La mayoría de los grandes personajes de la historia, llegan a ser reconocidos admirados y hasta idolatrados después de su muerte; Kira no es la excepción.
Un pequeño fic de dos capítulos (El primero subido a las 12:01 a. m. y el otro a las 11:59 del 28 de febrero) dedicado a Light: -Amor, Feliz Cumpleaños-. Relatando en breve qué pasó después de su muerte, y por supuesto la vanagloria que lo acompaña y la cual se merecía. Traté de ser lo más fidedigna al animé (incluye conversaciones reales, tiempo real, lugares reales y personajes no Ooc. O al menos no todos ellos)
Spoiler: Si amas a Near, no leas; si odias a Misa, no leas; si amas a Light, lee.
Disclaimer: Los personajes de Death Note no me pertenecen si no a sus respectivos autores.
Ahora sí, puesto que el título dice la absoluta verdad:
Porque sí fuiste el Dios del Nuevo Mundo
28 de Febrero, se encontraba contemplando la tormentosa lluvia caer, a través de los grandes ventanales de la casa de la familia Yagami se podía observar las inmensas nubes grises, casi negras que opacaban al Sol por completo; definitivamente la situación era la mejor, y no podía esperar un día más hermoso como el que contemplaba ahora, el día era idéntico al estado de su corazón. Una lágrima negra resbaló por su mejilla mientras recordaba el fatídico día que había tenido hace exactamente un mes, el día que se despedía de su amado para siempre; o por lo menos, hasta que la muerte los uniera de nuevo.
.K.
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Aquella mañana del 28 de enero, en la habitación del hotel en donde habían dejado a ella y a Mogi, tras ser llevados "a la fuerza" (por lo menos para ella); Misa se sentía extraña, una profunda desazón se apoderaba de ella a medida que notaba la tensión del ambiente, sabiendo que algo había acontecido en el grupo de la Fuerza Especial Japonesa, puesto que por las pocas palabras que Mogi cruzó por teléfono con Aizawa algo andaba mal; sus sospechas fueron confirmadas al oír que Mogi hablaría con un tal Near para avisar que estaba en contra de Light; sin embargo se limitó callar y escuchar en secreto la nueva conversación por teléfono que Mogi sostenía con Near, hacerse la dormida era fácil y aún más cuando se era actriz…
La conversación no le agradó en lo absoluto, Mogi comentaba sobre encarar a Light en el Muelle Daikoku, la Caja Amarilla, a la 1 p. m., creían que Light era Kira. Después de aquella conversación sintió cómo Mogi la cargaba y la llevaba cuidadosamente hasta que la ingresó a un carro; Misa decidió mantener la farsa, creyó conveniente estar ausente mientras se la llevaba, después de todo estaba segura que no le haría nada, no obstante ahora dudaba de ello.
-Todo listo, vámonos; pasaremos dejando a la señorita Amane en el hotel Teito, luego nos dirigiremos a nuestro destino.
-Por supuesto- mencionó Mogi a la miembro de la SPK Halle Bullock quien arrancó el negro vehículo y comenzó a conducir. Pasaron unos cuantos minutos sin decir nada, la tempestad hacía imposible hablar y además por la situación en la que estaban no era necesario que alguien pronunciase palabra alguna por lo que cada quien se encontraba sumergido en sus pensamientos. Las últimas palabras que le dijo Near a Halle sobre desenmascarar a Kira le retumbaban en la cabeza, cada vez más fuerte, cada vez más claro, cada vez más aturdidor. Todo este tiempo y al fin iba a acabar, todo estaba ya seguro; el plan era a prueba de fallas, era simplemente perfecto y Mello no estaba allí para apreciarlo. Halle, a pesar de estar conduciendo, cerró los ojos un instante pero las palabras de Mogi interrumpieron su visión de la profunda mirada de Mello en su mente…
Mogi trataba de reflexionar acerca de qué pasaría si Light en realidad era Kira, y de ser así, cómo era que Near lo descubrió, si ni siquiera lo había visto; además Soichiro Yagami aseguró que Light no era Kira, eso sin mencionar que la Death Note estaba bajo custodia al igual que Light Yagami -"¿Near, lo descubriste?"- dejó escapar en un susurro que fue perfectamente escuchado por Halle
-¡Claro que no!, sin Mello, Near no lo hubiese descubierto.
-¿Mello?
-El sucesor de L, el verdadero sucesor de L. Halle apretó el timón con más fuerza y frunció el seño.
-¿no es quién secuestró a Takada? Preguntó mientras recordaba las noticias de aquel acontecimiento.
