Disclaimer: Mira J.K. sé que TODOS los personajes te pertenecen y, por lo que a mí concierne quédate con Harry y con Ron pero ¿Podrías por favor regalarme a Theodore Nott y Blaise Zabini?
Libro: Harry Potter VI
Capitulo: Plata y Ópalos
Patético
Fue tu primer pensamiento al ver a Potter entrar, hecho una furia al local. Te preguntaste vagamente qué le había molestado aquella vez, lo observaste a lo lejos, estaba rojo de rabia y tenía los puños apretados, parecía un animal muy feo a punto de explotar. Era exasperante y vergonzoso, casi tuviste ganas de decirle que la ropa sucia se lavaba en casa, casi.
Decidiste centrarte en algo más agradable como las piernas de Bell, debías admitir que para ser una Gryffindor tenía todo bien puesto en su lugar, si no fuera por esa mirada vacía que observaba a la nada hubiera resultado medianamente atractiva.
Sonreíste de medio lado, por lo que a ti concernía Malfoy era un idiota o estaba realmente desesperado, no podías creer que él realmente creyera que hechizando a esa Gryffindor lograría acabar con el anciano favoritista que se hacía llamar su director, viste como Potter y su séquito de perros falderos se marchaban del lugar tras Bell y su amiga.
Todo sea por la causa, pensaste aunque en realidad creías que jurar lealtad a algo era completamente impráctico, aún cuando disfrutaras del sufrimiento de Malfoy también le... compadecías por decirlo de alguna manera, un poco, solo un poco.
No, mentira, lo único que creías es que se lo tenía muy merecido por ser un completo gilipollas, aun cuando aquella marca en su antebrazo izquierdo fuera un símbolo de superioridad al menos según las, poco sabias, palabras de los mayores no deseabas, al menos de momento, lucir una tú, demasiada responsabilidad y aquello no iba contigo.
Terminaste tu cerveza de mantequilla de un trago y subiste el cuello de tu capa, saliste de la taberna, preferías enfrentarte al temporal que estar un minuto más en aquel inmundo lugar, además sería interesante ver en primera fila como el plan de Malfoy fracasaba.
