Hola XD!
Aquí con un nuevo fic del cual ni siquiera sé que sucederá después del capítulo 3 je je je pero ya no me he resistido para publicarlo.
Ya no interrumpo más.
D. Gray-man y sus personajes son propiedad de Hoshino Katsura-sama.
=°w°= =°w°= =°w°=
Capítulo 1 - Orejas de Conejo
Era un hermoso día: el sol brillaba, el cielo de un intenso azul estaba despejado, las aves cantaban y las mariposas revoloteaban ayudadas de la refrescante brisa. Este grandioso día era ignorado por una persona rodeada de libros y documentos, en una amplia pero escasamente iluminada estancia, repleta de estantes con libros de diferentes tamaños y grosores.
-Jiji, por favor... llevo una semana aquí encerrado... por favor -suplicaba un pelirrojo con voz débil, recostado sobre libros abiertos con los ojos en blanco y su alma saliendo poco a poco de su cuerpo.
-... -el hombre mayor continuó con su lectura.
-Jijiiiii.
-... -con una venita en su frente.
-Jijiiiiiiiiiiiiiiii -rogando con voz chillona.
-... -tres enormes venitas.
-¡Panda-jiji! -gritando molesto por ser ignorado.
¡Paz!
Lavi recibió un zarpazo en la cabeza que lo hundió aún más entre los libros, quedándose aturdido por la fuerza del golpe.
-¡Vuélveme a llamar Panda y te quedarás un mes encerrado sin comida! -le grita furioso- márchate ahora -dándole la espalda- y no quiero más quejas... -pero la frase murió en su boca ya que al girar lo único que encontró fue una nube de humo y la puerta abierta.
-Gracias Jiji -se escuchó en la lejanía la voz de Lavi.
-Mj... estúpido mocoso -esbozando una media sonrisa.
-¡Siiiiiiii! ¡Soy libre! -gritaba emocionado mientras brincaba y corría con gran energía.
-Ku ku ku ku.
Lavi era observado desde las sombras.
-... -se detuvo por completo sintiendo un escalofrío recorrer su espalda- tengo un mal presentimiento.
-Hola Lavi-kun -saludo un sonriente Komui.
-Esto es malo -con una gotera en la cabeza y retrocediendo poco a poco, sudando frío.
-¿A dónde crees que vas? -sacando un pequeño control del bolsillo de su bata- Komurin XXXIII no permitas que huya -oprimiendo un botón.
-¡Kyaaa! -Lavi fue levantado por un robot de 2.5 metros de alto con grandes y largos brazos que lo sujetaban por los costados.
-Ahora Lavi-kun ¿verdad qué me vas a ayudar? mua ja ja ja ja ja -reía siniestramente mientras que un aura maligna salía de su cuerpo.
-¡Nooooooooo! -gritaba intentando zafarse sin éxito alguno y llorando a mares- soy muy joven y apuesto para morir.
-Descuida Lavi-kun, será muy rápido -con una máscara antigás puesta.
-... -azul del miedo por lo que pudiera provocar la pócima que sostenía en la mano derecha el científico loco.
Una enorme nube de humo se levantó después de que Komui lanzara el frasco contra Lavi.
Lenalee quien estaba cerca cuando escuchó la risa malvada de su hermano se acercaba con cautela mientras esperaba que el humo de donde provenía la carcajada de su hermano se despejara.
-Lavi-kun -se sorprendió la china al ver al pelirrojo sujetado por una de las invenciones de su hermano.
-¡Nii-san, deja en paz a Lavi! -le reprendió.
-Pero si él se ofreció como voluntario Lenalee-chan -con una inocente sonrisa.
-Nii-san -enojada- Inocencia actívate -sus botas carmesí aparecieron y destrozó la cabeza del robot con una patada. Los brazos aflojaron su agarre y Lavi cayó, pero Lena lo sujetó poco antes de estrellarse contra el piso.
-¿Te encuentras bien Lavi-kun? -preocupada.
-Si, aunque me siento un poco mareado -recargándose en la pared.
-Nii-san ¿qué tipo de poción utilizaste contra Lavi-kun?
-Pues la idea básicamente era volverlo más "adorable" pero sigue siendo igual que siempre así que tal vez no ha dado resultado. Nos vemos -sale corriendo a toda velocidad.
-¿Más adorable? ¿Y cómo se supone que debería verme para ser más adorable? -con fastidio.
