Descargo de responsabilidad: Los personajes de este historia le pertenecen a Rick Riordan no a mi
POV Hestia
La mujer estaba caminando por las calles frías de Nueva York en invierno, tenía un abrigo blanco y un vestido café pero no parecía tener frio, se dirigía a un pequeño bloque de apartamentos en Upper East Side, llego rápidamente y luego de verificar la dirección subió las escaleras hasta llegar a una puerta blanca no muy diferente de las otras y miró al suelo con asco, estaba lleno de manchas y botellas de cerveza rotas, así estuvo segura de que estaba en el lugar correcto y recordando la razón por la que venía reforzó si era posible aun mas su determinación para hacer lo que le habían pedido
Flashback
Hestia estaba como siempre atendiendo el hogar en la sala del trono, muchos pensarían que era aburrido pero a ella le bastaba sentarse al lado del fuego del hogar y sentir el amor y la calidez que solo se podían sentir en los pocos hogares pacíficos que quedaban, no mucho cambiaba a través de los días, los pocos cambios en su rutina eran cuando se dirigía al campamento mestizo que hacía cada vez menos ya que siempre se sentía decepcionada cuando ninguno de los niños iba a hablar con ella, pero ese día fue diferente, una muchacha hermosa de cabello largo oro y ojos de plata que cambiaban de color entro viéndose muy deprimida, esa fue su señal de alarma, Tyche casi nunca estaba triste, después de todo ella era la diosa de la suerte y prosperidad siempre estaba feliz de darle alegría a los demás
"¿Tyche lo que te trae al hogar?" dijo con voz suave, ella nunca alzaba la voz estaba en su naturaleza transmitir la calidez que el hogar le daba a todos quienes le buscaban
"Hestia es tan triste, no sé qué hacer he tratado de arreglarlo pero nada funciona solo podía buscarte a ti tu eres la mas bondadosa de todos tu comprenderías" ella parecía a punto de llorar, Hestia sabia que ella iba a ayudar al momento que lo pidiera, la vio tan triste que la abrazo concentrándose en transmitir tranquilidad
"¿Que paso?" ella sintió a la diosa tranquilizarse en el tono de su voz
Tyche le conto todo, siendo ella la diosa de la suerte podía sentir cuanta tenia cada mortal y cambiarla, recientemente había encontrado a un pequeño semidios de tan solo dos años al parecer, tenía una suerte terrible podría pasarse como que Némesis se ensañara con el pero al parecer no había interferencia divina, el niño era adorable y virtuoso según Tyche pero su madre era un monstruo, lo golpeaba cada noche por haber "arruinado su vida" pero al parecer era solo por desahogar la frustración de que el padre del niño la dejara, bebía, fumaba y salía de fiesta a diario y el era tan triste que Tyche no podía dejar de deprimirse, había intentado influir en su suerte pero no había funcionado, necesitaba participación directa y rápido, el odio de la mujer había crecido tanto que era solo cuestión de tiempo antes de que lo matara en alguna de sus borracheras.
Ella había tenido la idea de adoptarlo y criarlo ella misma aun contra las leyes antiguas y en secreto pero probablemente Némesis la descubriría, ella siempre la vigilaba para no favorecer mucho a nadie entonces solo podía recurrir a Hestia quien sabia que sus hermanos no notaban mucho su ausencia ni les importaban mucho sus acciones.
Hestia estaba indecisa ella por supuesto quería ayudar al pequeño pero tenía miedo de violar las leyes, porque sería la primera vez y Tyche viendo su indecisión le hizo una sola petición: ir a verlo
Fin Flashback
Hestia tomo una respiración profunda frente al departamento y abrió la puerta, Tyche le había dicho que allí solo iba a estar el niño así que era inútil tocar, apenas dio un paso en el lugar una ola de repulsión tan grande la golpeo que ella solo quería correr a su hogar donde era todo lo contrario a este terrible lugar, latas de cerveza y colillas de cigarrillos estaban esparcidos por todo el lugar, incluso habían botellas rotas y lo que más la horrorizó gotas de sangre en el suelo, rápidamente y resistiendo el impulso de huir siguió caminando abriéndose paso por lo que pensaba una vez había sido una pequeña sala de estar, paso por un pasillo y llego a la cocina, sintiendo curiosidad por lo que comían los humanos abrió la nevera, lo único que encontró fue carne podrida y un bolsa de leche vencida, rápidamente siguió su camino hacia una habitación cada vez compadeciendo mas al pequeño, y luego lo vio, entonces olvido todo su miedo e inseguridad y tomo su decisión, el realmente era adorable tanto que ella no noto hasta después los moretones y marcas que tenia, tenia cabello negro desordenado y unas adorables sonrojadas mejillas regordetas, y sus ojos eran los más hermosos que había visto, eran verdes mar y recordaban cosas hermosas como la vida, los bosque y prados, esmeraldas y los tiempos pacíficos, ellos brillaron con miedo en un primer momento, seguramente esperaba a su madre pero luego la vio más detalladamente y demostraban curiosidad mientras el ladeaba la cabeza adorablemente, ella sintió una oleada de amor y cariño viéndolo y supo que ella nunca podría dejarlo ir
El dijo en una voz tierna de bebe "¿Quién eres du?"
Hestia habría podido decir muchas cosas, alguien que no te hará daño, una amiga, un visitante pero ella sabía lo que realmente quería ser y le dijo "Tu nueva mami si así lo quieres" lo miró con ternura y le sonrió dulcemente
El sonrió brillantemente mientras corría a sus brazos abiertos y la abrazó "¿Mami podemos idnos?"
La diosa estaba horrorizada, ella podía ver los recuerdos de las personas automáticamente cuando los tocaba y cuando él la abrazo ella pudo ver los suyos, pudo ver los gritos, los llantos, los golpes, el miedo y la tristeza, resistiendo la furia que la invadió contra su madre biológica le devolvió el abrazo protectoramente y le respondió al pequeño que había aprendido en sus recuerdos se llamaba Perseo "Si, Percy nos vamos a tu nuevo hogar"
Publico esta idea para saber su opinión si quisieran que continúe, si les gusta y que me corrijan lo que este mal
Review con su opinión por favor
