Disclaimer: Los personajes y nombres de Fairy Tail no son mios. Propiedad de sus respectivos dueños.
Nota: El fanfic se encuentra localizado en una diferente linea temporal. La unica relacion en cuanto al anime/manga es respecto a los personajes y su forma de ser n.n No pretendo ligarla y/o desarrollarla con algun evento de Fairy Tail. Gracias :D
Capitulo 1: El futuro esta aqui.
El dia habia llegado, la generacion nueva presionaba a su inminente llegada. Los gremios debian buscar sangre nueva y era momento de reclutar.
Pero fuera de esas tierras magicas, esta el resto del mundo. Donde personas como tu, como yo, vivimos viendo la magia como algo de fantasia, irreal.
Y alli estaba el, un chico huerfano que tenia todo lo necesario para crecer o al menos sobrevivir. Una cantidad muy grande de dinero como herencia, unos amigos leales, un hogar pequeño pero perfecto para el.
Sus padres habian muerto, o no, el tampoco lo sabia, de hecho habia un abismo en su mente y parecia que todo lo que habia pasado antes de los 5 años de edad no existia, simplemente no podia recordar nada, sabia que tenia 5 años solo porque lo habia leido en un diario en blanco. Desde ese punto en su memoria todo estaba oscuro.
Pero hoy era un dia mas y debia ir a la escuela. A pesar de ser un chico solo, no habia perdido sus responsabilidades.
Iba de camino a escuela cuando escucho una voz a su espalda. -Dayer, esperame!
El volteo y pudo darse cuenta, era su amiga de la infancia Lind, ella estaba alli desde que cumplio los 6 años. Era muy atractiva, ojos azules que quedaban a par con su cabelll igual azul. Aunque tenia 18 años, al igual que Dayer, su cuerpo parecia haberse desarrollado con mayor velocidad.
-Eres muy grocero. Yo que me preocupo en ir por ti a casa y cuando llego puff! Nadie abre!
-Lo siento, pense que no llegarias, de hecho es algo tarde. -Decia Dayer mientras le mostraba la hora en su mobil.
-Wow... en serio es tan tarde? Bueno, no importa. Ya vamos en camino Lind era una chica muy dulce, tierna e incluso timida, aun teniendo la misma edad ella parecia la hermanita menor.
-Por cierto Dayer. Mmmm.. quisiera preguntarte algo. -Titubeaba Lind mientras detenia la marcha y lo miraba un poco sonrojada.
-Que sucede? -Decia el con un tono de sorpresa y a la vez de duda.
-Pues son los ultimos dias de escuela y.. mis padres tienen todo listo para que los visite, les hable de ti y... quieren conocerte. Podrias... o... quisieras ir conmigo a casa de mis padres estas vacaciones?
-Oh. Emmm.. Pues... - Dayer no sabia que decir, sabia que podia aceptar ese pequeño favor por ella pero tambien era conciente de que le daba terror el tener que volar en un avion -. Pues... esta bien! Ire!
-Gracias! -Gritaba de emocion Lind mientras abrazaba a Dayer.
-Jeje vale, vale, no agradezcas, pero hay que darnos prisa.
De inmediato se incorporaron y avanzaron a paso veloz hacia la escuela.
Pasaron las clases y era hora del descanso. Lind utilizaba ese tiempo para ejercitar mientras Dayer solo charlaba con sus amigos.
-Oigan, -munch,munch- saben que lei? -Decia el regordete del grupo mientras comia un Sandwich.
-No leemos la mente gordo, dilo. -Decia el chico deportista del grupo.
-Estaba leyendo sobre varias teorias conspirativas -munch, munch- y encontre lo que podria ser el mas grande secreto de la actualidad.
-Cual es la receta de pollo del coronel? -Decia Dayer con una risa leve en tono de broma.
-Ojala, pero no. -Munch, munch- Resulta que en algun lugar del mapa se encuentra un terrotorio muy grande, incluso mas que Australia, pero el gobierno mundial lo esconde. Todos los sistemas de navegacion y localizacion satelital tienen absolutamente prohibido revelarlo -munch, munch- y tal parece que alli habitan unos superhumanos con poderes y viven excluidos por el bien de la tierra.
-Gordo...dime que eso verde de tu sandwich es lechuga.
-Que tratas de decir? -El regordete miraba fijamente su sandwich -. Lo veo perfecto.
-Jaja quiere decir que parece que te metiste alguna hierba alucinogena o algo asi. -Decia Dayer mientras sonreia.
-Bueno, que opinan?
-Pues para serte sincero gordo, me has sorprendido. No pense que llegaras a ese nivel de locura...tan pronto.
-Basta señor musculos. Y tu Dayer?
-Pues la verdad, seria interesante algo asi pero... no es muy convincente.
Justo cuando Dayer dijo la ultima letra de esa palabra, se levanto y lo siguieron los demas como si nada hubiera pasado. Asi fueron a clase y terminaron. La ultima clase era diferente para los cuatro, incluyendo a Lind, y fueron a sus diferentes salones. La clase comenzo, continuo y termino. Se pusieron de acuerdo para verse en la fuente del jardin central pero faltaba el amigo regordete.
-No lo viste Ben? -Preguntaba Lind a el chico deportes.
-No, ya pasaron 20 minutos y aun no llega.
-Y tu lo viste? -Miraba a los ojos a Dayer.
-No. Ire a buscar.
Caminaba apenas a unos cuantos metros del pasillo que llevaba a los salones cuando escucho una multitud hablar y discutir.
-Dejalo ya Trend!
-Vamos! Dale al raro!
-Acabalo!
-Viejo. No te hizo nada grave.
Dayer giro hacia la salida al patio trasero y vio a una multitud rodeando a el chico brabucon que tenia contra al suelo a Loom, el regordete, que ya tenia un moreton formado en la mejilla y unas gotas de sangre salian de sus labios.
-Pero que...!? Dejalo! -Dayer levanto la voz y cuando apenas acabo, de alguna forma extraña, ya estaba a un lado de aquellos dos yendo sobre Trend. La fuerza de la embestida fue tal que logro separarlo de su amigo y hacer que tanto Dayer como Trend quedaran tirados en el piso. Ambos se levantaban en el momento.
-Pero si es el amigo del gordo y del tipo que tiene los musculos solo de adorno. A veces me da pena que ustedes sean amigos de la hermosa Lind. Ella merece algo como...yo.
-Callate ya. Y dime que sientes que un raro sea mas inteligente que tu por 10 y que otro tenga mejores musculos que tu? Eres perdedor entre los raros.
-Callate idiota! -Lanzaba su grito de guerra mientras se avalanzaba sobre Dayer con una rafaja de puños.
Los ojos de Dayer en ese momento parecian haberse vuelto mas oscuros. Lo que en verdad sorprendia a todos fue que Dayer esquivaba todos los puñetazos de Trend, era un espectaculo de elegancia y de ira que se llevaban de la mano. Mientras Trend era conocido por practicar Boxeo y tener peleas tan seguido, Dayer nunca habia peleado, o tal vez si, en esos 5 años.
Siguio evadiendo los golpes mientras Trend parecia cansado, en un movimiento fugaz, Dayer sujeto uno de los puños de Trend y lo detuvo en seco. Todos quedaron en silencio presas del asombro, hasta que Dayer con un golpe certero en el abdomen de Trend lo hizo caer inconciente y acto seguido, Dayer cayo al suelo de igual forma.
-Maestro! Pero en verdad es tan grave? No podemos hacer nada para intervenir?
-Lo lamento Erza, pero tal parece que los dias de un mundo magico en armonia estan contados.