Capítulo 1
CAMBIOS
Quien no recuerda aquel día, aquel en que al fin los grandes espíritus dejaron de dar señales, ese día en que el gran Hao Asakura según muchos, por fin se apodero de ellos. Muchas dudas se crearon a partir de ese momento, entre las cuales destacaban preguntas como: ¿dónde estaba Hao?- ya que muchos no creyeron posible el hecho de que el haya muerto-, ¿cuándo se volvería a reanudar el torneo?, ¿Yoh ya era el shaman king? y si no era así, ¿habría pronto un torneo? y ¿en cuánto tiempo?.
Nadie tenía la respuesta a tantas preguntas pero sabían que solo el tiempo se encargaría de responderlas.
¿Y exactamente cuánto tiempo había transcurrido?, bueno la verdad es que el tiempo corrió bastante rápido como de costumbre, hasta ahora han pasado ya 4 años, si cuatro largos años desde que el shaman Yoh Asakura jugó con la muerte saliendo triunfador, cuatro largos años en que todos volvieron a reanudar sus rutinas así como sus vidas y como era de imaginarse desde aquel día varias cosas han cambiado, así como la forma de pensar, ser y sentir de nuestros ya conocidos personajes y los cambios fueron …..bueno todo se sabrá a su tiempo.
-Todo se enfoca a esa pensión tan conocida-
Se encontraban habitándola los ahora muy conocidos entre los shamanes como entre las mejores sacerdotisas el gran Yoh Asakura y su prometida Anna Kyoyama. El primero conocido como aquel valiente guerrero que junto con sus amigos shamanes se enfrentaron al demonio del fuego Hao Asakura y por si fuera poco derrotarlo…
Claro que en la mansión no lo trataban precisamente así….
-¿Ya está lista la comida?, muero de hambre.
-Si Anita, ya está lista.
-Bien, aunque tardaste.
-Si el entrenamiento me retrasó – dijo acompañado de su característica sonrisa.
-¿El entrenamiento o Horo.?
-¿Eh?. . . bueno. . . pues ambos – volvió a reír en una forma más nerviosa.
-Ya veo entonces aún siguen con la tonta idea de la fiesta.
-No es tonta, además coincide con nuestra reunión de cada año y este será el primero en que tú estés con nosotros.
-Enserio cada año se reunían -dijo fastidiada-
-Si, lástima que tu no estuvieras aquí.
-Si supongo que me extrañaron mucho -dijo sarcásticamente-
-Sabes que si, ellos en verdad te estiman, así que, ¿qué dices?
-Lo pensare pero ahora mejor vamos a comer.
-Bien.
Ambos empezaron a comer en total y completo silencio
-Por cierto Anna llego esto para ti.
-¿Para mí? , ¿De quién?.
-Es de mi abuela a mí también me mando una.
-Ya veo -dijo ocultando un ligero nerviosismo que se apodero de ella, mientras la tomaba-
La observo por mucho tiempo hasta que Yoh hablo de nuevo.
-Bueno iré a hacer mi rutina después pasare por las cosas necesarias para la cena.
Anna solo siguió tomando de su té.
-Tratare de llegar temprano para no atrasar la cena.
-Porqué -dijo Anna -
-Si
-Porqué .. No .. Encargamos algo de cenar.
-Bueno podríamos. . . . ¿Pero qué? -hablo con sorpresa en su rostro-¿hablas enserio?
-Que, acaso prefieres cocinar.
-No, no es eso, es solo que.
-Entonces no digas nada, ahora ve a entrenar yo recogeré esto -si Anna ya no era tan mala con Yoh- luego los lavas -bueno casi nada-
-Si, regreso pronto -iba a retirarse pero antes de hacerlo- Anita.
