Bitácora I. Es fácil engañar a un tiburón
-¡Deben estar bromeando!- Esa fue la primera de muchas exclamaciones que comenzaría a expresar el pelirrojo atleta. Mostrando un sorprendido semblante había detenido cualquier movimiento de su cuerpo al tiempo que observaba el extraño cuadro que formaba aquella escena.
Los azulados y siempre inexpresivos ojos lo observaban como si aquello fuera de lo más normal del mundo. Por supuesto, sin omitir el pequeño detalle de que aquel ojiazul se encontraba sentando sobre el regazo de un corpulento castaño.
-¡Óra*, Rin-chan! No es para tanto...-Sin poderlo evitar el rubio propietario y conductor de permiso de aquel vehículo miraba divertido la situación de los asientos traseros.-Haru-chan no hizo ningún escándalo.- Terminando por murmurar con una sonrisa traviesa presiono el claxon despertando a Rin Matsuoka de su estupefacto estado.
-Solo porque era la única manera.- Respondiendo el anteriormente nombrado pelinegro, volteó el rostro haciendo que Makoto Tachibana mostrara una de sus características sonrisas.
-Pero, ¡¿Por qué de "está manera"?!- Señalando con un acusador y rígido dedo hacia él que parecía ser el más calmado y ajeno al problema. Sousuke Yamazaki se encontraba sentado junto a lado de Makoto (y Haruka) en la deportiva pero algo compacta camioneta de Nagisa Hazuki.
Todo había iniciado después de la temporada de competencias y exámenes. Ambos estudiantes tanto de las Academias Iwatobi como Samezuka disfrutaban de sus merecidas e obligatorias vacaciones escolares. Vacaciones que al parecer comenzaban a convertirse en la peor pesadilla para Rin. Sabía que debía haber aceptado la invitación del tímido Aiichiro Nitori. Después de todo lo que le había costado al pequeño formular entendibles palabras para terminar invitándolo a la casa de campo de sus padres. Proposición que se vio obligado a rechazar al ganarle la jugada el unido equipo Iwatobi. Aunque podría jurar a ver visto la más pura decepción en los ojos de Nitori el inoportuno (aunque en aquella ocasión oportuno) Momotarou Mikoshiba había aparecido usurpando su lugar. Al menos la valentía e invitación de Nitori fueron correspondidas, a pesar de no ser de la forma planeada por este último.
Y es que una vez más el Team* Iwatobi había salido victorioso al poseer al rubio integrante que había planeado "Las Revitalizantes Vacaciones en las Aguas Termales" como él mismo las había bautizado. No era un hecho desconocido los "jueguitos" de Nagisa y en está ocasión su faceta de guía vacacional. Y por si fuera poco, hasta Sousuke había sido involucrado al estar presente cuando fue personalmente invitado al viaje. La verdad todo aquello lo había tomado desprevenido, desde el recuerdo de ver a los cuatro integrantes de Iwatobi en la misma tienda deportiva donde paseaba con Sousuke, hasta la invitación que les habían hecho a las aguas termales. Había jurado que todo aquello había sido por la nula restricción de Nagisa en divulgar todos sus proyectos. Pero todo se volvió auténtico cuando en verdad los habían incluido en sus planes y por si fuera poco también habían cumplido la promesa de pasar por ambos en el medio de transporte del mismo y organizador rubio. Sabía que la familia Hazuki poseía un buen status social, así que la posesión de la camioneta no era de extrañarse.
Lo único extraño había sido el cumplimiento de aquella "charla" al atender el llamado de su puerta y encontrarse a los cuatro chicos esperándolos. Haciendo que no solo Sousuke y él dejaran pendiente el combate del rentado videojuego, sino que ahora iniciaran una nueva batalla de orgullos y al parecer de resistencia en momentos incómodos.
Pues sin haberle dado oportunidad de negociar (o de decidir cómo particularmente acostumbraban en su tradicional "piedra, papel o tijera") Sousuke se había instalado en la parte trasera del vehículo, segundando a Makoto con Haru en su regazo. Como si mostrara con sus acciones lo más lógico en cuanto a la ubicación exacta de cada integrante en esa camioneta.
-Yo no le miro nada de malo.- Haciendo juego con su imponente musculatura, la grave voz de Sousuke se dejó escuchar por primera vez. Provocando que Rin juntara sus delgadas cejas al sospechar el notorio tono divertido del moreno.
-Calmen chicos, podemos encontrar otra solución.- El siempre preocupado Makoto continuo con su sonrisa al tiempo que observaba como el rubio conductor inclinaba el cuerpo hacia su dirección.
-Mako-chan, está es la única solución. En el reglamentario de viaje hacia "Las Revitalizantes Vacaciones en las Aguas Termales" lo dice.- Gesticulando y dándole énfasis al particular título que él mismo había bautizado, volvió a mirar al contrariado Rin.-Además es el acomodamiento más adecuado.-
-¿Ah?-
-Bueno, en eso tienes razón.- Asintiendo con un gesto serio, Makoto apoyo el punto del rubio al tiempo que posaba una mano sobre su propia barbilla.
-¡¿Ah?!-
-Además de que Rin-sempai es el más cercano a Sousuke-sempai.- Uniéndose al debate y situado en el lugar del copiloto Rei Ryugazaki ajusto sus rojizos anteojos.
-¡¿Ah?!- Aquello había sido la gota que derramo el vaso. Habiendo escuchado las últimas palabras, Rin dirigió toda su ira hacia el desafortunado peliazul.- ¿Por qué no mejor ocupas mi lugar Rei? Eres más liviano y a Sousuke no creo que le moles...-
-Yada*.- Sin dejarlo terminar, Nagisa interrumpió al pelirrojo de forma abrupta.
-¿Por qué no?- Encarando al rubio, Rin entrecerró los ojos perspicaz.
-Porqué es mi GPS.-
-...- Un silencio grupal se hizo presente ante aquella revelación por parte del pequeño rubio, rompiéndose ante el repentino rugido del motor.
-¡Basta de niñerías Rin-chan, nos vamos!- Como si reafirmara sus palabras, Nagisa comenzó a presionar el acelerador de forma impaciente. ¿Quién lo diría? Después de todo el más infantil del equipo resultaba en esos momentos el más maduro.
-¡Oe* espera un momento! El automóvil ya tiene un GPS incluido, ¿acaso crees que me voy a tragar esa mier...-Siendo interrumpido por segunda vez, Rin se vio forzado a callar al vislumbrar la alta figura de Sousuke saliendo del vehículo.
-Rin...- Tomándolo de la muñeca, el moreno comenzó a observarlo con una penetrante mirada.- ¿Acaso dejaras vencerte por él?-
-...!- Captando inmediatamente el significado de aquella pregunta, el pelirrojo observó al instante el desinteresado semblante de Haruka Nanase (quien parecía el más lejano de la situación), haciendo que cambiara su antiguo gesto de molestia en un decidido gesto de determinación.- Tks, ¡Sousuke! No perdamos más tiempo.-
Con una ovación grupal (a excepción de Haruka) todos aplaudieron la iniciativa de los chicos de Samezuka, en especial hacia el alto moreno quien ahora se encontraba recibiendo en su regazo a un competitivo y sonrojado Rin.
¿Continuará?...
*Team (Equipo)
*さあ-"Ora!" (Vamos!)
*ノー "Yada" (No quiero-No me gusta)
*大江 "Oe!" (Oye!)
