Bienvenidos Damas y Caballeros al primer capitulo de una Fan Fiction creada como una actividad para mantener la mente ocupada de un pobre desempleado.
Una trágica cruzada
Capítulo 1:Un viaje imprevisto
Se suponía que iba a ser una noche de tres (Lucas, Fer y yo) amigos, una ocasión donde nosotros íbamos a charlar, jugar a la PlayStation y comer unas pizzas, pero… Los imprevistos siempre suceden.
Ya habíamos terminado de comer dos pizzas (las cuales habíamos comprado porque ninguno tenía ganas de cocinar), y estábamos como siempre jugando unos partidos de fútbol en el FIFA, lo normal que uno esperaría de una juntada con amigos. Pero lamentablemente nos aburrimos, por lo que Lucas sugirió intentar nuevos juegos.
"A ver Lucas, qué clase de juegos sugerís" Dije.
"Eh…Y si jugamos unos juegos como el de la Copa" Dijo Lucas.
"¿Estás seguro?, mira que Fer ni en pedo los va a jugar" le respondí.
"deja Javi ya no tengo tanto miedo además ¿No intentaron jugarlo con Lucas en su casa? "Me Dijo Fer
"No llegamos porque cuando lo intentamos ya era casi de día" "dijo Lucas. Fue entonces que tuve la "maravillosa" idea de proponer un juego sobre el que había leído en una página en los recónditos lugares de internet: "Che y si de vez de jugar al juego de la copa, no jugamos a un juego que es más ocultista digo a no ser que tengas miedo Lucas"
Hay dios si tan solo hubiera pensado un poco mis palabras capaz ahora no tendría esta historia para contarles, porque si hay una cosa de la que estoy cien por ciento seguro es que Lucas siempre va intentar algo que parece peligroso o ya es peligroso de por sí.
"Vos sabes que a mi NO me da MIEDO nada" me respondió sin dudarlo.
"Déjame que lo busco devuelta en internet" Y puse manos a la obra, por esas casualidades solo me tomó quince minutos, buscarlo en mi extenso historial (el cual ya había limpiado de cualquier elemento difamatorio) "Acá esta, el juego de las Cartas de Viaje" al parecer era un arte místico o de hechicería según decía la página, para mí eso parecía una tontería, pero sabía que para Lucas podía llegar a ser algo interesante. Cabe destacar que la página no era muy prolija y parecía que hubiera sido hecha varios años atrás.
Las instrucciones del juego precisaban lo siguiente:
*Una habitación pequeña totalmente a oscuras.
*Cinco velas blancas y cada jugador deberá llevar una vela.
*Una Hoja escrita en su totalidad en ambos lados, preferentemente en pluma con la siguiente oración: "Mit unbekannten Ziel abfahren" La cual yo juraría que no era esa oración la que leí cuando visite por primera vez la página.
"Los jugadores deberán ingresar en la habitación, prender las velas y sostener la hoja sobre la vela, pero a una distancia segura del fuego para poder dar un paso atrás, si desean continuar los jugadores deberán apagar y/o cortar cualquier elemento de iluminación que no sean las velas, paso seguido deberán recitar tres veces la palabra "LOS" "atención esta página recomienda que los deseados en aventurarse con este juego estén preparados" Leyó Lucas.
"Para mí que no funciona" Dijo Fer "Yo te lo digo pipi".
(ese es un apodo que Fer le puso a Lucas)
"Yo voy a buscar una pluma, si les parece lo hacemos acá en mi cuarto, total si pasa algo está estamos armados" Respondí.
"Bueno, pero vos no escribirías porque si no ni el diablo te entendería" Bromeo Lucas. (sabíamos que el papá de Javi y él practicaban tiro y poseían varias armas)
"Ah que chistoso" Le dije sarcásticamente.
Fue así que decidí buscar una pluma, una hoja de papel y por si acaso trabé la puerta de mi cuarto. Deje la pluma cerca de Lucas y él empezó a escribir las palabras múltiples veces en la hoja. Fer mientras tanto se reportaba con su novia como de costumbre.
Una vez vi que Lucas ya había terminado su labor, decidí juntarme de valor y hacer de maestro de ceremonias de este juego "ocultista" después de todo yo era el anfitrión de la noche y era mi deber entretenerlos.
"¿Están listos?" Pregunté.
"Sí" Respondieron los dos al unísono.
