NocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNocturnalPulseNoctunalPulse-

Pulsión Nocturna

Author's Note: Hello everyone! This is Lilith Filth, and I just wanted to say thank you very much for your support if you've read the English version of this story. It's been so much fun writing this, and I'm glad that you guys enjoyed reading it. I would also like to give a huge thank you to Francisca for taking time out of her day and away from her storiesto translate mine. I do not own Twilight or it's characters. Thank you all so much. Happy reading/writing and much love.

Nota de Autor: Hola a todos! Lilith Filth aquí, bueno yo solo quería decirles muchas gracias por todo su apoyo si esque han leído la versión en Ingles de esta historia. Fue muy divertido escribir esto, y me alegro que hayan disfrutado leyéndolo. Tambien me gustaría darle una gran gracias a Francisca por tomar tiempo de su día y de sus historias para traducir la mia. No me pertenece ni Twilight ni ninguno de sus personajes. Muchas gracias a todos. Feliz lectura y mucho amor.

1. Convenceme de nuevo

Nos sentamos todos juntos como una familia. Riendo y desfrutando de la compañía. Familia. Eso era lo que habían comenzado a pensar de mí. Una hija y una hermana. Todos ellos excepto Edward y Rosalie en su consentimiento a mi cambio. Pero la mayoría lleva. Solo era cuestión de tiempo. Los Volturi lo querían. Eran la realeza vampiresa. Cualquier cosa que ellos quisieran se tenía que hacer. Me asustaba mucho que estuvieran esperando. Amaneciéndose sobre mi fallecimiento. Pero de alguna manera lo bienvenida. De alguna manera estaban obligando a Edward a cambiarme. Para ser su compañera por toda la eternidad. Me hacía sentir bien que me aceptaran. Que todos quisieran que yo fuera parte de su mundo. Edward estaba sentado en sofá de cuero negro del salón de los Cullen. Su frio brazo abrazando mis hombros ligeramente. Así es como quería que mi vida fuera para siempre.

"Solamente en ese extraño mundo hubiera podido ocurrir eso" Exclamó Emmett mientras un avión se hacía mil pedazos en la pantalla de la televisión. Tenía la tendencia de arruinar las películas de acción como esta.

"Emmett…" Alice silbó. Estaba recostada sobre su estomago en el duro piso. Jasper se sentaba junto a ella con las piernas cruzadas, luciendo tan cautivado por la película como su inmortal esposa.

"Lo digo enserio!"Se inclinó hacia delante "Nadie podría sobrevivir a eso"

"Nosotros podríamos" Rosalie y Jasper respondieron al unísono. Todos reímos. Edward río entre dientes a mi lado. Enviando el delicioso olor de su aliento a mi rostro. Me encantaba su risa. Me acurruque mas contra el descansando sobre su pecho. Sus fuertes brazos se cerraron en mí alrededor.

"Ustedes me entienden" Emmett bromeó. Miro a su esposa Rosalie, con una juguetona mirada de amenaza antes de atraparla entre sus sólidos brazos y besarla apasionadamente como si nadie más estuviera en la habitación.

"Emmet.Rose." Esme se escucho desde el asiento que ella y su esposo Carlisle compartían cómodamente. No necesite ver a Alice para saber que puso sus ojos en blanco por el afecto que Emmett y Rosalie estaban compartiendo. Mire a mi otra mitad para encontrarle observándome con una mirada pensativa que no pude leer. Le sonreí ligeramente y le besé en la mejilla. Amor por todas partes. De pronto un sonido de beep interrumpió la atmosfera. Carlisle se inclino hacia atrás en el asiento para que le fuera más fácil meter la mano al bolsillo. Saco su beeper que emitía una luz azul en es oscuro cuarto. El joven doctor mostro una triste sonrisa.

"Me necesitan en Urgencias esta noche"

"¿Otra vez?" Esme tenía una mirada de decepción en su rostro.

"Lo siento amor. No me quedaré más tiempo del necesario. Lo prometo" Dijo esta ultima oración con una sonrisa sincera. Esme sonrió profundamente y se inclinó para darle un pequeño beso que el devolvió. Que amor tan hermoso esos dos tenían. Me encantaría que yo y Edward creciéramos juntos de esa manera. Quedando jóvenes y enamorado tanto tiempo como ellos. Creo que Edward pudo oler el calor que se esparcía en mí y me acerco más a él. En menos de un minuto, Carlisle estaba en el segundo piso y devuelta abajo, con su cabello peinado y vestido en una linda chaqueta con su maletín de doctor en mano.

"Buenas noches" Hablo otra vez mientras entraba en el salón para despedirse. Un beso más para su hermosa mujer.