-¡Es quien murió para descubrir las dos Death Note!- Pronunció cada palabra con énfasis pero más que para Mogi, esas palabras se las decía a ella misma; en cierta forma la ex agente del FBI tenía resentimiento hacia Near, aunque formaba parte de la investigación de él; Halle tenía la certeza que Mello sería quien resolviera el caso, darle el crédito a Mello era lo menos que podía hacer, respiró profundo tratando de mantener a raya sus emociones mientras retiraba a Mello de sus pensamientos. La lluvia siguió cayendo y ambos callaron durante el viaje para dejar en el lugar señalado por N a la rubia que alcanzó a escuchar las pocas palabras que cruzaron.
Por su parte, Misa se había hecho la dormida todo el camino. Pero mientras avanzaba el carro, la conversación de Mogi con Near pasó por su cabeza, algo la había dejado intrigada… acaso ¿Light era Kira?, -No, eso sería definitivamente imposible, de lo contrario se lo hubiese dicho a ella… o tal vez, no. En realidad Light nunca le comentaba nada, si mucho le hablaba acerca de la Death note y lo ocupado que se mantenía siempre en busca de Kira, claro también le contó acerca de Takada y la "farsa" que tenía con ella para encarar a Kira. A todas leguas se notaba que era ilógico que él fuese Kira. Aunque a decir verdad ella notó que Light jamás odió a Kira, más bien siempre que se daba la oportunidad, elogiaba la astucia con que Kira planeaba sus ataques. 'Kira, Kira, Kira, Kira, Kira' se repetía mentalmente Misa tratando de encajar la figura de quien alguna vez fue su héroe y de quien ahora amaba en una misma persona. No lo logró; sin embargo, había algo que no la convencía, tal vez eran los mareos que tenía seguido o el hecho de tener tensión por dirigirse a un lugar desconocido o tal vez la posibilidad de que quien era la verdadera justicia en este Mundo podría ser en realidad Light; sentía cómo si su inconsciente quisiera salir y decirle que Kira era su amado Light Yagami. Decidió dejar de pensar en eso al escuchar a Mogi y a Halle hablar; grabó mentalmente las pocas palabras que se intercambiaron pero que, por tratarse del famoso Near y de la Death Note, las recalcó literalmente en sus pensamientos.
El carro paró de repente, la sacaron con la misma cautela y la llevaron cargada, Misa se dejó llevar hasta sentir que Mogi la dejó sola en un sofá. Abrió los ojos con cuidado, y pudo observar a Mogi saliendo de la habitación. Se levantó inmediatamente para llamar a Light; ahora tenía información valiosísima que a su querido novio le podía servir. Agarró su celular y marcó el número; sin embargo, Light la llamó a ella primero.
-¿Misa, estás bien? Oír la voz de Light, la alivió mucho, después de tres días de no verlo ni saber de él en verdad necesitaba no sólo escuchar su voz, sino que ahora hablarle. Aunque antes de hacerlo quería verificar algo…
-¿Estas con los miembros del equipo verdad?
-Misa, estoy corroborando la veracidad de N al dejarte a salvo, ¿todo bien?
-Emmm sí; no sé qué paso pero creo que están disculpándose por retenerme, me hospedaron en el Pent House del Hotel Teinto; ¿puedes creerlo? ¡Uy esto sí me gusta!- Misa no pudo más que fingir, si Light estaba corroborando información de Near significaba que aquél no era el momento oportuno para hablarle de la información que escuchó puesto que las llamadas dentro del cuartel siempre eran interceptadas.
-Excelente, escucha Misa por favor quédate allí unas horas hasta que te llame-
-De acuerdo.- Colgó instantáneamente y se dejó caer en el sofá… Si Light no llamaba antes de la 1:00 p.m. ella tendría qué hacerlo.
Las horas se volvieron interminables, y el negro día no mejoraba la situación… las 12:30 p.m., no resistió más; la conversación que escuchó de Mogi y Halle era imposible de descifrar y entender, al menos para ella que no tenía consciencia de la situación. Llamó a Light pero para variar, éste no contestó; sin embargo, Misa no estaba para ese juego ahora, o lo llamaba de nuevo o sabía que se arrepentiría. Siguió marcando el número desesperadamente, hasta que oyó una voz del otro lado.
-Misa, ¿qué quieres? No tengo tiempo para hablarte, ahora no.- comentó Light quien iba de camino hacia el muelle; sin embargo Aizawa lo incitó a que hablase con ella, después de todo, se había disipado toda sospecha de Misa Amane respecto al caso Kira; mas Light no se encontraba en estado para escuchar a Misa cuando su plan de convertirse en Dios del Nuevo Mundo iba por la mitad.
