Rachel se despertó. Estaba sentada sobra uno de los pufs de la biblioteca de su colegio. Parecía que todo volvía a ser normal. El cielo estaba despejado y sin niebla, y ya no estaba todo oscuro. No tardó en darse cuenta de que Raze estaba sentado al lado suyo.
- - ¿Estás bien?
- - Sí, creo – dijo dudosa, y vio que tenía rascazos en los brazos y piernas.
- - Siento que te haya pasado todo esto, pero…Bueno… Mejor empiezo desde el principio.
- - Te escucho.
- - Bueno… Seguro que has oído hablar de una especie de historias urbanas, sobre asesinos, fantasmas y demás…
- - Si, algo he oído. Últimamente se habla mucho de eso.
- - Bien, pues… digamos que son reales.
- - ¿Qué?
- Déjame seguir – suspira – Bueno. Toda persona que ha llegado a convertirse en un ente sobrenatural, o fantasma en pena, etc., están retenidos en una dimensión paralela a la nuestra, pero a veces escapan, como mucho un par de días, ya que ahí apenas pasa el tiempo, pero… De alguna manera, la barrera se está rompiendo y esas criaturas están saliendo. Hay una serie de guardianes esparcidos por el mundo, nos hacemos llamar Guardianes de las almas.
- - ¿"nos"?
- - Yo soy uno, mi hermana Kalia y tu también-dijo Raze bajando la cabeza.
- - Me da que te estás equivocando…
- - Si, ya. ¿No recuerdas lo que hiciste ahí abajo? Esa luz salió de tu mano. Y eres muy fuerte.
- - Me estás diciendo… ¿Qué tengo una especie de poderes de luz y formo parte de una serie de personas, como una secta, encargadas de proteger el mundo de asesinos y fantasmas de otra dimensión?
- - Algo así. Pero son de esta dimensión, lo que pasa es que los encerramos en otra.
- Se acabó.
Rachel se levantó, con un poco de dolor por sus heridas y salió de la biblioteca. Raze le siguió.
- - ¡Espera! ¿Adónde vas?
- - ¿No es obvio? A casa. Seguro que ya es muy tarde. Y estás loco.
- - Todo lo contrario. Aún hace 1 minuto que se fue el autobús - Dijo sonriendo Raze.
- - ¿Eh?
- Cada persona pertenece a un linaje con un poder distinto. Yo soy del linaje de la Seguridad y Electricidad, mi hermana Kalia a la del Coraje y Fuego,jeje, digamos que puedo detener el tiempo, como mucho unas 2 horas.
- - Ya, ya, claro. ¿Y yo de que linaje soy? – respondió sarcásticamente Rachel.
- - Por lo que he podido ver, debes de ser de un linaje parecido al de la Esperanza y Hielo, ya que se activó en el último momento junto a un montos de copos helados.
- - Esto… mira, paso.
- - He, ¡espera! Necesito tu ayu…
Se quedó callado con cara de susto. Rachel se giró sorprendida. Luego,Raze frunció el ceño.
- - Hay uno más… Pero… ¿cómo no lo vi antes?
Entró corriendo otra vez al instituto. La chica se quedó quieta, dudando si seguirle o no. Suspiró.
- - Por qué hago esto…
Dio media vuelta y volvió al colegio.