"Edward, no olvides llevar a Bella a su casa. No quiero que Charlie este esperándola despierto toda la noche."

Puse mala cara. Carlisle no quería ser un aguafiestas, pero había logrado exitosamente que Edward moviera su brazo de mí alrededor y asintiera en agravio. Pero mi novio miro a mis ojos. Su topaz invadió mi café y nos dimos una mirada de entendimiento. El no me dejaría esta noche. El y yo compartíamos la cama en mi cuarto cada noche por un largo tiempo. Cada noche excepto los meses que el paso lejos. Y con este conocimiento me levante del sofá y deje la misión Cullen sin quejarme. Edward y yo nos despedimos de la familia y caminamos junto a Carlisle por la puerta hacia el fresco aire nocturno.

"Tómalo fácil esta noche" Edward le sonrió a Carlisle. El rubio y alto hombre le sonrió de vuelta y asintió.

"Y tú no tengas a Bella despierta toda la noche. Es increíble lo mucho que los humanos necesitan su sueño" Edward rió y me abrió la puerta de su Volvo.

"Acaso no lo sé…" Sonrió dejando ver su brillante dentadura-

"Buenas noches señor Cullen" dije yo con una sonrisa antes de bajar al asiento.

"Buenas noches Bella" Dijo el suavemente. Su sonriso eclipso la mía. El Mustang de Carlisle que estaba aparcado detrás del auto de Edward salió a toda velocidad antes de que saliera con un chirrido de llantas.

Edward condujo con una sola mano. Mientras que su otra pálida y fría mano estaba tomada con la mía. Arboles y faroles pasaban borrosamente por las ventanas mientras mi novio excedía el límite de velocidad para llevarme a casa. En menos de diez minutos, nos encontramos estacionados silenciosamente en las afuera de mi casa. Sabía que lo volvería a ver en tan solo unos momentos y que mientras más rápido saliera, mas rápido el volvería a su casa a dejar el auto y volvería a mí. Pero esperar por él era difícil. Ya había esperado mucho por él en mi vida. Meses sin él. Eso era suficiente. Era mucho y nunca quería estar sin él otra vez. Sus cejas se juntaron en un pensamiento mientras me observaba. Tratando como siempre de descifrar lo que pasaba por mi mente. Agonía. Completa agonía tener que siquiera pensar en cuanto había existido en Forks sin él.

"Bella" Susurro. Me saco de mi pesadilla a la realidad. Mire a sus ojos color topaz y deje que alivio se esparciera en mí. El estaba aquí. El estaba aquí para quedarse. El nunca me iba a dejar otra vez. Él lo prometió.

"Te veo en 10 minutos" Le dije con una sonrisa mientras me inclinaba hacia el par besarle en los labios. El me sonrió. Rápidamente abrí la puerta del auto y salí para entrar a la casa. Mientras entraba encontré a mi padre quien estaba absortamente viendo un partido de football en el living.

"Papa, estoy en casa!"

"Hola Bells! No pensé que fueras a volver. Creí que me tendría que alimentar por mi mismo de nuevo." Mire hacia la cocina y note el sartén con huevos fríos y tocino dentro. No pude retener una pequeña risa. Estaba demasiado perezosa para cocinar estar noche. Esto tendría que hacerlo. Me comí las sobras del sartén rápidamente, para no tener a Edward esperándome. Mire el reloj del microondas. Un poco más de las once. El definitivamente estaba esperándome arriba ahora.

"Mm… me voy a la cama ahora Ch-papa. Nos vemos en la mañana." Dije con un bostezo. Con esto arrastre pesadamente mis pies por las escaleras de madera hasta mi cuarto. Mi puerta se abrió silenciosamente mientras entraba. Vi a Edward entrando por mi ventana. Moviéndose rápidamente. Viéndose como un dios, como siempre. El cuidador de mi ventana. Mi hermoso chico vampiro. Sonreí.

"Alguien tiene apuro"

"¿Para verte a ti? Nunca. Dijo el con sarcasmo y una sonrisa en su rostro. Camine lentamente hacia el cómo lo había hecho muchas veces desde que volvimos de Italia. Toque su rostro. Mis dedos tocaron su fría frente. Sus cejas, sus parpados, sus mejillas, su perfecta nariz, sus labios. Si. El estaba aquí. Definitivamente. En la carne.

Y no me volverá a dejar. No me volverá a dejar. No me volverá a de-

"¿Bella?¿estas bien? Te ves un poco fuera de ti." Le mire a los ojos con lágrimas en los míos. El dio un rápido y profundo respiro.

