Hellow!
Bueno, este es mi primer fic hecho en Fiction y espero que les sea de agrado. Además, le he realizado unos ajustes de formato... Ah! No los entretengo más...
Y cualquier duda, comentario u opinión, adelante. No se las guarden, y exprésenla!
SENTIMIENTOS DE AYER
Capítulo 1- La Reunión
Anko Mitarashi despertó sobresaltada y se sentó erguida. El sudor cubría su rostro y su pelo lila pegado a su cuello, estaba allí temblando y llorando. Su cabeza le palpitaba y se sentía enferma. La marca de maldición comenzó a impulsar de repente y ella gritó de dolor cubriendo su hombro con una mano sudorosa. Se levantó de la cama balanceándose ligeramente y se dejó caer de rodillas abrazándose a sí misma.
- "¿Cuándo terminará esto?"– se pregunta.
No era la primera vez que las pesadillas le causaban mucho mal. Estaba acostumbrada a ello pero se sentía cansada de tener que despertar todas las noches con miedo y temor de que la marca se apoderara de ella. El no recordar nada le frustraba, se presentía como un libro al que la faltan páginas. Entendía que nunca sería libre de la marca de maldición.
- "Orochimaru-sama, ¿Por qué, por qué hace esto?"-
- "Anko, no tienes lo que necesito, eres fuerte pero aún te falta tener sangre fría y tu odio debe correr por todo tu cuerpo"-
- "Orochimaru-sama"-
- "Siempre se lleva esta marca de maldición, siempre… siempre"- la voz se desvaneció en la nada.
Había mantenido esa horrible verdad y nunca se había abierto a cualquier persona antes de su terrible experiencia. Anko podía sentir que el sueño empezaba a dominarla y trató de levantarse pero sus piernas les tambaleaban e intentó sentarse de nuevo. En pocos momentos quedó profundamente dormida.
El sonido del despertador hizo un eco a través de su departamento. Finalmente, abrió sus ojos buscando al reloj. Ocho de la mañana. –"Llegaré tarde"- gritó y se dirigió al baño ignorando el dolor leve de su marca. Iba a llegar tarde a la reunión de chunins y jounins, si no se daba prisa. Por suerte, se desvistió rápidamente dando vueltas en el agua de la ducha. Se sentó y permitió que el agua caliente calmara su dolor en el cuello. Se quedó allí por un momento, permitiendo que el agua caliente corriera por su cuerpo. Finalmente, ella se convenció de cerrar la llave para terminar de alistarse.
No quería ir pero le había hecho una promesa a su mejor amiga Kurenai que iba a asistir. Salió fuera de su departamento cerrando la puerta detrás de ella. Se abrió paso rápidamente por el pasillo y las escaleras, tomó una aspiración del aire fresco y suspiró. De repente, sintió una mano en su hombro izquierdo. Señaló un puñado de shurikens y dio la vuelta con intención de lanzarlas, era nada más y nada menos que el marciano verde de Maito Gai.
-"Buenos días Anko, como siempre usted tiene muy buenos reflejos"- le levantó un pulgar hacia arriba y una de sus estúpidas sonrisas.
Anko suspiró –"Cuándo dejará de hacer esas estupideces"- dijo para sus adentros. –"Buenos días Gai"- dijo cortésmente, tratando desesperadamente poder escaparse pero no lo logró. Ella guardó sus shurikens dentro de su abrigo. Giró y echó a andar de nuevo con la esperanza de que Gai no la siguiera, Él no se dio cuenta por idiota, saltó después y se puso a caminar a su lado.
-"Es un hermoso día, ¿no?"- la preguntó.
-"Uh-Huh"- ella contestó.
Caminaron en silencio todo el camino. Bueno, en realidad Anko caminó en silencio todo el camino. Gai alardeaba una y otra vez sobre su última misión y lo increíblemente maravilloso que era. Cuando llegaron a la torre Hokage, Gai se puso delante de Anko y abrió la puerta para ella.
-"Gracias"- ella murmuró
-"No hay de qué mi juvenil amiga"- dijo con una de sus ridículas poses. En ese instante Anko tomó un poco de aire y suspiró.
Una vez dentro ella se deshizo de él y suspiró de alivio al hacerlo. Inmediatamente se abrió paso entre la multitud y logró dirigirse a una esquina apoyándose contra la pared y contempló la escena ante sus ojos. Genma y Shizune estaban de pie cerca del frente hablando en voz baja. Shizune miró un poco avergonzada con un leve rubor evidente en sus mejillas. Gai estaba hablando con Asuma, el pobre tenía la cara de espanto con su típico cigarrillo a punto de caer al ver las horribles poses de su compañero jounin. Ibiki conversaba con Yugao y Ebisu, relativo a la nueva formación de los escuadrones Ambu.
-"Buenos días Anko"- una voz dijo de repente. Se dio la vuelta, era su mejor amiga.
