Disclaimer: Los personajes aquí usados (excepto Amber), NO me pertenecen. Todos son de JK Rowling.

Nota: Bueno, llevó años (mentira), pensando en esto. Es un potencial badfic con una potencial Mary Sue, porque yo tengo ese extraño poder de crear potenciales Mary Sues, así que, si alguien ve algo potencialmente terrible: DÍ-GA-ME-LO. La historia está en primera persona, algo que nunca había hecho y más o menos habla sobre la vida de Regulus. Digamos que la vida de él nunca ha sido abordada y, tengo una opinión sobre él. Una opinión que quizás va fuera del IC. Bueno, es culpa de Rowling por dejar tantos huecos. Yo sé, dentro de mí, que Regulus admiraba a Sirius y viceversa. Pero bueno, mucha platica y poco fic. Disfrutenlo y díganme lo que opinan. Grazie.

Prologo

Hace tiempo que no me sentía tan vivo.

Las sombras oscuras de la cueva hacían artimañas a mí alrededor. Podía ver con borrosa claridad lo que sucedía. Era como si no estuviera ahí, pero… también era como si estuviera ahí.

Merlín, tenía tanta sed en ese instante, una sed que me estaba dejando sin aliento. No sabía cuánto había pasado. ¿Un minuto, una hora, un milenio? El tiempo era tan relativo ahora.

Cuando Kreacher soltó mí mano y murmuró un: no lo dejare amo, volveré por usted, sólo pude sentir una sonrisa torcida en mis labios. No Kreacher, no debes volver, creo que le dije. Sólo vete, y gracias, se un buen elfo y no le digas a mamá qué me sucedió.

Creo que se fue.

Sí, ahora estoy seguro de que así fue. Abrí mis ojos (o eso creí), y miré de nuevo las extrañas figuras que danzaban frente a mí. ¿Por qué? No, la pregunta es, ¿para qué? Debí haberle hecho caso a Sirius cuando me lo advirtió… pero no. No lo hice. Sirius no me entendía, no comprendía la presión. Él lo tuvo fácil, sólo decidió salir de casa y nunca volver… el peso de los Black cayó en mí.

¡Tan fuerte cayó el peso sobre mí! Privado de querer, de soñar y añorar una vida medianamente normal. Ahora yo era el único hijo de Orión y Walburga Black. ¡El único heredero! Maldigo el día en que decidiste dejarme solo Sirius. De verdad maldigo el momento en que desapareciste por esa puerta y me dejaste ahí, con sólo dieciséis años y la mano de mi madre en mi hombro, diciéndome: Olvídalo Regulus, él nunca fue tu hermano. Ahora tienes sobre ti, todo el poder y prestigió de los Black.

Tú pudiste amar, romper, hacer y crear lo que querías. Nadie te podría detener, ni privar de una vida normal… De la vida que yo merecía. Vida que me quitaste. Siempre te admiré hermano, siempre lo hice y quería que me vieras como un igual… tenías razón sobre mí. Sólo he sido un lamesuelas, ahora entiendo que los ideales de Voldemort estaban mal. Pero no me di cuenta hasta que dañó a quién más me quería. Y pretendió herir a quién más amaba…

Me estire, agotado por la sed. La soledad era abrazadora y el sudor frío corría por mi cara, demostrando que lentamente me iba secando, me iba haciendo parte de la nada. Mi consciencia apenas reaccionaba, y pude ver y sentir lo que siente la gente que está por morir. Puedo ver la oscuridad, puedo escuchar el vacío y sentir la paz abrumadora… ahora todo estaría bien.

Todo estaría bien pero… espera, ¿qué es eso? ¿Es… es acaso ella? No, debía ser una broma. Pero está ahí, sonriéndome como en antaño, cuando pude reírme con ella, sin preocuparme por mi estúpido hermano, sin angustiarme del, ¿y qué dirán? Estoy hablando con una sangre sucia. Creo que puedo ver mi vida pasar frente a mis ojos. Qué grato.

La primera vez que nos vimos. Tú, sentada en el suelo, recogiendo papeles que un compañero de Slytherin había arrojado al suelo. Tú, maldiciendo por lo bajo, con tu cabello rubio sujetado en una coleta. Y yo. Yo, deteniendo mi paso para ayudarte a recoger tus cosas. Tú sonriéndome. Yo sonrojándome. Tu disculpándote por tu torpeza. Yo, murmurando incoherencias. Juntos, riéndonos.

Eras un año mayor que yo. Eras de la edad de Sirius. Eras de Ravenclaw. Te llamabas Amber Ericson. Tenías tres hermanos. Eras sangre sucia, y sabes algo, no me importó ser tu amigo y amarte en secreto.

Hola Amber, hola Sirius. Gracias a ambos. Adiós chicos, los quiero a ambos.

Un review para dominarlos a todos,

y en la oscuridad atarlos.

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