Hola a todos! Muchas gracias por tomarse un tiempo en leer esta pequeña historia XD Espero les guste tanto como yo disfrute escribiéndola. Y bueno, muchos saben que es raro que publique de un día para otro pero he leído algunas historias y me dije: Wow, aquí estamos un tanto tristes ¿no? Así que esta historia pasa a publicarse hoy.
Agradecimientos a Thomas Astruc por tan geniales personajes y amo a Félix y Bridgette KYAAAA! Y sin nada más que decir… COMENZAMOS!
….
Demasiado adorable.
Capítulo único.
-Hola Nath. Disculpa, ¿puedes ayudarme? Es que tengo dudas sobre algunos colores y necesito saber cómo combinarlos...
-C-Claro Bridgette, con mucho gusto puedo ayudarte.
Y allí estaba de nuevo. Bridgette y su constante dulzura que la hacían ver adorable y que ella misma no se daba cuenta. Cosa que le fastidiaba hasta la médula.
-Félix, calma, le perforaras la espalda a Bridgette.- dijo Allan observando al rubio con una sonrisa de lado.
-No estoy haciendo nada.
-Exacto. Y en nada se quedará por el momento.- Félix gruñó. Sabía a qué se refería Allan.
Estaba celoso a morir.
Bridgette y él habían empezado a salir hace un par de semanas. Y todavía no habían formalizado su relación. Pero ¿de quién es la culpa? ¡De él!
-¡Gracias Nath! Eres genial.
-D-De nada Bridgette. Si-Siempre es un placer ayudarte.
-Eres muy dulce, prometo compensarte después.- posó su mano en el hombro del artista y luego regresó a su lugar.
Nathaniel sonrió con un leve sonrojo pero se estremeció al sentir la mirada de Félix sobre él sintiendo un escalofrío recorrer su espina y bajó la mirada. Allan se rió, ver a su amigo así era hilarante. Y ese día en especial el universo parecía estar en contra del rubio.
En deportes todo iba normal, y Félix a veces no podía quitar la mirada de Bridgette que si bien su uniforme de deportes era un poco grande, eso no significaba que no fuese menos bella, al contrario...
-¡Ah! ¡Alyx!- gritó molesto Kim al ver su botella de agua en el suelo por culpa que Alyx tiró con la pelota de voleibol que estaba en sus manos. La chica sonrió de lado.
-Ups. Lo siento Kim.
-Bien sabes que no lo sientes.- gruñó molesto.
-Toma Kim.- Bridgette le tendió una botella de agua.- Siempre tengo una extra en caso de emergencias.
-¡Uf! Gracias Bridgette. Me salvas la vida.- dijo agradecido tomando la botella de su mano rozando un poco sus dedos.
-Bridgette, a veces te pasas de buena.- se quejó Alyx y Kim le fulminó con la mirada.
-No le hagas caso Brid, sigue así de linda siempre.- le guiñó el ojo sin saber que con eso firmó su sentencia.
-Vamos Félix, hay que jugar.- le empujó Claude a la cancha. Cuando el maestro les llamó para jugar al baloncesto, Claude y Allan vieron con miedo como el rubio parecía querer romper la pelota entre sus manos, luego a Félix no le importó cometer una falta con la pelota y la cara de Kim.
En el receso, Max y Markov llamaban la atención de todos con sus nuevas actualizaciones y Bridgette estaba entre el grupo. Aunque Félix veía a Bridgette de reojo reír con sus amigas, Max presumía de la nueva actualización de su robot.
-Como verán Markov ha acoplado perfectamente un sensor para medir o calcular las probabilidades de medir el peligro o evitar situaciones accidentadas.
-Vaya, eso le vendría bien a la mesera.- se burló Claudia y Bridgette quiso golpearla pero Markov voló a su lado.
-No te molestes Bridgette. No vale la pena molestarse con esa clase de personas o seres vivos que parecen personas.- Claudia volteó la cara ofendida cruzándose de brazos, algunos se rieron y Bridgette con un toque juguetón golpeó con su dedo la pantalla del pequeño robot.
-Gracias Markov, eres muy lindo.- los ojos del robot se pusieron como corazones ante ese tierno gesto.
-Oh… Mis circuitos se están calentando...- pero detrás de Bridgette, un muy molesto Félix miraba a Markov como si desease destrozarlo circuito a circuito y eso hizo saltar la alarma del robot.
-¡PELIGRO! ¡PELIGRO! AMENAZA LATENTE. NIVEL DE PELIGRO 100% Y SOBREPASANDO EL RANGO.- Markov decidió esconderse en la mochila de Max que estaba tan confundido como los otros, a excepción de Félix que estaba complacido.
