-¡¿Cómo ha sido?!- Derek no paraba de andar de un lado a otro del pasillo.-¡¿Qué coño a pasado Isaac?
-Tuvo un accidente de coche.- Isaac estaba sentado en una de las sillas, intentando que Derek mantuviese la calma, no era tarea fácil.
-¡¿Por qué no me habéis avisado antes?!
-Creímos que era más importante llamar antes a su padre y esas cosas…- No levantaba la voz, él sabía que solo empeoraría las cosas, al menos así era con su padre.
Derek se mordió el labio para evitar gritar, por fin se dejó caer sobre la silla junto a Isaac, se llevó una mano a la frente y la pasó por toda su cara, cerró los ojos y pareció esconderse de sus propios pensamientos.
-De todas formas ¿por qué te pones así?- Se arrepintió de preguntar, no quería que Derek volviese a ponerse a gritar, no quería llamar la atención.
-No sé.
-Claro…¿Has tenido un mal día no?
-Cállate.
-¿Por qué te preocupa tanto?
-¡¿Qué por qué me preocupa que Stiles esté en coma?!- Isaac sonrió, había hecho que Derek volviese a gritar y eso no le gustaba, pero también iba a conseguir que le dijera el porqué.-Porque…-Había vuelto a un tono más bajo.- Él es mi par.
-¿Tu par?
-Ya sabes algo así como "alma gemela", pero menos estúpido.
-¿Por qué no se lo has dicho?
-"Oh, hola Stiles, sabes eres mi pareja predestinada"-Derek miro a Isaac con sarcasmo.
-Cuando Stiles despierte, que lo hará, vas a decírselo.- Le miró directamente a los ojos.- Y si no te daré una buena paliza.- Retiró la vista e hizo sus ojos rodar, evitó ver la mirada de advertencia barra amenaza de Derek.-Puede que no te de una paliza, pero Allison te disparara unas cuantas flechas de esas que tanto nos gustan a los lobos.
-Lo pillo.- Murmuró él.
-Ahora podrías pasar a ver a Stiles…
-Pero esta Scott… Y- Isaac llegó a ver como los ojos de Derek estaban llenos de lágrimas, no había llorado desde que había llegado al hospital, pero sí lo había hecho antes, estaba seguro.
-Seguro que su madre te deja pasar, y seguro que Scott entiende que quieras verlo si le dices lo que me has dicho a mí.
-Scott ya lo sabe.
-¿Qué pasa que yo no soy de la manada?- Murmuro Isaac.- A mi no se me cuenta nada…- Masculló.
Derek no respondió a sus comentarios, se levanto y se acerco a Melissa.
-Perdón, pero me gustaría pasar a la habitación de Stiles.
-Ya, ¿sabes? Creo que no.- Respondió la mujer, que estaba intentando consolar al sheriff.
-Por favor, necesito pasar a verle.- Derek jamás había mirado a nadie de esa manera, la súplica se veía tatuada en su rostro, las lagrimas aun humedecían sus ojos y su boca estaba torcida en una falsa expresión de seriedad, intentando ocultar lo roto y solo que se sentía en ese momento.
-Un segundo.- Le dijo al padre de Stiles, que estaba sentado en una de las sillas, y se giro hacia Derek viendo el panorama.
Le costó un par de segundos dar su sentencia final, miro al lobo directamente en los ojos, no veía el mínimo rastro de amenaza que solía caracterizar su mirada.
-Maldita sea.- Murmuró.- ¿Estas enamorado eh? Una mujer ve esas cosas, y tener un hijo adolescente también ayuda.- Derek no respondió.- Pasa.
-Gracias.- Intentó sonreír, pero sus labios no llegaron a formar la sonrisa.
Derek entró a la habitación, lo primero que vio fue a Stiles en la cama de hospital, tapado por una fina sabana, con puntos en su cabeza y los ojos cerrados, su expresión era de serenidad, se preguntó cuánto tiempo llevaba Stiles sin sentirse así, sereno, sin preocupaciones, posiblemente desde poco después de que se conocieran en el bosque.
Últimamente Stiles había perdido su chispa de indiferencia ante los problemas el "soy un fan de ignorar los problemas hasta que desaparecen" ya no estaba entre sus frases, seguía bromeando, seguía haciéndolo porque todos necesitaban una broma, un poco de ironía de vez en cuando, pero Stiles ya no se reía por dentro, ya no tenía ilusión en su mirada, estaba cansado, ya no quería aventuras, no quería su vida y la de la gente que le importa en peligro constantemente, no quería tener que despertar un día para enterrar a su padre, o a Scott, rezaba porque no fuera Lidia.
