IMPORTANTE:

PAREJA: Ambos son OC.

- Chez: Un tipo grande, alto y rudo, con el corazón tan oscuro como su cabello. Amante de las fiestas y las mujeres...(hasta ahora).

- Piap: Un chico hermoso y delicado de cabello largo. ¿Esconde algo bajo esa ridicula apariencia?.

ADVERTENCIAS: Este es una historia de ficción original y no pertenece a ninguna serie, manga o novela. Con el tiempo puede contener sexo explicito entre hombres, lenguaje obsceno y muchas posibilidades de que nadie nunca la lea jajaja


SUEÑOS EROTICOS

by

Charlie Holloway


Chez, fumaba su tercer cigarro mientras descansaba sentado en el sillón, su pose dejaba mucho que desear, estaba exhausto y con una gran resaca que había ganado de la noche anterior. La habitación era demasiado brillante en las mañanas, con uno de sus brazos tapó la luz que venía de la ventana y lo dejó reposando sobre sus ojos, su otra mano estaba ocupada jugueteando descuidadamente con su miembro fuera del pantalón. Después de lo ocurrido en aquella fiesta, su mente no paraba de jugarle sucio, mostrándole imágenes de Piap haciendo un inúmero de caras eróticas y poses indecentes.

Imposible – Sabía muy bien que eso jamás ocurriría pero, ¿que tenia de malo dar rienda suelta a la imaginación de vez en cuando?.

En su mente, el delicado cuerpo de Piap reposaba bañado en sudor, agotado y maltrecho sobre su pecho. Siempre había pensado que tenía muchas similitudes con el cuerpo de una chica, su blanquecina piel era tersa y delicada, no tenía nada que envidiar a las mujeres del departamento de junto. Con unos torpes movimientos, el intento incorporarse sobre si. Su cabello gris, dividido en hebras largas y finas apenas fueron perceptibles para Chez cuando este se ganó encima y lo miró detenidamente, en ese momento sus cabellos caían con tal delicadeza sobre su rostro que no podía darse cuenta que lo cubrían por completo, creando una cortina que lo separaba del mundo real y donde lo único que importaba eran aquellos hermosos ojos claros que no se fijaban en nadie más que en el. La excitación estaba comenzando a afectarle tanto que sus manos estaban en una lucha eterna con su lengua por saber quién recorrería primero cada rincón de su cuerpo, cada vez que el chico se movía sobre el, incluso cuando giraba su rostro para mirar a un lado y dejaba descubierto su cuello, cada movimiento lo volvía loco, cada fibra de su ser quería sentirlo mas y mas cerca, estaba seguro que sus deseos y su voluntad eran aún mayores de lo que sentía en aquellos sueños pero por alguna razón dentro de estos jamás podía tocarlo, menos besarlo y eso además de generarle una gran e incontrolable erección en el mundo real, le cabreaba de sobre manera.

Últimamente los sueños se habían vuelto reiterados y cada vez más reales. Ya no bastaba satisfacerse con la masturbación, ¿Qué haría la próxima vez que estuviera realmente frente a Piap?.

No quería siquiera pensarlo.


NOTA: Ya que esto sale de mis pensamientos pervertidos del día, ire subiendo periodicamente mas contenido (Sip, la historia no acaba aquí). Saludos