Disclaimer: Ni soy inglesa, ni soy lo suficientemente cruel como para asesinar a Fred, así que estos personajes no me pertenecen.
Este fic participa en el mini-reto de abril para "La Copa de las Casas 2014-2015" del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black.
ODIO
Lo odio. Sí. No hay ninguna otra palabra que exprese lo que siento hacia él mejor que esa. No hay sentimiento mejor acertado para referirme a Ronald Weasley.
Lo odio porque con sus primeras palabras ‒ ¿Hermione, compraste ese monstruo?‒ firmó una sentencia de enemistad eterna. Porque, al poco tiempo de conocerme, se atrevió a acusarme de asesino, aún siendo él el idiota que metía un mortífago en su propia cama.
Lo odio porque el primer llanto que vi en el rostro de la persona más especial que he conocido fue causado por su culpa. Porque, después de esas lágrimas, le siguieron otras muchas; siendo él de nuevo el motivo. Porque aún siendo yo su pañuelo de lágrimas, era él quien se llevaba todos los suspiros y la mayoría de atenciones por parte de ella. Porque ni si quiera era capaz de verlo, con lo evidente que podía resultar incluso para una mascota como yo.
Lo odio por ser incapaz de disimular sus celos, por todas y cada una de las miradas cargadas de envidia que es capaz de lanzar cada vez que ronroneo entre los brazos de ella. Lo odio porque fue capaz de romperle el corazón, y no se dio cuenta de ello hasta meses después. Porque llegó a conseguir que ella lo olvidara tan solo con un par de frases recomendadas por un libro, casi tan estúpido como él.
Lo odio porque todavía se esconde detrás de ella cada vez que una araña se convierte en mi cena. Porque a pesar de eso, él, con ese cabello pelirrojo que tiene tanto que envidiar al mío, me ha arrebatado el título de héroe ante sus ojos, aun teniendo la capacidad emocional de una cucharilla de té.
Lo odio porque él le prometió una vida entera a su lado, y ella aceptó olvidando que yo le podía prometer seis más.
Lo odio por muchas cosas, pero; sobre todo, lo odio por hacer que se me olvide odiarlo cada vez que hace que ella sonría. Porque por mucho que me gustaría que no fuera así, es el único que consigue que sus ojos brillen de la misma manera que brillaban el día que, de entre todos esos animales desamparados que anhelaban un nuevo hogar y una nueva familia, me eligió a mí para formar parte de su vida.
N/A: Bueno, esto ha sido complicado, nunca me habría planteado hacer un fic desde el punto de vista de una mascota, y precisamente por eso lo entrego el último día con prisas y ,en fin, así.
Supongo que algún día acabaré contenta con algún fic del reto, espero que sea pronto.
Dar por supuesto también las gracias a Kristy por betearme.
Y eso es todo, nos leemos :)