Y Derek parecía ser el único que se había dado cuenta de ello, de cómo Stiles había cambiado.
Volvió a la realidad, vio a Scott sentado en un sillón junto a la cama de Stiles, Scott le miro de vuelta.
-Hola Derek.
-Scott.- Dijo en respuesta, se acercó a la cama.
-Los médicos dicen que se pondrá bien, no saben cuando despertara, pero hay como un noventa por ciento de posibilidades de que lo haga.
-¿Y si no lo hace?
-Entonces… Bueno.- Scott no termino la respuesta.
-Me gustaría quedarme con él.
-Me lo imaginaba.- Scott se secó los ojos, había estado llorando al lado de Stiles, seguramente le habría hablado de cuando eran pequeños, de cuando se conocieron, de cómo le ayudo cuando paso lo de su padre y más aun cuando se convirtió en hombre lobo, le habría dicho que era su mejor amigo, se habría echado las culpas del accidente, y le habría pedido que despertase, pero Stiles no había hecho nada, mantenía su expresión de calma, esa calma que tan mal le sentaba.
Scott se levantó y se paró frente a Derek, no dijo nada durante unos segundos, pero al final decidió hablar.
-Derek, si no llega a llamarle Stiles no llega a coger el coche hoy, la culpa a sido mía.- No dejó responder a Derek.-No intentes culparte.- Continuó.- Pero como cuando despierte no le digas que lo quieres, hare que tú acabes en esa cama.- Scott no bajó la cabeza, continuó su camino hacia la puerta, Derek no se giró para verle salir, escuchó cómo se sentaba junto a Isaac y volvía a secarse las lagrimas.
Se acercó al sillón donde Scott había estado pero no se sentó, lo movió para que estuviese aun más cerca de la cama, cogió la mano de Stiles y se sentó dejándola sobre sus piernas con la palma boca arriba.
-Maldita sea Stiles.- Comenzó a hablar, se sentía extraño hablando solo pero quería hacerlo, ¿le podría oír Stiles?- ¿No sabes que hay que llevar el maldito cinturón siempre?- Colocó una de sus manos bajo la de Stiles.-Sabes si te pasara algo, si… si…- Derek no quería decir esa palabra.- Si no despertases no podría soportarlo, me volvería loco.- Comenzó a hacer dibujos sobre la palma de Stiles, nada complicado, unas rayas, unas ondas, un circulo…- Cuando… Cuando te vi, lo supe ¿sabes? Desde ese momento supe que eras mi par.- Un cuadrado, un triangulo…- Pero pensé, "Imposible, es un idiota, no sabe cuidar de sí mismo, no piensa, es un humano, ni siquiera sabe que los hombres lobo existimos y encima es un cobarde"- Una espiral, un circulo, otra espiral…- Pensaba "Odio todo de ti, entonces ¿Por qué te quiero?" Pero pasó algo, entonces te conocí, te conocí de verdad me refiero, comencé a darme cuenta de lo jodidamente inteligente que eres, de cómo te esforzabas paraqué todos estuviesen bien, de cómo cuidabas de Scott, de que eras lo suficientemente valiente, y estúpido, para plantarme cara.- Un par de líneas, una "s" otra espiral…- Para plantarme cara, como dejaste de tenerme miedo, fuiste la primera persona que no me tenía miedo en mucho tiempo.
Derek echó la cabeza hacia atrás y suspiro, después volvió a centrarse en la mano de Stiles, no podía mirarle a la cara, le ponía nervioso no poder ver sus ojos tan despiertos y llenos de vida como siempre.
-Y entonces empezaste a caer, me fije, creo que soy el único que se ha dado cuenta, sigues haciendo bromas, pero no quieres, te esfuerzas para hacer sonreír a los demás, pero a nadie le importa que tú sonrías, ¿eso sientes verdad?, bueno, es mentira, yo quiero que sonrías.- Continuó con los dibujos, esta vez más complejos, una casa, su chimenea…- Quiero que te recuperes de esto, y cuando eso pase no quiero volver a verte en una cama como estas, quiero que vuelvas a ser feliz, me gustaría, me gustaría que jamás hubieses entrado en este mundo, aunque no llega a conocerte.- Dejó de dibujar la casa, hizo una "z" como intentando tacharla.-Creo que todo hubiese sido mucho más fácil si no llega a conocerte.- No reprimía sus lagrimas, no paraban de caer por su rostro.- Mucho más fácil, no llega a sentir esto, es horrible te lo aseguro, y tú… Tú no llegas a estar aquí, pero… A la vez siento que si no llega a conocerte.- Se mordió el labio, agarró con fuerza la mano de Stiles y no dijo nada más.
