"Los personajes no me pertenecen, one-shot ambientado días después de su salida del tártaro, recuerdos de los primeros capítulos de la casa de Hades.
Un grito desgarrador atravesó la habitación en medio de la noche.
«Una pesadilla» Pensó Percy mientras trataba de tomar a Annabeth de los brazos para calmarla.
"Shhh, está bien, estamos afuera, estamos bien, estamos juntos, listilla." Susurró de forma calmante el muchacho de pelo azabache.
Se encontraban ambos adolescentes durmiendo juntos en una de las habitaciones del Argo ll, hace un par de días la pareja logró salir de las profundidades del Tártaro.
Percy arrullaba a Annabeth mientras recordaba todo lo que tuvieron que pasar. Él estaba seguro de que no habría sobrevivido siquiera a la caída al río Cocito si no hubiera estado con ella. Aún recuerda lo que las voces del río le decían.
«Inútil. Es inútil seguir.»
No es que deba estar sorprendido, después de todo, ella ha sido su ancla al mundo mortal desde, ahora puede decirlo, años, y no es algo que piense en cambiar.
«¡Dioses! Ni siquiera puedo poner en palabras cuánto siento por ella.
Sé con certeza que no puedo imaginar un mundo sin ella, mi mundo sin ella.» Reflexiona mientras abraza con delicadeza el cuerpo dormido de la chica de ojos tormenta.
«¿Cómo lo hace?¿Cómo logra que el mundo vuelva a armarse aunque todo alrededor se derrumbe? Creo que son preguntas de las que no tendré respuesta, pero, estoy seguro de que entre los 7 semidioses de la profecía, Annabeth es la más peligrosa de todos, su inteligencia siempre fue el arma más afilada.» Pensó mientras acariciaba el cabello de su novia.
"Te amaré hasta que muera, en esta vida y en las siguientes." Dice mientras la observa dormir.
«Muchas personas dirán que somos muy jóvenes para pensar en una vida juntos, pero el luchar por tu vida y seguir a esa persona por el mismísimo infierno, creo que cambia nuestras circunstancias»
No pude responder al "te amo" que me dijo mientras caíamos al tártaro, pero lo hago ahora…
"Te amo, wise girl."