-Que quie….-no termino de hablar ya que la acción del joven shaman la hizo callar cuando deposito un beso muy cerca de su boca sin tocar sus labios-
-Gracias -dijo dulcemente-
Anna se quedó un poco sorprendida ante la atrevida demostración de afecto, aun le resultaba difícil el acostumbrarse a las esporádicas muestras de cariño, desde que había regresado Yoh le demostraba un nuevo cambio día a día, su comportamiento era tan distinto al despreocupado e inocente chico que era, y su indudablemente atractivo ahora era más que obvio pues los años de entrenamiento y las facciones más maduras lo habían convertido en alguien totalmente apuesto, sin embargo su esencia era algo que conservaba tan única e intacta como en los viejos tiempos, ahora era cuando recordaba la vez en que lo volvió a ver después de tres años.
Flash back
Vivió con su sensei Kino por tres largos años ya que está decidió que Anna debía aumentar sus conocimientos de sacerdotisa y explotar al máximo sus capacidades, especialmente su mente ya que había notado el gran potencial de la chica, quería tenerla preparada por si el torneo se volvía a reanudar y así Anna esta vez sería más poderosa y ayudaría mas a su nieto. Pero una vez que agoto todos los recursos y técnicas que podía enseñarle pudo darse cuenta que Anna había superado todo cuanto más le pudiera enseñar, fueron años arduos de trabajo para la joven pero definitivamente los resultados fueron másde lo que esperaba.
Así por fin decidió que era hora de que la chica rubia regresara al lado de su nieto después de todo estaban comprometidos y no era bueno que estuvieran tanto tiempo separados, así que preparo todo para que Anna regresara al lado de yoh.
Anna no olvidaría ese día, llego a la estación un poco tarde, era un día frio y en cuanto fue anunciada la llegada a Fumbary tomo su equipaje, bajo sin dar mucha importancia a su alrededor, hasta que escucho una voz, esa voz que tanto quería oír, alzo su vista y ahí estaba, un chico castaño con una gran sonrisa en sus labios, que con tan solo verla sabía que todo estaría bien.
Sus ojos brillaron realmente cuando la vio, cielos estaba hermosa, camino apresuradamente para darle la bienvenida.
-Anita - estaba a punto de abrasarla quería estrecharla en sus brazos y demostrarle cuanto la extraño pero esa actitud que siempre recordaba de la chica lo hizo reaccionar, solo acorto la distancia lo más que pudo y sonriendo le dijo – bienvenida.
No podía creerlo él era Yoh, definitivamente no lo creía, sí que había cambiado, quería darle un gran abraso sentirlo cerca de ella, demostrarle cuanto le había hecho falta, al demonio lo que creyeran los demás, debía demostrarle todo lo que sentía por el, no sería fácil pero debía intentarlo, sintió su cuerpo temblar cuando lo vio acercarse, vio todas las intenciones que el tenia para abrasarla y ella no tenía la intención de evitarlo pues ella también lo deseaba y necesitaba, pero en cuanto Yoh estuvo cerca de ella nada paso, se sentía un tanto rara estaba segura que lo que iba a pasar era algo diferente pero Yoh solo se detuvo y le sonrió dándole la bienvenida, no importaba se conformaba con ver ese rostro que extrañaba, esa sonrisa tan sincera, observo detalladamente ese muy apuesto rostro, era increíble como en tan pocos años el tiempo lograra que se viera tan bien.
-Gracias -solo eso "bienvenida" bueno Anna cálmate fue tu culpa pensar en que algo más podía pasar-
Quedaron inmóviles por unos segundos ambos sin querer admitirlo querían grabar en su mente cada milímetro de sus rostros.
-¿Que no piensas ayudarme?-dijo con su tono habitual-
-Claro Anita - dijo al mismo tiempo que le quitaba sus maletas y reía-
Fin de flash back
Si definitivamente Yoh estaba cambiando a un buen físico, además ya no era aquel chico solitario, claro que aun Manta era su inseparable amigo, pero ahora no había chica que no se sintiera atraído por el joven, varias chicas se acercaban a él, el mismo número que salía desilusionada al no ver interés por completo de parte del chico y por saberlo prometido de la joven Kyoyama.
Mostro una ligera sonrisa una vez que Yoh se había retirado.
Dejo escapar un suspiro de sus labios, se dirigió a la sala y prendió la tele y comenzó a ver un poco de videos musicales enseguida cambio a las noticias y por ultimo a una película.
