LA USURPADORA
Notas de la Autora:
Hola lectores, en esta ocasión les traigo otra historia basada en la obra de la mangaka Rumiko Takahashi y que surgio con mis platicas con Allison Sagat.
En esta ocasion he decidio hacer un fanfic del triángulo amoroso de Kikyo x Inuyasha x Kagome, con un poco de mi pareja favorita Sango x Miroku.
Capítulo I: El encuentro
Ella despertaba contenta por aquella velada junto al hombre de sus deseos Onigumo Takeda que era diez años mayor que ella, pero para Kikyo Houshi igual lo deseaba. Pese al compromiso que sus padres y su tio abuelo habian acordado con el menor de los herederos Tashio.
Se movio lentamente de la cama, cubriendo su desnudez con la sabana roja, se levanto y comenzo a vestirse. Al no sentirla en la cama su amante se desperto y la observo atentamente mientras cubria su perfecta silueta desnuda con sus prendas.
-Fue fantastico lo de anoche- mirandola perversamente.
- Lo sé, Onigumo – suspiro- Sabes deberiamos vernos más antes de mi boda.
-Pero querida ¿no te sientes mal de engañar a Inuyasha?
-Que va, cariño- colocandose las zapatillas rojas- El es un niño mimado lo que mi familia desea para no desheredarme.
-¿Y yo soy lo que deseas?- dijo coquetamente el hombre de cabellos negros.
- Por supuesto- acercandose a el para darle un apasionado beso de despedida- Nos vemos y espero me visites en la empresa.
La pelinegra salio rapidamente de aquel departamento colocandose unas gafas oscuras, una mascada y una gabardina color beige para ocultar su presencia de los reflectores, aun tenia una imagen de heredera exitosa y brillante comprometida con uno de los solteros más cotizados del momento. Pero su reputación podria irse al pique, al saberse que mantenia una relación prohibida con un importante socio de su tio Mushin, aunque al principio habia sido despecho por su rompiento con el guapo Koga Wolf, pero ahora estaba más que ilusionada e incluso no le importaba que su amante fuera mayor que ella y menos que estuviera casado con Tsubaki.
Se subio al automovil comenzo a manejar con rumbo a la empresa de su familia, al llegar se despojo de las prendas que servian para ocultar su identidad ante las personas, al bajar del vehiculo emprendio su camino molesta por todos los pendientes que habia dejado el abogado y su hermano Miroku antes de su inesperado viaje.
Camino por aquel pasillo, llegando a la oficina de su hermano mayor en donde reviso las carpetas que le habia dejado al lado habia una fotografia de su familia en la graduación del ojiazul (estaban su padre, su madre, seguidos por su tio abuelo Mushin abrazandola a ella y mientras su hermano mostraba su titulo llevando una toga y virete puestos).
Su hermano era un joven intachable, recto, organizado y a lo contrario de ella se preocupaba por mantener su imagen pulcra para dañar con ello la empresa. Pero a Kikyo solamente ñe onteresaba ser rica, hermosa y verse joven, que todas las mujeres la envidiaran. El telefono comenzo a sonar interrumpiendo sus pensamientos y contesto.
-Señorita, Houshi tiene una llamada- decia la secretaria de su hermano.
-Gracias, Koharu- indico y espero que le comunicara- Hola, habla Kikyo Houshi.
-Kikyo, querida- dijo una mujer tras la linea.
-Hola, madre.
-Querida necesito que nos acompañes a Shima y a mi con la modista.
-Por dios, madre- dijo rabiando- Falta año y medio para mi boda.
-Hija mia, debes de poner un alto en tu actitud... Sino alguien podria ganarte a Inuyasha.
-Madre- dijo molesta.
-Bueno espero que tomes un tiempo para que te pruebes el vestido de dama de honor para la boda de tu hermano y Shima- aumentando su tono de voz- Ella quiere casarse en cuanto el vuelva y por ello debemos ...
-Luego te llamo, madre- colgandole.
Al terminar los encargos que su hermano le hizo la pelinegra salio apurada y al salir de la empresa se encontro con su amiga y futura cuñada, Shima Fujimoto.
-Cuñis ¿nerviosa con tu compromiso?
- Ya te lo dije. Shima- bebiendo un trago- No me ilusiona mi boda con Inuyasha.
-Pues que mal, porque a mi me emociona casarme con tu hermano- luego puso un tono triste y cruzo los brazos- Pero a diferencia de mi, el no hace más que retrasar la boda y eso me pone triste.
-Es por su noviecita la pobretona- bebiendo más- Pero tu vales más, Shima.
-Lo sé, pero esa odiosa castaña-haciendo un puchero- ¿Cuñis, no entiendo porque no la olvida?
- No lo sé- hizo una pausa pensando sus palabras- Tu eres exitosa, rica y popular, mientras que Sango no es nada.
-Disculpen, señoritas- se acercaron un par de jovenes- ¿podriamos acompañarlas?
-Por supuesto- dijo la heredera Houshi.
-Pero, cuñis- dijo la otra chica confundida – Estamos comprometidas.
-No pasa nada, Shima- sonriendo.
Los hombres se sentaron junto a ellas ofreciendo que bebieran lo que deseaban, mientras transcurrian los minutos los cuatro parecian grandes amigos y mientras el alcohol aumentaba la rectitud de Shima comenzaba a romperse pues ahora se encontraba besando al chico rubio, mientras el castaño le hacia insinuaciones y de las que ella sonrio. Minutos más tarde los tres se marcharon rumbo a un hotel del amor, "Shima lo merecia" dijo mentalmente la pelinegra debia disfrutar sus meses de aventura y mientras Kikyo continuaba bebiendo sola.