"Bueno…Empecemos" y decidí prender la vela…
Ese día parecía que lo íbamos a pasar como cualquier juntada que hubiésemos hecho antes, unas buenas pizzas, jugar a la play y las típicas charlas de grupo de autoayuda que suelen suceder entre amigos, pero después de varios partidos de FIFA y muchas peleas en el Mortal Kombat X se tornó aburrido (seguramente se preguntaran como alguien se puede aburrir con una play 4 y esos juegos), pasadas varias horas uno se cansa de cualquier cosa, por lo que decidí sugerir probar jugar otras cosas. Y así fue como poco a poco y sin saberlo nos fuimos metiendo en un terreno desconocido, cualquiera lo pensaría dos veces antes de intentar realizar un ritual satánico pero nosotros no somos cualquiera y se preguntaran ¿por qué hacerlo? la respuesta es tan simple, que es el motivo de todos los que lo intentan "solo por ABURRIMIENTO", además de que Javi me había desafiado a hacerlo, seguramente pensando que me iba a asustar o que me iba a dar pereza hacerlo, pero creo que hasta el día de hoy se arrepiente de haberlo hecho aunque también me debe estar eternamente agradecido.
De repente nos encontrábamos en su cuarto con velas blancas y ese papel que escribí entero, por cierto todavía me dolía la mano, solo para que al final tener que quemarlo en el medio de nosotros tres, a mí me parecía una estupidez sin sentido sacada de internet pero la página parecía prometedora, luego de unos segundo de que se terminara de consumir lentamente todo el papel, nos dimos cuenta de que parecíamos tres tontos haciendo cosas sacadas de internet solo porque no tenían nada mejor que hacer.
"¿Eso es todo?" Dije.
"Capaz hicimos algo mal" Dijo Javi.
"Era obvio que no iba a pasar nada, ¿no sé porque se emocionaron tanto por hacerlo?" Dijo Fer
"Bueno es mejor que no hacer nada" Dije.
De repente algo en el cuarto era diferente, o por lo menos yo lo sentía así, lo mire a Fer y se seguía riendo de lo tonto que era el ritual que hicimos, mientras tanto Javi seguía buscando más rituales que podríamos intentar, prendimos las luces sin apagar las velas, capaz si las hubiéramos apagado todo hubiera sido distinto, pero no lo hicimos, fue en un instante que se cortó la luz. Fue entonces que las cosas se pusieron extrañas o eso es lo que creemos porque ninguno de nosotros sabe que sucedió de verdad, lo único en lo que coincidimos todos es que un momento estábamos en el cuarto de Javi, y al otro aparecimos en un lugar totalmente desconocido para nosotros.
Lo primero que pensé fue que nos habíamos quedado dormidos o que en el corte de luz algo malo había sucedido. Tarde un par de minutos en darme cuenta que estaba en medio de un bosque, el cual no parecía extraño a excepción de que había objetos del cuarto de Javi dispersos por el bosque.
Mirando alrededor encontré un mueble el cual tenía ropa de Javi y un par de cuchillos que habían sido de su padre, los cuales por razones obvias de supervivencia me los llevé. Tras unos minutos de caminar encontré una mochila, decidí cargarla con la ropa y los cuchillos, mientras lo hacía no me di cuenta que había alguien más en el bosque conmigo hasta que escuché el ruido de una espada al ser desenvainada.
"No sé quién seas, pero hoy no es tu día de suerte". Dijo la Figura que estaba detrás mío.
Ese momento siempre quedará grabado en mi mente, porque fue el primer indicio de que lo que paso podía ir peor. Dándome la vuelta lentamente pude observar la figura que estaba detrás mío. Era un Hombre de no más de 30 años que era más alto que yo (y eso que no soy para nada bajito con 1.80 metros de altura) pero parecía que había pasado carencias y desde hace tiempo.
"No sé dónde esto..." Trate de responder, pero al parecer a la persona no le gusto ya que solo movió la espada más cerca de mi garganta.
"No creo que te haya dado permiso de hablar" Dijo mientras mantenía una sonrisa burlona que le llegaba de oreja a oreja "Por lo tanto ¿por qué no te mantienes callado?" Inmediatamente alzó su espada y cuando estaba por cortarme la garganta… Un sonido, que para el hombre fue extraño, pero a mí se me hizo familiar, estremeció todo el bosque y el hombre perdió el balance, ya que donde una vez había una rodilla ahora había un agujero del tamaño de una pelota de golf. Fue entonces que vi a Javi armado con una pistola, la cual era su primera arma obtenida por él luego de cumplir los dieciocho, acercándose y apuntando al hombre que me quiso matar, ahora gritando de dolor tendido en el suelo.
"¿Lucas sos vos?" Me dijo algo cansado.
"Gracias Javi, si soy yo, pero ¿Por qué estás cansado?" Le respondí todavía un poco agitado.
"Espera un segundo" Me dijo. Fue entonces que se acercó al hombre tendido en el suelo.