Después de unas cuantas horas apago el televisor, bostezo y se dirigió a las escaleras, subió uno a uno los escalones como si le pidiera permiso a cada músculo de su cuerpo para hacerlo, tenia plena intención de dirigirse a su cuarto pero antes de entrar como era su intención se detuvo ante el cuarto de su prometido, la tentación se dejó ver en su ser ya que por mas que no quería hacerlo su mente le decía que entrara, le tomo importancia a su impulso y giro la perilla sin pensarlo mas, en cuando puso un pie en la habitación pudo sentir el embriagante y posesivo aroma que mantenían las paredes, era indescriptible para ella, su cuarto estaba muy ordenado y el peculiar aroma que la envolvía la hacia adentrarse mas a la habitación, tomo un disco de la gran colección del chico,si que le gustaba Bob incluso el cd que ella había tomado era el que ella misma le regalo, al menos sabia un gusto indudable del joven castaño.
Pero. . Acaso ¿él sabía algo de ella? – esa pregunta retumbo por un gran rato en su mente
-Lo suficiente -se dijo a si misma al mismo tiempo que sacudió su cabeza para desvanecer su pregunta y duda, volvió a acomodar el disco definitivamente no podía negarlo su relación había evolucionado, no lo podía negar solo que el problema era que no como muchos hubiesen querido.
Hace cuanto que no entraba a la habitación, la última vez fue aquella en la que Yoh enfermo y ella administro su medicina aun lo recordaba fue esa misma vez en que ella e Yoh -se sonrojó al recordarlo- fue aquella vez en que Yoh confeso lo que sentía por ella.
-Toma debes tomar esto.
-Pero sabe horrible – se quejó como si de un niño se tratara-.
-Yoh no seas infantil y tómatela te ayudara a dormir.
-Esta bien -Anna ayudo a Yoh pasando uno de sus brazos por su cuello para ayudarlo a incorporarse mientras con la otra mano le daba un vaso de agua-
-Gracias Anita.
-Ahora duerme.
-Anna.
-Si dime.
Yoh tomo la mano de la chica la cual se sonrojo ante tal acto.
-Es bueno que hayas vuelto, gracias por estar a mi lado.
-Yoh sabes que . .
-Realmente me alegra que seas mi prometida.
-Yoh yo -Anna acerco su rostro como si de un imán se tratase poco a poco sus labios perdían distancia-
-Te quiero mi hermosa Anita -fueron sus últimas palabras antes de caer dormido-
Anna volvió a alejarse al ver que el chico estaba dormido.
-Tonto -dijo tiernamente y un poco desilusionada ya que casi lo besaba- yo también te quiero
Hubiera querido que Yoh no hubiera caído rendido por efecto del medicamento -voltio su rostro bruscamente- pero desde ese entonces no pasó nada mas al parecer Yoh no recordaba nada y no mostraba interés en querer decirlo, Anna no sabia si solo fue efecto de delirio o realmente lo sentía es que el no hacía nada por acercarse a ella y esa actitud realmente la confundía, tal vez en realidad solo la estimaba o la tenía al lado por saber que era un obligación que tarde o temprano debía cumplir por otra parte ellos se llevaban mejor platicaban, salían e incluso había veces que lograban cocinar juntos, se divertían.
-Solo eso- dijo ligeramente dolida.
Decidido que era hora de salir de ahí no debía estar más tiempo ya que seguramente Yoh llegaría pronto, sin embargo estaba muy equivocada en pensare eso.
Fue a su cuarto y se mantuvo bajo entrenamiento mental, que últimamente practicaba por orden de Kino era muy agotador pero cada dia controlaba mas su mente y poderes, una vez que ella decidió que ya era suficiente miro su reloj ya era tarde seguramente Yoh ya había llegado y no le dijo nada ya que el sabia que a esta hora ella meditaba como cada tarde así que bajo con la intención de aclarar sus dudas.