-"Ah! Buenos días Kurenai"- le contestó.
-"Al parecer todos ya están aquí con excepción de Kakashi. Conociéndolo, probablemente va a llegar tarde como siempre"- respondió.
-"Mmm..."- murmuró Anko.
-"Anko, estás muy distraída. ¿Te sucede algo?"- le preguntó su amiga un tanto preocupada.
-"No, no es nada Kurenai, no te preocupes"- le dijo y sonrió.
-"¡Hola chicas!"- dijo el propio Kakashi.
-"Como siempre llegas tarde"- dijo una Kurenai un poco enojada.
-"Eh! Lo siento, creo que me perdí por el camino de la vida"- dijo con la mando derecha detrás de la cabeza y la otra en el bolsillo de su pantalón.
Anko frunció el ceño –"me pregunto porque siempre llega tarde. ¿Qué oculta? ¿Por qué rayos me importa? Acaso será… no. Debo alejar esos pensamientos de mi cabeza. Por ahora mi único objetivo es destruir a ese maldito de Orochimaru"- se dijo a sí misma. –"No puedo darme ese lujo"- murmuró.
-"Mmm… ¿Dijiste algo?"- Kakashi preguntó.
-"Ah! No nada. Sólo me preguntaba el por qué de esta reunión, eso es todo"- le dijo un poco nerviosa.
-"No tengo la menor idea"- respondió Kakashi con el tono suave que le caracteriza.
El nivel de ruido en la sala iba en aumento debido a la llegada de otros shinobis. La marca de maldición de Anko latía en respuesta al alboroto. Ella hizo una mueca y su mano se cerró sobre él. Kakashi la miró bruscamente, una mirada clara de preocupación se disipó en su único ojo negro visible pero antes de poder hacer cualquier pregunta, la voz fuerte y un poco de miedo de Lady Tsunade llenó la habitación.
-"Bien es suficiente, todo el mundo encuentren un asiento"- gritó dominando fácilmente el ruido. Hubo un raspado en las sillas cuando todos encuentran asiento. De alguna manera, Anko se encontró en medio de Kakashi y Gai.
Tsunade se aclaró la garganta, la convocatoria a la atención –"Voy a ir directo al punto"- dijo cruzando los brazos –"mañana se realizarán los preparativos de la fiesta en conmemoración a nuestros ninjas que se celebra cada año"- un murmullo llenó la sala, la alegría era evidente en los rostros de muchos.
Anko se puso rígida en su silla –"Es evidente que utilizará esta excusa para escapar de sus obligaciones"- pensó.
-"El motivo principal de esta reunión es para informarles que todos"- prosiguió haciendo énfasis en la última palabra –"sin ninguna excepción deberán asistir de lo contrario, se atendrán a las consecuencias. Shizune permíteme"- señalando una lista que la joven ninja tenía en sus manos. De inmediato comenzó a examinarla –"Veamos, Mmm… Shizune, Kurenai y Anko. Ustedes tres serán las encargadas de organizar la fiesta"-
-"¿Eh?"- Anko gritó.
-"Así es. ¿Hay algún problema con las asignaciones?"- preguntó Lady Tsunade.
-"No pero…"- empezó a decir antes que la Hokage la interrumpiera –"Entonces todo está dicho, así que lo dejo en sus manos, tengo total confianza en ustedes"-
-"Hai"- dijeron las chicas.
-"Ah! Por cierto, todos deberán asistir formalmente"- todos los presentes fruncieron el ceño –"ya pueden retirarse"- concluyó.
Anko estaba desconcertada con la actitud tomada por la Hokage que no se había dado cuenta de que la gente se mueve dejando el edificio. Suspiró –"¡Siempre hace lo mismo! Debería tomar más en serio su rol de Hokage, se supone que ella debe encargarse personalmente de esos preparativos o por lo menos opinar al respecto"- pensaba mientras se dirigía a la puerta.
De repente, Shizune y Kurenai interrumpieron sus pensamientos.
-"Oye Anko"- dijo la chica de cabellos y ojos negros –"Como somos las encargadas del evento que les parece si vamos a comer algo y platicamos"-
-"Me parece bien"- contestó Kurenai –"¿Y a ti?"-
-"A mí también aunque organizar una fiesta no es mi fuerte"- Anko siseó.
Las chicas sonrieron al unísono y comenzaron a caminar hacia un restaurante de dangos dejando a Asuma como tonto, un Kakashi confundido, a Genma como idiota y a Gai aturdido –"Al parecer no se dieron cuenta que estábamos detrás de ellas"- dijo nuestro querido marciano verde.
-"¿Qué dicen si vamos a comer barba Kiu?"- preguntó Asuma a sus compañeros jounins los cuales asintieron levemente.
¿Les gustó?
Si no es así, acepto sugerencias!