-Discúlpalo, en ocasiones ni yo misma sé que pasa por su cabeza ¿aún te sientes mareado?
-Sí, pero es muy poco, debe ser también porque no he dormido y me salté el desayuno.
-Entonces vayamos a comer, ya casi es la hora.
-Suena bien -separándose de la pared.
Ambos se encaminan a la cafetería. Cada uno hace su pedido. El comedor estaba lleno pero al fondo logran vislumbrar una mesa vacía en la que se van a sentar.
-Hola Yuu -sonriente.
-Tsk -le lanza una mirada asesina.
-Veo que hoy también estás de buen humor.
-Hola Kanda ¿qué tal tu misión?
-... -sigue comiendo soba, negándose a responder.
-Kanda -molesta, alzando el tono de su voz.
-Bien -con hastío.
-Me alegro -sonriendo.
-En ocasiones Lena me da miedo -pensaba un pelirrojo con una gotita en su cabeza.
Comieron tranquilamente hasta que Kanda se levantó.
-Sabía que eras un baka usagi -y se marchó
Sus compañeros no entendieron el porqué de su comentario y se miraron confundidos.
-¡Lavi! -soltó la peliverde señalando la cabeza del mayor y cubriendo su boca con la mano libre.
-¿Qué? -comenzó a palparse la cabeza con ambas manos- pero qué demonios -sintiendo algo suave y peludo- acaso son...
-¡Orejas de conejo! -completó con alegría su pensamiento- pero que lindas son -emocionada.
-¿¡Cómo qué lindas! Esto no está bien ¿cómo es qué...? -suspirando- debe ser culpa de la poción de Komui -deprimido, sus orejas decayeron también.
-Te ves tan adorable ¿puedo tocarlas?
-Lena eso no me ayuda -llorando.
-Por favor, sólo un momento.
-... ni siquiera me estás escuchando -viéndola con cara de pocos amigos ¬_¬
-¿Siii? -con rostro de que no rompe ni un plato.
-... -molesto- solo un momento -hablando a regañadientes.
-Arigato Lavi-kun -las toca- son tan suaves -apretándolas.
-¡Ay! no tan fuerte -sujetándose la cabeza.
-Lo siento mucho. Son tan lindas -feliz con la chapitas sonrosadas. (N/A no sé si me explico es cuando les ponen un ovalito rosado en las mejillas, normalmente cuando están chibis, si alguien me recomienda una mejor manera de describirlo se los agradeceré mucho)
-...
-... -complacida continuando con su labor.
-... -tratando de ser paciente.
15 minutos después.
-¡Ya basta! -explotó el pelirrojo- ¡dije solo un momento!
-Pero Lavi -con un puchero- es tan irresistible el no tocarlas.
-Pues en ese caso me voy -se levanta y toma su charola- y dile a tu hermano que quiero una cura ¡y qué sea pronto! -irritado, elevando la voz.
El pelirrojo comienza a caminar. Los murmullos no se hacen esperar, después las risas y las frases compasivas.
Dejó con fuerza la bandeja con los trastos sucios sobre la mesa y la mayoría guardo silencio. Furioso salió del comedor.
-¡Kyaaa! -gritó y se giro mientras sus manos cubrieron su trasero.
-Lo siento Lavi-kun -con gesto angelical.
-Como que "lo siento" -con un tic en el ojo.
-Es que tu colita se ve tan esponjocita que no lo resistí.
-¡¿Qué acaso piensas seguir manoseándome?
-Mmm... -pensativa colocando el dedo índice a un costado de sus labios.
-No es posible que lo esté pensando -con una gotera.
-Sí -sonriendo- solo un poco más -con ojos de cachorro.
-¡Jamás! -y sale corriendo tanto como sus piernas se lo permiten.
-Lavi espera -gritaba la china mientras seguía al mayor.
Y toda la tarde Lavi estuvo escapando, dificultándosele la tarea ya que la peliverde activó su Inocencia para no permitirse perderlo.
=°w°= =°w°= =°w°=
En el comedor
-Buenas noches Jerry-san.
-¡Allen-kun! Qué alegría que hayas vuelto de tu misión. Me imagino que has de tener hambre.
-Sí -afirmando con la cabeza.
-¿Y qué deseas ordenar?