Seguramente una vez mas como solía pasar se encontró con el enano cabezón -pensó- estaba comenzando a molestarse trataba de no hacerlo pero era inútil por mas que trataba de pensar en lo positivo de la situación como tener tiempo libre y no ser molestada en su entrenamiento pero lo negativo salía a flote rápidamente, cuando pensaba que ella misma sugirió encargar algo para la cena y todo según ella para pasar tiempo juntos, pero no todo sale como se piensa.
Una vez que estaba en la cocina se sirvió un vaso de agua y tomo la mitad de su contenido después lo dejo en la mesa tomo una caja de galletas y saco una y volvió a tomar el vaso al tomarlo vio algo en la mesa algo que había olvidado, era la carta.
Una vez mas ese sentimiento de nerviosismo que tanto odiaba tener apareció, la tomo entre sus manos y la volteo varias veces , decidió que era mejor abrirla en su cuarto, tomo una manzana y subió nuevamente, se encerró nuevamente en su habitación.
Acabo dando la última mordida a su manzana y tiro el resto, por más que quisiera hacer tiempo sabía que debía abrirla así que mejor lo hizo de una vez por todas.
Hola mi querida Anna , como has estado ya no eh recibido noticias de ti e Yoh, dime acaso la relación ya no va tan bien como me describiste en la última carta.
Se sentía culpable por engañar a su sensei pero debía hacerlo siempre que hablaban de Yoh, Anna guardaba y borraba de su mente todo pensamiento acerca de ello hasta que la propia Kino le prometió no meterse ni tratar de volver a leer su mente siempre y cuando la tuviera al tanto de la relación amorosa entre ellos no por que en verdad quisiera saber todo entre ellos la razón era para ir fijando una fecha para la boda.
Por ello cada vez que Anna recibía una carta no era del todo agradable además de que no le gustaba andar escribiendo cursilerías y demás cosas y sinceramente que se metieran en su vida no era de su agrado. Pero a todo esto porque el repentino l interés de Kino, bien pues todo paso así.
Flash back
Aquella mañana llego Kino a la pensión junto con Yomei, la razón era visitar a Yoh el cual había caído enfermo y se encontraba un tanto delicado .
-Gracias Anna has cuidado muy bien de mi nieto.
-No tiene que agradecer recuerde que yo soy su prometida.
-es cierto y has hecho un buen papel como tal pero hablando de eso como va su relación.
-A qué se refiere- trato de no reflejar su sorpresa ante el cuestionamiento-
-Bueno ya tienen la edad suficiente y creo que ya va siendo hora de que la relación entre ustedes cambie y poner fecha a la boda.
-Pero aún es muy temprano -dijo tratando de ocultar su sorpresa-
-¿Temprano?, no lo creo o acaso es que el compromiso ya es de tu interés.
-No es eso es solo que.
-Ya veo mi nieto como siempre tan lento ¿no?
-Bueno.
- No me digas seguramente Yoh no ha dado ningún paso o me equivoco.
Anna se sonrojo ligeramente.
-¿Me equivoco?
Al no ver respuesta por parte de la rubia decidió dar un ligero vistazo a su mente, Kino se sorprendió, su nieto al fin mostraba sus sentimientos, trato rápidamente de ocultar su sorpresa más sin embargo Anna se dio cuenta de lo que hizo e inmediatamente saco a Kino de sus pensamientos.
-Lo siento no debí hacerlo más sin embargo me alegro haberlo hecho no tienes por qué avergonzarte es bueno saber que Yoh no es tan tonto como pensaba, prometo que no volveré a hacerlo y descuida no pretendo que se casen aún son muy jóvenes y necesitan más tiempo es solo que ya ha pasado mucho tiempo desde que se conocen y no veo cambios pero ahora estoy más tranquila -dijo con un poco de picardía-.
-Sí.
-Bien así se hará, ahora iré a ver a Yoh.
-Por favor no le diga nada de lo que ya sabe.
-Descuida yo no sé nada.
Desde ese día Anna decidió poner una barrera a su mente para que nadie entrara no se arriesgaría a que alguien más leyera su mente.