"Por favor, ten piedad, lo hacía por mis hijos, solo quería ropa para que no pasaran frío en el invierno" Gritaba la persona que unos segundos antes no dudaba en intentar matarme.
Javi no lo miro a los ojos, sino que miró lo que su arma había provocado. No sé qué clase de pensamientos él habrá tenido, pero apuntó a la cabeza del bandido (padre de familia) y disparó no solo una, sino que tres veces, dos Impactaron a la altura de la frente y el tercero en el ojo, esparciendo pedacitos de cráneo y materia gris por el suelo.
"Javi..." Le intente encarar.
"Por primera vez… Mate a alguien" Respondió dejándose llevar por la emoción y el pánico de tal acción.
"No te preocupes Javi… yo también hubiese disparado" Le dije intentando ayudarlo a mantenerse lo más cuerdo posible.
"¡SI, PERO NO TODOS LO HUBIERAN MATADO!" Gritó Javi como si él lo hubiera conocido de toda la vida.
"Todos no lo hubieran matado porque tenía familia, pero alguien que no teme matar, tampoco debería temer cuando esta por morir" Intente no reprocharle mucho, porque todavía tenía la pistola en su mano y no sabía cuán perturbado podría estar.
"Pero no lo mate con esos tres tiros, lo mate ya con volarle la rodilla…" Respondió
"¡Imagínate arrastrarte con una rodilla hecha pedazos en medio del bosque y perdiendo mucha sangre, si no hubiera un hospital cerca no creo que pudiese salvarse de ninguna manera, además quiso matarme!" Le Dije.
"Mírale la ropa, parece salido de una película de Robín Hood" Me dijo Javi.
"Dudo que donde sea que estemos haya un hospital cerca" Le dije.
"Creo que sería milagroso que encontremos algún auto" Respondió.
En ese instante pude notar la ropa de mi asesino ya muerto, parecía que llevaba una camisa algo abultada de mangas largas y unos pantalones de color marrón, a excepción de su rodilla que estaba manchada de tono carmesí. Pero el detalle más llamativo era su calzado, que eran cueros mal atados en la planta de su pie y su tobillo.
"¿Qué clase de persona se pondría ese tipo de ropa?" Dije.
"¿No es algo incómodo llevar algo tan rústico?" Dijo Javi.
Pero además quien llevaría una espada la cual parecía que había sido muy maltratada y mal afilada.
"¿Dónde estamos?" Pregunté.
"No lo sé, pero sea donde sea que estemos no es en mi casa, ni siquiera sabemos si es nuestro mundo o nuestra dimensión" Respondió todavía algo exaltado.
"¿Por qué lo decís?" Le Pregunté.
"Porque cuando desperté, cerca mío vi a dos bestias pelearse por un animal muerto o eso parecía, por suerte no me vieron, pero por si acaso tenía mi 45 conmigo, eran bestias como salidas de una pesadilla o un juego de aventura." Me respondió.
"En ese caso vayamos con cuidado, ¿El ritual habrá funcionado?"
"No lo sé, ¿acaso piensas que yo puedo viajar como si nada a un bosque? Eh" Respondió todavía exaltado por su primer homicidio.
"Solo fue una pregunta, no tenes porque tomártelo así..." Le respondí.
Pensé en alguna manera de ayudarlo con la carga emocional, cuando de repente vino a mi mente una pregunta que tendríamos que habernos hecho desde el principio.
"¿Y Fer?" Dije mirándolo a Javi con una cara de preocupación, Javi se tocó la cabeza y miró por todos lados.
"¿No estaba con vos?" Me preguntó Javi.
"NO! ¿VOS LO VES ACÁ?" Le respondí medio eufórico.
"Cálmate vamos a buscarlo" Me dijo Javi
"¿Y si las bestias que viste no se lo habrán...?" No termine la pregunta, no quería terminarla.
"Pensé lo mismo, pero no tenían ni una gota de sangre en sus garras, es decir que la presa que cazaron la habían matado hace mucho"
"¿Qué tal si él…?" Y mire para el cadáver.
"No lo creo" Respondió rápidamente Javi
"¿Por qué?" Pregunté.
"Porque Fer tenía el arma de mi viejo" Me respondió.
"A todo esto, ¿Por qué yo no tengo ningún arma?" Dije desconcertado.
"Te iba a prestar una pero no la encontré" Me respondió Javi tan tranquilamente
"¿Claro, Fer y vos tienen un revólver, pero yo no tengo nada?" le dije sarcásticamente.
"Pero nunca pensé que iba a pasar algo como esto… además se la di a Fer porque sería más intimidante"
"¿Y por qué a mí no?" Pregunté.