Dejó su mano sobre la cama y se levantó, dio un par de vueltas por el cuarto, secándose las lagrimas.
-¿Qué te parece si pongo la tele?- Nadie respondió, encendió el televisor y se sentó de nuevo en el sillón.- ¿Qué te gustaría ver? No sé nada de lo que te gusta, que mal ¿eh?-Intentó sonreír con la marca de las lagrimas aún en sus mejillas y una expresión de dolor ensombreciendo su mirada, no paraba de aspirar por la nariz intentando mantener la serenidad.- Creo que "Crímenes imperfectos" debe de ser de tus programas favoritos.-Dejó la tele en esa cadena.
Se oyeron unos golpes en la puerta, bajo el sonido del televisor.
-Derek.- Melissa McCall pasó a la habitación.- El horario de visitas a acabado, solo una persona se puede quedar a pasar la noche con él y su padre…-La miro con los ojos aun llenos de lágrimas.- Que demonios.- Susurro.- No me va a perdonar esto, pero que un hombre lobo me odie no entra en mis planes.- Suspiro y bajo la mirada, volvió a mirar a Derek.- Puedes quedarte si quieres.
-Gracias.- Respondió con sinceridad.
La noche tardó poco en caer, Derek no se levantó del sillón, la verdad es que el programa estaba bastante bien, de vez en cuando comentaba algo, esperando respuesta, cosa que nunca sucedía.
Cuando acabo apagó la televisión, la habitación quedó solo iluminada por la luz que entraba por la ventana, arropó un poco más a Stiles, acarició su cara, arrepintiéndose medio segundo después de hacerlo y cogió su mano, se sentó de nuevo, no soltó su mano, no la soltó en toda la noche, miró por la ventana y solo vio el aparcamiento del hospital, no quedaban más que dos o tres coches, agudizó el oído, no había nadie fuera, solo un médico que pasaba de largo.
-Buenas noches.- Miro a Stiles y sonrió.
Cerró los ojos y se acurruco en el sillón, intentando dormir, aunque le fue casi imposible, bien entrada la noche lo consiguió durante un par o tres horas.
Cuando despertó entre sudores y a la vez recorrido por un escalofrió hubiese dado lo que fuera por no dormirse, sus manos eran garras y el sillón estaba lleno de arañazos, agarraba la mano de Stiles con tanta fuerza que podría habérsela roto.
Intentó tranquilizarse lo que le llevó unos cinco minutos, volvió completamente a su forma humana y vio que había arañado la mano de Stiles, estaba sangrando, no podía llamar a un médico para que le vendasen o le echarían de la sala.
-Lo siento.- Masculló.
Por suerte los cortes no eran profundos, así que con una venda bastaría, y con algo más de suerte los médicos no dirían nada al día siguiente.
Derek dejó la habitación, no sin cierta amargura, y salió a buscar vendas y algo de alcohol pera curar por primera vez una herida humana.
No le costó encontrar una pequeña habitación, más bien un tipo de armario, que debía servir como uno de los almacenes de primeros auxilios, forzó la cerradura con sus garras y sacó unas vendas, encontró algo de agua oxigenada y alcohol, se llevo un bote de cada, volvió al cuarto dando un gran rodeo para no chocar con los médicos y enfermeras de guardia.
Aún así no pudo evitar a la madre de Scott que estaba esperándole junto a la puerta de la habitación.
-Derek.- Él cerró los ojos pensando "joder".- ¿Qué le has hecho?
-Nada.- Apartó a la mujer de la puerta y entró a la habitación, ella le siguió.
-Dios mío.- Murmuró.
Derek no respondió, limpió las heridas con agua oxigenada y les echó alcohol.
-Déjame a mí.- Melissa no se atrevía a acercarse.- Derek.
-No.- Terminó por responder, con cuidado empezó a envolver la mano con la venda.
-Trabajo haciendo eso, lo hare mejor que tú.
-Es mi culpa, yo lo arreglare.
-Supongo que no lo has hecho adrede.- Derek la miro confirmando su duda.- No lo has hecho adrede, lo sé, pero igual estaría mejor con su padre al lado que con un hombre lobo.
Nuevamente no respondió, pero las palabras no pasaron en balde por su cabeza, termino de vendar a Stiles y se sentó en el sillón, con la mano vendada entre las suyas.
-O tal vez no.- Susurro, formo una media sonrisa con los ojos tristes y salió de la habitación, esperando no tener que arrepentirse al dejar a Stiles solo con Derek.