Fin flash back
Y en efecto en la última carta Anna le dio a conocer a Kino que Yoh y ella seguían muy bien y su relación aun mejor, tuvo que mentir ya que la "relación" no era de noviazgo como Kino suponía sino más bien era de amistad, era una suerte que Kino se fuera el día siguiente.
Siguió leyendo la carta
Espero que mi tonto nieto no te haga enojar y si algo no anda bien, infórmamelo sobre todo si Yoh no te hace caso como debe, házmelo saber yo hablare con el, se de ante mano que es un despistado y puede arruinar todo lo que logre asi que ten paciencia.
-Anita estas ahí- hablo el castaño tocando la puerta.
Anna doblo rápidamente la carta y la metió en la bolsa de su falda.
-¿Qué quieres?
-Puedo pasar -no obtuvo respuesta así que iba a volver a hablar cuando Anna abrió la puerta mirándolo de una forma un tanto molesta-
-Lamento haber llegado tarde pero me encontré con Manta.
-Si lo imagine.
-Siento haber tardado es que me enseño un correo que envió Ren diciendo que mañana llegara -dijo entusiasmado-
-Buenas noches Yoh -su molestia aumento ligeramente-
-Espera Anna no quieres cenar te traje algo.
-No tengo apetito, hasta mañana Yoh -cerró la puerta en la cara del castaño-
Nada marchaba bien no sabía si Yoh era un ingenuo o un tonto que se supone debía hacer la relación era de los dos pero Yoh no mostraba ningún interés además el ya había empezado a vivir su vida tal vez ella solo vino a molestarlo una vez más.
Flash back
-Hola Yoh buenos días -dijo una chica sonriente que se colgó inmediatamente del brazo de yoh-
-Hola buenos días.
-Dime Yoh al fin podremos desayunar juntos.
-Bueno es que veras -dijo subiendo una mano a su cabeza-
-Piensas quedarte ahí todo el día -dijo una chica al ver como alguien se encimaba a su prometido tratando de llamar su atención-
-Anna – Se asustó y sorprendió ante la presencia de su prometida.
-¿Quién es ella?, hay no Yoh no me digas que es tu novia -dijo la chica asiendo puchero-
-No ella no es mi novia -sonrió con nerviosismo-
-Menos mal Yoh ya me había preocupado
Anna esperaba una respuesta más por parte del castaño pero la molesto no oírla.
-Si, no soy su novia . . . soy su prometida - declaro tajantemente la rubia-
-No, eso no puede ser verdad Yoh que no es cierto.
-Bueno pues veras yo. .
Anna se molestó aún más porque simplemente no decía que si.
Lo miro fríamente y decidió pasar de largo.
Fin flash back.
Si ya no lo dudaría en verdad era un tonto, pero no todo era tan malo con el castaño incluso esa misma vez demostró que podía tener agallas.
Flash back
Como se atrevía a quedarse callado era un grandísimo idiota, pero ahora que haría, ella no conocía la escuela donde demonios se supone que debía ir.
-Hola eres nueva ¿verdad?, porque no olvidaría tan lindo rostro, mi nombre el Elliot ¿puedo ayudarte?.
Era un chico realmente simpático, tenía toda la intención de decir que no pero realmente necesitaba saber dónde estaba su salón además Yoh se había quedado con la resbalosa esa.
-Busco este salón.
-Déjame ver , mira qué casualidad está cerca del mío sería un placer poder guiar a una chica tan linda como tú.
-Anna -interrumpió llamándola por su nombre una voz molesta a espaldas de los chicos-
Ambos voltearon.
-Vamos te llevaré a nuestro salón- hablo un serio yoh-
-Lo siento amigo yo te gane, aunque al parecer él te conoce - viendo a Anna - es tu amigo.
-Él es . . . .
-soy su prometido -dijo recalcando las últimas palabras mientras tomaba la mano de la rubia- vámonos
El apuesto joven solo sonrió ante el acto heroico del castaño
-Nos vemos luego Anna -grito a lo que Yoh solo se molestó más-
-No tienes por qué llevarme de la mano -dijo molesta la rubia pues tenía derecho de seguir enojada-
-¿Quién era él?
