Bueno Bueno, cualquiera que leyó "Un Secreto Para Dos" se que me estará odiando en estos momentos jajajaja, perdí esa cuenta y con ella todo el fic, ni lo tengo en la pc. Anyway, necesitaba cumplir con la sociedad GaaSaku espero no defraudarlos :3

Este fic al principio les parecerá raro por lo no convencional, como todos los primeros capítulos de todas las historias es obvio que no hay nada de acción, sino que es la preparación para eso xD YO LO LLAMO ACLIMATARSE

DISFRUTEN :)

Capitulo 1: Sol y arena

Jamas se me hubiese ocurrido, nadie lo hubiese inventado, ni supuesto, imaginado, nada.

Cualquiera que supiera nuestra historia reiría hasta morir. De solo pensarlo, brotaban de mi sentimientos que ni mi propia madre hubiese sospechado, hasta a mí, la única persona que en esta historia no había soltado una carcajada, le causaba gracia. Se que a estas alturas ya puede darse la idea de quien soy, amigo lector, la verdad no tengo tiempo para estas cosas, he tomado unas horas libres de mi vida para confesarme, para conseguir paz conmigo mismo, aquí en el fondo de mi tienda todo lo veo mas claro.

Ya sabrán que tengo el cargo mas importante que cualquier ninja pudiera desear, pero aun así con tanto trabajo suceden estas cosas "sin previo aviso".

En vista de que no puedo darme el lujo de poder contarle a quien yo quiera, la verdad no quería contarle a nadie, lo escribo aquí en mi diario, esperando que en algún momento, luego de que la muerte venga por mi, que podría ser mañana o en unos años, alguien lea esto y pueda saber lo que me he pasado, como ya dije, en estos tiempos de guerra todo puede pasar, aunque seguramente deseche esto y lo consiga algún mendigo en un basurero.

Todo comenzó una tarde calurosa, podía sentir la arena en todas las partes de mi cuerpo, incluyendo esas donde no pegaba la luz del sol, el sudor y la arena me causaban una gran picazón, procure no moverme como siempre para mantener la compostura, no veía la hora de irme a mi tienda, quitarme todo lo que tenia encima y no hacer nada como siempre. Ninguno de los millones de ninjas ahí presentes no tenían ni la menor idea de lo que sentía; a algunos de ellos mi sola presencia les causaba temor y a la otra mitad seguro quise asesinarlos en el pasado, pero el único shinobi que allí no se encontraba era por casualidad la única persona que de verdad podía entenderme, mi verdadero amigo.

Sin entrar en cursilerías, el ruido de las personas que hablaban al mismo tiempo podía compararse a un corral de pollos, me ponían de mal humor, tenia ganas de rascarme y no podía hubiese sido más fácil que el desierto se abriera y se los tragara a todos. Pude haberlo hecho pero, ya no era mas ese tipo de persona aunque tuviese esos pensamientos.

Cerré mis ojos, buscando una salida para ignorar que ya casi podía derretirme por el calor, me imagine en la tina de mi casa, junto a ella una pequeña ventanilla redonda, no se veía paisaje alguno, estaba obscuro, pero para mi, era la vista mas hermosa de todo Sunagakure. Sonreí, ya casi podía sentir el agua fría haciendo erizar los vellos de mi cuerpo, se sentía tan real que un escalofrío bajo por mi espalda y ya ni siquiera oía la gente que me rodeaba.

-Gaara-kun, eres nuestro comandante general, creo que deberías relajarte y decir unas palabras...- dijo Kakashi a mi lado, pero realmente no le estaba prestando atención.

Me tomó por sorpresa, "¿un discurso? Sonaba irónico, siempre decía poco más que palabras y ahora querían un discurso". Tragué, esperando que mi vida se fuera con mi saliva. Shock tras shock. De Kazekage pasé a ser un tipo con un cargo más largo que mi propio nombre, todo en cinco minutos. En el segundo que estas palabras pasaron por mi cabeza ya se había formado en las filas un alboroto. Me frustré, tenía que hacer algo si quería salir de ese infierno, separe a ambas personas con mi arena y dije:

-Hasta ahora, tres veces... Hemos luchado por nuestras naciones, por nuestras aldeas. Nos hemos hecho daño los unos a los otros, nos hemos odiado mutuamente. Y ese odio alimento las ansias de poder y de esas ansias de poder... nací yo.- Todos me miraban atentamente, como si fuese la primera vez que hablara en mi vida, yo lo sentía como la primera vez, la adrenalina corría por todo mi cuerpo, ahora que había abierto la boca no podía contenerme- Yo era un Jinchuuriki, la personificación del odio y del poder. Y odiaba el mundo y a todas las personas que en el habitaban...quería destruirlo con mis propias manos, lo mismo que esta intentando hacer Akatsuki. Pero UN hombre, un ninja de konoha me detuvo.

