Shaman king Supreme

Este será mi primer Fic sobre shaman King ^-^

Quiero aclarar que soy seguidora del manga y anime de Shaman King, todo le pertenece a Hiroyuki Takei. El manga culmina perfectamente dándole un final bueno a la serie.

No obstante, pese que el anime se hizo un poco distinto al manga, sobre todo el final, él me dejó en la duda… y mi mente me hizo esta reacción: WTF ¿Qué paso con Hao? ¿El torneo se ha cancelado?... entre otras…

Pues después razoné y me dije, que ese final fue intencional para que nuestras mentecitas les diéramos continuación.

Bueno para los que no conocen shaman King los invito a verlo, ya que es un buen anime, para mi tiene un aire de misticismo, ya que el arte de ser shaman "es el vinculo que une este mundo con el mas allá", no solo le da la capacidad de comunicarse con esos espíritus y/o fantasmas si no también pueden ser utilizados para combates o en su caso para que esos seres que vivieron hace tiempo en la tierra, aporten nuevos conocimientos a las personas. Cosa que me llamó mucho la atención es el torneo de los shamanes, que consta de la participación de todos los shamanes donde tienen batallas para elegir a su nuevo rey, quien llevará el nombre del Shaman King (Rey de los Samanes).

En ese detallito fue que se quedó el anime, bien ahora yo tomo esa trama para traerle como una historia alterna al anime, de ahí viene este fanfiction.

Trataré de actualizarlos los más pronto posible, eso si mis fic son algo largos .-.

Jaja no se por qué me salen así… pero bueno… Aquí les dejo una introducción sobre mi fic, en mi perfil dejo unos link de videos, uno es del tráiler de este fic y los otros son el opening y ending que elegí para esta primera entrega. Espero que puedan disfrutarlo ^-^

Advertencia

Algunos personajes tendrán OCC en cuanto a la parte del romance y otras cositas de menor detalle, del resto mantendrán su esencia.

Habrán unos fic de lenguaje fuerte, lemon/lime sin súper especificar demasiado. Colocare su respectiva advertencia cuando publique dichos capítulos.

Introducción

El origen de un Shaman

Te has preguntado…el ¿por qué? De nuestra existencia,

¿Cuál es el sentido de la vida de un shaman?

Un ser supremo pudo crear todo lo que nosotros hoy conocemos.

Pero para ello acudió a un grupo de semejantes para mantener el orden en su creación.

Todo bien hasta este punto, pero…

La vida siempre estará manifestada en cualquier rincón de este pequeño planeta; la brisa fresca que sopla, los calurosos rayos del sol, la lluvia que cae del cielo, el despertar de una flor, el resplandor de la luna…

Aun sigues sin entender…

¿El por qué de tu existencia?

Proteger lo que se te ha dado, equilibrar lo que se ha desequilibrado, guiar al que te necesita, completar lo que haga falta y… amar lo que nazca de tu corazón.

Recordando que…

Lo que está destinado a suceder… siempre encontrará una forma única, mágica, y maravillosa para manifestarse…Así como tú…

Solo tú posees la esencia que brilla en el universo. No la dejes ir tan fácilmente, por que el día que eso suceda moriré y todo lo que tenga vida también lo hará.

Aunque sinceramente, yo te di vida con el don de poder ver más allá, de lo que un simple ser humano es capaz de mirar a través de sus ojos. Ahora bien, te pido que me ayudes una vez más a salvar nuestro hogar…Ayúdame a proteger…

La Vida.

Por ahora…Apagaré las luces, pero te dejaré las estrellas encendidas

—¡Mama! —Vociferó un pequeño rubio de ojos verdes al ver que aquella mujer se retiraría de su lado— Si logro detenerlo… ¿estaremos juntos otra vez?

—Así es mi lucero—respondió aquella mujer de rasgos hermosos. Depositó un beso en los labios de aquel niño que se encontraba en la cama— Ahora debes dormir… mañana será un día importante— concluyó la mujer arropando al pequeño para luego desvanecerse lentamente.

Una vez desalojado aquella habitación, la mujer de rasgos hermosos, cabello rubio, ojos dorados, piel pálida se apareció en sus aposentos, observando una figura familiar para ella. Un dios de cabello platinado largo, ojos dorados, tez blanca la esperaba ansiosamente.

—¡Vita! —dijo aquel hombre— ¡¿Estás segura de que funcionará?!

—¡Tiene que funcionar, Balder!—dijo la mujer— Sethor no se dará por vencido hasta ver destruido todo.

—¡Eso ya lo sé!. Lo único que no logro imaginarme las atrocidades que hará para lograrlo—dijo aquel dios de cabellos platinados.

