Espíritu 精神.
Capitulo uno:
Azoto la puerta, no lo quería escuchar mas, ya no aguantaba a esa gente hipócrita ni tampoco sus falsos pésames, nadie era capaz de entender su dolor, nadie.
Tanta frustración y sentimientos encontrados no lo dejaban siquiera llorar, tenía que descargarse de alguna forma deshacerse de ese nudo en la garganta que lentamente estaba terminando con su cordura, tomó todo lo que se encontraba a su alcance aventándolo con furia al suelo y paredes.
¡Dios, no podía más!
La puerta sonó.
―¡déjenme solo! ―bramó.
La voz de su estúpido hermano sonó aumentando aun mas su enojo, sino se iba pronto lo golpearía a él.
―Otöto necesitas hablar con alguien abre la puerta ―pidió Itachi.
―¡déjame en paz si necesitara hablar con alguien ten por seguro que no sería contigo Itachi! ―le faltaba el aire aflojo rudamente su corbata dejándose caer al suelo sin importarle mucho las cosas de su alrededor, escuchó como la puerta lentamente se abría, su hermano se agachaba a su lado y comenzaba a acariciarle el cabello, no tenia siquiera ánimos para rechazarlo.
―igual que tu estoy muy triste Sasuke y siento muchísimo el no haber estado aquí contigo.
―tu nunca estas aquí ¿por qué no vuelves a ese estúpido pueblo? ―susurró.
―lo haré, pero tengo que terminar los trámites del entierro, estar presente en la lectura del testamento y arreglar la mudanza ―arrugó el ceño ¿mudanza? ¿No había dicho hace segundos que volvería a ese pueblucho? Se reincorporo para verlo cara a cara y eliminar sus dudas.
―¿Qué mudanza?
―la tuya, vendrás conmigo a Hokaido ―informó sonriéndole fraternalmente, lo dicho por su hermano consterno a Sasuke ¿ir a ese lugar en medio de la nada? jamás.
―vete al diablo, no mejor a Hokaido pero solo, yo no me moveré de aquí.
―lo siento Sasuke pero ahora yo soy tu tutor, tendrás que hacer lo que te digo ―le estaba dando órdenes ¿con que derecho?
―aprovechas el accidente de nuestros padres para hacer lo que te dé la gana ¿cierto? debes estar contento como solo tengo diecisiete años tu puedes disponer de todo ―escupió con rencor.
―yo nunca haría eso Sasuke, eres mi hermano lo único que me queda ahora, solo quiero tenerte cerca de mí.
―¡si quisieras estar cerca de mi no te hubieras ido hace cuatro años a ese lugar! ¡Yo no te importo, en un año cuando sea mayor de edad no me veras nunca más!
Para su sorpresa Itachi lo abrazo con fuerza, sentía como lloraba en su hombro y eso en cierto modo también lo quebró él no era el único que había perdido a sus padres no era el único con ese dolor.
―Itachi...-
―prepara tus cosas nos iremos mañana, dejaré todo en manos del abogado ―sentenció.
Fue egoísta pero su hermano lo era mucho mas ¿por qué lo arrastraba a Hokaido? esa casa era su hogar ahí tenía toda su vida, sus recuerdos, su infancia, sus momentos de felicidad ¿por qué su hermano se lo quería arrebatar? ¿No era suficientes cosas perdidas con lo de sus padres? ¿Por qué la vida era así de injusta con él?
―no dejare la ciudad tengo muchas cosas aquí, tengo que terminar mi último año de secundaria ―rompió el abrazo bruscamente.
―allá hay una escuela Sasuke.
―¿Qué parte no entiendes? me quiero quedar.
―el accidente me hizo comprender que las cosas que amamos se pueden perder en un segundo...me arrepiento de cada pelea con papá, me arrepiento de cada invitación de mamá que rechace no quiero arrepentirme contigo, Sasuke sino te gusta el lugar volverás en un año y nos seguiremos viendo de vez en cuando, no es definitivo no te pido que pases el resto de tu vida allí, te pido que me acompañes un tiempo.
