Disclaimer: No soy rubia, ni inglesa ni millonaria y si los personajes fuesen míos estarían vivitos y coleando.
Dedicado a mi amiga Teresa, que adora a Sirius y desgraciadamente está pasando un mal momento.
Si tú a Sirius Black en su época de Hogwarts le hubieras dicho que acabaría en una celda de Azkaban condenado por traicionar a James y a Lily, se hubiese reído en tu cara y te habría aconsejado que dejases la marihuana.
Y ahora él necesita la marihuana para olvidar, porque James, está muerto, y Lily con él.
Todo por culpa de una maldita rata.
Se siente mal, porque fue él quien aconsejó a su hermano que nombrase Guardián Secreto al traidor.
Porque desconfió de Remus, teniendo delante de sus narices a un miserable que vendería a su abuela por un knut.
No puede, no puede seguir sin su Cornamenta, su amigo, su hermano, su confidente.
Sin las broncas, los abrazos de oso y los bizcochos de Lily.
Joder, no puede vivir sabiendo que el pequeño Harry, lo único que le queda de sus amigos, va a crecer sin padres, sin nadie que le consienta todos sus caprichos.
Porque todo eso se lo recuerdan los putos dementores, y una pequeña parte de su mente quiere dejarse arrastrar por la locura y olvidar.
Olvidar quién es y en qué cree. Olvidar que ha luchado hasta el final en la estúpida guerra organizada por el estúpido psicópata que ha matado a su James y a su Lily.
Pero Sirius no quiere, no quiere olvidar a los Merodeadores, las risas, las travesuras.
Los reproches de Lily, los llantos de Harry, la paciencia de Remus.
Las charlas de James sobre "Evans me ha rechazado... otra vez", las miradas cómplices, las mentiras, las ideas geniales.
Las veces que Cornamenta y él salían a fumar marihuana intentando que Lily no les pillase y empezase con su discurso de "¡No contaminéis el aire de mi hijo!".
Las broncas de McGonagall, los castigos, las insolencias y descaros.
Los correteos bajo la luna llena, las transformaciones, los intentos de Remus de morder al primero que pasase al lado.
No quiere olvidar que tiene una cuenta pendiente con Peter que va a saldar cuando salga.
Porque sí, él va a salir de Azkaban. No sabe cómo, pero ya se le ocurrirá algo.
Dicen que es imposible. Tampoco es que nadie lo haya intentado.
Pero él es Sirius Black. ¿Por qué no va a poder fugarse?
Al contrario de todos los presos, no se ha vuelto loco en todos los años que lleva encerrado allí, aunque tenga eternamente 21 años, que es la edad a la que dejó de existir, porque Black sin Potter no es nada.
O tal vez sí esté loco, pero le viene de antes. De Hogwarts, de los Merodeadores, de Cornamenta. De tiempos mejores.
Al fin y al cabo él es un Merodeador. Es Canuto.
Y tiene tres buenas razones para escapar.
Harry, Remus y la venganza.
Porque Sirius Black tiene buena memoria. Puede acordarse toda la vida de algo que hayas hecho mal y reprochártelo o echarse unas risas.
Puede olvidar cualquier cosa, menos una traición.
Y no se va a olvidar de su pequeña cuenta pendiente.
Espero que os guste. Cortito, lo sé.