-Mmm… me gustaría pollo frito, tallarines, estofado, arroz con un huevo estrellado,… (cincuenta platillos más tarde) y 20 dangos.
-Muy bien. Enseguida tendré tu pedido Allen-kun -respondía un radiante cocinero.
Después de una deliciosa cena y un relajante baño en las aguas termales, sintiéndose agradecido como pocas veces de que Komui las hubiera cambiado por las regaderas, se dirigió con parsimonia a su habitación.
-¡Allen!
Giro para saludar a la peliverde -buenas noches Lenalee.
-Bienvenido, es bueno tenerte de regreso.
-Estoy en casa. Gracias.
-¿No has visto a Lavi por aquí?
-¿Lavi? No -negando con la cabeza- vengo de ducharme y tampoco estaba ahí ¿lo necesitas con urgencia?
-Así es, llevo toda la tarde persi-buscándolo -corrigiéndose- ja ja ja -riendo nerviosamente.
Ladeando la cabeza, no entendiendo- si llego a verlo le diré que lo buscas.
-¡No! -interrumpiéndolo bruscamente- mejor dile que mi hermano desea que vaya a la oficina -moderando el tono de su voz- creo que me está evitando así que si le dices que yo lo busco dudo vaya a acceder.
-... -preguntándose el por qué Lavi evitaría a la china -descuida yo se lo diré -fingiendo una sonrisa.
-Gracias Allen. Descansa. Hasta mañana.
-Hasta mañana.
El albino siguió a la joven hasta que desapareció de su vista.
-Mj, se ve que tenía muchas ganas de verlo -cabizbajo.
Retomó el camino a su habitación.
Entró y dejó sus cosas sobre el escritorio. Se quitó el saco y los guantes. Se acostó boca arriba en la cama después de quitarse las botas y cubrió sus ojos con su brazo.
El golem dorado salió del saco y comenzó a volar por la habitación.
-Tim, ven a dormir conmigo.
-¿Yo también puedo dormir contigo? -preguntó una traviesa voz.
-Si... espera un momento ¿quién es yo también? -se sentó alarmado y con los ojos abiertos por la impresión.
-Bienvenido Allen-kun -dijo un sonriente pelirrojo.
-Lavi... -sus mejillas se tiñeron con un ligero carmín- … -miró con más detenimiento sobre su cabeza- ja ja ja -comenzó a reír con tal intensidad que se recostó de nuevo con las manos en el estómago- ja ja ja pero ¿qué se supone que haces ja ja ja con orejas de conejo? -intentando preguntar entre risas.
-No me hace gracia -con cara de pocos amigos- y son MIS orejas -recalcando la penúltima palabra.
Minutos después el albino se incorporó de nuevo, secando las lágrimas de sus ojos por tanta risa- ¿cómo que tuyas? -ya un poco más tranquilo.
-Fue culpa de Komui -molesto- he sufrido tanto durante el día y ahora tu llegas y te burlas -sus orejas decaen a los costados.
-Lavi... -sintiéndose mal- lo siento no era mi intención...
-... -fingiendo llorar- eres muy malo -cubriendo su rostro.
-Discúlpame -no sabiendo qué hacer, sintiéndose peor.
El pelirrojo lo mira entreabriendo un poco los dedos, complacido porque su actuación dio resultado.
-Dame un caramelo y tal vez podría sentirme mejor -aun cubriendo su rostro.
-¿Un caramelo?
-Un chocolate, una paleta. Algo dulce.
El menor se levanta y dirige hacia el escritorio, buscando en todos los cajones hasta poder encontrar algo que ofrecerle al mayor.
-¿Está bien con esto? ¿Te hará sentir mejor? -hablando con suavidad y ofreciéndole 3 pequeños dulces redondos con envoltorio rosa.
-¿En serio puedo tomarlos? -sorprendiéndose de que el albino tuviera algo comestible en su habitación, sabiendo muy bien sobre su afición a la comida.
-Por supuesto -con una tierna expresión.
-... -los tomó y un sonrojo tenue se posó en sus mejillas.
-¿Y cómo ocurrió? -señalando sus orejas y tomando asiento muy cerca del otro.
-Komui quería probar una fórmula nueva que según él volvería más "adorable" a Lenalee pero creo que fui la primera persona que encontró y decidió experimentar conmigo -con pesar.
-... Ya veo, que mala suerte -con una gotita.