Afueras de los aposentos de la diosa se escuchó un gran estruendo que alarmó a los dos, saliendo rápidamente del lugar.

—¡Ni creas que podrás detenerme con esto Vita! —se escuchó muy cerca la voz de aquel dios de la destrucción. Un hombre de altura promedio, tez pálida, cabello castaño algo alborotado.

—¡Sethor déjalo ir! —Exclamó Vita impresionada al ver en sus brazos al pequeño niño, aquel que acaba de dejar en su habitación.

—¡Creías que esta cosa! — Manifestó con odio Sethor tomando al niño por el cuello, asfixiándolo— Podría detenerme…

—¡Mamoru! —Gritó Vita desesperada— ¡Tómame a mí!

—¡Porque demonios! —dijo Sethor— Puedes amar algo como esto… ¡Y a mí no! —Afirmó con fuerza — ¡¿Por qué?!

—¡Porque eres un egoísta! —expresó duramente el dios de fuego lanzándole un puño el cual atravesó el cuerpo del dios de la destrucción, haciendo que este soltara al pequeño que asfixiaba.

Vita por su parte corrió velozmente para atrapar al pequeño y llevárselo a su lado.

—¡Debo pelear! —declaró Mamoru, sosteniendo firmemente su espada.

—¡No Mamoru, espera! —habló la diosa pero el rubio no logró escuchar sus palabras.

El chico rubio de ojos verdes poseía una determinación incalculable haciéndole frente al dios de la destrucción. Su velocidad era increíble, esquivaba cada ataque que recibía de su oponente. Sabía que para tener la paz que anhelaban debía detenerlo.

—Te subestimé—expuso Sethor— Pero no serás capaz de detenerme. ¡Ahora mismo te demostrare porque me llaman el dios de la destrucción!—el dios hizo que sus ojos brillaran de una manera anormal, su fuerza aumentaba a cada segundo que transcurría, desprendía de su interior una carga de poder incalculable.

Una fuerte pelea se desató entre los tres dioses. Loki el dios del fuego, un chico de cabello pelirrojo y ojos dorados, Thor el dios de los cielos; un hombre de cabello verde con ojos dorados y Sethor el dios de la destrucción.

En la tierra se hacía resonar aquel impacto entre los poderes de los dioses, haciendo que esta respondiera de forma agresiva. Sethor desprendía rayos que impactaban en la tierra destruyendo todo a su alrededor.

—Jaja, ¡Qué bien! la tierra pronto será destruida—observó Sethor sonriendo— Mientras mantenga una batalla con ustedes… todo lo que he esperado será…

El dios de la destrucción se vio interrumpido al recibir un golpe físico de la diosa de la vida.

—¡Ya basta! —declaró Vita—No permitiré que destruyas todo lo que hemos hecho con tanto sacrificio… ¡Dime que es lo que tengo que hacer para que dejes de actuar de esta forma!

—Se me olvidaba…—vociferó Sethor, escupiendo unas gotas de sangre— que tu odias las peleas… —recitó mostrando una sonrisa—¡Vita! Ya tú sabes que es lo que deseo… pero tú te niegas a dármelo…

—No es lo que crees, hermano—susurró Vita.

—¡No me digas así! —Expresó Sethor, expulsando una gran cantidad de energía— El día que nosotros cuatro fuimos creados… él pensó que hacía falta algo, de ahí surgiste tú… ese mismo día nació algo dentro de mi ser… No, ciertamente ese día me enamoré de ti, pero nuestras habilidades son tan opuestas…

—Sethor—susurró dulcemente la diosa.

—Jaja… me causa gracia… porque todo lo que tu creabas, yo al tocarlo con mis manos lo destruía sin pensarlo…—sostuvo Sethor—pero… esta cosa—dijo señalando al pequeño que se encontraba detrás de los 3 dioses— ¡Esa cosa que creaste, no la puedo destruir! Desde que nació de ti has pasado más tiempo con él que conmigo. ¡Dime porque!

Vita al escuchar su declaración solo se acercó hacia el dios de la destrucción, extendiendo sus brazos en forma de que él viniera a ella.

—Si me quieres a mi… ¡Aquí me tienes! —expresó dulcemente la diosa, extendiéndole sus brazos.

—¡Vita no! —se escuchó entonar detrás de la mujer.

Sethor se sentía aliviado al escuchar lo que deseaba, su anhelo más codiciado se cumpliría al fin. Se acercó tanto a ella hasta el punto de estrechar su cuerpo, tanto así que sus rostros se podían ver la mirada de felicidad del dios de la destrucción, su mano acarició suavemente el rostro de la diosa, acercando sus labios a los de ella.

