No soy rubia, no soy rica y mucho menos británica. Eso es claro. Si Harry Potter fuera mío no hubiera terminado como termino. Demasiado utópico. Si HP fuera mío, alguien le hubiera dado un merecido a Harry.
Este es mi primer fic publicado en esta página, disculpen si no entiendo mucho de ella.
Cancion recomendada: Mad World, Gary Jules.
Zacharias Smith no solía optar por un bando, por un color. No solía traicionar sus principios cuando recibía una buena proposición, no solía ponerse en contra de una persona que tuviese ideales diferentes a los de él–bueno si, algunas veces. ¡Alguien debería decirle a Chang que se veía mal hablando tanto de Potter!–. Simplemente era único en ese aspecto. Era él chico que nunca decía una respuesta que todos esperaban, que veía al mundo de diferente forma en la que muchos lo hacían. Algunos solían decir que por más Hufflepuff que fuese, pues su uniforme lo decía a gritos, tenia madera de Slytherin. O eso decían sus compañeros. No todos debían ser leales y hacerse a un lado para dejar a otros brillar.
No, él no contaba en ese grupo.
Él no, se repite cada vez que esta frente a un espejo y ve como su mirada ya no es la de antes. Está un poco más apagada y no le da por mofarse de sus compañeros. No más y muy pocos saben las razones: algunos dicen que por el quidditch, otros dicen que por la falta de sueño. No es nada de eso, desde luego. Teme al futuro, como todos, y no sabe que va a hacer en cuanto el mal se cierna sobre ellos. Si se va con los mortífagos, Circe no lo quiera, va a morirse, si se va con el E.D también terminara muerto. Todos saben lo que les depara el futuro, sin embargo todos quieren ser héroes. Él no quiere ser héroe, solo quiere estar vivo.
— ¿Qué harás, Zach?
Y mira con una mueca a la dueña de esa voz. Le sonríe a la pequeña Rose y se encoge de hombros, demasiado seguro.
— Vivir, Rose.
Siempre existirá alguien que lo vea todo gris.
¿Tomates, calabazas, zapatos?