Chasqueo la lengua, lo estaba controlando, ir contra Itachi era como nadar contra corriente, inútil. Pero solo sería un año ¿cierto? no convivía con su hermano desde hace mucho tiempo y desde que abandono la casa solo lo veía unas pocas horas al año, nada.
Lo extrañaba pero no lo admitiría, medito un poco, tal vez el luto era mejor pasarlo con una persona que te comprendiera y no solo.
―así que Hokaido ¿eh? ―pronunció con aires derrotados.
Su hermano cerró los ojos en una sonrisa sincera.
―así es, Hokaido. Estoy seguro que te encantara.
Odiaba Hokaido y solo había llegado hace un par de minutos, su padre siempre decía que su hermano había parado en un lugar viejo, sucio y pueblerino nada digno de un Uchiha y debía darle toda la razón a su difunto padre.
―Te quedaste corto papá ―pensó viendo con asco el cartel de bienvenida ya desgastado con el tiempo, era de hierro forjado ya totalmente oxidado.
―¿Te gusta Sasuke? ―le preguntó Itachi cargando las maletas del taxi que ya desaparecía en la calle de tierra, de vuelta a la civilización.
―No ―le contesto seco comenzando a caminar.
―Estoy seguro que te agradara con el tiempo ―aseguró caminando a su par.
―a seguro se lo llevaron preso (1) ―escuchó un suspiro de derrota por parte de su hermano, le importaba una mierda se lo merecía por llevarlo ahí.
―Bueno te daré un tour, este es el centro del pueblo, por allí está la tienda de víveres ―señaló una pequeña tienda nada en comparación al supermercado donde iba a comprar, si es que iba―, al lado está la tienda de ropa ―esa tienda daba risa ¿todos iban a una sola tienda? ya se imaginaba a los habitantes todos vestidos iguales― por allí es la oficina del doctor ―genial ahí pasaría la mayoría del tiempo, ya se encontraba enfermo― que también es el dentista ―por casualidad ¿no era también el tipo que vendía helados?―. Esa es la comisaria del pueblo ―mas que comisaria parecía oficina de correo― que también es la oficina de correo ―¡había adivinado! pero no le sorprendía se imaginaba al comisario repartiendo las cartas, deprimente―, ese es el bar-restaurante ―no comería en ese lugar ni aunque lo obligaran― y por último la escuela.
El edificio era enorme a comparación con los demás sin embargo no era ni un cuarto de su antigua escuela, era vieja de dos plantas varias ventanas de madera que increíblemente no estaban podridas, estaba pintada de un verde musgo que la envejecía aun mas, la pintura ya se descascaraba, tenía un par de bancos desgastados por las afueras que se notaba a leguas que nunca conoció un jardinero y para colmo la entrada pedía a gritos un cambio ¿en serio ahí se estudiaba? digna escuela de ignorantes.
―y bueno eso es todo ―tenía que estar bromeando, ni siquiera había pegado dos pasos y ya conocía el lugar completamente.
―genial ―comentó sarcástico cosa que Itachi decidió ignorar.
―Bien, mi casa está a dos kilómetros, es la más antigua del pueblo ―afirmó feliz.
―dime que tiene un baño adentro ―pidió serio imaginándose el "dulce" y viejo hogar de su hermano.
―claro Sasuke, en Hokaido no somos animales ni cavernícolas ¿sabes?
―Hmp hablando de eso ¿donde están todos? ―desde que había llegado no vio un alma hasta parecía que se ocultaban de él.
―bueno son la una P.M. hasta las cuatro todo está cerrado y los estudiantes salen dentro de una hora ―explicó tomando rumbo a un camino de tierra, al rededor solo se veía sembradíos de arroz y alguna que otra pequeña casa.
―Itachi ―llamó después de un rato de ver lo mismo― ¿cuánta gente vive aquí?
―bueno ahora contigo somos ciento noventa y cuatro habitantes.
Genial con él se llegaba al noventa y cuatro más específicamente al nueve desgracia y al cuatro muerte ¿era una señal? (2).