-Pero eso no es lo peor -llorando- Lenalee se obsesionó con tocar mis orejas y mi rabito y me persiguió por toda la Orden, incluso activó su Inocencia para alcanzarme snif, snif, fue horrible. Por fortuna pude perderla unos instantes y aproveché para esconderme en tu habitación. Espero no te moleste -mirándolo a los ojos con lagrimones, limpiándose su ojo visible.
El albino se sonroja por la escena, las orejas le daban un toque de ternura que volvían al pelirrojo violable para cualquiera que lo viera. Incluso para nuestro inocente albino.
-N-no. N-no te preocupes -desviando la mirada totalmente sonrojado y tartamudeando.
El ojo del pelirrojo destelló y una traviesa sonrisa apareció.
-Ne Allen-kun ¿no te molesta si yo también te doy un dulce? -con voz cantarina.
-¿Por qué habría de molestarme? -girando para verlo.
El ojiesmeralda lo tomó de la nuca y lo besó sin aviso alguno. El albino paralizado abrió sus ojos totalmente desconcertado. Pocos segundos después los fue cerrando con lentitud y correspondió el beso. Al ser su segundo beso (ya que Road le había robado el primero) su respuesta era algo torpe pero al pelirrojo no pareció molestarse. Lo besaba lánguidamente queriendo disfrutar esa nueva y maravillosa experiencia. Desgraciadamente el oxígeno se les acabó y se vieron obligados a separarse pero sus rostros solo estaban separados por exiguos centímetros.
Se miraban fijamente. El albino con un carmesí más intenso que su compañero, respirando audiblemente.
-Allen... me gustas -con una mirada tan cálida que casi derrite al menor.
-Lavi -con los ojos cristalizados- ¿lo dices enserio?
-Jamás bromearía con algo como esto.
Las lágrimas por fin brotaron -te quiero Lavi -y lo abrazó con todas sus fuerzas.
El conejito correspondió el gesto y se mantuvieron así durante varios minutos. Cuando se separaron lo hicieron con una gran lentitud, tomándose de las manos y viéndose con gran amor. Sin decir ni una palabra. El simple hecho de estar uno al lado del otro era suficiente.
-Lavi... mmm... yo... -tímido.
-¿Si Allen-kun? -ladeando un poco la cabeza.
-Podría... mmm... si me permites- fijando y desviando la mirada continuamente.
-¿Si? -animándolo a continuar.
-Bueno, es que... -bajando el rostro.
-Vamos dilo -desesperándose.
-¿Puedo tocar... tus orejas? -inocentemente.
-¿Mis orejas? -decepcionado.
-Claro, si quieres -creyendo que el mayor se molestó por su petición.
-Descuida, no hay problema, pero hazlo con suavidad ya que son muy sensibles.
-Descuida, lo tendré -emocionado. Se pone de pie frente al mayor y las toma con sumo cuidado -¡vaya! son realmente suaves.
-... por favor, que no se ponga como Lenalee -rogando, comenzando a sentir un poco de miedo.
En su afán de seguir tocando las orejas el albino pega su cuerpo al del pelirrojo sin darse cuenta. El ojiesmeralda no soporta más y con un rápido movimiento lo acuesta boca arriba de la cama subiéndose sobre él con sus piernas a los costados del menor.
-La-lavi -sonrojado y muy nervioso.
-Shhh -se inclina lentamente para besarlo. El beso comenzó dulce pero poco a poco se tornó apasionado. Se separaron para respirar. Lavi delineó el contorno de los labios de SU ahora amante, ejerció un poco de presión en el centro, el otro abrió con timidez su boca pero en cuanto las lenguas se rozaron el calor de ambos aumentó y el beso se intensificó. El pelirrojo colocó los brazos del albino alrededor de su cuello y no perdió tiempo para recorrer el cuerpo bajo el.
...
=°w°= =°w°= =°w°=
Las dejé picadas je je je ¬w¬
Descuiden el próximo capítulo habrá Lemon XP.
Disculpen los errores que llegué a tener pero la emoción y las ansias de publicar el fic pudieron traicionarme. Lo siento. -_-'
Con este fic no se cuanto tiempo tarde en actualizar pero espero no sea demasiado.
O.o Me sorprendo de la extensión que alcanzó el cap.
Bye bye =°w°=
Por favor jitomatazos no, mejor pastelazos y si son de chocolate mejor je je je.