-¡Light no me cuelgues! Más de una vez él había hecho lo mismo, se excusaba y la cortaba, ahora no podía hacer aquello. –¡Light, Mogi y Aizawa creen que eres Kira! Gritaba en vez de hablar, no quería que Light se perdiera una sola palabra de lo que decía.
-Eso ya lo sé, adiós Misa.
-No, no, no, no ¡espera! Hay más.- Misa sentía que las palabras no le alcanzaban, en cualquier momento Light la cortaba y necesitaba decirle un par de cosas más importantes.
-¿qué?– Suspiró suavemente, le molestaba la insistencia de Misa y más aún cuando se encontraba de camino hacia encontrarse con Near; y no estaba de más decir que la lluvia incesante opacaba por mucho la comunicación.
-¡Un tal Mello descubrió dos Death Note! Misa gritó esto último tan alto que Light tuvo que despegar su oído del auricular para no escuchar la voz chillona de Misa retumbar en su cabeza. En realidad Misa no tenía idea de qué estaba diciendo, pero a juzgar por la voz seria, segura y decidida de la mujer que conducía, supo que debía darle esa información a Light.
-Misa, háblame cuando te calmes, te llamó luego. Otra vez Misa sentía su débil corazón desfallecer, Light a veces podía ser frío y cruel con ella; optó entonces por decirle algo necesariamente importante… algo que Light no esperaba, tal vez era el momento inadecuado pero Misa quería que Light supiera la verdad.
-¡no me cuelgues!, ¡No!, solo algo más. La voz de Misa se resquebrajó, cosa que Light notó inmediatamente; en tantos años estando con ella, la chica jamás había llorado o no que él hubiese visto, por lo que no entendía las razones por las que ahora lo hacía por teléfono; a pesar del estrés que lo atormentaba por su inminente encuentro, decidió moderar la voz y ser dulce con la chica que, por el sonido que escuchó, parecía intentar contener las lágrimas.
-dime amor, te escucho- oyó cesar los suspiros de Misa.
-yo…estoy… Misa respiró profundo,
-yo… estoy… segura de que eres Kira- un segundo, dos, tres y silencio en la línea. Los ojos de Light estaban completamente asombrados y sus facciones intentaban denotar tranquilidad pero eso era prácticamente imposible; sin embargo nadie del grupo lo notó.
-y es por eso… que te amo más Light- Tal vez no era lo que le hubiese querido decir primordialmente pero ya habría tiempo para que tanto él como ella aclararan sus dudas y dejaran secretos atrás. Misa colgó el celular, no quería escuchar por ningún motivo a Light diciéndole que él no era Kira, y por supuesto Misa no tenía base suficiente para respaldar lo que afirmó, aunque si se le puede llamar base a la intuición entonces el contexto sería distinto. Sintió un alivio en su corazón, se dejó desplomar sobre el sillón que se encontraba tras ella y, viendo hacia el techo, tuvo la ligera sensación de sentirse completa al confesarle a Light su pensar y su sentir aunque, no era toda la verdad; era un buen comienzo. Por su parte Light aún se encontraba atónito, ¿cómo lo sabía Misa?, le había ordenado deshacerse por completo de la Death Note y con ello todos sus recuerdos. 'Seguro conservó una hoja' pensó de inmediato, Light sonrió levemente, había subestimado a Misa. Igual ahora no importaba mucho si ella supiera o no, pronto él se convertiría en Dios del Nuevo Mundo y no habría persona en la Tierra que no supiera de su identidad. Desgraciadamente la felicidad dura muy poco…
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¿Destino?, ¿Suerte?, ¿Casualidad?, O tal vez ninguna de ellas, simplemente el divino Karma. En sus manos se encontraba ahora un pequeño trozo de papel doblado a la mitad, con una ínfima gota casi imperceptible de sangre y, escrito en él, un nombre y una hora que seguro recordaría por el resto de su vida, un nombre y una hora que vengarían la muerte de Light. Mientras el Padre profesaba la homilía por el fallecimiento de Kira, paso seguro para su excomulgación; Misa miró fijamente a Ryuk y asintió con la cabeza, la señal ya estaba dada y Ryuk sabía qué hacer… Estrujó en su mano aquella hojita tratando de no romperla, y entre tanta amargura de su corazón, brilló una pequeña sonrisa maquiavélica mientras recordaba los sucesos pasados justamente ayer, después de la muerte de Light; recordaba el místico y maravilloso momento en que ese retazo de la Death Note llegó a sus manos…