―ya te inscribí en la escuela pero como recién llegamos no pude comprarte el uniforme, te daré el dinero para que lo hagas mañana ¿de acuerdo?
―Hmp ¿y que se supone que llevaré puesto mañana? ―le importaba una mierda como se vestiría en esa escuela pero se encontraba de mal humor y el calor no ayudaba.
―no te preocupes con que lleves ropa normal por un día no sucede nada.
Lo fulmino con la mirada ¡necesitaba quejarse de algo, de lo que sea!
―¿cuánto falta?
―¿no te diste cuenta Sasuke? ya llegamos ―apuntó a sus espaldas, se giro contemplando la gran casona de madera y techo de tejas verdes, al verla no se le venía la palabra "vieja" como todo en ese sucio pueblo, antigua era un adjetivo mucho mejor.
Espero paciente a que Itachi abriera la puerta principal, se descalzo en el genkan (3) y recorrió un poco la sala fue hasta la cocina que era continua, abrió la heladera como si viviera de siempre ahí, todo era muy Itachi fruta, vegetales excepto por ¿latas de cerveza? genial necesitaba algo frió.
―ya deje tus maletas en tu nueva habitación ¿te gusta la casa?.
―la verdad me sorprendiste Itachi debe ser el lugar más decente de todo Hokaido ―tomó una lata dándole la espalda a su hermano para ir a descansar a su cuarto, revisaría en todos hasta encontrar sus maletas.
―oye Sasuke dame eso no debes beber ―lo regañó como si fuera su padre, Itachi se creía demasiado eso del tutor responsable le hizo un gesto maleducado con el dedo medio y se fue sin escuchar el resto del sermón, necesitaba urgente descansar de todo esa mierda y tal vez con suerte pudiera olvidar por un puto segundo que estaba en Hokaido.
No le fue difícil encontrar el engawa (4), era una casa tradicional japonesa todas las habitaciones daban al patio del fondo, su hermano sí que lo cuidaba pues tenía demasiadas flores para su gusto, menos mal que no era alérgico. Miro indiferente a la fuente que adornaba y marcaba el centro del jardín, después de abrir varias puertas corredizas encontró al fin su habitación, era mediana de color azul claro, sin más que un armario y tatamis en el suelo, se sentó en el umbral de la puerta viendo sin interés el exterior, una vez terminada la cerveza la tiro al patio ―que Itachi se encargue más tarde― cerro los parpados con pesadez, mañana iría a esa escuela de mediocres, suspiro, todo iba demasiado rápido pero no tanto como para que cumpla años estaba seguro que los días se le harían interminables más adelante.
Escucho un ruido inusual, al abrir los ojos se encontró con la lata a su lado, arrugo el seño ¿qué carajos...? Tenía que ser una broma de mal gusto; no lo asustó, lo perturbó. Busco rápidamente al culpable pero estaba completamente solo, se resistió al enfrentar a Itachi si él fue el responsable no le daría el gusto era mejor olvidarse de eso, él no era ingenuo no creía en fantasma para asustarse
―Ya descubriré quién fue.
La campana sonó tan estrepitosamente que solo lo irrito mas, casi le ordenaba que entrara a esa horrible institución, le preguntó de mala forma a alguien que tenía pinta de profesor dónde estaba su salón ese tipo sí que era raro en pleno verano usaba una máscara que le tapaba casi toda la cara pero no le interesaba seguro que en Hokaido todos eran así de fenómenos, el hombre le indico dónde tenía que ir y así lo hizo.
Dudo un poco al abrir la puerta estaba llegando tarde y mas que seguro lo mirarían como al bicho raro de la clase, suspiro, aunque alargara las cosas todo sería igual ¿qué caso tenia?
Al entrar pudo sentir las miradas punzantes de todos ni siquiera tenía un puto uniforme para pasar más desapercibido, camino los pocos pasos de la entrada al escritorio de la profesora sin mirar los bancos en ningún momento, en la carpeta de la sensei pudo leer "Kurenai Yūhi" le entrego la nota que le dio su hermano esa mañana, en completo silencio, tenía ganas de gritarle al resto ¿qué mierda le miraban? la tal Kurenai leyó la nota, se paró de su silla y carraspeo un poco para llamar la atención de su alumnado y de paso sacarla de él.