Las horas de clases llegaron a su fin, y en la sesión de fotos de esa tarde estaba pensando en Bridgette. La joven debía tener cuidado, debía entender que no podía ser tan amable, tan dulce, tan hermosa, ni tan adorable con todo el mundo, aquello podría malinterpretarse y convertirse en una situación incómoda.
-¡Veinte minutos!- anunció el fotógrafo y Félix suspiró un poco cansado.- ¡Bravo Félix! Tus expresiones son algo cambiantes hoy pero son perfectas.- el rubio arqueó la ceja, ¿de qué estaba hablando? Y es que sin darse cuenta sus expresiones cambiaban a una serena cuando pensaba en Bridgette a una molesta y fría cuando pensaba en la posibilidad de usar su Cataclysm en quienes se atreviesen a mirarla de forma no platónica.
-¡Félix!- Bridgette estaba a un lado del Gorila con una caja entre sus manos con el logo de la cafetería Dupain-Cheng. Al acercarse este se inclinó para besar su frente.
-¿Qué haces aquí, Bridgette?
-Bu-Bueno, es que quise traerte algo especial.- se acerca para susurrar a su oído.- Y ya soborne a tu chofer, así que no dirá nada sobre tu dieta.- Félix miró de reojo que su chofer tenía una caja más grande en su mano, arqueó la ceja aunque nadie podía resistirse a las exquisiteces de los Dupain-Cheng.
Se sentaron a almorzar, Félix comía de acuerdo a sus modales, ya que como Chat Noir los olvidaba por completo, unas deliciosas crepas de pollo en salsa.
-¿Están buenas?
-Deliciosas.- Bridgette sonrió con un leve sonrojo, la joven se imaginaba ya la vida de casada en donde desayunaban juntos y con tres bonitos niños; en cambio Félix pensaba que esa expresión soñadora la hacía ver más hermosa... y debía hablar con ella.
-Bridgette. Necesitamos hablar.- Bridgette le miró con grandes ojos, como si esas palabras hubiesen roto su burbuja.
-¿D-D-De que quieres hablar?- ella se imaginaba los peores escenarios, hasta su mechón de pelo parecía inquieto y Félix la tomó de este al verla temblar.
-No es nada malo.- gruñó y después soltó su mechón. Tomó aire antes de comenzar.- Bridgette, tal vez no seas consciente de tu actitud pero algunas cosas que haces podrían llevarse a malinterpretarse y otros no verían tus acciones con las mismas intenciones que tú.
-¿Qué quieres decir?
-Lo que quiero decir es que... ¿podrías dejar de ser tan... tú?- dijo como pudo y Bridgette le miró confundida.
-¿Qué cosa?- no entendía de lo que estaba hablando ¿es que de nuevo se había hecho de esa maldita hierba de gato? En cambio Félix intentaba encontrar las palabras correctas.
-Lo que quiero decir... lo que quiero decir es que tú... ¡Tú eres...!- las palabras no le salían al estar siendo observado por esos brillantes ojos zafiro, ¿desde cuándo ella lo ponía nervioso? De repente Bridgette hizo un leve gesto de sorpresa y al ver arriba algunas nubes negras.
-¿Eh? ¿No dijo la chica del tiempo que llovería más tarde?
-Obviamente no será así.- gruñó cuando algunas voces de los transeúntes se hicieron algo altas por la sorpresa que traía el cielo.- Vamos.- Félix guardó su comida y cuando el fotógrafo dio por terminada la sesión algo molesto por dejar a medias la mejor sesión de la temporada, una lluvia ligera comenzaba a caer sobre la ciudad y la casa de Bridgette estaba demasiado lejos… solo había una solución.
Félix no había tenido opción más que llevarla a la mansión. Se había producido un accidente en el camino y la lluvia empeoraba a cada minuto, eso y sumando el hecho de que ambos estaban un poco mojados y necesitaban cambiarse antes de que se resfriaran. Por suerte Natalie y su padre no estaban.
-¡Achu!
-Ven, te daré algo de ropa.
-Gracias chaton.- agradeció de corazón y le siguió a su cuarto.
La habitación de Félix, tenía montones de libros y era acogedor, aunque a primera instancia podía percibirse una extraña reclusión con el resto del mundo, esta quedaba descartada ante unas cuantas fotos que no solo mostraban a la madre del rubio, sino a sus amigos y a Bridgette.
-Toma.- le tendió uno de sus pijamas, un conjunto color gris oscuro que era muy cálido.
-Gracias Félix.
Tikki y Plagg salieron de sus escondites y volaron un poco alrededor.
-Espero que las cosas aquí no se pongan raras entre ustedes dos.
