Episodio I

Alcaldía, Saltadilla, 09:30 am

El profesor Utonia se dirigía a grandes zancadas a la oficina del alcalde, este lo había llamado de emergencia.

— ¿Qué sucede alcalde?— pregunto una vez llego.

— Profesor Utonio— Lo nombro el alcalde, extrañamente serio—. De nuevo una ciudad fue destruida, ningún sobreviviente— Menciona viendo el periódico posado en su escritorio—. Y no fue una ciudad pequeña.

— Entiendo… ¿qué podemos hacer?— Cuestiona de nuevo.

— Nada… nada de nada, esto aún no nos afecta, pero…

— Teme que seamos el siguiente— Termina la frase que el alcalde no podía decir.

El alcalde asiente, ambos se quedan unos minutos en silencio, pensando, reflexionando.

— ¿Cree que sea oportuno decirles? — Ahora fue el turno de preguntar del alcalde.

— No sé, no están al tanto de esto, como están a punto de pasar al nivel medio superior.

— Lo mejor será que no lo sepan— Al final lo reconsidera—. No estamos del todo seguros y esto solo causara su alteración.

El profesor se va de la oficina, sumergido en sus pensamientos ¿Sera oportuno decirles? No, no debe darles esa preocupación.

— Ningún sobreviviente— Murmura ya dentro de su auto—. Quien sea o sean los culpables, lo tiene muy bien planeado— Con esto arranca para ir a su hogar.


Aeropuerto, Saltadilla, 10:30 am

— ¿Por qué?— Pregunta.

— Ya es hora de volver— Le responde de manera seria.

— Crees que ya debamos…

— Si no es hoy, nunca lo será— Le contesta con una sonrisa burlona.

— ¿Qué dirán cuando nos vean?— Pregunto de nuevo.

— ¿Quién dice que nos verán?— Sus acompañantes sonrieron con maldad.


Secundaria Robles Nobles, Saltadilla, 11:30

Ni bien entro la maestra todos estaban aburridos, su receso había concluido hace una media hora y todos querían irse; después de todo era un viernes, al final todos se van a descansar, festejar, o cosas de su gusto.

— A-bu-rri-do— Dice mientras cubre su cara, solo se puede apreciar su negra cabellera.

— Cállate— Le reclama su mayor mientras intentaba no dormirse, a pesar de ir bien en la escuela se estaba aburriendo.

— Quiero salir, es viernes— Dice jugando con uno de sus mechones rubios.

— Bien, hoy tenemos tres estudiantes más con nosotros, pasen— Les llama amablemente la profesora.

En el salón entran tres personas, todos se sorprendieron al ver su apariencia.

La primera era pelirroja, sus ojos o bueno su ojo era rosado, el izquierdo era cubierto por un parche gris, su cabello suelto le llegaba a la mitad de su espalda, se fleco iba un poco más al lado derecho. Su ropa era una blusa rosa con un chaleco de cuero de color fiusha, usaba una falda del mismo color que la blusa y abajo un mayon igual al chaleco, tenía puestas unas botas hasta las rodillas, negras, y en su cuello tenía un lazo rojo amarrado, su expresión era indiferente y seria, veía atentamente a la clase causando algo de temor e incomodidad a todos.

La segunda era de cabello negro como la noche, le llegaba por arriba de los hombros y dos mechones pequeños sobresalían a sus costados cubriendo sus orejas, el fleco alborotado, sus ojos eran verde algo claro, pero no tanto, en su ojo izquierdo había una cicatriz de arriba hacia abajo, no tan grande, pero si visible, en su oreja izquierda habían tres pircins; su vestimenta era una blusa verde, chaleco verde más oscuro, un pantalón de mezclilla negro y rasgado, tenis verdes y usaba un collar con púas saliendo de este, como los que usan los perros, su expresión era una sonrisa maldanosa con el ceño fruncido, parecía la típica chica busca pleitos, observaba a la clase con burla.

La ultima era de cabellos rubios, amarrados en dos coletas bajas, sus ojos eran azul cielo, tenía una cicatriz bajo el ojo derecho, su fleco iba más a este lado, incluso más que el de la primera, tenía una blusa azul y un chaleco de cuero de un azul más fuerte, tenía una falda blanca y unos botines del mismo color, su expresión era sonriente, alegre y algo entusiasmada.

— Soy Zaphiro— Dice la rubia con una sonrisa.

— Yo Esmeralda— Contesta la pelinegra sin borrar su expresión. A diferencia de la primera su voz era más profunda, sin dejar, claro, su tono femenino. Todos observan a la mayor que no dice nada.

— Oh ella es Rubí— La presenta su hermana oji azul.

— Creo que puede hablar ¿O no? — Se burla una pelirroja pecosa, con el cabello atado en dos chongos.

— Cállate Morbucks— Le dice Esmeralda, todos se sorprenden de que la chica supiera su nombre.

Rubí le hace una señal de "Compórtate" y su compañera le obedece.

— Bueno chicas siéntense en la parte trasera— Dice la maestra buscando calmar a la clase, Rubí se sienta pegada a la ventana, Esmeralda a un lado (Derecho), Zaphiro a la derecha de Esmeralda. Las tres soltaron un suspiro que solo tres personas pudieron escuchar.


Salida de Secundaria Roble Nobles, Saltadilla 2:00 pm

— ¡Oigan! — Llega corriendo hacia las tres nuevas alumnas.

— ¿Qué pasa? — Pregunta Zaphiro sonriente.

— Bueno… queríamos presentarnos— Se rasco entre sus cabellos negros.

— Yo soy Brick— Dice el peli naranja.

— Yo Butch— Contesta el pelinegro.

— Boomer— Dice con una sonrisa amigable.

— ¿¡Son los héroes de Saltadilla!? — Pregunto con asombro la rubia.

— Exacto— Le contesta Brick, sonriendo socarrón.

— Interesante — Comenta Esmeralda.

— ¿De dónde son? — Pregunta el menor.

— Estuvimos viajando por varias ciudades debido al trabajo de nuestros padres— Le responde Zaphiro.

— Esta vez toco Saltadilla— Le secunda la pelinegra.

Los tres se quedaron viendo a la pelirroja que no dijo palabra alguna.

— ¿No hablas? — Pregunto Butch en plan broma.

— Es de pocas palabras— Contesta Esmeralda, sabiendo que su hermana no iba a hablar.

— Se nota— Murmuro el rubio.

— Bueno nos retiramos— Avisa la rubia.

— Un gusto conocerlos— Le sigue la pelinegra. La pelirroja alza la mano en despedida y se alejan dejando a los Rowdyruff Boys solos. Se encaminan a su hogar.

— Que curiosos ¿no creen? — Comenta Zaphiro, sus hermanas asienten.

— Pero recuerda que no estamos aquí para juzgar lo curioso de nuestros compañeros— Le dice la pelinegra mirando a su hermanita—. ¿O no Rubí? — Esta asiente mirando al frente.

Fin del capítulo.