―escuchen chicos, él es el nuevo alumno: Sasuke Uchiha hermano de Itachi, viene de la ciudad así que espero lo traten bien durante su estadía aquí ―los murmullos se hicieron presentes los vio superadamente no eran más que quince, los varones lo miraban con recelo y las mujeres como idiotas eso si que era normal y aburrido― Sasuke yo soy Yūhi Kurenai pero puedes llamarme simplemente Kurenai o sensei como prefieras soy la profesora de literatura, puedes tomar asiento donde gustes.
Vio los asientos disponibles, decidió quedarse con el ante ultimo del fondo al lado de la ventana, camino entre lo bancos con las miradas de todos encima, dios eso era tan estresante, se sentó para dedicarse a mirar la ventana fijamente tratando de ignorar a los demás, un rubio con cara de tarado estaba sentado frente a él y no perdió un segundo en darle el saludo.
―¡Hola Sasuke, mi nombre es Naruto Uzumaki y soy vecino de tu hermano me gustaría que seamos amigos dattebayo! ―¿no se cansaba de gritar? solo lo miro por un segundo para simplemente asentir en silencio esperaba que con eso lo dejara de fastidiar pero él siguió hablando hasta por los codos de cosas que ya no escuchaba ¿esa profesora no diría nada? prácticamente nadie le prestaba atención a su patética lección.
Estaba por mandar a la mierda al idiota pero la puerta del salón abriéndose le llamo la atención era verdaderamente tarde ¿quién podía ser? su pregunta fue respondida cuando una chica entro, no podía ver su rostro con claridad ya que iba cabizbaja dejando solo a la vista su corto cabello rosa y su uniforme bastante diferente que el de las demás chicas, el suyo era verde oscuro, falda corta, medias negras por encima de la rodilla, zapatos cafés y camisa blanca que en el cuello llevaba un gran listón rojo en forma de moño, el de las demás era azul, falda un poco más larga, zoquetes blancos, zapatos negros y simplemente una camisa de mangas cortas, nada más.
Le llamo la atención como nadie la miraba a excepción de él a pesar de llegar tan tarde y vestida tan llamativa, parecía que la ignoraban, que ella no estaba ahí.
Paso por su lado y solo la miro de costado, se sentó justo detrás de él en el último banco.
―Oye ―llamó a Naruto interrumpiendo su monologo, el mencionado lo miro extrañado.
―¿Si Sasuke?
―¿Quién es la que esta atrás mío? ―le susurró procurando que la muchacha no lo escuchara, el rubio dio una mirada disimulada detrás de él y lo volvió a mirar aun mas extrañado.
―etto... Sasuke, no hay nadie atrás.
Aclaraciones:
1- Es un dicho muy popular en mi país significa que una persona no puede estar tan segura pues puede equivocarse al estar tan confiado.
2-Seguramente ya lo sepan pero lo pongo igual, tanto el cuatro como el nueve son de mala suerte en Japón ya que cuatro se pronuncia igual que muerte y lo mismo pasa con el nueve, es tan arraigada esta superstición que en Japón es común que no exista el piso cuatro en los edificios es decir que se lo saltan y ponen tres, cinco.
3- El genkan es como el hall japonés donde se dejan los abrigos, zapatos, paraguas, etc.
4- Engawa es el famoso pasillo de piso de madera que da al exterior en las casas japonesas.
5-la franquicia Naruto no me pertenece y tampoco pretendo hacer parecer que es de mi propiedad :/
¡Hola! vengo con este nuevo proyecto sasusaku ,tal vez el cap fue algo corto y mal narrado XD pero siempre son así los primeros capítulos bueno eso pienso prometo que con el pasar de los capítulos (no serán muchos) la trama sera mejor, miles de gracias a Shina Uchiha por su corrección!.
Ya saben si les gusto y quieren el siguiente cap comenten ,amo los reviews!.
Muchos besos y abrazos n.n
