Mi pequeña Estrella

By Lluna/Tsuki Kori Saishi

llllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllCambio de día

Letras en cursiva son pensamientos


Cambio de lugar y/o tiempo

1.Una tarde, un parque, una cancha, un chico y una chica.

Kaede Rukawa, el chico mas frió, insociable, solitario y enigmático de todo Japón, estaba, como todas las tardes al terminar el entrenamiento, practicando en la cancha de un parque a medio camino entre su apartamento y Shohoku.

Cuando estaba practicando triples apareció una chica en la esquina de la cancha. Rukawa se encontraba apunto de lanzar el balón a la canasta cuando se percato de su presencia. La chica iba vestida con una camiseta a rallas y otra negra con unas letras blancas que dicen alcatraz, unos pantalones negros muy ajustados a sus caderas pero muy anchos de tobillo¿muy acampanados¿Se llama así? y deportivas. No lo pudo evitar y fallo el tiro, aquella chica lo havia dejado embobado. La pelota golpeo el tablero a medio metro del aro y cayo cerca de la chica. Cogió el balón y se acerco al moreno que se la miraba atónito.

-Es preciosa -es el único pensamiento claro que tenia en ese momento. No era japonesa. Tenia el pelo muy largo, un poco mas de la cintura, castaño claro. La piel blanca como la nieve parecía ser extremadamente suave, aterciopelada. Los ojos pintados de negro que realzaba el color esmeralda. Unos labios rosados y carnosos con una pequeña pero tierna sonrisa que invitaban a ser besados.

Al aproparse el viento izo que su pelo se moviera de un modo muy sensual.

Él seguía parado en el mismo lugar (cualquiera que le conociera hubiera dicho que se havia vuelto a que dar dormido de pie y con los ojos abiertos).

La chica se paro ante él y le extendió la pelota.

Creo que es tuya.

Gracias.

Iba a preguntarle que hacia allí cuado vio que llevaba una pelota de básquet bajo el brazo. Al cavo de unos segundos su cerebro consiguió llegar a la conclusión (sin necesidad de preguntárselo) que había ido a hacer unos tiros.

¿Quieres compartir canasta?

No, no. Soy muy mala, y tan solo te molestaría.

Seguro que no eres tan mala como eso.

Jeje, en realidad desde hace años que no juego al baloncesto. Así que mi nivel esta bajo mínimos.

Como quieras, si quisieras yo te podría ayudar.-dijo Rukawa lanzando desde la línea de tiros libres.

Mejor hoy no. Se acerca tormenta, o como mínimo un cambio importante de tiempo.

...¿-recoge la pelota y mira la chica que miraba el suelo. -¿un cambio de tiempo? Si por la tele anunciaron que seguiría el buen tiempo.- levanto la mirada y como si pudiera leer la pregunta en la mente de Rukawa le responde

Es que tengo un problema en las rodillas y cuando me duelen es que se avecina un cambio de tiempo... -su mirada se torno triste y la desvió añadiendo con otra media sonrisa como la anterior- soy mas fiable que los meteorólogos y sus aparatitos, y nunca me estropeo...

Rukawa quería decir algo para reconfortarla ya que se le notaba un deje de tristeza. Era un especialista en intuir los sentimientos de los que, como él, intentaban ocultarlos de las miradas indiscretas. Más no se le ocurría nada.

Perdona, soy una estúpida siempre hablo mas de la cuenta.

¡No digas esto! Por cierto, me llamo Kaede Rukawa. ¿Y tu?- Dijo extendiéndole la mano.

Estel Llumis Camp, encantada.

Perdona, pero... ¿cual es tu nombre?

Es que en mi país tenemos primero el nombre, el mío es Estel, luego el apellido del padre Llumis y finalmente el apellido de la madre Camp.

¿Así que te llamas Llumis?

Por favor llámame por el nombre, Estel.

De acuerdo Estel, entonces llámame Kaede.

Mucho gusto Kaede.

Paso un par de horas en las cuales Rukawa tiraba triples y Estel lo observaba y analizando su juego. Cuando se levanto.

Ya es tarde me tengo que ir.

¿Ya?

Si es que estoy a medio trasladarme.

Hablas muy bien el japonés. ¿Tienes parientes japoneses?

Gracias. No ninguno. Bueno, hasta la vista.

¡Hasta la vista!

Rukawa estaba embobado mirando la chica marcharse. -¡A¡ Va un poco coja! Es verdad que dijo que tenia problemas en las rodillas. Espero que no sea nada grabe.-Se giro para lanzar un par de triples antes de marcharse cuando recordó- !Mierda¡No le pregunte donde vivía, ni si vendría por aquí, ni el teléfono! Genial Kaede Rukawa acabas de conocer una chica guapísima, simpática,... un ángel caído del cielo y no sabes si volverás a verla. Definitivamente eres un perfecto estúpido.-

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Hola! Espero de todo corazón que os interese y os guste. Es mi primer fanfic y no estoy muy segura de que sea de vuestro agrado. Disculpad por las faltas y si hay algo que no entendáis no dudéis en preguntarme porque no hablo nunca en castellano y puede que diga cosas o expresiones de mi idioma sin enterarme. ‚" Soy muy mala con los idiomas..

Ya lo olvidaba... slamdunk no es mio! Y esto no lo ago con animo de lucro... todas estas cosas...