XXX
Kagome revisaba los estados de cuenta de su tarjeta, estaba cansada de las deudas que su padre los dejo cuando los abandono y de las que le habia dejado Houjo su novio que la habia engañado. Pronto se marcho de Okinawa a la cuidad de Tokio para ayudar su familia, luego de llegar conocio a una joven madre soltera llamada Sango y a su pequeño hijo Kimori con quien rentaba un pequeño departamento, ambas trabajaban de meseras en un club nocturno.
-Dime, Sango- llamando la atención de la castaña- ¿Vas a irte temprano hoy?
-En media hora- moviendo la charola entre sus manos- Mañana tengo una entrevista de trabajo y tengo que ver con quien dejar a mi hijo.
-Sabes, te veo algo preocupada-suspiro- ¿Sucedio algo entre tu y el jefe?
-Lo mismo de siempre, Kagome- desanimada- Ya no lo aguante y decidi renunciar.
La castaña se marcho rumbo al vestidor para recojer sus cosas, mientras la azabache se dirigio hacia su jefe y renuncio como su amiga, se habia cansado de ver como el jefe hostigaba sexualmente a su amiga para conseguir llevarla a la cama y prometiendole una vida llena de lujos a cambio de ser su amante. Pero ella estaba cansada de los hombres, ya que tuvo una mala experiencia con el padre su hijo, un joven ojiazul atractivo, rico y que la abandono embarazada para casarse con otra.
Sango se comenzo a cambiar en el vestidor, mientras la pelinegra entro al tocador chocando con una joven de piel blanca, cabello negro y con ropa elegante.
-Disculpe, señorita ¿se siente bien?
-Por supuesto- dijo la mujer mirandola de reojo- Sabes me suenas familiar ¿te conozco?
-No lo creo, señorita- ayudando a la mujer a caminar.
-Sabes, creo que nos parecemos un poquito-hizo un gesto con la mano para indicar que se colocara frente al espejo- ¿Dime tu eres?
-Kagome Higurashi.
-Encantada, Kikyo Houshi.
Ambas se colocaron frente al espejo observandose detalladamente era verdad eran identicas, salvo por algunos detalles que un estilista y un diseñador de imagen podian corregir , mientras Kagome aun la miraba confundida, la mente de Kikyo ideo un plan para evitar a su prometido.
-Kagome, te tengo una propuesta con la que obtendras una gran suma de dinero- hizo una pausa – Sólo quiero que te hagas pasar por mi .
XXX
Miroku se encontraba estresado preparando unos documentos mientras observaba de reojo el portarretrato que lo acompañaba en todos sus viajes, en el habia una foto de una bella chica castaña en un bello campo de flores que vestia un uniforme de marinero y traia el cabello atado en unas trenzas sonriendo feliz; sin saber lo que el futuro les depararia en su relación.
En aquel día ella tenia dieciseis años y él veintiun años, ya habian pasado casi siete años sin verla, tomo el cuadro comenzo a tocar con sus dedos la silueta de la chica, mientras su mente comenzo a viajar recordando los besos, las caricias y el calor de su piel fundirse con él de Sango. Mientras su corazón se quebraba al saber que ella desaparecio de su vida meses antes de que el se matriculara para que estudiara Derecho en la Universidad de Harvard y que se enterará que se uniria a otra mujer que no amaba, comenzo como de costumbre a hablarle al retrato.
-Sabes, Sanguito nunca dejaré de pensar en tí y ni de amarte...
Una lágrima caia de aquellos ojos záfiros, mientras su celular comenzó a sonar y trato de mantener su voz agradable como de costumbre.
-Hola socio- suspiro- ¿Alguna novedad en Chibuya?
-Ninguna, excelencia- suspirando- Como te dije hace dias ella no vive desde hace años con su familia, es dificil hayar pistas de una persona...parece que a Sango Taijinya se la trago la tierra.
-Hachi, no pienses de esa forma y sabes que tengo el dinero suficiente para que continues buscando.
-Pero, joven Miroku- haciendo una pausa- Pero ¿No pronto regresará a Tokio para casarse con la señorita Shima?
-Gracias por recordarmelo- dijo en un tono molesto- Sigue tu busqueda.
Colgo la llamada y observó con melancolia la fotografia que sostenia en sus manos "¿Donde estas Sango Taijinya?"
XXX
El peliplateado estaba molesto e inquieto, al parecer su prometida no hacia más que ignorarlo observaba con mal humor la feliz pareja que su medio hermano Sesshomaru hacia con Rin frente a él, ambos esperaban con ansias la llegada de su primer hijo Seishiro Tashio. Habian planeado esa cena en la mansión de Inu Tashio a pesar de la presencia de su madre Izayoi y de la ex esposa de su padre, Irasue.
-Inuyasha, ¿te encuentras bien?- suspiro su madre.
-Claro, madre.
-Solo esta nervioso, Izayoi- dijo su padre.
-Tienes razón, querido- sonriendo- Debe ser porque pronto se casará con la bella, Kikyo Houshi.
-Si me disculpan ire a descansar- suspiro- Sesshomaru y Rin felicidades por su hijo, buenas noches.
-Gracias, cuñado- sonrio la pelinegra que abrazo al mayor de los herederos Tashio.
El se marcho tratando de disimular su estrés, tratando de imaginar como seria su matrimonio con una mujer que no conocia, que era fría, bella e interesada. Camino a su habitación al llegar cerro la puerta, se desvistio quedando solo en boxer y se acosto en su cama esperaba pronto encontrar la calma al dormir, a pesar de saber que mañana regresaria a Tokio para aclarar algunos pendientes en la importante reunión con su futuro cuñado y socio, Miroku Houshi.
Continuará…