aLas TMNT y su historia no me pertenecen
N/A: Lo sé no he acabado mis otros dos fics de las tortugas, pero es que acabé de ver la temporada cuatro y me vino un ataque de inspiración, espero lo disfruten
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Juegos de Ninjas
--¿Dónde? ¿Dónde?—susurraba Miguel Ángel mientras buscaba un buen escondite en ese lugar, tenía el listón amarrado al brazo, necesitaba darse prisa antes de que sus hermanos lo atraparan. Entró a uno de los tantos edificios, subió a las vigas del techo—perfecto—tenía una vista perfecta, podía ver si alguien se acercaba al edificio, se rió por lo bajo, esta vez Rafa no lo atrapará en menos de dos minutos
--*--
--¿Algo?—preguntó Donatello en cuanto se cruzó en el camino de Leo
--Nada
--Hay que admitirlo ha mejorado
--El tiempo record de Miguel es dos minutos, no dejemos que lo supere—se volvieron a dividir
--*--
--Vamos Mike, sal de donde quieras que estés—decía Rafa mientras saltaba hacia una ventana rota. Aterrizó en el edificio contiguo…había algo ahí que no estaba bien. Miró hacia su derecha…nada
--*--
Sonrió pícaramente, lo tenía justo debajo de él. Podría caerle encima si gustaba, pero…no, era más divertido verlo mientras trataba de encontrarlo
--*--
Vamos Rafael concéntrate pensaba mientras sus músculos se tensaban, había algo más ahí. Mucho más que la tortuga que se encontraba en las vigas…
--¿Qué es eso?
--*--
Un poderoso temblor sacudió el edificio, me dejé caer aterrizando a lado de Rafa
--¿Qué es lo que pasa?
--No lo sé…--ambos tuvieron que saltar hacia las vigas, una enorme cosa gris casi los aplasta
--¿Qué demonios es eso?—preguntó Rafa mientras sacaba sus sais, la cosa gris rugió antes de incorporarse de nuevo
--Parece tu hermano Rafa—dijo Miguel burlonamente
--Idiota entonces también sería el tuyo…--varios hombres de negro entraron en el edificio-ey…¿No son los agentes de Bishop?—la cosa gris los embistió y salió corriendo por el otro lado del edificio
--*--
Para cuando Don y Leo habían llegado sólo quedaba escombros y quejidos. Rafa y Miguel bajaron de su escondite
--Se perdieron todo un espectáculo—dijo el menor
--¿Qué pasó?—preguntó Leo
--Una especie de monstruo acaba de pasar por aquí—dijo Rafa
--Ey, son los agentes de Bishop—dijo Don
--¿Dónde está esa cosa?—preguntó Leo desesperado
--Salió por ahí—señaló Miguel
--No puede estar libre por la ciudad—corrió hacia la enorme abertura
--Y como siempre, las tortugas metiéndose en los que no les importa—dijo Rafa antes de seguirlo
--*--
--¿Ave Fénix?
--¿Sí?
--El quinientos doce está suelto por la ciudad, necesito que lo duermas
--Claro—la comunicación por los audífonos se cortó, los retiró de su cabeza, corrió a la cochera—hora de trabajar—se colocó su casco rojo antes de tomar la motocicleta negra
--*--
Habían llegado a un almacén de comida, al parecer el monstruo se estaba alimentando
--No parece querer hacer daño a nadie—dijo Don—se está alimentando solamente
--Pero aún así, no puede estar libre por la ciudad—dijo Leo, en ese momento varias luces iluminaron el almacén
--Y ahí están de nuevo—dijo Rafa, los hombres de Bishop rodearon la monstruo y comenzaron a dispararle. Y él en respuesta atacó--¿Podemos disfrutar el show?