-Yo que se lo acabo de conocer.
-Anna lo siento no fue mi intención no decir nada.
-Descuida no tienes que decir nada que no te agrade solo por complacerme.
-No te equivocas, no lo hice porque no sabía lo que tu querías, pero la verdad yo me siento orgullosos de que seas mi prometida.
Un sonrojo inevitable adornaron las mejillas de la rubia.
El chico intento besarla pero recapacito y solo dijo.
-Nos vamos.
Sí que era lento siempre lo arruinaba y Anna tenía que vengarse.
-espero que lo que acabas de decir sea cierto sabes que no puedes engañarme.
Fin del Flash back
Y realmente se lamentó no dejarlo hacerlo esa vez ya que después Yoh no volvió a intentar besarla. Kino solo la mantenía presionada buscando respuestas, tal vez Yoh la respetaba y por ello no se atrevía a ser algo mas o quizás le tenía miedo, tantas preguntas surgían y necesitaba respuestas pero ya no tenía mucho tiempo estaba comenzando a creer inútil que ella siguiera intentando despertar algo en el joven shaman y ahora que le diría a Kino.
-Es tan simple dile la verdad-escucho a su conciencia-
-Estás loca decirle querida sensei su tonto nieto sigue igual no tiene tiempo para mi y al parecer menos para un compromiso por que no habla con el
-Sí, eso suena bien.
-Sí y puedo acabar con un atentamente la "desesperada Anna "
-Si, si suena bien. . . .un momento O.o? DESESPERADA acaso lo estás.
-Por supuesto, no sé qué le diga Kino a Yoh en las cartas que ella manda, el tal vez está más que enterado de todo lo que tuve que inventar y yo soy la que queda como tonta.
-Entonces por qué no hablas con tu sensei ella te entenderá.
-Si lo entenderá y "obligara" a su nieto a cambiar.
-perdona no estoy segura pero que no eso es LO QUE QUIERES.
-Claro que no, no quiero tener a Yoh a mi lado, no si es por un compromiso que debe cumplir.
-Entonces seguirás mintiendo.
-No tengo otra opción.
-Bien pero cuanto aguantaras.
-No lo sé …. No lo sé.
Caminaba un tanto distraído, Anna volvió a molestarse con él, eso era evidente pero todo era su culpa no debió tardar tanto, era sorprendente ya casi su abuela ponía fecha para la boda y él no lograba un cambio con Anna bueno por una parte ella era ahora como decirlo más accesible y hasta dulce en cierta forma como la vez que fue su cumpleaños y le regalo aquel disco que significo mucho para él pero y el que sabía de ella, no mucho en realidad y cada vez que tenía una oportunidad debía arruinarlo, haciendo que Anna se molestara, es solo que tal vez las presiones no se hicieron para él, no él no era cobarde es solo que aún no sabía cómo actuar claro que quería a Anna simplemente con cada día era más hermosa y cada día la relación tenía un cambio bueno pero había veces que todo se congelaba , pero como fueran las cosas él debía actuar rápido ya que como una vez Ren le dijo Anna era muy bella y cualquiera podría quitársela y eso no lo soportaría debía hacer algo.
La chica rubia se aproximó a su futon y se acostó se dispuso a descansar, volteo hacia la ventana ya que le dio la impresión de haber visto algo pero al no ver nada se relajó y cayó en un profundo sueño.
Afuera de la habitación alguien la observaba, unos ojos brillantes que apenas podían distinguirse de entre las sombras se posaron sobre ella, acompañados de una sonrisa que mostraba lo complacido que estaba por haberla encontrado.
-Al fin te encontré Anna. . .al fin . . . mi querida sacerdotisa.
Continuara . . .. . . .
Que tal como ven el primer capítulo. Debía hacerlo, la idea me surgió después de haber visto shaman king de unos videos que me prestaron y al fin hice un fic en el cual ya no es universo alterno espero tener su aceptación y lo continuare muy pronto y esperen no tardare en sacar a mi querido Hao Asakura.