy – el castaño agacha la cabeza y asiente, Peeta no es mala persona, pero a veces su comportamiento no es el mejor.
Los tres amigos están sentados en una agradable terraza ahora mirando la gente pasar, las jóvenes de su edad, se ponen muy guapas en primavera y el espectáculo es agradable para los cuatro, Peeta Marvel, Tom y Cato van a pasar el resto de la tarde desplegando sus artes de seducción.
Katniss no se ha dado por vencida aún – Ese maldito bastado debe estar en alguna parte ahora - sus ojos buscan la cabellera rubia sin descanso se lo tiene que hacer pagar,
No puede quejarse ante sus padres, en teoría tiene que saberse defender de sobra, y tiene que trabajar, su padre es profesor de Judo en un colegio y la madre ama de casa, ellos no pueden pagar todos los gastos que tiene una estudiante de diseño gráfico, eso sin tener en cuenta que es su opción y ella se comprometió por no querer seguir los pasos de su padre, como su hermano, aun así todos los fines de semana tiene que practicar, y en el tatami es tratada como un estudiante más, aunque James le quita la mayoría de los porrazos, porque su padre es un profesor temible en la lucha, cinturón negro décimo DAN, una leyenda entre los maestros, compitió durante mucho tiempo antes de dedicarse a la vida tranquila de la enseñanza y fundar una academia.
Y Katniss no es una chica de la que uno se pueda burlar, algo que Peeta va a descubrir en apenas un momento.
La castaña se mueve con dificultad, cargando como puede la cabeza del disfraz a un lado y se planta tras el rubio que acaba de hacer su día aun más desagradable que de habitual, los muchachos se sientan en un banco cercano bajo la sombra de un gran árbol, Cato está consiguiendo unos refrescos en un puesto cercano mientras la conversación de nuevo vuelve a la "chica pájaro" que muy callada siente como sus labios tiemblan de ira.
- Has sido demasiado borde – comenta Marvel también de espaldas a Kat – la pobre chica está intentando trabajar.
- Bah, cuando te vistes como un pollo ¿Qué puedes esperar? - Peeta gruñe un poco antes de continuar – seguro que es una de esas que necesitan el disfraz aunque no trabajen. Le dará vergüenza enseñar su fea cara.
- Peeta, eres demasiado superficial –
- Eres un imbécil – suena tras ellos una voz conocida, Katniss no ha podido contenerse más.
Cato regresa en ese momento y se queda parado a su lado mirándola con curiosidad y todo hay que decirlo, una marcada diversión, portando las bebidas. Entonces pasa lo que ninguno de ellos esperó, justo en el momento en que Peeta, Marvel y Tom se giran sorprendidos, Katniss alcanza un vaso que tentadoramente ha quedado a su alcance y lo arroja sin pensar, ante la atónita mirada de todos.
- Estúpida ¿Cómo te atreves? – la voz de Peeta resuena tras ella mientras se gira y sale de allí como puede, los niños se ríen alrededor del rubio.
- Pelea de novios, pelea de novios – canturrean sin parar.
- Maldita sea, ven aquí "chica pájaro", mi ropa está inservible, hazte responsable.
- ¡Ja! – exclama Katniss sin girarse del todo – tenías razón de una chica que viste como un pollo nada bueno se puede esperar – con un gesto audaz le lanza un beso con el dedo corazón mientras se aleja del lugar.
- ¡Mierda!, me las vas a pagar – murmura entre dientes Peeta mientras aguanta las risas de los demás –
- ¡Vaya! – comenta Cato – parece que Peeta Mellark ha topado con la horma de su zapato, una chica se te resiste al fin.
- Calla –
- jajajaja, en serio Peet, no creí vivir para ver este día –
- ¡calla! – insiste el rubio que echa humo por las orejas casi de forma literal –
- Ok, ok, pero reconoce que tiene agallas –
La mirada de Peeta a su amigo es casi negra un tono que no suele verse en sus ojos color azul cielo – dame algo para secarme y vámonos – unas pocas servilletas de papel le sirven para eliminar el refresco de su cara mientras piensa en la maldita chica que le ha puesto en su lugar y en algún momento ¿ha pensado que es bonita?, ¡mierda Mellark! Que está pasando contigo, la odias ¿no es verdad?.
Pero de nuevo esos ojos grises se muestran en su cabeza con claridad, esa boca carnosa color cereza, ese pelo castaño que brillaba por el sudor y siente que ha perdido antes de batallar, Cato tiene razón, no es como las otras, algo brilla en su interior, se marchan sin decir una palabra, pero al entrar en su cuarto una segunda sonrisa se instala en su cara, la primera apareció en el primer momento en que vio un Sinsajo.
Bueno ya se que es cortito, pero me gustaría saber que pensais XD. Gracias a todos los que me tenéis en favoritos y en follow espero responder adecuadamente a vuestro interés.
besitos.