--*--
Tuvo que agacharse levemente para esquivar un cuerpo que salía volando
--Llegué tarde—se quitó el casco, metió su mano en las bolsas aledañas de la motocicleta. Sacó un par de pistolas, una catana, un cuchillo y unos pequeños dardos. Entró al almacén
--*--
--Esto se está saliendo de control—Leo saltó seguido de sus hermanos
--Son las tortugas—dijo uno de los soldados
--Gracias Leo—dijo Rafa mientras lanzaba a uno lejos—de verdad gracias—Leo hizo caso omiso y se abrió paso entre gente asustada, otros que intentaban atacarlo y otros que intentaban acabar con el monstruo…¿Quién es ella?
--*--
Lo primero que pensó fue dispararle, pero sus órdenes habían sido dormirlo. Suspiro guardó el arma y se abrió camino entre los soldados, saltó sobre el monstruo, este comenzó a agitarse fuertemente, la chica no lograba insertar el dardo. Con un movimiento brusco la sacó volando, iba a amortiguar la caída perfectamente, cuando un soldado se atravesó en su camino, lo empujó con los pies. Ella cayó, para cuando volvió a mirar el puño del monstruo se encontraba a pocos milímetros de ella, cerró los ojos fuertemente…
Cinco segundos, nada. Cuando abrió los ojos una tortuga se encontraba deteniendo el ataque
--¿Sabes que esto no es fácil?—ella rodó y él saltó, el puño del monstruo se clavó en el suelo levantando una capa de polvo. La tortuga había aterrizado a su lado
--Supongo que debo darte las gracias
--Eso hace la gente educada—él también tenía catanas. El monstruo rugió, ella desenvainó su catana—hay que acabarlo
--Adormecerlo
--¿Por qué?
--Esas son mis órdenes…
--¿Eres soldado de Bishop?—ella lo miró sorprendido
--Su mejor guerrera…--apenas y tuvo tiempo de interponer su catana
--Estoy harto de Bishop y sus jueguitos—de verdad se veía enojado, ella tomó impulso y lo empujó levemente, Leo se abalanzó sobre ella, sus catanas chocaron, pero él aún tenía una, se volteo para atacar con su catana, pero algo se interpuso un cuchillo. Espalda con espalda ambos resistían los ataques. Cuando la chica dejó de oponer resistencia, saltó para atrás cayendo en los hombros de Leo, y ahí mismo tomando impulso para caer lejos de él
--Tómatelo con calma—dijo la chica—yo vengo por esa cosa ¿quieres que se tranquilice?
--¡Leo no nos vendría mal una ayudadita!—gritó Rafa mientras esquivaba un manotazo del monstruo
--¿Qué esperas?—la chica le dio un pequeño dardo—en la yugular—saltó hacia el monstruo, sin embargo este se movió, cayó al piso, el monstruo juntó sus dos manos, el golpe iba directamente hacia ella, sin embargo esta se deslizó entre la piernas de esa cosa y fue ese momento de distracción en el cual Leo encajó el dardo, el monstruo comenzó a balancearse lentamente, sus movimientos eran torpes, entonces ella saltó y le encajó otro dardo, no tuvo tiempo de saltar antes de que el monstruo callera levantando una gruesa capa de polvo
--*--
--¡Leo!¡Leo!—gritó Don, mientras intentaba dispersar la densa nube de humo a su alrededor
--Estoy bien—por fin todo se aclaró, era un desastre, el monstruo estaba dormido en medio del almacén, había comida desperdigada por todo el lugar, mientras los cuerpos quejumbrosos de los soldados intentaban incorporarse. Leo miró a su alrededor, alcanzó a ver la melena negra por la puerta de entrada, corrió hacia ella
--*--
--Objetivo cumplido
--Bien—se cortó la llamada, guardó su celular y se colocó el casco, cuando miró hacia el almacén ahí estaba él, viéndola, al parecer no tenía ninguna intención de seguirla. Un segundo después tres tortugas más se le unieron, sonrió pícaramente antes de lanzarles un beso y arrancar la motocicleta
--*--
Rafa silbó
--Vaya esa chica sí que tiene estilo
--¿Quién es ella Leo?—preguntó Miguel, el mencionado suspiro
--No lo sé
Me inspiré especialmente en dos capítulos "Dragon´s Brew" y "I, monster"
Manfariel