"Bueno digamos que a Fer y a mí nos harían frente sin dudarlo, pero a vos capaz lo pensarían, además no te da miedo hacerle frente a cualquier cosa" Javi trataba de hacerme un cumplido para quitarme el enojo que tenía por no tener un arma.
"Mejor empecemos a buscar a Fer" Dije.
Como no tenía forma de defenderme por mi propia cuenta me acerque al muerto y tome el par de espadas que llevaba consigo, en un instante pensé que eran algo pesadas, pero podría acostumbrarme, en el fondo me decía que nunca había usado espadas, pero seguro me vería bien si las aprendía a usar.
"Está bien" Dijo Javi.
Y partimos con cuidado hacia lo desconocido.
Si alguna vez sus amigos se ponen a jugar un juego ocultista no los sigan, háganse los tontos y váyanse a fumar un pucho.
¿Cómo carajo termine en medio de una plantación de marihuana?, todavía me lo sigo preguntando, por suerte los dueños no eran agresivos y en cuanto les dije que yo también fumaba me compartieron un cigarro, además de dejarme quedar en su casa, hacerme muchísimas preguntas y prestarme algo de ropa.
Pasados unos días, me pidieron si no podía ayudarlos a llevar un cargamento y entre otras cosas marihuana a la capital, me dijeron que, si estaba buscando a mis amigos, seguro que los encontraría ahí. Acepté sin dudar y decidí ayudarlos a cargar su carreta, no sin antes guardar en una bolsa el revólver que era lo único que tenía para protegerme.
El viaje al principio fue... Revelador, pasamos por pequeños pueblos en una situación de extrema pobreza, así como también patrullas de soldados que muchas veces pedían soborno, afortunadamente mis anfitriones tenían con qué pagarles, hasta en algunos casos con un par de vegetales o comida ya eran suficientes.
Desgraciadamente en el camino también había otras amenazas. Una enorme bestia agresiva y con gran fuerza se cruzó en nuestro camino, mis compañeros de viaje se asustaron e intentaron hacer que los caballos tiraran con más fuerzas a la carreta en un intento en vano de ir más rápido. Lamentablemente los caballos también estaban en pánico de ver tan tal criatura.
Fue entonces que decidí disparar con el revólver, por desgracia lo único que logré fue que se enojara más, solo porque le di en un ojo. Recuerdo que en ese momento vi pasar mi vida frente a mis ojos… Sin embargo, también vi una mancha amarilla, que parecía una mosca, volar alrededor de la bestia, pero terminó siendo una persona.
De pronto por no decir unos instantes la bestia cayó detrás de la carreta, tenía cortes por todo su cuerpo, como si la mosca que estaba volando a su alrededor lo hubiera estado cortando continuamente, de la nada mientras estábamos mirando todos los cortes de la bestia, una persona con un suéter amarillo apareció frente a nosotros, era bajito o por lo menos para mí lo era (yo mido casi un metro con noventa centímetro), llevaba consigo una espada y una mochila, nos preguntó si estábamos bien, le agradecimos que nos haya salvado de la bestia, le ofrecimos algo de oro y de comida por su ayuda pero la rechazó diciendo que era su deber y que no era necesaria ninguna recompensa.
Al ver tanta bondad le preguntamos cómo se llamaba, dijo que su nombre era Tatsumi y que se dirigía hacia la capital, nos preguntó hacia dónde nos dirigíamos, le respondí que por casualidad también íbamos para la capital, así que ofreció acompañarnos para mantenernos a salvo de cualquier otro ataque.
Mis compañeros me dejaron hablando con él mientras decidían qué responderle, luego de un rato parados me preguntó ¿Cuál era el motivo de mi viaje a la capital? al cual respondí que estaba buscando a unos amigos, me sonrió y me dijo que él también estaba buscando a sus amigos, que iban a juntarse en la capital, mis compañeros volvieron y le dijeron a Tatsumi que sería un honor que nos acompañará hasta la capital, así que subimos todos a la carreta y seguimos nuestro camino.
No sé si fue porque Tatsumi apareció o mera coincidencia, pero en todo el resto del viaje no hubo ninguna bestia, al llegar a la puerta de la capital fue que nuestros caminos se separaban, Tatsumi siempre con una sonrisa en la cara nos deseaba lo mejor en nuestro viaje y que yo encontrara a mis amigos, fue así como se fue alejando de nosotros mientras nos adentrábamos en la capital.
¿Que habrá pasado con estos tres jóvenes? ¿Formaran parte de Nigth Raid o serán simples testigos de grotescos asesinatos?
Desde ya muchas gracias por sus minutos dedicados a este intento de matar tiempo. Criticas y/o Recomendaciones serán bienvenidas y a esperar el próximo capitulo.