-¡Plagg! No digas esas cosas.
-¿Qué? Solo decía. A esa edad son un montón de hormonas alocadas y no quiero ver nada que me quite el hambre.- Tikki rodó los ojos.
-Típico de ti.- en cambio Bridgette parecía una roja fresa y Félix intentaba controlarse para no agarrar al kwami de la cola y lanzar contra la pared.
-¡V-V-Voy a cambiarme en el baño!- dijo Bridgette de forma atropellada antes de correr a encerrarse en el baño. Cuando lo hizo Félix y Tikki fulminaron a Plagg con la mirada.
-¡Ah, que delicados son!- Tikki suspiró y miró a Félix.
-Me lo llevaré por un rato.
-Por favor.- la kwami sonrió y se llevó al molesto gato. Tikki le caía muy bien.
Encendió la televisión y vio que algunas calles estaban siendo cerradas o incluso había desviaciones por algunos accidentes menores.
-¡Félix! ¿Qué es ese ruido?- habló desde el baño.
-Solo veo las noticias. Al parecer algunas calles están cerradas.
-¿De verdad? Creo que debo avisar a mis tíos que llegaré tarde.
-¿Y cómo piensas irte con esta lluvia?
-Sencillo, como Ladybug.
-¡Ni hablar!- espetó Félix.- Está lloviendo a cantaros y los techos son muy resbalosos y traicioneros. Y hablo por experiencia.
-Pero Félix...
-Te quedarás aquí. Hay muchas habitaciones solas, que ocupes una no pasará nada.
-Pero...
-Bridgette.- su tono de advertencia fue lo único que necesitó para convencerla.
-Vale, les llamaré para decirles que me quedo.
-Buena chica.
Más tranquilo por lo a veces cabezota que era Bridgette, Félix debía pensar en cómo retomar el tema pendiente. Frunció el ceño mientras se ponía una camiseta blanca y al escuchar la puerta del baño abrirse volteó solo para quedarse congelado en su sitio. Bridgette tenía el cabello suelto y húmedo, su camisa le quedaba algo grande cubriendo sus muslos, iba descalza y... no llevaba pantalones puestos, estos estaban en sus manos.
-L-Lo siento pero me quedan algo grandes...- ella lo miró como si fuese culpable del tamaño del pantalón; con sus grandes ojos, ese sonrojo en sus mejillas y esos labios rosados abiertos ligeramente...
-¡SUFICIENTE!
Furioso llegó a ella en tres zancadas y la tomó de los hombros. Bridgette emitió un pequeño chillido y su corazón latía desbocado ante la intensa mirada de Félix.
-Bridgette. A partir de este momento eres mi novia oficialmente.- Bridgette tardó unos segundos en reaccionar.
-... ¿Eh?
-No lo voy a repetir. Eres mi novia y ni se te ocurra decir algo.- una sonrisa apareció en los labios temblorosos de Bridgette y hasta su mechón cambió a formar un corazón.
-Oh, Félix... Sí, ¡SI!- le abrazó feliz.- Claro que seré tu novia chaton.- Félix sintió que podía respirar tranquilo.
-Bridgette...
-Y tu...- con su dedo hizo unos pequeños toques en la punta de la nariz de su novio.- Eres mío.- Félix ahora fue quien sonrió un poco.
-Siempre my lady.- se miran embelesados, ambos mirándose con una ternura infinita mientras sus rostros se acercaban hasta casi tocarse y...
-Voy a vomitar... en serio voy a vomitar.- Bridgette ahogó una carcajada cubriendo su boca con sus manos y Félix suspiró contando hasta diez o arrojaría a Plagg por la ventana.
A Gabriel Agreste era difícil, sino imposible de sorprender. Pero en esa clara mañana después de regresar de su viaje mucho antes de lo previsto, al entrar al cuarto de su hijo las cejas se dispararon hacia arriba. Félix estaba dormido sobre las cobijas abrazando un bulto alargado de donde sobresalía la cabeza de una chica a la que tardó en reconocer. Tosió de forma fuerte y fue que los vio despertarse, bien, la chica tenía ropa, eso era buena señal, pero eso no significó que mirara de forma severa a su hijo.
-Veo que te dedicas a ciertas cosas en mi ausencia Félix.- el joven gruñó y Bridgette muerta de la vergüenza tomó una almohada para protegerse.
-Padre...
-Bu-Buenas días señor Agreste. Sé que esto se ve mal pero en serio, EN SERIO no hicimos nada.- dijo de forma atropellada la pobre chica y Félix pone su mano sobre su cabeza.
-Deja explico yo.
