Angel de la Luz de La Luna.
Me despierto de repente, y me siento en la cama.
Escucho con atención. Estoy seguro de que oí a alguien diciendo mi nombre, digo esto en voz alta para mí.
Pero no hay nadie, todo está tranquilo en la habitación. Mis ojos dan una exploración superficial de la habitación, observando los muebles de buen gusto, las paredes de piedra, y la luz de la luna brillando a través de las ventanas.
Satisfecha no hay peligro, doy un suspiro de alivio y lentamente miro hacia abajo. Entonces giro la cabeza y miro la vista más hermosa del mundo. Allí está ella.
Recostada a mi lado, durmiendo plácidamente, en el claro de luna, te ves como un ángel. Su cabeza descansa sobre la almohada, se inclinó frente a mí, así que tengo una visión perfecta de su bello rostro. Su pelo negro, libre de su cola de caballo habital, ahora libre como cascada alrededor de su cara y sobre la almohadas como un campo suave en el que quiero enterrar mi cara.
Tu suave piel se ilumina, en la luz de la luna. Hay una ligera capa de sudor en tu frente, la prueba de nuestra vida sexual vigorosa y apasionada hace tan sólo unas horas atras.
Tú lo eres todo para mí. Tú eres mi amiga, mi compañera de aventuras, mi amante, mi ángel.
Somos dos mitades que se han unido en una maravillosa unión, cariñosa. Eso en sí mismo te hace la persona más importante, lo más especial en mi vida. Tu amor es la mejor sensación que jamás había experimentado. Todo lo que siento al estar con tigo, amarte y hacerte el amor son los mejores sentimientos que he sentido.
Sigo viendote por unos segundos más antes de inclinarme y darte un beso muy, muy suave en los labios. Sólo te moves cuando pruebo tus labios.
"Buenas noches, Kitana. Te quiero", le susurro suavemente a ti, mi ángel de la luz de la luna.
Antes de que mis ojos se cierren, veo en tus labios como se convierten en una hermosa sonrisa.
FIN.