Cerré mis ojos y pude ver su rostro, recordé aquella conversación en nuestra primera y única batalla, Naruto... ahí me di cuenta que no era el único que vivía ese dolor. Luego de eso vinieron a mi imágenes de cuando desperté en aquel campo y todos me miraban preocupados, Naruto interrumpiste el silencio diciéndome "-Hey Gaara, tu siempre metiéndote en problemas" por primera vez me sentí valorado por alguien, alguien aparte de mis hermanos claro esta, también era algo distinto al respeto de ser Kazekage, sabía que habían ido a rescatarme y a mi alrededor, todas las personas que se preocupaban por mi. Me despedí de ti aquella tarde, me prometí muy dentro de mí pagarte aquella deuda...

-¡El ERA mi enemigo!¡Y aun así lloro por mi! Yo le herí y aun así me consideró amigo suyo- Agregue elevando mi tono de voz, necesitaba que sintieran empatía por lo que yo sentía, me puse la mano en el corazón, lo sentía tan pequeño por el sentimiento que me causaba recordar aquello- ¡El me salvó! Mi amigo Jinchuuriki... ¡ Sufría el mismo dolor que yo pero él no quería hacerle daño a nadie!

En ese punto ya no tenia calor, ni sentía el sudor ni la arena, ni la pesada pera en mi espalda, ni las miradas a mis costados de los demás generales, ni las miradas de los demás shinobis bajo mis pies, hasta la picazón había cesado.

-¡ Aquí no hay enemigos!- grite fuerte para que les quedara claro y proseguí- ¡ Aquí todos hemos sido victimas de Akatsuki!¡Por lo que no hay mas Sunagakure, ni Konoha, ni Iwagakure, ni Kirigakure, ni Kumogakure!...¡Sólo hay Shinobis!- Exclamé esto ultimo, pude ver como todos habían cambiado su forma de verme, la duda no estaba en sus miradas, mi mirada se perdía entre ellos, entre aquellas personas decididas a luchar- ¡Y si aún así te sientes agraviado por Sunagakure... Cuando termine la guerra ven y pide mi cabeza!- Le dije directamente al shinobi que había empezado el pleito, ya no era yo el que hablaba, sino todo eso que estaba revolviéndose dentro de mí...

-¡Nuestros enemigos van detrás del amigo que me salvó la vida!¡Si lo tocan, si se los entregamos, el mundo tal y como lo conocemos no será el mismo!¡Quiero protegerlo a él y a nuestro mundo! Pero soy muy joven para protegerlo yo solo...-Esto ultimo hizo que me encorvara, tenía los sentimientos a flor de piel, podía sentir como las ganas de llorar venían a mi, pero no salía ni una gota, estaba decidido a convencerlos- ...¡Por eso necesito la ayuda de todos ustedes!

A penas terminaba y ya oía a una multitud gritando mi nombre, las voces conocidas se mezclaban con aquellas que no reconocía, por fin estábamos todos juntos en esto.

-¡Todo el que este conmigo... EN MARCHA!.

Creí que nunca terminaría los otros cuatro generales y yo nos pusimos delante de las filas y partimos hacia el horizonte, ya no eramos individuos sino una sola masa de shinobis, que pelearíamos tanto por aquellos que fallecieron como por aquellos que esperaban en nuestras casas a que regresáramos con vida, la batalla había comenzado y yo estaba al frente, cuenta regresiva, corriendo con todo mi chakra fluyendo por mis venas, cuando me volvía hacia un lado, podía ver a los demás corriendo tras de mi, jamas pensé que podría llegarle tan profundo a la gente, pero todo era gracias a tí, NARUTO.

Lo único con lo que no contaba era, que entre las filas, estaría la causa de mis problemas, claro, mis problemas personales.

-FIN DEL CAPITULO-

ESPERO REVIEWS PARA QUE ME DIGAN QUE LES PARECIÓ LA NARRACIÓN, YA SABEN POR QUE LO DIGO JAJAJAJA

SUBIRÉ CAPÍTULOS DE DOS EN DOS PARA NO CORTARLES LA INSPIRACIÓN!

NOS LEEMOS, GAASAKU POR SIEMPRE YA DIJE YA.