Comentarios: Viñetas escritas para la comunidad de livejournal 10pairings y del cual elegí como personaje a Fran (por ser mi segundo personaje favorito del Manga y por enojo que no recibe amor mi niño o.ó)
Los personajes no son de mi propiedad, si no serian mucho menos geniales y diez veces peor dibujados UU, pertenecen a Akira Amano (la cual ESPERO vuelva a hacer aparecer a mi niño :333333)
Parte del Gekokujou :3 *chiste, chiste*
Advertencias: Tendrá insinuaciones de yaoi, yaoi y estará en el rating T por si se me ocurre poner un lime (que no creo, pero mejor prevengo por si me viene la inspiración divina (jaaa si claro))
Superhéroe.
No es que Squalo le agradara más que el resto de los Varia, pero aun así Fran prefería pasar su tiempo libre a lado de él. Claro que el hecho de que el Príncipe idiota de Bel y el pervertido ignorado de Levi, se contuvieran un poco de querer asesinarlo cuando estaba con el segundo al mando de los Varia, influía ligeramente en su decisión.
Cuando salían a misiones, Fran buscaba terminar en el equipo que incluyera a Squalo, porque estaba completamente seguro que si se iba con alguno de los otros miembros sin el espadachín con ellos, regresar a la mansión en una pieza iba a ser toda una proeza. Y quitarse cuchillos de la espalda, esquivar balazos, acosos y paraguas eléctricas no era algo que le entusiasmara hacer. Puede que Squalo le gritara como todos –o gruñera, como era el caso de Xanxus-, pero al menos no había intentado atravesarlo con su espada… todavía.
Además, Squalo lo mantenía con vida por, según las palabras del espadachín, lo problemático que seria buscar a alguien que lo reemplazara en su puesto y, a pesar de que no era con lo mejor de los sentimientos, eso le bastaba a Fran para sentirse tranquilo y protegido a lado del de cabello gris. Rodeado de tantas mentes desequilibradas que lo querían borrar del mapa en el primer descuido que cometiera era ligeramente agradable saber que alguien en esa mansión de locos quería que siguiera respirando y que lo protegiera, a su muy extraña manea de hacerlo.
-Vooooi ¡¿se puede saber que me estas viendo?- gritó Squalo viendo fijamente al ilusionista que no le había quitado la vista de encima desde que salieron de la mansión.
Fran, bastante acostumbrado ya a la estridente voz del otro y a sus gritos innecesarios, le dio una larga mirada para después fijarla al frente sin cambiar su expresión.
Squalo sintió una vena palpitar en su sien y el impulso de atravesar con su espada al otro fue mas fuerte que nunca. Si ese niño era de lo más insufrible y desesperante y, la idea de reemplazarlo, ahora resultaba muy tentadora.
Aspirantes había muchos, puede que no tan hábiles pero seguro serian mucho menos estresantes. Además, existía la posibilidad de que se encontraran con uno que fuese mudo y, después de conocer a Fran, eso seria completamente excelente.
-Solo pensaba que, de una muy retorcida forma, eres una extraña clase de superhéroe.
Y Squalo solo bufó molesto, bajando el brazo que tenia la espada y que ya apuntaba a la cabeza del de cabello verde y le gritó que se apurara mientras Fran en su eterno plano tono contestaba con un "Haiii"
