Impressive Instant
By Cathain
Disclaimer: Naruto le pertence a Masahi Kishimoto.
30vicios: Recientemente me anote en esta comunidad, hare 30 pequeñas historias sobre 30 temas diferentes sobre la pareja Sasuke/Naruto. No tendran relacion entre si, cada una sera completamente independiente de la otra. Si quieren mirar la tabla esta en mi LJ podran encontrar el link en mi bio.
Vicio #1 – Limite
Te miro directamente y no lo entiendo, pero ya no me importa... finalmente alcance mi límite. Ya no daré un paso mas, ya no soñare con ser Hokage, ni siquiera con seguir siendo tu amigo... No hay otro camino para mi, Sasuke.
Tenia que haberme dado cuenta de que alcancé el limite justo en el momento en que Sakura casi se desangra entre mis brazos hasta morir, si Sai no la hubiese separado de mi quizás estaría muerta, y ese es uno de los pensamientos que me consume cuando veo que la sangre se derrama... su sangre, mi sangre, tu sangre.
Otro momento en que debería haberme dado cuenta es cuando miro hacia el cielo y digo "Estoy cansado" porque lo estoy Sasuke, ya mi cuerpo no resiste mas; Kyuubi lo sabe y yo también. Lo noto por las miradas de lastima que me dan todos nuestros amigos.
Así te sientes tu? no tienes limites pero te dejas marcar tu destino de manera absurda por tu hermano. Itachi solo te dijo: hazte fuerte, ódiame y hazte fuerte, nunca te dijo persígueme. Yo siempre eh luchado contra los limites porque quiero ser el mejor, quiero ser reconocido por lo que soy y no por el demonio que llevo dentro, quiero ser apreciado. Podrías decir que en cierta forma lo eh conseguido pero no es así, porque quiero que tu también te sientas así, eres una de las personas mas importantes para mi, sin ti no puedo seguir y se que es un pensamiento absurdo pero no puedo hacer mi vida pensando que estas allí afuera consumiéndote en el odio y la venganza, no puedo abandonarte sabiendo que me necesitas... Pero hoy lo eh visto en tu mirada, no hay nada que pueda hacer por ti y... estoy cansado.
Mátame.
Siento como aquella maldita katana atraviesa nuevamente mi estomago y mi sangre mancha tu rostro, mientras en esos ojos rojos de aspas danzantes se refleja una ausente felicidad porque finalmente lo has conseguido... ya no seré mas un obstáculo para ti y es doloroso. Ya eh perdido la cuenta de cuantas veces has hecho esto, cuantas veces me has torturado en los pocos días que llevo encerrado en esta cueva... te complace sentir mi dolor, te deleita ver mi sangre derramarse lentamente antes de que Kyuubi me sane y puedas volver a hacerlo.
Pero hoy es diferente, lo se, se respira en el tenso ambiente. Miro mi herida y me percato de que cada vez me cuesta más sanar porque ya alcance mi límite...
-"Estoy cansado... cansado". -te digo y tu solo me miras de aquella forma ausente, sin emociones, sin nada en lo que pueda reflejarme allí dentro.
Ya no hay nada por lo cual luchar...
Cierro los ojos y me dejo arrastrar por la inconsciencia.
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Estaba recostado sobre algo suave y mullido, como una cama, mientras sentia como los rayos de luz se cuelan a través de su cortina caldeando un poco el ambiente, haciéndolo mas cómodo, dejándole sin ganas de levantarse hasta que sintio aquella corriente fría cubrir su cuerpo y cuando abrio los ojos era otra vez un niño de 7 años... estaba recostado al lado del árbol junto a su columpio, lo cual era realmente extraño porque lo ultimo que recordaba... lo ultimo que recordaba era...
Se puso de pie de golpe y comenzó a correr, primero entro en la academia pero allí no estaba ni Iruka-sensei ni nadie así que decidió ir donde la Hokage pero tampoco estaba, su siguiente parada fue el Ichiraku pero estaba cerrado, entonces siguió corriendo hasta que llego a su casa, estaba intacta; como antes, como cuando había vuelto de entrenar con Jiraiya para ir a buscar a Sasuke...
Sasuke!
Sasuke!
Comenzó a correr nuevamente hasta llegar al pequeño muelle que había a los alrededores de la casa del Uchiha y cuando estuvo lo suficientemente cerca se dio cuenta de que allí estaba su amigo, un niño de 7 años sentado en el borde, decidído llego hasta el y con la mano temblorosa se atrevió a estirarla hasta su hombro pero antes de que pudiera oyó aquella voz.
- Naruto. -llamo una voz oscura que se arrastraba suave y ágil como las serpientes.
Recordó las serpientes que mordían su cuerpo mientras aquella katana se deslizaba suave y venenosa entre su carne rasgándole, dañándole. Su cuerpo comenzó a temblar mientras quedaba congelado, a medio camino de tocar al Sasuke niño mientras el Sasuke adulto estaba a su espalda esperando que diera la cara.
- Naruto salta al agua. -ordeno con un tono de voz algo ansioso, como cierta preocupación que hacia muchos años no sentía en su voz.
- ¿Porque?. -fue lo único que se le ocurrió preguntar, sin siquiera importarle si volvían a torturarle.
- Si quieres ver a Sakura debes saltar.
- Estoy cansado. -dijo con aquella voz que le resultaba tremendamente infantil para su edad.
- Si saltas se te pasara. -dijo el otro con voz impaciente.
- No se me pasaría ni aunque durmiera una semana completa -respondió con un tono de burla muy raro en el y que Sasuke noto enseguida.