Después de explicar lo ocurrido por culpa de la lluvia, la expresión de Gabriel Agreste permanecía indiferente, pero sus ojos viajaron por un segundo hacia la mano de su hijo que sujetaba la de la chica que estaba más roja que una cereza. La reconoció de algunos concursos recordando su gran talento y era una chiquilla muy linda para su edad.
-... Y sin querer nos quedamos dormidos mientras hablábamos. Eso es todo.- Gabriel suspiró a lo bajo murmurando algo entre dientes.
-Que aburrido.
-¿Disculpa?
-Dije que entiendo. La situación es comprensible y es normal a tal como se te ha sido educado que desees ayudar a esta jovencita.
-Efectivamente.- Gabriel asintió y luego observó alrededor donde vio sobre una silla la ropa de Bridgette.
-Muy bien Félix, aunque debiste hacer algo con la ropa. De esa forma las prendas deben de seguir húmedas. Debiste dejarlas con alguien del personal para que se secaran correctamente.- se acercó tocando un poco la chaqueta que estaba en el respaldo y Bridgette por primera vez habló.
-¿N-No está seca? ¡No puede ser! Hay que ir a la escuela y no puedo salir así.- se cubrió más con las sabanas y antes de que Félix la tranquilizara su padre habló.
-No se preocupe. Creo tener algo de su talla.
-¡Oh no! No podría…
-Insisto. Es amiga de mi hijo y me gustaría compensarla por el inconveniente de su ropa. Y no acepto un no por respuesta.- la mirada del Agreste mayor la intimidó tanto que asintió enseguida.
-Entiendo. Gracias y disculpe las molestias causadas.
-No es ninguna molestia. Se lo aseguro.- Félix no por qué, pero tuvo un mal presentimiento y estaba seguro que no fue su imaginación esa leve sonrisa que vio en los labios de su padre cuando se dio la vuelta para salir del cuarto... Y no se equivocó.
El auto se estacionó frente a la escuela pero Félix no tenía intenciones de bajar y mucho menos de dejar bajar a Bridgette.
-Vamos Félix. No pongas esa cara.
-Ni se te ocurra bajar.- siseó con lentitud las palabras y Bridgette rodó los ojos divertida.
-Eres un exagerado chaton.- sin percatarse en qué momento había bajado Gorila para abrir la puerta del lado de Bridgette, Félix no tuvo tiempo de detenerla. Al bajar Bridgette y dejar que la luz del sol iluminara cada aspecto de ella dos cosas pasaron por la mente de Félix, que Bridgette se veía hermosa y que su padre tenía una mente tan diabólica que no dudaría si él fuese Hawk Moth.
-¿Bajas?- preguntó Bridgette girando sobre los talones de esas sandalias de cintas cafés hasta sus tobillos con ese vestido floreado de color crema de mangas hasta los codos, con flores violetas en donde las hojas verdes rodeaban las bonitas flores, con un cinturón grueso de cuero en su cintura de cintas entrelazadas y cuya falda llegaba por encima de sus rodillas dando una mejor vista a esas piernas que volvían loco a Félix y que se movía al menor movimiento. Félix bajó a regañadientes notando enseguida las miradas puestas en ellos, y frunciendo más el ceño al notar algunas miradas sobre una inocente Bridgette.
-Vamos Félix. Hay que entrar o se nos hará tarde.- con una enorme sonrisa se adelantó inconsciente del suave movimiento de la falda del vestido por detrás. Aquello era demasiado. Dedicó una mirada asesina a cada chico que la veía y la alcanzó para rodearla con su brazo. Definitivamente debía estar al pendiente de Bridgette, era demasiado adorable para su propio bien y como su novio se encargaría de cuidarla, como todo buen gato celoso que era protegería a esa adorable e inocente criatura de todos... bueno, excepto de él. Él era el único que podía ser malo con esa adorable boba que lo sacaba de quicio sin querer y sabiendo que a ella le gustaría mucho.
…..
Extra:
-Creo que mi padre es Hawk Moth.- declaró Chat Noir a una sorprendida Ladybug.
-¿No habíamos descartado esa teoría ya?
-¡Exijo que se reabra el caso! ¡Las pruebas están allí!- exclamó mostrando sus dientes y Ladybug suspiró rodando los ojos.
….
Y… Espero que les haya gustado! Gracias a todos por leer y agradezco de corazón por todos los que ponen a favoritos y me dan follow, y los reviews, me gustan los reviews, algunos son divertidos XD Y bueno ya han visto a Luka? A mí me ha gustado, tal vez no sea un galán como Adrien pero tiene lo suyo XD Y bueno, dejen review, nada de tomatazos y nos leeremos en otra ocasión. Y sin nada más qué decir… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE!