—¡No un solo beso y será el fin de los dos! —Exclamó Loki el dios de fuego.

Mamoru quien se encontraba detrás observando todo no puedo evitar tomar su espada y correr hacia donde estaban los dos dioses y detener aquel beso, pero desafortunadamente era muy tarde para evitarlo, Sethor quien había esperado esa oportunidad no la desperdició fácilmente. Sin embargo el niño se impulsó a clavarle la espada en el costado del dios.

—¡Qué has hecho! —dijo Sethor separándose de la diosa, pero la herida no fue lo único que lo impactó, velozmente se veía como su cuerpo se destrozaba en pedazos—¿¡Que me está pasando!?

—¡Balder! —gritó Vita— ¡Hazlo ahora!

El dios rubio de ojos azules logró crear un campo debilitador que rodeara a Sethor. Pero la furia del dios de la destrucción era demasiado para sellarlo. Vita pensó que la única manera seria que su cuerpo se quedara sellado junto con el de él.

—¡No aguantaras! —Exclamó Thor, el dios del cielo.

—¡Es demasiada energía! —Manifestó alarmado Loki el dios del fuego.

—Debo ser yo, quien lo selle para siempre…—susurró Vita.

—¿Qué? ¡Estás loca! —Replicó Balder.

—¡Mamá! —dijo Mamoru

—Mi pequeño, gracias por ayudarme—dijo la diosa acariciando sus cabellos alborotados—Pero me temo que…

—¡Lo prometiste! —aseveró el pequeño entre sollozos.

—Lo sé, pero no estarás solo, siempre estaré a tu lado—dijo la diosa— Ahora quiero que te conviertas en el protector de esta tierra, ayudes a los seres humanos a convivir con la naturaleza y seas feliz.

—¿Cuándo te volveré a ver? —preguntó ilusionado el pequeño.

—Cuando mires las estrellas; estaré en cada una de ellas, cuando sientas que el viento sopla; seré yo que te acaricia dulcemente, cuando llueve; seré yo para que me escuches y cuando sueñes estaré allí contigo—manifestó la diosa abrazando al pequeño.

—Te quiero mucho mamá—declaró el rubio.

—Yo te quiero mucho mas—contestó dulcemente la mujer.

—Muy lindo todo Vita, pero aunque te metas dentro de esa esfera… te debilitarás y él saldrá fácilmente lo peor es que si tú te mueres, la vida en este planeta y toda su existencia se acaba—interrumpió Loki.

—Hay una manera—aseguró Vita—Aquellas almas puras que vivieron en este mundo, serán el pilar del sello y cada 500 años reencarnaré y absorberé ese cuerpo físico para recuperar mi energía… Así de esa forma no moriré; ya que la naturaleza vivirá a través de los tiempos. Por ello Mamoru tú te encargarás de hacer en ese tiempo un torneo para elegir aquel ser que protegerá al mundo y guiará con todo el conocimiento y el poder de un dios. ¿Te ha quedado claro?

—¡Si mamá! —aseguró el pequeño.

—Por eso fue que lo creaste—articuló Thor, el dios del cielo un hombre de cabello verde corto, ojos dorados— Un semi dios…

—Llámalo Shaman—dijo la diosa sonriente— se escucha más bonito, que decir semi dios.

—Shaman King…—susurró Balder.

—¡Es la hora! —dijo Vita despidiéndose de los tres dioses quien la veía con tristeza y de su pequeño hijo, soltando una lagrima, preparándose para vociferar un canto mágico.

Vita tomó todas aquellas almas y con ellas creó una torre, aquel espécimen fue capaz de sellar los poderes de aquel dios enfurecido, hasta que…Cierto torneo se vio interrumpido cuando Hao Asakura logra penetrar por su cuenta en esa torre, vinculando su destino con el del dios.

—¡Estoy en lo correcto! —Exclámo Hao el chico de cabellera larga mientras ordenaba a su espíritu atacar.

—¡Por eso nunca serás aceptado! —dijo Yoh, aseverando su respuesta logrando deducir el golpe final de esta batalla..

Los grandes espíritus al presenciar el resultado de esa batalla, sintieron un desequilibrio interno, cosa que permitió sin dudar alguna la salida de aquel dios de la destrucción. Al momento Sethor poseía una energía acumulada lo que hizo fue estallar una parte de la tierra. Su despertar hizo que el desequilibrio fuera más notorio en el planeta azul… Logrando derramar una lagrima en el rostro de aquella chica rubia.