- Pensé que no existía ningún límite que no pudieses sobrepasar. -comento descuidadamente.
En ese momento Naruto perdió la inamovilidad de su cuerpo y enfrento al Sasuke adulto, estaba de pie con aquella pose de soy mejor que tu mirándole fijamente, una mirada que rehuyo completamente mientras veía hacia otro lado.
- Cuando me propongo conseguir algo lucho hasta que lo consigo, es cierto, todo eso era cierto hasta que... hasta que no pude seguirte mas...
Sintió al otro chico moverse hasta quedar arrodillado frente a el, y tomar su barbilla en un gesto gentil hasta hacerle mirarle. Cuando enfrento aquellos ojos negros como la noche se sintió aliviado porque volvían a ser aquellos ojos negros, ausentes y carentes de emociones pero vivos.
- Naruto. -volvió a llamar pero esta vez con un algo de afecto.- Salta.
- ¿Para que quieres que salte?. -pregunto el rubio frunciendo el ceño.
- Porque solo así podrás volver con nosotros. -dijo rodando los ojos ante lo terco que podía ser el rubio.
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Cerro los ojos y en cuanto los abrió se encontró recostado sobre una cama en una habitación oscura con un Sasuke adulto sobre el, mirando directamente a sus ojos y con el sharingan activado. Sintió un calor asentarse de golpe sobre sus mejillas antes de quitárselo de encima de forma ruda, haciéndole caer fuera de la pequeña cama. Se sentó azorado mientras observaba al otro chico desde su posición... era raro, lejos de parecer molesto parecía aliviado.
Lo siguiente que vio fue a la Hokage entrar a la habitación inspeccionándola con curiosidad y en cuanto lo vio despierto se acerco a el y le dio un efusivo abrazo.
- Ya estas bien... -dijo la rubia con la voz temblorosa.
Sasuke se levanto sacudiendo su pijama como si fuese lo mas normal antes de mirar de soslayo aquella escena y sin ánimos de interferir se decanto por acostarse nuevamente en su cama, ya mañana tendría que aguantarse al dobe otra vez, pensó con una sonrisa. Sabia que funcionaria aunque había quedado cansado, llevaba ya 2 horas en la cabeza de Naruto y todo lo que había visto, todo lo que tuvo que hacer para traerle de vuelta le dejo tanto emocional como físicamente agotado.
Cuando Tsunade finalmente le dejo en paz, después de hacerle un chequeo, se volteo hacia Sasuke y puso su mano sobre su frente.
- Oba-chan... que sucedió?. -pregunto extrañado, nada de lo que recordaba coincida con lo que estaba pasando.
La rubia suspiro terminando de revisar al otro shinobi, solo estaba con algo de fiebre, debía estar muy agotado después de lo que había hecho. Sabía en el fondo que el Uchiha seria capaz de ayudar a Naruto aun cuando todos se negaban. Aquella noche había decidido cerrar aquella puerta con llave hasta que oyera alguna cosa fuera de lo normal. Había sido una larga espera. Acaricio la frente perlada en sudor con algo de afecto, a pesar de todo lo que había hecho sufrir al rubio, le estaba agradecida por traerlo de vuelta y salvarle, estaba consciente de que Naruto estaba perdiendo aquella llama que siempre le caracterizaba y ahora seguro que no la perdería. Se dio la vuelta mirándole algo enfadada mientras pensaba como le respondería.
- Eres un baka, eso es lo que paso. -soltó molesta- Caíste en las garras de Akatsuki gracias a una trampa que te puso Itachi, te logramos rescatar antes de que te sacaran al Kyuubi... pero tu cuerpo estaba maltrecho y tu mente estaba perdida Naruto... creímos que no saldrías de esta.
El rubio la miro sorprendido, el no recordaba nada de eso.
- Pero que dices!. -acuso molesto- Lo ultimo que recuerdo es a Sasuke... a Sasuke torturándome día tras día y ahora me despierto aquí... no entiendo nada.-susurro a lo ultimo con la mirada perdida.
- Sasuke no te hizo nada de eso, fue Itachi, te envolvió de tal manera... Estabas atrapado en un poderoso genjutsu del que era imposible sacarte por métodos normales. Por eso deje que él lo intentara... no se perdía nada.
Se acerco al rubio nuevamente y le dio un beso en la frente como despedida. Deteniéndose ante la salida le dedico una mirada comprensiva.
- Trata de descansar que seguro mañana tendrás un día movido. Buenas noches. -dijo antes de cerrar la puerta y dejarle sumido en sus pensamientos.
Tras meditarlo y sin entenderlo totalmente decidió a que esperaría que Sasuke despertara y le explicara todo. Lo observo descansar sobre una cama cercana a la suya, dormido se veía relajado, su rostro podría mostrar cualquier emoción que estuviese sintiendo en sus sueños. Tenia una expresión adolorida que no le gusto para nada así que bajando de la cama se acerco a la otra, poso su mano sobre su frente algo húmeda por el sudor mientras terminaba de mirar todos los cambios en su cuerpo, quizás su rostro era el mas cambiado, se veía terrible con esas ojeras pero a pesar de eso parecía haberse aliviado al momento en que su mano había entrado en contacto con su piel.
Decidido se acostó junto a el, arropándolos a ambos y descansando su frente sobre su hombro. El cuerpo de su amigo era calido y reconfortante, totalmente diferente a las manos frías que lo torturaban en sus recuerdos. Este Sasuke si era el Sasuke que recordaba.
- Gracias. -fue el murmullo que se oyó antes de que la habitación se sumiera en un silencio apacible.
Fin.
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