"¿Qué pasa?..."Dijo él. La seriedad demostrada en sus ojos. El movimiento de su cuerpo lo decían todo. Sus brazos estaban ahí para confortarme, pero sus ojos me decían que si alguien me estaba causando dolor, el saltaría alegremente de mi ventana de nuevo y mataría a que me estaba haciendo llorar. Y gracias a dios que no me podía leer la mente. Porque era el mismo.

"Es solo que… estoy muy feliz que estés aquí" Lloriqueé. Sus ojos se suavizaron al entenderme.

"Nunca te dejare de nuevo, cariño. Tú lo sabes. No soy lo suficientemente fuerte para estar sin ti. No otra vez."

El hablo con tristeza. Queriendo más que nada que le creyera. Le mire de nuevo y asentí. Si le creía. ¿No es así?. Su rostro se acerco al mío. Cerré mis ojos. Su frio aliento paso por mi cara. Mis labios. Y estaba en pura dicha. Nuestros labios se tocaron. Me sostuvo cerca por mi cintura, sin saber que eso era lo único que me abstenía de caer al piso. Sus fríos dedos estaban entre mi cabello. Eran estos momentos los que me hacían olvidar que me había dejado. Era mi cumpleaños. El me trajo a casa de la fiesta en su casa que había estado perfecta. Todavía no estaba de acuerdo con transformarme en un vampiro. Pero el si quería estar conmigo. Sostenerme y besarme hasta el amanecer. Todos esos meses nunca sucedieron. Sentí en ese momento que realmente iba a llorar. Saco sus labios de los míos lentamente y me sonrió cálidamente.

"¿Estas convencida?"

"Uh uh… creo que… me vas a tener que convencer de nuevo. Todavía no te creo mucho…" Dije con una sonrisa juguetona. Y en mi demanda, el precioso vampiro se acerco y me beso con amor en los labios otra vez.

"Eso tendrá que hacerlo…" Dije sin aliento…"Mmm…necesito una ducha"

"Estaré esperando" Dijo él con voz parcial y una hermosa sonrisa.

Lentamente me soltó y me dejo ir a buscar mi bolso con personales y mis pijamas para dormir. En la ducha deje que todos los pensamientos negativos se lavaran y se fueran junto a la suciedad del día en mi piel al oscuro abismo que era el desagüe. Deje que las gotas de agua se metieran en mi cabello y mojaran mi rostro antes de cerrar la presión y salir de la bañera a la alfombra. Me seque completamente y me puse el pijama antes de pasar el cepillo por mojado cabello y dejar el húmedo baño.

Cuando entre a mi cuarto. Encontré a Edward mirando a las cosas sobre mi escritorio. Fotografías de mama y Phil. Maquillaje que nunca usaría. Esmalte de uñas que nunca se aplicaría en mis dedos. Retenedores que mantenía en una pequeña caja.

"¿interesado en algo?" Dije con una sonrisa cerrando la puerta silenciosamente tras de mí. Edward rió.

"Puedes creer que después de todo el tiempo que hemos estado juntos, todavía estoy curioso por ti Bella Swan…"

Sonreí un poco. Sabía perfectamente cómo se sentía. Después que se fue, me encontré completamente intrigada por el otra vez. Supongo que ambos estábamos asustados que haber perdido algo crucial en cada una de nuestras vidas. El yéndose fue un pináculo que me rompió el corazón. Pero aprendí mucho sobre mí misma. Por ejemplo, que la vida sin él era un infierno. Un absoluto infierno. Me cansaba el solo pensarlo. Bostece lentamente. Edward me sonrió suavemente otra vez. Volviendo mis piernas gelatina.

"La princesa necesita descansar" Me levanto en sus fuertes brazos y me cargo la corta distancia hacia mi cama en donde me recostó entre las sabanas para luego caminar hacia la pared de al lado y apagar la luz.

"¿Y el príncipe se quedara con la princesa esta noche, no es cierto?"

Inmediatamente después de apagarse la luz, sentí un frio brazo abrazarme. El sonido de su respiración al tomar mi esencia tras de mí era intoxicante.

"No hay ningún lugar en donde el príncipe prefiriera estar…" Acaricio mi cabello y beso mi cuello gentilmente. Mandando una onda de calor por todo mi cuerpo

"Te amo" susurre. No me moleste en esperar su respuesta. El me amaba. Lo sentía en mis propias emociones. Antes de que él pudiera responder, me dormí rápidamente.

...Continuara

Sii!! primer capituloo ojala les gustee a mi me encanto cuando la lei por eso la estoy traduciendo para que mas gente tenga la posibilidad!!

besos BYEE

Lilith ur a great writer hugs Lilith eres una gran escritora abrazos

bye!!